En su columna del 25 de febrero, 2018 en el diario jordano Al-Ghad, ‘Alaa Al-Din Abu Zeina escribió sobre el futbolista estrella egipcio Muhammad (Mo) Salah, que ha estado jugando para el equipo de Liverpool desde junio, 2017. Abu Zeina señaló que Salah ha logrado hacer que incluso fanáticos racistas del fútbol británico lo vitoreen y cambien su actitud hacia el Islam, e incluso han escrito un cantico con la promesa de convertirse al Islam si este sigue anotando goles. Este agregó que, si los fanáticos de Salah no se convierten, él y otros jugadores de fútbol musulmanes que no ocultan su fe ayudaran a mejorar la imagen de la religión, la cultura y de la nación islámica. En esto, contrastan con los extremistas musulmanes que libran el llamado yihad contra Occidente y que pretenden derrotarla mediante atentados y decapitaciones, pero de hecho solo logran el fracaso.

El 17 de marzo, 2018, luego que Liverpool derrotara a Waterford en un partido gracias a los goles marcados por Salah, el periodista egipcio Husam Al-Haj escribió que un fanático del Liverpool tuiteó: «Lo que Salah ha hecho esta temporada es totalmente increíble. Yo formalmente me he convertido al Islam y por ende declaro de que no existe dios sino Alá y Mahoma es el Mensajero de Alá».[1]

Lo siguiente son extractos de la columna de Abu Zeina:[2]

Muhammad Salah se postra durante un partido (imagen: Al-Arabiya.net)

«Los medios de comunicación occidentales y las redes sociales se han enfocado recientemente en el cómo los fanáticos del equipo de futbol británico Liverpool han estado aupando al jugador de fútbol egipcio Muhammad Salah. No es nada nuevo que los hinchas animen a un jugador brillante que anota goles, sin importar su etnia o religión. Pero lo notable en el caso de Salah es el tono positivo tomado por el público británico hacia el Islam gracias a este jugador árabe.

«[Uno de] los canticos [creados por sus fanáticos] dice: «‘Mo Salah, si es lo suficientemente bueno para ti, entonces es suficientemente bueno para mí. Él se encuentra sentado en la mezquita, ahí es donde quiero estar. Si consigue anotar otros cuantos tantos, entonces también seré musulmán’. El diario británico Daily Express calificó este canto de ‘maravilloso’ y ‘brillante’, sin comentar sobre su referencia a la religión, sino solo sobre los logros de Salah y su camino [al éxito] que lo hicieron digno de esta gloria. El diario norteamericano El Washington Post escribió [un informe] sobre este canto [titulado] «Los fanáticos de fútbol del equipo Liverpool literalmente cantan las alabanzas de un jugador musulmán». Tal como se desprende de este titular, este fenómeno es desconcertante, porque es nuevo.

«Muhammad Salah no es el único jugador musulmán en la liga de fútbol británica y en otras grandes ligas europeas. Europa tiene muchos jugadores musulmanes líderes que son admirados por el público europeo. Muchos de ellos expresan su identidad musulmana recitando el Fatiha [el primer capítulo del Corán] antes de subir al campo de juego, pero Muhammad Salah es único en la forma en que celebra sus goles: este se arrodilla en el campo y se postra en gratitud a Alá, expresando claramente su identidad musulmana. El público sin duda entiende el significado [de este gesto] y es por eso que cuando anota goles, los fanáticos declaran que lo seguirán hasta la mezquita.

«Lo que hace que la canción que los fanáticos británicos cantan en honor a Salah sea nueva y desconcertante es [un hecho] que el diario El Washington Post explicó, citando el portal de Fare, Futbol Contra el Racismo in Europe, una organización sin fines de lucro en Londres que estudia el fenómeno del racismo en el fútbol. Un informe sobre las últimas tres temporadas de fútbol en Europa llevó al portal a concluir que los fanáticos del fútbol británico fueron responsables del mayor número de incidentes racistas, nacionalistas e islamofóbos en todos los estadios de Europa durante este período. La directora de la organización Piara Powar dijo: ‘Esta es la primera vez que veo una apreciación tan exuberante, abierta y positiva que incluye la religión [de un jugador]’. Hay otras canciones que expresan el amor de los fanáticos de Liverpool por Muhammad Salah, en el que lo llaman ‘El Faraón’ y ‘El Rey Egipcio’. Una de ellas dice: «¡Él corre por el ala, rey egipcio!’, y otra que dice: «Trajimos al chico de Roma y este anota goles en cada juego. ¡Es egipcio y es brillante y Muhammad es su nombre!’ dice Piara: «Salah está jugando muy bien, lo que entusiasma a los fanáticos, haciéndolos más aptos para aceptar su origen étnico y religioso cuando es muy probable no lo hayan hecho antes. Los buenos jugadores rompen barreras. Sabemos que la apreciación de alguien como jugador conduce a ver su identidad y, para muchos fanáticos, el aceptar su identidad».

«Los hinchas del Liverpool no se han convertido al Islam debido a Salah, por supuesto, pero la actitud positiva que les inspiró a expresarse hacia el Islam es importante. Existen algunos entre nosotros que excluyen a Salah, claramente un musulmán devoto, del manto del Islam [es decir, lo acusan de apostasía] porque piensan que [el fútbol] es un juego tonto que distrae la mente del pueblo de lo que es importante. Pero la imagen alterna del Islam propuesta por estos fanáticos no lleva más que destrucción, [porque consiste en] asesinatos, decapitaciones, corte de miembros, bombardeos y asesinatos de civiles inocentes, que pintan al Islam como una religión agresiva y excluyente que amenaza con eliminar a todos los miembros de otras religiones y es hostil a la civilización. ¿De qué sirve esta presentación de los árabes y musulmanes y su cultura? [¿Qué es lo que hace] excepto invitar al odio, el desprecio y el acoso [hacia nosotros]?

«Los numerosos fanáticos del fútbol musulmán quienes declaran su afiliación religiosa a través de un simple [gesto] – recitar el Fatiha en el terreno de juego – le hacen un servicio mayor a su religión, su cultura y naciones que los yihadistas extremistas de hoy día. Ultimadamente parece ser que los atentados y las decapitaciones no conviertan a los [países] árabes y musulmanes en superpotencias o los ayudan a [resolver] sus problemas. Mientras que Salah hizo que los británicos racistas cantaran canciones en su honor y elogiaran su religión, los [atacantes] suicidas yihadistas que asesinan a algunos civiles inocentes en Londres o París y [luego] afirman que han vencido a Occidente o conquistado Roma ciertamente nunca han logrado nada parecido».


[1] Soutalomma.com, 7 de marzo, 2018.

[2] Al-Ghad (Jordania), 25 de febrero, 2018.