Las tensiones entre Arabia Saudita e Irán han ido gravemente empeorado recientemente seguido a dos grandes eventos: La toma Houthi de la capital yemenita de Saná el 21 de septiembre, 2014 así como también de los lugares estratégicos a las orillas del Mar Rojo; y los temores en Arabia Saudita respecto a importantes concesiones por parte del grupo de los P5+1 con Irán conduciendo estas a la firma de un acuerdo permanente en materia nuclear.

Sin embargo, a diferencia del pasado, esta vez las tensiones entre los países se desbordaron al punto de recriminaciones mutuas en el ámbito político y diplomático. Así, por ejemplo, algunos interpretaron la sentencia de muerte dictada por un tribunal saudita de un opositor chiita Nimr Baqr Al-Nimr como una acción anti-iraní. Lo mismo ocurre con la dramática caída de los precios del petróleo a nivel mundial, lo que fue interpretado por Irán y muchos analistas en el mundo árabe como una acción destinada a perjudicar la economía iraní. [1] Una expresión de la escalada de tensiones es la amplia cobertura dada en las últimas semanas por los medios de comunicación sauditas, en particular el diario oficial del gobierno Al-Watan, al tema de las minorías étnicas perseguidas en Irán, principalmente los sunitas, kurdos, baluchis y minorías ahwazíes. Esta cobertura incluye demás informes, artículos y entrevistas que se ocupan de estas minorías, poniendo énfasis en su «opresión» y a los «actos inhumanos» a los cuales están sujetos por el régimen iraní.

Así, por ejemplo, Al-Watan publicó un artículo sobre la política discriminatoria racista de Irán respecto a los sunitas, y contrastó la política de Irán, que, según dijo, «lleva a sus estudiantes sunitas a la horca», con políticas de Arabia Saudita y los Estados del Golfo – que invierten en la educación de los jóvenes independientemente de su origen étnico y «asegurándose de concederle becas a los estudiantes chiitas». [2] Un artículo de opinión en el diario oficial saudita Al-Jazira, también comparó el tratamiento de las minorías chiitas en Arabia Saudita con la de las minorías sunitas en Irán. Este escrito afirmó que Irán cuenta con una política de opresión y persecución hacia los árabes ahwazíes sunitas, expresada por los intentos de eliminar su identidad árabe, suprimir su fe sunita, oprimirlos culturalmente prohibiéndoles hablar y estudiar árabe, y robarles los recursos naturales en su territorio. [3] Otro artículo en el diario saudita Al-Riad afirmó que los sunitas de Irán «sufren de marginación, son escrutados sobre el tema de seguridad, persecución, arrestos y torturas, además de no permitírseles realizar sus rituales y construir mezquitas». [4] El diario oficial saudita Makkah asimismo publicó, el 29 de noviembre, 2014 un artículo condenando «la política racista» de Irán hacia las minorías que viven en su territorio, que según dijo, se manifiesta en arrestos, torturas y ejecuciones. [5]

Además de los informes y artículos, los medios de comunicación sauditas acondicionaron un púlpito para los voceros de las minorías étnicas de Irán, quienes hablaron largo y tendido sobre su dura opresión, que incluyó la usurpación de derechos, persecuciones y ejecuciones. En octubre, 2014 el diario oficial saudita Al-Watan llevó a cabo una serie de entrevistas con estos portavoces, incluyendo al líder de la Organización Nacional para la Liberación de Ahwaz, también conocido como HAZM, [6] y con el jefe del comité ejecutivo de HAZM [7], con Saeed Hamidan director ejecutivo de la Organización Ahwaz para la Defensa de los Derechos Humanos; [8] y con funcionarios de la organización kurda PJAK [9] Estos voceros se quejaron por «la negación a los derechos de las minorías en Irán» y del «trato racista» e incluso a las «ejecuciones», «crímenes contra la humanidad», «limpieza étnica» y «exterminio masivo» llevado a cabo contra ellos.

Por otra parte, los medios de comunicación sauditas también pusieron de relieve a los portavoces de los grupos armados de oposición que trabajan en contra de Irán, que al parecer otorgan legitimación saudita y apoyo a las acciones militares contra Irán. Así, por ejemplo, el 25 de octubre, 2014 el portal para el canal saudita Al-Arabiya entrevistó al jefe del grupo armado baluchi Jaish Al-Adl (el Ejército de Justicia), Salah Al-Din Farooqi, quien dijo que su organización «continuará las acciones armadas [contra Irán], siempre y cuando el pueblo baluchi y sunita [de Irán] esté sujeto a la opresión, discriminación y marginalización a manos de las autoridades iraníes». [10]

Al-Watan publicó también una entrevista con el comandante de Jaish Al-Adl Farooqi el 27 de octubre, 2014 en el que revelaba que su grupo derribó un avión de guerra de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) sobre Baluchistán el 11 de octubre, 2014 matando a siete altos funcionarios del CGRI. Cabe mencionar que los medios de comunicación iraníes informaron que una falla mecánica provocó que el avión se estrellara. [11]


De la entrevista de Al-Arabiya con el líder de Jaish Al-Adl

Parece ser que la intensa cobertura mediática saudita a las minorías étnicas en Irán, específicamente la entrevista de Farooqi en Al-Watan, en la que se atribuyó la responsabilidad por el derribo del avión iraní, indignó a las autoridades iraníes. Al-Watan incluso declaró explícitamente que su intensa cobertura de las minorías étnicas perseguidas en Irán enfureció al régimen allí. Según el diario, la entrevista con Farooqi «avergonzó al régimen iraní delante del público iraní» y «en respuesta, el CGRI emitió un furioso comunicado amenazando a los medios de comunicación saudíes a que detengan el darle relieve a la cuestión de las minorías…» [12] Por el contrario, parece ser que las minorías étnicas de Irán están contentas por habérseles dado un púlpito. Al-Watan informó que su editor recibió una carta de HAZM agradeciendo al diario en nombre del «pueblo ahwazí árabe» por su cobertura y por su «participación a los oprimidos y débiles de Irán». [13]


Carta de la organización ahwazí al editor de Al-Watan (Al-Watan, Arabia Saudita, 30 de octubre, 2014)

Cabe mencionar que los medios de comunicación saudíes siempre han destacado alegatos de injerencia iraní en los asuntos internos de Arabia Saudita e intentos de Irán para incitar a los sauditas chiitas en contra de las autoridades locales, y que ha ofrecido numerosos artículos llamando a responderle a Irán por igual mediante el apoyo a las minorías étnicas allí. [14] Esta reciente tendencia en los medios sauditas parece ser una implementación de esta postura.

El 19 de octubre, 2014 como parte de la mencionada serie de entrevistas con los portavoces de las minorías étnicas de Irán, Al-Watan publicó una entrevista con el líder HAZM Habib Jaber. HAZM es una organización que agrupa a varios movimientos populares de liberación Ahwaz que han estado operando abiertamente en Egipto desde el 15 de enero, 2010. En la entrevista, Jaber dijo que Irán ya había puesto en práctica la mayor parte de su plan expansionista, que consiste en interferir en los asuntos internos de los estados árabes y del Golfo para incitar a las minorías chiitas en estos países contra los regímenes sunitas y por el posicionamiento de iraníes leales en puestos clave. Jaber también justificó la pena de muerte que el tribunal saudita emitió contra el antiguo clérigo chiita y oposicionista Nimr Baqr Al-Nimr, con el argumento de que Irán ejecuta árabes sin juicio por cargos menos graves que los presentados contra Al-Nimr.

También, Jaber pidió a los estados del Golfo apoyar a las minorías en Irán, incluyendo a los árabes de Ahwaz, quienes dijo son oprimidos fuertemente por el régimen chiita de Irán, y ha añadido que el apoyo a esas minorías le daría a Irán algo de su propia medicina encendiendo el conflicto dentro de sus fronteras, al igual que Irán inflama conflictos en otros países. [15]

Lo siguiente es una traducción del artículo:

Los árabes deben apoyar a las minorías étnicas en Irán para avivar los conflictos allí, tal como Irán lo está haciendo en los países árabes

«El director de la Organización Nacional para la Liberación de Ahwaz [HAZM], Habib Jaber, expresó su sorpresa porque Irán defendió a Nimr Al-Nimr, a quien un tribunal saudita condenó a muerte la semana pasada ‘como una advertencia [a otros]’. ‘En una conversación telefónica con Al-Watan, Jaber dijo que si un residente Ahwaz dijera en Irán lo que Al-Nimr dijo [en Arabia Saudita], [el régimen] en Teherán lo hubiese ejecutado sin juicio alguno…

«Habib señaló que Irán tiene un plan de ’50 [años]’, cuya mayoría de medidas han sido llevadas a cabo con éxito, [16] y que los países árabes, por otra parte, específicamente los estados del Golfo, no tienen un plan contrario o actividades que puedan contrarrestar en el terreno a fin de frenar el expansionismo iraní. El líder de HAZM dijo: «En primer lugar, todos deben darse cuenta de que no somos [tratados como] ciudadanos iraníes, por lo que no podemos ser [llamados] ‘árabes iraníes’. Somos un pueblo que vive en tierra ocupada por los persas, y nuestro problema no es diferente al de los palestinos. La injusticia iraní va dirigida a todos los sectores iraníes conocidos como pueblos no persas. Los mismos persas también sufren de esta opresión, pero la opresión del [pueblo] Ahwaz es cualitativa y cuantitativamente diferente’.


Logo HAZM (imagen: Facebook.com/AlmnzmtAlwtnytLthryrAlahwazHzm)

«[En la entrevista,] Habib Jaber señaló que Irán ha estado implementando la más cruel de las tácticas de opresión contra los árabes de Ahwaz desde junio de 1925, cuando el llamado levantamiento se produjo en lo que para ese entonces era la capital de Ahwaz, la ciudad de Al-Muhammara, [un levantamiento] que fue completamente aplastado con la ayuda de Gran Bretaña. Estas violaciones de [derechos humanos] continuaron hasta 1979, cuando los árabes, especialmente los niños fueron masacrados en Ahwaz, luego que [el ayatolá Ruhollah] Jomeini le dio al gobernador militar la autoridad para realizar esto, [Jaber] añadió: ‘Estas violaciones a los [derechos humanos] no cesaron, y todavía están siendo llevadas a cabo en el 2005, [los habitantes de] Ahwaz se rebelaron, exigiendo derechos, y sus hijos fueron asesinados simplemente porque ellos exigían esto’.

«Jaber describió a la República de Irán como un país que comete crímenes masivos, [agregando que] no sólo no existe impedimento para detener sus violaciones a los derechos humanos, sino que siguen haciendo falsas acusaciones contra los árabes de Ahwaz en su suelo ocupado. Se ha vuelto un crimen usar el keffiyeh rojo [uno de los símbolos del movimiento nacional ahwazí] por el cual los árabes son ejecutados, y [cualquiera que hable] árabe es castigado con la muerte [meramente] por usar el idioma del Corán».

Jaber dijo que, si los árabes de Ahwaz recibieran sólo una cuarta parte de la suma que los iraníes gastan en interferir en los países árabes incitando a los chiitas allí, ellos serían capaces de hacer que Irán pruebe de su propia medicina iniciando conflictos dentro de Irán.

Y agregó: «‘Para que nosotros podamos quebrarle las espaldas a Irán, es suficiente que los países árabes estén con nosotros. Pero está claro que los países del Golfo, especialmente Arabia Saudita, estén siendo apretados actualmente con un tornillo y tuerca iraní – desde el sur en la forma de los houthis en Yemen, y desde el norte en la forma de la incursión del Hezbolá dentro de Irak. Desde 1990 Irán ha estado invirtiendo esfuerzos en llevar a cabo esto, y en la actualidad está teniendo éxito en la mayoría de las acciones que planeó. Pero estas [acciones] pueden ser como un boomerang contra Irán si los [países] árabes utilizan una de sus cartas en Irán [es decir, a las minorías árabes allí]’.

«Jaber afirmó que [los árabes de] Ahwaz son una de cinco cartas [que los árabes pueden utilizar en contra de Irán], que incluyen a los baluchis, kurdos y otras minorías [no persas en Irán], y destacó que era suficiente utilizar una de estas [cartas], que existen como resultado de la obstinada política de Irán, para garantizar una crisis que mantendría a Teherán preocupado por su situación interna, que ya de hecho es volátil debido a sus violaciones. Jaber dijo: «A pesar de la política intervencionista generalizada de Irán, que perjudica la soberanía de los estados del Golfo y los asuntos internos de los países árabes, los países [árabes] que están en peligro debido a Irán no han iniciado una respuesta, ni siquiera una, al [sufrimiento] de los afligidos ahwazis, kurdos, y baluchis, tal como elevar el asunto de los pueblos no persas de Irán [sobre la agenda internacional]’. Según Habib Jaber, los estados del Golfo deben tratar a Irán de la misma manera [que este los trata a ellos] y aprovecharse de estas oportunidades, aunque sólo sea para enviar un mensaje a Teherán de que «los persas de Irán no son inmunes al caos que han causado en el mundo árabe'».

«Si un árabe ahwazí hubiese dicho incluso el 10% de lo que Nimr Al-Nimr dijo en sus discursos, habría sido ejecutado sin juicio alguno»

«Habib Jaber dijo que el veredicto contra el supuesto líder del fitna en Al-Awamiyah Nimr Al-Nimr, no es tan injusto como la injusticia perpetrada por Irán contra los árabes de Ahwaz. Este sostuvo que, si un árabe ahwazí hubiese dicho incluso el 10% de lo que Nimr al-Nimr dijo en sus discursos, este habría sido ejecutado sin juicio alguno y se le hubiesen negado incluso los derechos básicos que Arabia Saudita le concedió a Nimr Al-Nimr durante su juicio. Este añadió: ‘Estamos siendo ejecutamos por las cuestiones más simples, incluso el keffiyeh rojo es considerado una provocación por los persas, y nos condenan por ello e incluso ejecutan a árabes que lo usan».

«Este afirmó además, que las acciones del líder del fitna [Nimr Al-Nimr] y su comportamiento durante sus discursos, que esparcen veneno a través de toda la población de Arabia Saudita, le dan el reino el derecho a ejecutarlo. Según Jaber, ‘todos los ciudadanos sauditas son árabes de diferentes sectas, y a pesar de esto, el líder del fitna rutinariamente exigió que la región oriental se separe [de Arabia Saudita, por otra parte, él se atrevió a decir esto] en la [propia] Arabia Saudita. Los sirvientes de Irán en el Golfo han alcanzado este nivel de depravación moral porque no existe un plan para disuadirlos. La mayor parte de las acciones del plan de «cincuenta [años] de los Ayatola, que fueron expuestos en los años 90, ya se han llevado a cabo con éxito. La prueba más contundente de esto es [visible] en Kuwait, seguido por Bahréin y Yemen».

«El líder de la ASMLA cree que los funcionarios iraníes en el Golfo han cruzado la línea en sus demandas. Dice que en los años 90, Irán comenzó a formular medidas para adquirir influencia, especialmente en los estados del Golfo. Según él, esto se hizo evidente en Kuwait y Bahréin, e incluso en países árabes tales como Yemen, Siria, y específicamente en el Líbano, mientras que gente influyente de manufactura iraní comenzó a emerger. Habib mencionó que Irán penetró la región árabe mediante la ampliación de la ayuda a los comerciantes [árabes]. Después de ganarse la simpatía de estos comerciantes con beneficios financieros y demás, los convirtió en una clase social [poderosa] en sus países, y participaron en los parlamentos y otras [instituciones], en donde comenzaron a servir los intereses de Irán en los territorios árabes

«Habib Jaber se preguntó el por qué no existe un plan árabe para contrarrestar el plan iraní, e hizo hincapié en que si los países árabes deseaban disuadir a los iraníes, estos podían encontrar varias entradas que sin duda influirán en el plan de Irán y sus esfuerzos expansionistas y los intentos de infiltrarse en los países árabes. y agregó: «Irán ha penetrado profundamente en la patria árabe, y tiene un plan que, tal como los funcionarios [iraníes] han subrayado, no se detiene en Irak y Yemen o Siria, sino que [también] apunta a la región del Golfo árabe. Esto, porque [consideran] a esta área parte del Imperio Persa, que debe regresar a este. Pero ¿dónde está nuestro plan árabe ante este comportamiento iraní?'»


[1] Al-Nimr fue condenado a muerte el 15 de octubre, 2014 después de que el tribunal lo declarara culpable de varios cargos, entre ellos incitar para derrocar a los regímenes de Arabia Saudita y Bahréin; tratar de convencer a los que estaban siendo buscados a rebelarse contra el régimen saudita; llamar a la ciudad chiita de Al-Awamiyah en la provincia de Al-Qatif a separarse de Arabia Saudita; recaudar fondos para comprar bombas molotov; y hablar de la ilegitimidad del gobierno de Arabia Saudita y llamar a derrocarlo y reemplazarlo con el Mandato del Jurisprudente. Al-Nimr afirmó los cargos contra este pero decidió apelar el veredicto en el lapso de un mes. Al-Hayat (Londres) 16 de octubre, 2014.

[2] Al-Watan (Arabia Saudita) 19 de octubre, 2014.

[3] Al-Jazira (Arabia Saudita) 25 de octubre, 2014.

[4] Al-Watan (Arabia Saudita) 19 de octubre, 2014.

[5] Makkah (Arabia Saudita) 29 de noviembre, 2014.

[6] Al-Watan (Arabia Saudita) 19 de octubre, 2014.

[7] Al-Watan (Arabia Saudita) 26 de octubre, 2014.

[8] Al-Watan (Arabia Saudita), 31 de octubre, 2014. Al-Watan publicó también una entrevista con

el destacado activista Ahwaz ‘Abd Al-Hamid bin Suhail Al-Nasri Al-Tamimi – un ex chiita convertido a sunita – quien señaló el cómo las autoridades iraníes le persiguieron y hablaron sobre el sufrimiento de los sunitas en Irán. Este hizo un llamado a los países árabes a que ayuden a las etnias no persas que están siendo oprimidas por el régimen iraní. Al-Watan (Arabia Saudita) 14 de noviembre, 2014.

[9] Al-Watan (Arabia Saudita) 20 de octubre, 2014.

[10] Aralabiya.net, 25 de octubre, 2014. El canal también informó el 14 de noviembre, 2014 que el Jeque Abd Al-Hamid Ismail Zahi, el Imam sunita en la capital baluchi de Zahedan, llamó a poner fin a la discriminación de la minoría nacional y religiosa en los medios estatales iraníes.

[11] Al-Watan (Arabia Saudita) 27 de octubre, 2014.

[12] Al-Watan (Arabia Saudita), 30 de octubre, 2014.

[13] Al-Watan (Arabia Saudita), 30 de octubre, 2014.

[14] Véase MEMRI Despacho Especial No. 5776, ‘Editor adjunto de ‘Al-Hayat’: Los estados del Golfo deberían ayudar a Al-Ahwaz a separarse de Irán, 19 de junio, 2014; y MEMRI Despacho Especial No. 4735, Artículo en diario saudita en Londres Al-Sharq Al-Awsat: Confronten a Irán en su propio terruño, 17 de Mayo, 2012.

[15] Al-Watan (Arabia Saudita) 19 de octubre, 2014.

[16] Según varios informes, se trata de un plan formulado por el Majlis de Irán, que cuenta con cinco etapas de 10 años, y va dirigido a la realización de los objetivos expansionistas de Irán mediante la exportación de la Revolución Islámica a áreas sunitas de Irán, los estados del Golfo, Irak, Turquía, Afganistán y Pakistán. En el pasado, columnistas y elementos kuwaitíes advirtieron contra los planes iraníes de hacerse cargo de los estados del Golfo. Véase MEMRI Investigación y Análisis Informe No. 635, Preocupaciones en Kuwait y el Golfo por amenaza iraní a los estados del Golfo, 9 de septiembre, 2010.