A continuación se presentan extractos de discursos de varios clérigos egipcios sobre el tema del martirio y el amor por la muerte. Los programas fueron presentados en Al-Rahma TV y Al-Nas TV el 2, 8 y 11 de enero, 2009.

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Al-Rahma TV, 2 de enero, 2009

Hazem Shuman: Morir significa reunirse con Alá, entonces por qué le tememos a la muerte y al martirio?»

Clérigo egipcio Hazem Shuman: «Por qué odiamos la muerte? Nosotros no evitamos o le tememos a la muerte. Evitamos y sólo le tememos al fuego del Infierno.

[…]

«Quieres entrar en el Paraíso? Por supuesto que si. Todos queremos. Tu nunca entrarás al Paraíso hasta que mueras. ¿Amas al Profeta Muhammad? Lo amas mucho. Yo también. Nunca conseguirás verlo o abrazarlo hasta que mueras.

[…]

«La razón por la derrota de 1967, por las calamidades de 1948, por la pérdida de todas nuestras tierras, la caída de Bagdad, la ocupación, por Darfur, los problemas al sur de Sudán, por el colonialismo que duró todo el siglo 20 es nuestro odio a la muerte. El Jeque Amin y yo llegamos juntos a la estación de televisión, y sin arreglar esto de antemano, decidimos venir aquí para luchar contra el odio a la muerte. Debemos amar a la muerte, al igual que los compañeros de los Profetas.

[…]

«Morir significa reunirse con Alá, entonces por qué le tememos a la muerte y al martirio? Vemos a los mártires en Gaza… Nosotros no estamos tristes por sus muertes, porque ellos son mártires. Sólo estamos tristes por la manera humillante en que fueron muertos, y sobre las circunstancias humillantes en que nosotros vivimos. Nosotros no odiamos el martirio». […]

«El hombre está sitiado, viviendo en dolor… con sus esposas e hijos en ansiedad; de repente… se encuentran en el Paraíso»

«El Jeque Nizar Rayan, pueda él descansar en paz, quien fue muerto en Gaza junto con sus esposas y sus nueve hijos prefirió permanecer en su hogar, aunque sabía que sería bombardeada. Yo hablé con el Jeque Amin en nuestro camino hacia acá, y dijo algo agradable. Dijo: Si hubiera salido de su casa, podría él estar seguro que viviría?

«El hombre está sitiado, viviendo en desgracia, en dolor, hambriento y sediento, con sus esposas e hijos en ansiedad y sosiego. De repente, el fondo cambia, y se encuentran en el Paraíso. Renacen, juntos, en una clase diferente de belleza y felicidad. ¿Puede usted imaginarse esto?

«El objetivo de este programa… el Jeque Amin y yo hemos venido a emprender el jihad contra… es como en medicina. Un hombre enfermo pudiera tener 1,000 problemas en su cuerpo – en sus manos, pecho, corazón, pulmones, estómago, piernas y articulaciones – pero todos estos problemas fueron causados por un solo virus. El virus que aflige a nuestra nación es el odio a la muerte, gente.

«Lo que más pasmó y asombró a los enemigos del Islam, cuando enfrentaron a los ejércitos del Islam… Esto fue discutido extensivamente en el hadith: Hemos conocido gente que ama la muerte tanto como nosotros amamos la vida». […]

«Con cada gota de sangre que escurre de su cuerpo por la causa del Islam… recibe bendiciones – donde la primera es que uno ya no debe nada – todas sus obligaciones y deudas están cubiertas»

«El mártir obtiene el martirio por la causa de Alá. Él es absuelto con la primera gota de sangre. Hay cinco litros de sangre en el cuerpo. Si el corazón de alguien es cortado en dos – fluirán esos cinco litros inmediatamente? No. Con la primera gota de sangre, se es absuelto, y ciertamente con las próximas gotas, habrá otras bendiciones. Con cada gota de sangre que escurre de su cuerpo por la causa del Islam y de Dios, uno recibe bendiciones, donde la primera de ellas es que uno ya no debe nada – todas sus deudas y obligaciones están cubiertas.

«El mártir… Esta noche, queremos ver la muerte de una manera diferente. Cuando vemos a un mártir, le vemos yacer en el suelo, su sangre fluye, pero el mártir ve cosas de una manera diferente. Él se siente como un prisionero liberado. ¿Cómo se siente un prisionero hacia su prisión después de su liberación? Es el lugar que más odia. ¿Cómo puede un feto sentir después de dejar el útero de su madre hacia ese cuarto diminuto oscuro – el útero? ¿Es concebible que quisiera regresar a ese lugar sofocante? Así es cómo se siente alguien que ha dejado este mundo. Yo espero que Alá nos saque de este mundo como mártires.

«Él es absuelto con la primera gota de sangre, y ve su asiento en el Paraíso. Cuando muere, no es que el horrendo enterrador aparece por encima de su cabeza. Su muerte es como una película, en el que ve imágenes del Paraíso. Él se sienta y observa estas imágenes, y su alma asciende hacia Alá. Cuando Abraham murió, los ángeles le dieron albahaca dulce para que oliera, y su alma partió. Un hombre huele una flor bonita – una flor de Alá, no de este mundo – y encuentra a Dios. ¿Cómo podemos nosotros temerle a la muerte? Este miedo a la muerte debe parar».

Al-Rahma TV, 2 de enero, 2009

Jeque Ayman Sayda: «Alá convierte los golpes de espada y las bombas en besos de ángeles… Hay vírgenes de ojos negros listas para ustedes»

Clérigo egipcio Jeque Ayman Sayda: «Alá absuelve al mártir con la primera gota de su sangre.

[…]

«Uno no siente los golpes de la espada en su cuerpo, o las bombas o los misiles desde los aviones. En lo absoluto. Alá convierte los golpes de espada y las bombas en besos de ángeles que besan sobre el cuerpo del mártir. Los ángeles le besan, amigo. Imagine un ángel que le besa en la frente, y si es un muchachito, los ángeles lo llevan directo al Paraíso. ¿Para qué vivimos? Deberíamos estar llorando por nosotros, los vivos. Felicitamos a los parientes de quienquiera que haya muerto por la causa de Alá. Felicitamos a éstos mismos [mártires].

[…]

«Hay vírgenes de ojos negros que están listas para ti. El mártir obtiene al menos dos de las vírgenes del Paraíso, y ellas abrazan al mártir. Imagínense a una virgen de ojos negros que abraza al mártir. Mientras la gente transporta el cuerpo a ser enterrado, una virgen de ojos negros lo está abrazando. Estamos hablando de las vírgenes de ojos negros, amigo! Todos ustedes que están buscando a las mujeres y muchachas de este mundo… Cierto, una mujer virtuosa es algo bueno, pero el mártir obtiene algo más valioso – una virgen de ojos negros. ¿Sabe Usted lo que es una virgen de ojos negros? Cuando ella ríe, opaca la luz del sol y la luna. Ella tiene una hermosa sonrisa. A veces uno escucha o ve a muchachas o mujeres con una hermosa sonrisa. Imagínense – cuando la virgen de ojos negros ríe, opaca la luz del sol y la luna. Quién quiere casarse? ¿Quién quiere vírgenes de ojos negros?

[…]

«Una virgen de ojos negros, amigo. Cuando sonríe, opaca la luz del sol y la luna. Si ella fuese a escupir en un furioso mar salado, como el Océano Pacífico, el Océano Atlántico, el Mar Mediterráneo o el Mar Rojo, los furiosos mares salados se convertirían en agua dulce – sólo de su escupo.

[…]

«Inmediatamente después de eso, el mártir es salvado de los tormentos de la tumba. La tumba… La tumba… aun cuando no haya ningún otro tormento, la tumba sería suficiente. La tumba… Pueda Dios salvarme a mi y a usted. El mártir es salvado de estos tormentos. La pena y el dolor es la suerte de aquéllos que viven.

[…]

«Entonces, él está casado con las 72 vírgenes del Paraíso. Alá Akbar – 72 vírgenes del Paraíso. Yo ya las he descrito para ustedes. Ellas lo saludan con cantos, con palabras bonitas, tales como: Oh amigo de Alá, yo nunca he visto a nadie tan perfecto y guapo como tu.

«Desearía que las mujeres aprendieran de las vírgenes del Paraíso».

Al-Nas TV, 11 de enero, 2009

Safwat Higazi: «Cuando despierto… [cuento] los mártires para saber cuánta felicidad hay en el cielo y en la tierra… despierto por la mañana para ver cuántos niños seguirán siendo niños para siempre»

Clérigo egipcio Safwat Higazi: «Cuando despierto por la mañana, chequeo el número de mártires para saber cuánta felicidad hay en el cielo y en la tierra. No despierto para ver a cuántos de nosotros han matado. No, despierto para ver cuántos novios se han casado en los cielos, cuántas novias se han casado en los cielos. No despierto por la mañana para ver cuántos niños han sido muertos. Despierto para ver cuántos niños atestiguarán por sus parientes. Despierto para ver cuántos niños seguirán siendo niños para siempre. Despierto en la mañana para ver cuántos niños cargarán jarros de agua al vertedero del Mensajero de Alá.

«La sangre de los mártires brilla luz en todo entre el cielo y la tierra. Quiero conocer el número de mártires y el número de heridos, para saber cuántos litros de la sangre de los creyentes ha sido derramada, cuántos litros de la sangre de los creyentes ha sido derramada en la tierra de Gaza, aumentando su pureza, limpieza y honor».

Al-Nas TV, 8 de enero, 2009

Jeque Salam Abd Al-Qawi: «Debemos enseñarles a nuestros hijos a… odiar a los judíos»

Clérigo egipcio Jeque Salam Abd Al-Qawi: «Odiar a los enemigos de Alá es muy importante. Debemos enseñarles a nuestros hijos, a nuestros jovenzuelos, a nuestros hermanos y a todos los musulmanes a odiar a los malditos judíos sionistas. ¿Por qué no? Ellos les enseñan a sus hijos a odiarnos. Nuestro odio a los judíos está basado en nuestra fe. El Corán nos dice que los odiemos, no que los amemos.

[…]

«Debemos enseñarles a nuestros hijos a obedecer a Alá, a obedecer al Profeta Muhammad y a odiar a los judíos, a los sionistas y lo qué los sionistas están planeando. Debemos educarlos en los versos coránicos que llaman a luchar y emprender el jihad por la causa de Alá. Queremos criar a nuestros niños a que amen el jihad por la causa de Alá. Debemos enseñar a nuestros hijos que la muerte por la causa de Alá es nuestra meta más elevada.

[…]

«Queremos que nuestros hijos amen el jihad por la causa de Alá, enseñarles lo qué es el sacrificio, lo que significa amar el jihad por la causa de Alá. Nosotros también, como padres, debemos aprender esto. La cresta de mi felicidad como padre es criar a un mártir, y sacrificarlo en el campo de batalla del jihad por la causa de Alá. La cresta de mi felicidad sería hacer lo que los compañeros del Profeta hicieron. Cada madre debería criar a su hijo, y alimentarlo – junto con su leche – con el amor del jihad por la causa de Alá, con el amor al Paraíso.

[…]

«¿Qué tipo de honor, gloria y estatus puede una madre desear para su hijo que sea mejor que el Paraíso? ¿Existe algo mejor que esto? ¿Hay algo mejor que el Paraíso? ¿Existe algo mejor que el martirio por la causa de Alá? Es por eso que queremos cambiar la cultura de la educación de nuestros hijos. La educación no debería ser a través del amor, de la corrupción y el ser mimado. Cierto, éstas son cosas buenas – yo no estoy diciendo que debe matar a sus hijos o atarlos. Éstas son cosas buenas, pero es aun mejor enseñarles a nuestros hijos a odiar a los enemigos».