Pakistán y muchos países islámicos están siendo testigos de asesinatos selectivos de musulmanes chiítas por fuerzas jihadistas sunitas tales como los talibanes y Al-Qaeda (Imagen cortesía: shiapost.om)
A continuación se presentan extractos de un artículo que apareció en uno de los principales diarios de Pakistán seguido a los ataques terroristas del 15 de junio, 2013 en Quetta, capital de la provincia paquistaní de Baluchistán, donde una terrorista suicida atacó un autobús que transportaba a muchachas estudiantes y luego los militantes sitiaron un complejo médico donde los heridos estaban siendo tratados.
El artículo, titulado «Islam en Guerra – Consigo mismo» del destacado comentarista Murtaza Haider, fue publicado por Dawn, un diario paquistaní liberal. En este, Haider sostiene que el debate en el mundo islámico se centra sobre los conflictos donde musulmanes son oprimidos por no musulmanes, mientras que convenientemente no plantean un debate sobre el por qué los musulmanes están asesinando musulmanes.
Lo siguiente son extractos del artículo:[1]
«Desde Aleppo en Siria a Quetta en Baluchistán, los musulmanes están enfrascados en masacrar a otros musulmanes», «muchos se preguntan si la creencia en el Islam es suficiente para unirlos unos a otros en paz»
«Desde Aleppo en Siria a Quetta en Baluchistán, los musulmanes están enfrascados en masacrar a otros musulmanes. Las cifras son enormes: Más de 93.000 muertos en la guerra civil en Siria y más de 48.000 muertos en Pakistán [desde el 2004].
«Millones han perecido en conflictos intra-musulmanes similares en las últimas cuatro décadas. Muchos se preguntan si la creencia en el Islam es suficiente para unirlos unos a otros en paz.
«Desde el final de la Segunda Guerra Mundial, el mundo se ha movido en dos direcciones distintas. Occidente, mayormente cristiano, ha tratado de minimizar el conflicto intra-europeo y ha tenido un gran éxito con algunas excepciones. El mundo musulmán, por otra parte, ha caído uno tras otro en conflictos violentos, involucrando mayormente a musulmanes.
«Varios conflictos intra-musulmanes continúan efervescentes tales como las guerras de poder. En los años 80, la sola guerra Irán-Irak dejó millones de muertos. Más recientemente, un coche bomba en Irak el domingo [16 de junio, 2013] asesinó a otras 39 personas en la guerra sectaria entre chiítas y sunitas que dejó un saldo de al menos 1045 asesinados en mayo, 2013».
«La abrumadora evidencia… sugiere que las divisiones sectarias y tribales entre los musulmanes y la justificación de la violencia en nombre de la religión son las principales causas del por qué el Islam está en guerra consigo mismo»
«A medida que la violencia entre los musulmanes aumenta, la mayoría prefiere negarla, o buscar chivos expiatorios. Aquellos en negación creen que no existe este tipo de violencia y todo el asunto es fabricado por los medios de comunicación controlados por los occidentales. Otros culpan a chivos expiatorios – hindúes y estadounidenses son los más frecuentemente culpados.
«La abrumadora evidencia, sin embargo, sugiere que las divisiones sectarias y tribales entre los musulmanes y la violencia justificada en nombre de la religión son las principales causas del por qué el Islam está en guerra consigo mismo.
«En Pakistán, confesiones y afirmaciones terribles de responsabilidad por parte de los portavoces del Tehrik-e-Taliban y Lashkar-e-Jhangvi no deberían dejar ninguna duda sobre [donde] reside la culpa. Al mismo tiempo, las agencias de inteligencia paquistaníes han juntado pruebas incriminatorias en cientos de miles de páginas contra los extremistas sectarios, afiliados a Al-Qaeda, las milicias nacionalistas de Baluchistán, y otros que han cometido actos de violencia indiscriminada contra la población civil y el estado resultando en más de 48.000 muertes desde el año 2004.
«Los abismos alimentados de odio que dividen a los musulmanes son tan amplios que no sólo los civiles desarmados, sino los médicos y otros que tratan de salvar a las víctimas de la violencia también son blanco de los extremistas. El ataque al Complejo Médico Bolan el sábado [15 de junio, 2013 en Quetta], que dejó decenas de muertos, entre ellos cuatro enfermeros, no fue el primero de su tipo. Un ataque sectario [chiíta-sunita] en Karachi en febrero, 2010 fue seguido por un ataque con bomba al Hospital Centro Medico de Postgrado Jinnah, donde a las víctimas se les llevó para ser tratadas. Más de 25 musulmanes chiítas fueron asesinados en los dos ataques».
«Desde el primer día, a los musulmanes se les enseña que su creencia en el Islam triunfa sobre todas las demás identidades que puedan sostener», «¿Por qué entonces, han muerto millones de musulmanes a manos de sus compañeros creyentes?»
«Y si bien la violencia de musulmanes contra musulmanes está reclamando víctimas en toda Pakistán, la violencia contra los no musulmanes, incluyendo a hindúes y cristianos, a menudo reúne a musulmanes de diferentes estirpes, que de otro modo se pelearían entre sí atacando a minorías religiosas.
«Los asesinatos selectivos a profesores universitarios en Karachi y Quetta, el asesinato de médicos y profesionales chiítas, y los ataques a los santuarios de los santos patronos [es decir, místicos sufíes] son evidencia al hecho de que los musulmanes han estado asesinando a otros musulmanes motivados estos por el odio y usando el Islam para justificar la violencia.
«¿Por qué es que la creencia en el Islam no es suficiente para prevenir la violencia entre musulmanes?
«Desde el primer día, a los musulmanes se les enseña que su creencia en el Islam supera todas las otras identidades que puedan sostener. Su color de piel, tribu, casta o credo – nada importa una vez que entran dentro de las filas del Islam ¿Por qué entonces, millones de musulmanes han muerto a manos de sus hermanos en fe?»
«Líderes políticos, religiosos y demás en el mundo musulmán han mantenido el diálogo centrado en los conflictos en donde los musulmanes han sido las víctimas», «Pocas veces han centrado el diálogo sobre el por qué los musulmanes asesinan a otros musulmanes»
«Líderes políticos, religiosos y demás en el mundo musulmán han mantenido el diálogo centrado en los conflictos en donde los musulmanes han sido víctimas. El conflicto bosnio, la violencia comunal en India, que ha causado la muerte de miles de musulmanes, y el conflicto árabe-israelí han sido el foco de los líderes musulmanes.
«Pocas veces el diálogo se ha centrado en el por qué los musulmanes asesinan a otros musulmanes. Y aun así si el tema aparece en el tapete, termina siendo un ejercicio en la búsqueda masiva de chivos expiatorios.
«Las sociedades musulmanas han evolucionado hacia lugares donde la venganza se confunde con justicia, el perdón con la debilidad, y la paz con cobardía. Estos son los lugares donde los hombres impíos emprenden guerras santas contra civiles desarmados, lanzando a musulmanes en contra de otros musulmanes.
«Imagínense el estado de ánimo de la persona que llevaba puesto un chaleco suicida y abordó el autobús que transportaba a las jóvenes [el 15 de junio en Quetta] cuyos rostros brillantes se iluminaban con el orgullo de ser educadas. No había ninguna razón para atacar a estas mujeres inocentes desarmadas y sin relación alguna con ningún conflicto. Pero eso no impidió que la terrorista suicida procediera a asesinarlas junto a ella misma en un ataque suicida».
«Un grupo de hombres entonaron con orgullo: ‘Alá-u-Akbar’…, elogiando a la atacante suicida por asesinar a las [muchachas estudiantes]», «todo esto fue hecho en nombre del Islam, que será repetido tarde o temprano; algunos dirán éste no es el ‘verdadero’ Islam»
«Momentos antes de la explosión, las jóvenes ignoraban el dolor que pronto les sería infligido. Deben [haber estado] sonriendo y hablando con sus amigas, planificando el resto del día y de lo que les deparaba el futuro en sus vidas. La atacante suicida miró los rostros de las mujeres que, si se les diera la oportunidad, sin duda hubiesen mejorado la situación de la empobrecida nación…”
«En algún lugar o cerca de Quetta, un grupo de hombres entonaban con orgullo: «Alá-u-Akbar «(Dios es grande), elogiando a la atacante suicida por asesinar a las propias [estudiantes] más prometedoras de Pakistán. Su portavoz llamó a los medios de la prensa para responsabilizarse por el ataque a mujeres desarmadas. Luego, en el Complejo Médico Bolan de Quetta, otro grupo de hombres, armados con AK-47 y con chalecos suicidas comprometieron al personal de seguridad en un enfrentamiento que dejó varios muertos más, entre ellos cuatro enfermeras que atendían a los heridos de la explosión anterior.
«Todo esto fue hecho en nombre del Islam. Esto tarde o temprano se repetirá. Algunos podrían argumentar que este no es el ‘verdadero Islam’. ¿Importa realmente lo que el verdadero Islam es cuando sus verdaderos seguidores no pueden ir contra aquellos que utilizan la religión para cometer genocidio?»
[1] (Pakistán), 17 de junio, 2013. El escrito original en inglés fue editado ligeramente para mayor claridad y normalización.