El 21, 22 y 23 de abril, la prensa de Qatar publicó tres artículos caracterizados por un antisemitismo virulento y/o la negación del Holocausto. El primero, del escritor y periodista argelino ‘Abd Al-Baqi Salay, el cual apareció en el diario Al-Sharq. Salay escribió que la historia ha sido injusta con Hitler, quien era simplemente «un guerrero como cualquier otro» y cuya guerra contra los judíos estuvo basaba en la premisa de que eran «una nación corrupta, que debía ser eliminada para siempre». Salay también alegó que Hitler era un gran admirador del Islam y que si este hubiera ganado la guerra, el problema palestino nunca hubiera surgido.
El segundo artículo, del autor intelectual de Bahrein Dr. ‘Ali Muhammad Fakhro, publicado en Al-Raya y que trató con la «explotación judía» del Holocausto y del antisemitismo. Fakhro equipara al Holocausto con la suerte de los palestinos bajo el régimen «Sio-Nazi», y pidió a los árabes establecer un centro que ayudaría a contrarrestar las manipulaciones judías y exponer «los mitos y la mentira de los sionistas».
El tercer artículo, también en Al-Sharq, fue de Muhammad Al-Sharshabi. Este sostuvo que todos los conflictos y guerras a nivel mundial, y especialmente los de dentro de la nación musulmana, fueron causados por «el sionismo global», con el objetivo final de dominar al mundo y judaizarlo.
A continuación presentamos extractos de los artículos:
‘Abd Al-Salay Baqi: Hitler «creía que el Islam era la verdadera fe»
Al-Salay escribió: «A menudo sucede que las personas son mal juzgadas… sólo porque la historia nunca ha permitido que surja una opinión disidente o cuestione lo que ha sido escrito por los historiadores. Pero la verdad, no importa la forma en que traten de despedazarla, siempre se esfuerza por hacerse escuchar, incluso después de un largo período de silencio y ocultación deliberada…
«Este es el caso del líder alemán Adolf Hitler, a quien la historia aún describe en [tonos] estridentes, esparciendo [todo tipo de] rumores y tonterías sobre su carácter y describiendo su gobierno en los términos más viles, a pesar de que este llegó al poder mediante elecciones democráticas – donde la mayoría de los líderes árabes están muy alejados de estas.
«La razón por el cual estos [historiadores] engañosos acusan a Hitler de tiranía y crueldad, [y aplican todo tipo de] descripciones y epítetos desagradables hacia él, es que perdió [la guerra]. Si hubiera ganado, la situación habría sido muy diferente de lo que hemos conocido durante más de 50 años. Es un hecho bien conocido que los británicos hicieron mucho más [daño] que Hitler, tal como hicieron los japoneses durante su era imperial. Entonces, ¿por qué el mundo se resiente de Hitler hasta el día de hoy y desprecian al nazismo por lo que le hizo al mundo y a los judíos, mientras los crímenes de los japoneses cayeron en el olvido [inmediatamente] después que su imperio colapsó [en 1945], al igual que los crímenes de los ingleses contra los escoceses, los crímenes del régimen [del Apartheid ] en el sur de África… [los crímenes cometidos por] Francia y sus presidentes en Argelia y los crímenes de los Estados Unidos en Vietnam?
«En realidad, tal como muchos investigadores señalan, si Hitler hubiese estado vivo hoy el problema palestino habría sido resuelto. De hecho, este nunca hubiese surgido en primer lugar, porque la guerra de Hitler contra los judíos y su existencia estuvo basaba en una premisa única, es decir eran una nación corrupta que debía ser eliminada para siempre.
«La actitud de Hitler hacia los judíos, a quien este castigó, estuvo motivada religiosamente. Él se mantuvo firme en destruir a los que desean establecer una patria en Palestina y por medio del famoso Holocausto judío decidió exterminar a los judíos, porque necesariamente se convertirían en una amenaza para el mundo entero. En su libro Mein Kampf… Hitler utiliza muchas expresiones tomadas del Corán, tales como ‘hasta que un camello pueda pasar por el ojo de la aguja’, al hablar de los judíos y la imposibilidad de reparar su [manera de ser].
«En cuanto a su actitud hacia el Islam, esta era totalmente diferente. Después de haber estudiado historia antigua y [la historia] de las naciones que gobernaban al mundo, este se centró en el papel de los árabes musulmanes. Él dijo: ‘Hubieron tres fuerzas iluminadas que conquistaron el mundo, es decir, los persas, los bizantinos y los árabes musulmanes. Los dos primeros [comenzaron] como civilizaciones y luego adquirieron poder, que utilizaron para conquistar al mundo. Los árabes musulmanes, en cambio, [comenzaron] como bandas de bárbaros que conquistaron el mundo – por lo que Hitler dijo – y [sólo] entonces se convirtieron en una civilización. La característica [única] de la civilización musulmana fue que ellos no impusieron su cultura, mientras eliminaban a otras culturas, sino que introdujeron su cultura junto a otras culturas. [El carácter de] la cultura musulmana demuestra que los musulmanes se civilizaron. [Hitler] estaba impresionado con el Islam, que formó la tierra [fértil] en el cual esta cultura se desarrolló. Incluso en medio de la guerra mundial, este imprimió folletos sobre el Islam y los distribuyó a su ejército, con el fin de familiarizar a los soldados con [esta] religión, especialmente a los no musulmanes entre ellos.
«Se dice que el día en que su ejército se acercó a Moscú, el líder alemán Hitler quiso dar un discurso [apasionado] al mundo, y ordenó a sus asesores que encontraran las más poderosas, bellas y sublimes expresiones con el cual abrir su gran discurso, de las escrituras o de los libros de filosofía o poesía. Un intelectual iraquí, quien residía en Alemania le mostró el verso coránico «La hora [de juicio final] está cerca y la luna está dividida en diferentes partes [Corán 54:1]’. Hitler quedó impresionado con este versículo y abrió su discurso con estos… Esto demuestra que creía que el Islam era la verdadera fe, la religión del monoteísmo, el poder y la justicia. Debido a esta creencia, permitió que sus soldados alemanes quienes eran musulmanes oraran siempre y cada vez que quisiesen, en cualquier circunstancia. Ellos solían rezar juntos en la plaza [principal] de Berlín y él lo vería [y esperaba] hasta que hubiesen terminado antes de dar sus discursos al ejército nazi. También se reunirá con musulmanes académicos y aprendía de ellos sobre la vida de los compañeros del [Profeta] y de cómo trataban a las poblaciones no musulmanas.
«La verdad es que la historia ha sido injusta con el líder alemán Adolf Hitler, quien fue un guerrero como cualquier otro y los criminales que ganaron la Segunda Guerra Mundial difamaron su carácter. Estoy seguro de que si Hitler hubiera ganado la Segunda Guerra Mundial, la historia habría sido muy diferente y los [historiadores] afeminados no se atreverían a maldecirlo por sus acciones. Por el contrario, estoy seguro de que se hubiesen orinado en los pantalones mientras los miraba, por no mencionar hablar con ellos – entonces se habrían muerto de miedo». [1]
Dr. Ali Muhammad Fakhro en referencia a «los Himmler del régimen Sio-Nazi»
El Dr. Ali Muhammad Fakhro escribió: «El tema del Holocausto nazi en Europa y la farsa del antisemitismo, los cuales son presentados desde un millón de ángulos [diferentes], [son cuestiones que] deberían mantener ocupados a los árabes y musulmanes. No deben ser dejados a [los] judíos en Occidente, [quienes los utilizan] para extorsionar a los europeos, cuya conciencia está cediendo bajo el peso de su historia: sus crímenes y errores, y sus sentimientos de culpa y [auto-] odio, que [les hizo] capitular a los mitos [judíos], a las exageraciones y lágrimas de cocodrilo.
«Este problema nos concierne a todos más porque nos estamos quemando en sus llamas: el Holocausto Sio-Nazi en las tierras de la Palestina ocupada y el antisemitismo sionista contra los árabes y los musulmanes en todas partes, son comparables a, e incluso peor que [al Holocausto nazi y el antisemitismo]. El mundo entero y especialmente los Estados Unidos y Europa, deben darse cuenta que las víctimas judías de los años 1930 y 1940 pertenecen a la historia y que sus hijos y nietos no tienen derecho a hablar tan descarada y oportunistamente sobre estos dos despreciables fenómenos históricos [del antisemitismo y el Holocausto] porque ellos mismos cometan [crímenes] similares todos los días, de forma aún más bárbara y terrorista, en la Palestina ocupada y en todas las tierras árabes y musulmanas. Un criminal no tiene derecho a hablar ni tampoco en nombre de las víctimas de otros criminales.
«La razón por el que [planteo] esta cuestión hoy es que un tribunal alemán ha impuesto una multa de 30.000 dólares sobre un sacerdote alemán que negó el Holocausto en uno de los canales de televisión. Esto [nos] lleva de nuevo al tema del pulpo de los medios de comunicación sionistas y financieros, que ha tenido un éxito espectacular en el chantaje a la conciencia de las sociedades occidentales y en arrojarlos en una fosa de culpa, miedo y de mendicidad humillante. Esta ha llegado al punto en que el antisemitismo y el Holocausto se han convertido en temas sagrados, que sustituirán al derecho a hablar libremente, expresar una opinión disidente, plantear dudas o preguntas. De hecho, se han vuelto más sagrados aún que la religión, la divinidad o los profetas, ya que para uno es posible rechazar la religión abiertamente, a la iglesia o a los mensajeros, pero uno no puede hacer preguntas, solicitar aclaraciones o formular objeciones racionales en materia del [Holocausto o el antisemitismo].
«Nada puede exponer las mentiras y cuentos de hadas utilizados por los sionistas para chantajear al mundo con excepción de una comparación objetiva y científica entre el tormento [sufrido por] las víctimas de los nazis alemanes durante la década de 1930, y el tormento, el dolor y las lágrimas de las víctimas de los Sio-Nazis en Palestina y otros lugares. Si la era nazi nos ha proporcionado imágenes de niños judíos muriéndose de hambre y de las deportaciones crueles, los campos de detención, muros del gueto y la gente que fue llevada a ser masacrada, entonces [la ocupación en Palestina proporciona imágenes] que son similares y de hecho aún más brutales, depravadas e inhumanas: [fotos de la muerte] y campos de detención, de viviendas destruidas, cultivos quemados y de hospitales, escuelas y mezquitas bajo ataque. [Estas acciones] son llevadas a cabo alegremente y con arrogancia por los mercenarios, los [funcionarios] de la Gestapo, los Himmler y Hitler del establecimiento Sio-Nazi que está llevando a cabo Palestina y a su pueblo por la garganta.
«Esta distinción – entre lloriqueos de los judíos sobre un episodio de la historia que ha venido y se ha ido y lo que [ellos mismos] le están haciendo hoy a las víctimas palestinas – debería ser el tema de una campaña árabe para dirigirse al mundo occidental. [Debemos] idear libros de historia, política [ciencia] y [ciencias] sociales, novelas, documentales, largometrajes y artículos de Internet en inglés, francés, español, alemán, chino y ruso. [Todo esto a fin de] presentar una comparación científica y documentada de imagen vs. imagen, reclamo vs. reclamo… para que el mundo se de cuenta de que las lágrimas de los sionistas son falsas y que su demanda de justicia histórica no es nada más que [el acto de] un asesino que se hace pasar por víctima, mientras derrama la sangre de sus [propias] víctimas sin un ápice de compasión.
«Ningún esfuerzo le servirá a la causa palestina mejor que el esfuerzo de exponer la extorsión política, financiera y moral de los Sio-Nazis de todo el mundo y [exponer cómo] el establishment sionista se aprovecha del sufrimiento de las víctimas judías en los años 1930 como un [arma] en contra de cualquier persona que se siente tentado a criticar a la entidad sionista expropiadora de tierras en Palestina y su tratamiento brutal de civiles [no armados] y contra todo aquel que cargue la estandarte de la resistencia.
«Si la Liga Árabe está realmente dispuesta a enfrentar la conspiración sionista-norteamericana opresiva, debe [trabajar] – en coordinación con los países musulmanes y al mismo tiempo aprovecharse de la sociedad civil árabe y todos sus recursos – para establecer un centro civil profesional que lleve a cabo este tarea. Este centro puede utilizar todas las habilidades de investigación y escritos y todos los recursos de distribución en los países árabes y musulmanes del mundo], así como también los de los liberales de todo el mundo. Esto, con el fin de presentarle al mundo con [evidencias] constantes y acumulativas – utilizando todos los medios posibles y aprovechando todos los círculos políticos, medios de comunicación y medios profesionales – para [exponer] la verdad sobre aquellos que están explotando su conciencia y la de la humanidad mientras que ellos mismos son los que realizan a diario, todos los componentes del Holocausto y del exterminio racista, y son responsables por las palabras y los hechos [que equiparan] las [declaraciones y acciones antisemitas más despreciables]. Este centro se enfrenta a un enorme reto, que ya ha sido llevado a cabo por escritores respetables e investigadores de todo el mundo. Todo lo que tiene que hacer es coordinar sus esfuerzos con los esfuerzos árabes, con el fin de exponer los mitos y las mentiras de los sionistas». [2]
Dr. Muhammad Al-Sharshabi: Los judíos siembran pugnas entre las naciones con el fin de controlar al mundo
El Dr. Muhammad Al-Sharshabi escribió: «El mundo musulmán [sufre] numerosas disputas, algunas justificadas y otras no, que están en constante crecimiento y están más allá de nuestra capacidad el detenerlas o limitarlas, de manera que los musulmanes se han convertido en la nación más afectada por la guerra civil y los disturbios internos. Cuando una nación identifica las fuentes de la enemistad y el odio entre sus miembros se pueden encontrar soluciones y fomentar un espíritu de amistad [entre sus miembros].
«El Dr. Mursi Al-Suweidi, profesor de teología comparada y da`wa, dice: «Uno de los signos de la grandeza de la fe musulmana es que comanda a los musulmanes a ser una fuente de paz dondequiera que esté y evitar ser una fuente del maldad o daño. A pesar de esto, el mundo está inundado de un [odio] fanático contra el Islam y la nación [musulmana] y contra todo lo que es humano.
«Hay que señalar que el sionismo mundial tiene planes… y los judíos presumen de su capacidad para aplicarlos e imponerlos en el mundo. [Al-Suweidi] aclara que los judíos siempre se basan en el método de sembrar la pugna entre naciones, [tal como se refleja en] su famoso lema de «divide y vencerás», porque una nación preocupada por las guerras y los conflictos internos no se da cuenta de las malas obras [de los judíos]. Además, esta política es una fuente de beneficios financieros para ellos. Cuando una nación vive en [un estado de] lucha interna entre sus [diversas] sectas e instituciones, se ve obligada a tomar préstamos de los bancos controlados por los judíos. Por lo tanto, [ellos son los] que planifican todos los incidentes extremistas terroristas y desarrollos, encendiendo las llamas del conflicto entre las superpotencias, y esto muestra… que la empresa sionista no se aboca por la paz, sino en humillar y derrotar al otro].
«[Al-Suweidi], añade que el sionismo no solo se surte de consignas inteligentes y convincentes a través del cual engañan a la raza humana, tales como el lema de la libertad, la fraternidad y la igualdad, que captan la atención de la gente y despiertan simpatía, pero cuando son examinadas en profundidad estas prueban que carecen de valor… el sionismo mundial también conspira contra la humanidad, con el fin de extender su influencia para instigar golpes de estado y urdir complots mortales…
«[Los judíos hacen esto], apoyándose en su capacidad para controlar la economía mundial… influir en la opinión pública mundial, corrompen sociedades y aniquilan toda conciencia y religión y a todas las naciones y regímenes. Todo esto se basa en los planes [establecidos en] el Talmud… Su objetivo final es judaizar al mundo ideológicamente y plantar percepciones materiales en los corazones y las mentes de la gente… Esto demuestra que la mayoría de las [campañas] destructivas, cualquiera que sea su nombre, son invenciones judías [y el fruto de] su imaginación satánica, con la intención de dejar a [todas] las naciones y pueblos en las garras de la influencia judía y el control sionista». [3]
[1] Al-Sharq (Qatar), 21 de abril, 2010.
[2] Al-Raya (Qatar), 22 de abril, 2010.
[3] Al-Sharq (Qatar), 23 de abril, 2010.
