La reacción oficial del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) al anuncio del Plan General de Acción Conjunto al acuerdo en materia nuclear entre Irán y el P5+1 trajo a relucir los desacuerdos entre los estados miembros del CCG sobre este tema. La mayoría de los estados del Golfo, con la excepción de Arabia Saudita, emitieron declaraciones oficiales en respuesta al anuncio del acuerdo, enviando cartas de felicitación a los líderes de Irán expresando su esperanza de que el acuerdo ayudara a la estabilidad regional. En contraste, la respuesta de Arabia Saudita, expedida por un alto funcionario no identificado a la agencia de noticias oficial saudita SPA, señaló la importancia del anuncio pero amenazó que el país reaccionará con dureza si Irán utilizará sus recursos para socavar la estabilidad regional. [1]
El desacuerdo entre los estados del CCG también surgió en una columna de Ghassan Al-Imam en el diario saudita de Londres Al-Sharq Al-Awsat criticando a los estados miembros del CCG que se apresuraron a felicitar a Irán y que, dijo este, habían sido engañados por las declaraciones del ministro de Relaciones Exteriores iraní Jawad Zarif. Al afirmar que sólo Arabia Saudita actuaba con el propósito de frenar a Irán en la región árabe, este instó a los estados del CCG a que mostraran su solidaridad árabe con los pueblos afines que habían sido perjudicados por las políticas iraníes – tales como los sirios – en lugar de confiar en los Estados Unidos que, declaró, habían «retrocedido a las demandas por [ambos] los árabes y los europeos con el propósito de poner fin al programa nuclear de Irán».
A continuación se presentan los principales puntos de su columna:
Ghassan Al-Imam (Imagen: Aawsat.net/writers)
«Los árabes no poseen bombas nucleares, pero sí tienen científicos que trabajan en el ámbito nuclear, que pueden formar un comité científico que examinará y evaluará los detalles técnicos y físicos sobre el acuerdo nuclear que los Estados Unidos alega retrasará, por lo menos en una década, la capacidad de Irán para obtener una bomba nuclear…
«Sigo persuadido por todos las declaraciones oficiales árabes que los ayatolás de la teocracia [iraní] se comprometerán a no fabricar una bomba durante los años del embargo internacional y que no la van a utilizar contra ambos los ‘apóstatas’ y los creyentes en la región…
«Yo no he leído las 159 páginas del acuerdo, así que no sé si se le anexaron secretos diplomáticos [relativos a] la disposición de los asuntos regionales entre los Estados Unidos, Irán e Israel. No se tomó en cuenta la sonrisa sarcástica del ‘artista del maquillaje’ [el Ministro de Relaciones Exteriores iraní] Zarif, quien ‘maquilló’ los rostros árabes durante una ronda de visitas a los estados del Golfo, cuando anunció que el principio [árabe] de ‘los vecinos antes que la propia casa’ [es decir, antes que los intereses iraníes] regirán la política iraní, a fin de distraer a los árabes del Oriente y del Golfo de las ‘catástrofes’ del acuerdo en materia nuclear…
«Los árabes se están frotando los ojos y oídos. Quedaron para escuchar a escondidas durante las conversaciones en materia nuclear entre Irán y Occidente y que escucharon a los Estados Unidos y a los líderes europeos exigir que Irán ponga un alto al calentamiento de combustible nuclear y las entregas a Rusia, que detengan la fabricación de misiles balísticos intercontinentales; y que se abstenga de amenazar al Golfo y penetrar en el Oriente árabe. [Ellos escucharon a estos líderes decir que] si ellos [los iraníes] no lo hacen, los Estados Unidos e Israel destruirán la industria nuclear iraní.
«Luego de [aplicar] el maquillaje árabe al acuerdo nuclear… los ministros del exterior del [CCG] se apresuraron a felicitar a Irán por el acuerdo… Arabia Saudita fue el único país árabe que expresó sus reservas sobre el acuerdo nuclear – [pero] sin declaraciones formales en su contra, a fin de preservar la coordinación diplomática mínima entre los estados del Golfo…
«Sobre el terreno, la respuesta saudita al acuerdo en materia nuclear se produjo en Yemen. Contrario a lo esperado, Arabia Saudita salió victoriosa, con el apoyo de Alá, sobre la intervención de Irán, resultando casi en una completa toma houthi de Yemen y el establecimiento de un régimen proxy iraní que le permitiría controlar la entrada sur del Mar Rojo y utilizaría a los houthís como caballo de Troya iraní en suelo saudita…
«La diplomacia saudita a lo mejor puede recurrir a una misión [adicional] difícil [pero] noble y de nuevo tratará de superar las controversias entre el más pequeño de los estados árabes (Qatar) que está distraído en su lucha con el mayor de los estados árabes (Egipto), [de participar] en serias mediaciones a las disputas árabes y regionales. Lo qué pudiera facilitar esta misión es dejar de visualizar a la Hermandad Musulmana [HM] como el mayor peligro para los regímenes de los estados del Golfo. En mi opinión, el arresto de los ‘sabios’ de la oficina del Guía General de la HM – entre ellos el derrocado presidente Muhammad Mursi – y la pena de muerte impuesta a todos ellos, llevó a la aparición de un joven liderazgo que llenó el vacío en el liderazgo de la HM, [defendiendo] una política más extremista y [mostrando] mayor disposición para las actividades violentas y terroristas en contra del estado egipcio.
«Uno de los ‘logros impresionantes’ del acuerdo en materia nuclear es el anuncio de la renovación de la iniciativa iraní para resolver la crisis en Siria… La iniciativa, que ha sido reforzada por el reconocimiento de Estados Unidos a una Irán con capacidad nuclear, pretende imponer a Irán como un socio extranjero y sin invitación en la seguridad nacional árabe, a fin de consolidar el mandato del colapsado mandato de Bashar [Al-Assad] y continuar exterminando árabes sunitas sirios si no están de acuerdo en permanecer siendo sujetos que poseen obligaciones [pero] que han sido privados de todos los derechos.
«Irán ha perdido totalmente el control de la situación sobre el terreno en Siria. Lo que está sucediendo ahora es que la siria árabe está siendo dividida en pequeñas ares turcas, kurdas chiitas y ‘alauitas. Irán está anulando el parlamento del Líbano, al gobierno y la presidencia posiblemente en preparación para anexarse una pequeña área libanesa chiita al bolsillo de un estado alauí chiita persa que se extenderá desde Damasco a través de Homs hasta la costa siria, a lo largo de la frontera noreste del Líbano – que ya ha sido erradicada debido a la participación de Hezbolá en llevar a cabo crímenes [junto] al régimen sirio.
«Arabia Saudita reconoce y está consciente de estos hechos sobre el terreno. Todos aquellos que se apresuraron a darle la bienvenida al acuerdo nuclear deben comprometerse a un mínimo de solidaridad diplomática árabe, confiar más en sí mismos y depender de sí mismos.
«Esta [debe ser la respuesta al] derrotismo de la administración Obama, que dio marcha atrás a las demandas por [ambos] los árabes y los europeos a fin de poner fin al programa nuclear iraní y despojarle a Irán de la capacidad, en un futuro inmediato o lejano, de producir una nueva tragedia como la de Hiroshima». [2]
[1] Véase MEMRI Despacho Especial No. 6107, «En prensa del Golfo, temor y críticas al acuerdo en materia nuclear de Irán: Obama le deja el Medio Oriente un legado de desastres», 15 de julio, 2015.
[2] Al-Sharq Al-Awsat (Londres) 10 de agosto, 2015.