En un artículo del 18 de octubre, 2008 en el portal iraní Aftab, Wahid Karimi, director del departamento de Europa y Estados Unidos en el Ministerio del Exterior de Irán, recomienda que Irán señale a Londres como blanco, ya que es la capital del país aliado más cercano a los Estados Unidos en Europa. Esto, dice Karimi, sería con el objetivo de asegurar que la administración Bush no ataque a Irán en sus últimas semanas, después de las elecciones presidenciales norteamericanas el próximo mes y antes de que Bush oficialmente deje el cargo el 20 de enero, 2009.
A continuación se presentan los puntos principales del artículo de Karimi:
Karimi: «Los medios más apropiados de disuasión que Irán tiene, además de una operación de venganza en la región del [Golfo], es tomar acciones contra Londres»
«… Es claro para todos que George Bush seguirá siendo el presidente oficial de los Estados Unidos hasta el 20 de enero del 2009. Los presidentes norteamericanos son generalmente aventureros en sus segundos periodos… [entre ellos Richard] Nixon, con la desgracia del escándalo Watergate; [Ronald] Reagan, con la aventura del Irangate; [y Bill] Clinton, con Mónica Lewinsky – y quizás George Bush, el presidente que ahora ocupa la silla, creará un escándalo conectado a las legitimas actividades sobre la energía nuclear de Irán como para no quedarse atrás.
«En el pasado, Irán ha marcado como blanco las bases militares norteamericanas en los países árabes en el Golfo Pérsico, para detener la aventura norteamericana. Poco después de eso, este dio las advertencias requeridas respecto a [una posible acción iraní para] paralizar ‘al régimen que ocupa Jerusalén [e.d. Israel]’, como para detener la aventura de los norteamericanos…
«Aunque un ataque militar norteamericano a las instalaciones nucleares de Irán no es nada probable… los últimos dos meses de la presidencia de Bush, desde finales de noviembre del 2008 al 20 de enero del 2009, serán los peores días posibles de su presidencia [ya que Irán, y durante estos él puede] aprovecharse de su poder para llevar a cabo una aventura política y una operación malvadamente concebida. En ese caso, cómo podemos nosotros contenerle?
«Es posible que después de que el próximo presidente de los Estados Unidos sea determinado en noviembre – es decir, [o John] McCain o [Barack] Obama – Bush y el presidente electo alcanzarán un acuerdo sobre una operación enfermizamente concebida en contra de Irán.
«En el peor de los escenarios posibles, George Bush puede quizás persuadir al presidente electo a que lleve a cabo una operación malvadamente concebida contra Irán, antes del 20 de enero, 2009 – es decir, antes de que el régimen sea entregado y termine su presencia en la Casa Blanca. El próximo presidente de los Estados Unidos tendrá que lidiar con las consecuencias…
«Si acordamos tal escenario – con América, Inglaterra e Israel en su centro – es concebible, entonces parecería que los medios más apropiados de disuasión que Irán tiene, además de una operación vengativa en la región del [Golfo], es tomar acciones contra Londres. La experiencia demuestra que [la parte actuada] por los políticos en Tel Aviv y en Londres, en [hacer ventilar] las llamas contra Irán y en instar a América a que ataque Irán, no es nada menos que [la parte actuada] por Bush».