Cerca de mes y medio después de la formación del gobierno libanés, con una mayoría para las Alianza 8 de Marzo pro-Siria pro-Irán liderada por Hezbola, los Estados Unidos están incrementando su presión sobre el Líbano, con el objetivo de evitar que Hezbolá se vuelva aún más fuerte en la arena política libanesa y evitar que el Líbano se acerque más a Rusia.

Esta presión se ve manifestada en declaraciones de la embajadora estadounidense en el Líbano Elizabeth Richard quien, al concluir su reunión del 19 de febrero, 2019 con el Primer Ministro libanés Sa’d Al-Hariri, expresó su preocupación por el creciente papel de Hezbolá y dijo que este desestabiliza al país. Sin embargo, aclaró que los Estados Unidos tienen la intención de continuar su ayuda al Líbano.[1] El secretario de Estado adjunto estadounidense para Asuntos del Cercano Oriente David Satterfield, quien visitó el Líbano a comienzos de marzo, 2019 subrayó aún más el vínculo entre la ayuda estadounidense y los esfuerzos requeridos por el Líbano para impedir que Hezbolá se vuelva aun más fuerte. Este destacó que el enfoque del Líbano y el de otros países dependían de «cómo el Líbano toma sus decisiones, que esperamos sean positivas para el bien del Líbano y no para el bien de elementos externos» – es decir, Irán.[2] Según un informe, Satterfield también dijo que la continuación de la ayuda de Estados Unidos al Líbano estaba supeditada al cese de su acercamiento con Rusia.[3] La visita de Satterfield fue antes de la visita planeada para el 23 de marzo del Secretario de Estado de los Estados Unidos Mike Pompeo.

Según informes en la prensa libanesa, se espera que Pompeo, en sus reuniones con líderes libaneses, incluyendo al Presidente Michel Aoun y el Primer Ministro Al-Hariri, plantee la preocupación de Estados Unidos sobre el fortalecimiento de la posición de Hezbolá en la arena política; la preocupación de que, como resultado, Irán incrementará su influencia en el Líbano por medio de Hezbolá o mediante la penetración dentro de las instituciones gubernamentales tales como el ejército y también en sus esferas correspondientes a la salud y energía; y también la preocupación de que el Líbano se convierta en conductor para eludir las sanciones impuestas a Hezbolá e Irán.[4] También se espera que Pompeo exprese reservas estadounidenses sobre la creciente cercanía del Líbano a Rusia, que durante el año pasado ha estado trabajando para establecer su presencia en el Líbano a través de acuerdos militares conjuntos, acuerdos respecto al petróleo y mediante la iniciativa de devolverle a los refugiados sirios en el Líbano a siria. Cabe destacar que se prevé que Pompeo llegue al Líbano 3 días antes de que el Presidente libanés Michel Aoun se dirija a Rusia para reunirse con el Presidente Putin. Otro tema que discutirán Pompeo y altos funcionarios libaneses es el establecimiento de la frontera económica entre El Líbano e Israel, un paso que a Estados Unidos le gustaría acelerar, aparentemente debido a la preocupación de que un Hezbolá más fuerte perjudicará las posibilidades de realizarlo en el futuro.

La Alianza 8 de Marzo respondió con amargura a la presión estadounidense sobre el Líbano para evitar así el fortalecimiento de Hezbolá y sus aliados. Elementos en este bando vieron las palabras del Embajador Richard y del Secretario de Estado adjunto Satterfield como intervención «grosera y vulgar» en los asuntos internos del Líbano.[5] Los dos fueron acusados ​​por representantes de este bando de violar el honor del Líbano y también de incitación, en un intento por provocar una guerra civil.[6]

Artículos en el diario afiliado a Hezbolá Al-Akhbar afirmaron que Estados Unidos está intentando desestabilizar al Líbano y que «está decidido a no permitir que el Líbano permanezca fuera de la guerra estadounidense-israelí-saudita contra el eje de la resistencia». Tal como fue mencionado, Satterfield afirmó que su país continuara presionando al Líbano incluso a costa de socavar su estabilidad.[7]

Mientras tanto, la Alianza 8 de Marzo sigue muy de cerca el momento previo a la visita de Pompeo, mientras advierte en su contra. El jeque Suheib Habli, quien es cercano a Hezbolá, advirtió sobre un regreso a los planes estadounidenses para perjudicar la seguridad y estabilidad del Líbano, y agregó que la ola de incitación estadounidense terminará con la visita de Pompeo «que traerá consigo lo que Estados Unidos dicte y quiera imponerle al Líbano».[8] El ex-ministro Wiam Wahhab incluso advirtió: «Si [el Primer Ministro Al-Hariri] se rinde a la presión del Secretario de Estado Pompeo, esto conducirá a la caída del gobierno… y al establecimiento de un gobierno mayoritario [de la Alianza 8 de Marzo]».[9]

Un artículo en el portal de Hezbolá Al-Ahed, declaró que Pompeo no es bienvenido ya que viene a incitar en contra de Hezbolá. El artículo describe a la Embajada de Estados Unidos como una «red de espionaje» cuya única misión es espiar a Hezbolá.[10] El ataque de la Alianza 8 de Marzo a la próxima visita de Pompeo también fue expresado en un artículo del periodista Yasser Rahal, publicado en el portal de Hezbolá Al-Ahed, el cual denominó a los Estados Unidos como la «madre del terrorismo» y el «Gran Satanás». Este agregó que la actividad estadounidense en el Líbano tiene como objetivo perjudicar a la resistencia y al Líbano en general y que la visita de Pompeo pretende presentar al Líbano con dictados e incentivos financieros. Por lo tanto, este concluyó, los libaneses no deberían minimizar sus fuentes de fuerza, primero y ante todo la resistencia.

Lo siguiente es la traducción del artículo de Rahal:

«Cada vez que la situación en el Líbano tiende a estabilizarse y pareciera que los libaneses están llegando a un entendimiento y acuerdo y el tren está retornando al carril, llega de nuevo el pájaro de mal agüero estadounidense con presagios maliciosos, con un plan para provocar controversias internas.

«De hecho, los Estados Unidos alientan las luchas internas y peleas y es ‘la madre del terrorismo’. Yo dirigiría a cualquiera que aún crea en el sueño americano y en todas las consignas relacionadas a este, como la comunidad internacional, a que echen un vistazo al historial afroamericano estadounidense, el cual está repleto de crímenes y agresiones contra países y pueblos.

«Conformémonos con [dar aquí] una lista de los países contra los que ha luchado, conquistado o en cuyos asuntos ha intervenido: Colombia, Panamá, Corea, Marruecos, Honduras, México, Nicaragua, República Dominicana, Filipinas, China, Haití, Costa Rica, Guatemala, Turquía, Rusia, Alemania, Japón, Grecia, Puerto Rico, Líbano, Laos, Ecuador, Vietnam, Indonesia, Granada, Libia, Islas Vírgenes, Irak, Somalia, Sudán, Yugoslavia, Afganistán, Siria, Bahréin y Yemen. Treinta y seis países han sufrido de la maldad estadounidense. No hay más remedio que repetir las famosas palabras del Imam Jomeini que describió a los Estados Unidos como el Gran Satanás.

«Con respecto al Líbano – no volvamos al desembarco [de las fuerzas estadounidenses] en la costa de Beirut en 1958.[11] Resolvámonos con los planes que los cancilleres [estadounidenses] y sus ayudantes y sus embajadores, tuvieron para sus visitas al Líbano.

«No tenemos la intención de relatar la historia en detalle. Basta con mencionar nombres que le recordarán a los libaneses las posiciones del para ese entonces ‘querido’ [embajador de Estados Unidos en Beirut y secretario de estado adjunto] Jeffrey Feltman y los $500 millones [destinados en ese momento para] demonizar a Hezbolá; [la entonces embajadora de Estados Unidos en Beirut] Michelle Sisson y sus declaraciones sobre Hezbolá que fueron reveladas a través de WikiLeaks;[12] [el Secretario de Estado Adjunto para Asuntos del Cercano Oriente] David Satterfield y la presión que ejerció se aplicó para privar a los libaneses de sus derechos sobre el petróleo; [el entonces Secretario de Estado] Colin Powell y [su] intento de eliminar la resistencia [es decir, Hezbolá]; [la entonces Secretaria de Estado] Condoleezza Rice y el intento de subyugar el pueblo de resistencia durante la agresión del año 2006 [es decir, la Segunda Guerra del Líbano] y antes de eso, [la entonces Secretaria de Estado] Madeleine Albright y sus actividades para prevenir la liberación [del sur del Líbano y su apoyo al] robo de [Tierra, agua y petróleo en beneficio del enemigo y [su] amenaza contra el entonces presidente [libanés] Emile Lahoud.[13]

«En su próxima visita, el comportamiento de Mike Pompeo no será diferente al de sus predecesores. Este vendrá a ‘educar’ a los libaneses porque se defendieron y se negaron a someterse a las condiciones del enemigo israelí respecto al redibujar la frontera del mar.

«Este viene a advertir que habrá ‘grandes calamidades y catástrofes’ si la resistencia [es decir, Hezbolá] permanece arraigada en los corazones de los libaneses. Viene con las manos manchadas de sangre de los chicos en Yemen, Irak, Libia y Palestina y en Siria, que le derrotó y este se irá con la cola entre las piernas en total y rotundo fracaso. Este no se esconderá detrás de acusaciones infundadas, como es común en la diplomacia, dirá en voz alta: es Israel o el látigo. Incrementaremos las sanciones, cerraremos su economía e impediremos acuerdos y eso es solo el comienzo. Entréguennos al jefe de la resistencia y lo que recibirá de nosotros de seguro sorprenderá al mundo. Renuncie a su soberanía, a su tierra y a su petróleo y le recompensaremos en creces 10 veces más.

«Cálmense, caballeros, los tiempos han cambiado. El Líbano ya no está en el punto más bajo de su debilidad, sino que es fuerte en virtud de su ejército, su pueblo y su resistencia [es decir, Hezbolá].

«Ya se ha demostrado que cada vez que entramos en la contienda somos nosotros los que ganamos. ¿Quién hubiese creído que el ejército imbatible [es decir, las FDI] sería derrotado? ¿Quién hubiese creído que la guerra contra el terrorismo takfir tendría éxito y que lo eliminaríamos de nuestro país? Si los libaneses menosprecian todos sus puntos fuertes esta vez, entonces [podemos decirle] adiós al país… y será demasiado tarde para lamentarlo».[14]


[1] Lb.usembassy.gov, 20 de febrero, 2019.

[2] Almanar.com.lb, 5 de marzo, 2019.

[3] Elnashra.com, 9 de marzo, 2019.

[4] Véase la serie de MEMRI Investigación y Análisis No. 1443 – Disputa en el Líbano por el ofrecimiento de Irán para equipar al ejército libanés, 25 de febrero, 2019.

[5] Elnashra.com, 20 de febrero, 2019.

[6] Almanar.com.lb, 6 de marzo.

[7] Al-Akhbar (Líbano), 7 de marzo, 2019; 8 de marzo, 2019.

[8] Elnashra.com, 15 de marzo, 2019.

[9] Elnashra.com, 18 de marzo, 2019.

[10] Alahednews.com.lb, 19 de marzo, 2019.

[11] En 1958, Estados Unidos intervino militarmente en el Líbano para detener la guerra civil que había estallado en el país.

[12] El portal WikiLeaks reveló telegramas sobre Hezbolá enviados por el Embajador Sisson, por ejemplo, un telegrama sobre la participación de Irán en la red de comunicaciones de Hezbolá. Wikileaks.org, 16 de abril, 2008.

[13] Tras la oposición del Líbano a un proyecto de resolución en el Consejo de Seguridad de la ONU que aprobó la retirada de las FDI del Líbano en el año 2000, la Secretaria de Estado estadounidense Madeleine Albright, presionó al presidente libanés Emile Lahoud para que renovase a la oposición de su país. En su libro, Lahoud escribió que durante la discusión (por teléfono), Albright lo amenazó y este le colgó. Consulte la serie de MEMRI Despacho Especial No. 7360 – A la sombra de las demandas estadounidenses por desarmar a Hezbolá y por el compromiso en los conflictos fronterizos entre el Líbano e Israel, el Secretario de Estado estadounidense Tillerson es insultado en visita al Líbano y su reunión no alcanzó ningún resultado, 28 de febrero, 2018

[14] Alahednews.com.lb, 15 de marzo, 2019.