En un artículo escrito unas semanas antes de que la organización yihadista Tehreek-e-Taliban Pakistan (TTP) acordara un alto el fuego provisional con Pakistán para facilitar las conversaciones de paz, el escritor paquistaní Umer Farooq discutió la situación de seguridad regional, en especial la relación de cooperación entre los talibanes afganos y el ejército iraní.
Tehreek-e-Taliban Pakistan dio a conocer un video en noviembre, 2021 que muestra a sus combatientes en pleno entrenamiento
El artículo de Umer Farooq, titulado «¿Hasta qué punto puede Pakistán confiar en los talibanes afganos para que maneje su problema con Tehreek-e-Taliban Pakistan?» fue publicado por el diario The Friday Times, una publicación independiente.[1] Este se produce cuando el grupo Tehreek-e-Taliban Pakistan (El movimiento de los talibanes pakistaníes, TTP) y el gobierno paquistaní firmaron un acuerdo de alto al fuego provisional para facilitar las conversaciones de paz mediadas por el Emirato Islámico de Afganistán, la organización yihadista talibán afgana que tomó el poder en Afganistán el día 15 de agosto, 2021.[2]
El artículo señaló que las fuerzas especiales del ejército iraní y el Emirato Islámico poseen experiencia trabajando juntos en Afganistán para combatir contra el Estado Islámico (EIIS).
A continuación se presentan extractos del artículo:
«En el período formativo a su auge, Tehreek-e-Taliban Pakistan fue financiado en gran medida por el liderazgo de Al-Qaeda»
«Los orígenes del Tehreek-e-Taliban Pakistan son bastante oscuros. Pero esto es lo único que se sabe: En el período formativo a su ascenso, este fue financiado en gran medida por el liderazgo de Al-Qaeda, que huía de las fuerzas estadounidenses tras la desaparición del primer régimen talibán en diciembre del año 2001.
«El liderazgo de Al-Qaeda se ubicó en las áreas tribales paquistaníes luego de huir de Afganistán. Varios documentos recuperados del poder de agentes de Al-Qaeda en Pakistán revelaron que la estrategia del grupo militante internacional era mantener ocupados a los servicios militares y de inteligencia paquistaníes en el conflicto local con las organizaciones militantes tribales.
«Y el liderazgo étnicamente árabe de Al-Qaeda deseaba tener las manos libres para operar en las áreas fronterizas entre Afganistán y Pakistán. A fin de crearse un espacio para ellos en esta región, aplicaron una estrategia de utilizar al Tehreek-e-Taliban Pakistan como poder y agente-estado contra el ejército de Pakistán. El gobierno paquistaní estuvo familiarizado con la estrategia de Al-Qaeda en ese momento. Las finanzas y técnicas – incluyendo la producción de terroristas suicidas en los centros de entrenamiento locales, provenían de agentes de Al-Qaeda. Esta relación continuó hasta el año 2014, cuando Tehreek-e-Taliban Pakistan cambió a sus amos extranjeros o aliados extranjeros.
«En ese momento, el grupo Estado Islámico (EIIS) comenzó a hacer sentir su presencia en Afganistán y Pakistán. Estos eran más radicales, tenían un carácter sectario dirigido hacia los musulmanes chiitas, lo cual se adaptaba al gusto de los talibanes paquistaníes y estaba listo para facilitar la lucha armada del Tehreek-e-Taliban Pakistan contra el estado paquistaní. Para ese entonces, Al-Qaeda perdía fuerza».
«Los talibanes afganos emitieron una declaración condenando el asesinato de Qassem Soleimani, quien para ese entonces era comandante de las Fuerzas Quds, por las ‘salvajes fuerzas estadounidenses’ y advirtieron sobre las consecuencias»
«Un acontecimiento paralelo se estaba produciendo en la dinámica interna de la militancia sunita en la región: los talibanes afganos estaban desarrollando relaciones sólidas con las potencias regionales, que estaban muy nerviosas por el surgimiento de grupos extremistas sunitas más radicales y despiadados en Afganistán. El EIIS al norte, este y oeste de Afganistán les dio bastantes noches de insomnio a los planificadores de seguridad iraníes y rusos.
«La proximidad geográfica del norte y este de Afganistán con los estados de Asia central, que la federación de Rusia todavía considera que están dentro de su perímetro de seguridad, obligó a los aparatos de seguridad de Rusia a proveer armas, entrenamiento y asistencia en inteligencia a los talibanes afganos, mientras las tropas estadounidenses aún estaban operando en el país ya devastado por la guerra.
«De manera similar, el régimen clerical de Irán comenzó a mostrar cierto nivel de aceptación ante los talibanes afganos. El ejército iraní facilitó a los talibanes afganos utilizando las Fuerzas Quds del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI), conocida por sus operaciones fuera del territorio iraní. No fue sorpresa para muchos que el 5 de enero, 2020 los talibanes afganos emitieran una declaración condenando el asesinato de Qassem Soleimani, el entonces comandante de las Fuerzas Quds, perpetrado por las ‘salvajes fuerzas estadounidenses’, advirtiéndoles sobre las consecuencias ante el hecho.
«Esta cooperación bilateral con segmentos del aparato militar iraní y de seguridad ruso puso a los talibanes afganos en curso de colisión con el EIIS dentro de Afganistán, el mismo EIIS que se estaba incrementando en fuerza en territorio afgano con deserciones a gran escala en las filas de los talibanes afganos, tal como era de esperarse, llegó un momento en el año 2016 en que tanto las fuerzas estadounidenses como los talibanes afganos, con la ayuda de las fuerzas de Al-Quds, llevaban a cabo operaciones militares contra las estructuras organizativas del EIIS al este y norte de Afganistán…»
«En el año 2016… Los talibanes afganos también llevaron a cabo operaciones militares contra la presencia organizativa del EIIS, con la ayuda de las fuerzas especiales iraníes»
«El hecho de que el EIIS ganaba fuerza en las partes del norte de Afganistán, cerca de las fronteras afganas con los estados de Asia Central… también ponía muy nervioso a Rusia. El hecho de que existía una insurgencia islámica activa en Tayikistán y Uzbekistán agrega a los temores de aquellos responsables de planificar militarmente en los países al norte de Afganistán. Fue el momento en que Irán comenzó a establecer contactos con los talibanes afganos a fin de reforzar su poderío militar contra la creciente marea del EIIS en Afganistán.
«En el año 2016, según algunos informes, los talibanes afganos también llevaron a cabo operaciones militares contra la presencia organizativa del EIIS, con la ayuda de las fuerzas especiales iraníes. Después de llegar al poder en Kabul al tomar el poder el 15 de agosto, 2021 los talibanes afganos continúan sus operaciones militares contra las fuerzas del EIIS en Afganistán. La última operación de este tipo fue llevada a cabo en las afueras de Kabul el mes pasado en septiembre del 2021.
«Los talibanes afganos también compiten con el EIIS para ganarse el favor de los talibanes paquistaníes. Como tal, los talibanes afganos y paquistaníes llevaron a cabo operaciones conjuntas contra las fuerzas de la OTAN en el pasado. Existe una diferencia de opinión dentro de los talibanes afganos sobre si apoyar el ‘yihad’ del Tehreek-e-Taliban Pakistan contra el estado paquistaní, pero no faltan extremistas en sus filas que han apoyado con vehemencia los ataques terroristas en contra del estado paquistaní en el pasado.
«El tema importante para Pakistán no es si los talibanes afganos logran vencer al Tehreek-e-Taliban Pakistan y lo obligan a disociarse organizativa e ideológicamente del EIIS. En cambio, el tema es si el régimen talibán evitará al liderazgo talibán paquistaní, que sigue residiendo en ciudades fronterizas del lado afgano de la frontera internacional, desde su uso del suelo afgano para llevar a cabo ataques terroristas dentro de Pakistán.
«Este tema es tanto de intención como de capacidad, lo que, en otras palabras, significara si los talibanes afganos tienen o no la capacidad militar y de inteligencia para prevenir ataques contra Pakistán desde suelo afgano. Para desarrollar esa capacidad, la conferencia de los jefes de inteligencia regionales detenidos en Islamabad en agosto del año 2021 acordó proveerle a los talibanes afganos evaluaciones de inteligencia de la situación en tiempo real.
«Aún así, sería muy imprudente por parte de los planificadores paquistaníes en el área de seguridad confiarle a los talibanes afganos la seguridad de Pakistán ante el resurgimiento de la amenaza que emana de los talibanes paquistaníes. El terrorismo y la violencia son la propia naturaleza de la estructura organizativa e ideología de los talibanes. Esperar cualquier cambio en la naturaleza de los talibanes paquistaníes resultará ser una ingenuidad de primer orden”.
[1] TheFridayTimes.com (Pakistán), 24 de octubre, 2021. El escrito en inglés original del artículo ha sido ligeramente editado para mayor claridad y comprensión.
[2] Informe del PSATY en MEMRI -Tehreek-e-Taliban Pakistan (TTP) acuerda cese al fuego de un mes con el gobierno de Pakistán a fin de facilitar las negociaciones que están siendo mediadas por los talibanes afganos, 15 de noviembre, 2021.17