A principios de febrero del 2010, el diario de Qatar Al-Raya informó que el Comité del Fatwa de Al-Azhar había emitido un fallo contra Facebook, señalando que cualquiera que entre a este portal estaba cometiendo un delito contra el Sharia. Según el diario, el fatwa está basado en un informe elaborado por el Centro Nacional de Egipto para Estudios Sociales y Criminológicos, el cual alegó que Facebook es una de las principales causas de divorcio en el mundo musulmán. El estudio sostiene que uno de cada cinco casos de divorcio se debe a que uno de los cónyuges tiene una aventura amorosa en Internet a través de Facebook. [1] De acuerdo con un informe en el portal Al-Arabiya, el fatwa fue emitido por un ex jefe del Comité del Fatwa de Al-Azhar, Jeque ‘Abd Al-Hamid Al-Atrash, quien dijo que entrar a Facebook está prohibido en luz de la generalizada inmoralidad entre los jóvenes y porque este portal es usado para destruir familias y hogares, y cualquiera que entre en este es un pecador. [2]
Sin embargo, el secretario general del Comité del Fatwa de Al-Azhar, Jeque Sa’id ‘Amer, negó que tal fatwa se había emitido. El propio Jeque Al-Atrash dijo que ni siquiera sabía cómo entrar en Facebook, y por lo tanto no podía haber emitido un fatwa contra este. Aclaró que sólo había instado a la gente a utilizar Internet con fines positivos, más que con fines de corrupción y relaciones ilícitas y había prohibido entrar en «sitios inmorales».
Miembros de la Academia de Investigación Islámica de Al-Azhar tomaron una postura similar, explicando que a un musulmán se le permite utilizar Facebook y los portales en general para efectos positivos tales como la protección del Islam y su imagen. Por ejemplo, el Jeque Fawzi Al-Zifzaf dijo: «Facebook tiene un área donde los usuarios pueden expresar sus opiniones, y esto significa que cuando surge un problema que implica [la tergiversación] del Islam, un participante musulmán puede hacer el bien mediante la presentación del punto de vista islámico correcto. Esto es preferible a dejar en oscuras [a otros usuarios] que no saben nada acerca del Islam». Al-Zifzaf agregó: «No es práctico prohibir el portal únicamente porque puede causar daño a unos cuantos usuarios. Se permitirá el uso de Facebook siempre y cuando el pueblo y el Islam saquen provecho de esto».
Otro miembro de la Academia, el Dr. Mustafa Al-Shak’a, apoyó esta opinión, diciendo: «Si este portal puede ser beneficioso, entonces no hay nada malo en ello. Si es dañino, debería ser clausurado». [3] El miembro de la Academia Dr. ‘Abd Al-Mu’ti Bayoumi explicó que Facebook es como todo lo demás en el mundo: es legítimo siempre y cuando se lo utilice para fines legítimos, tales como la obtención de información y el mantener conversaciones, de lo contrario está prohibido. [4]
Una postura más dura fue tomada por el clérigo saudita Dr. Salman Al-‘Ouda, miembro de la Unión Internacional de Estudiosos Musulmanes, quien caracterizó el fatwa como un «enorme error» y como un «desliz». Dijo que el público debe ser alentado a participar en Facebook, y que si este portal está prohibido, uno bien podría prohibir libros, bibliotecas y todas las formas de medios de comunicación. Al-‘Ouda dijo que él mismo tiene una página en Facebook, a través del cual conversa con los jóvenes y responde a sus preguntas. [5] El juez saudita sr. ‘Issa Al-Gheith dijo que Facebook es un arma de doble filo, al igual que todas las demás tecnologías modernas, pero que si merece ser prohibido, entonces lo mismo puede decirse de los teléfonos, los canales vía satélite y todas las demás comunicaciones y tecnologías de información. [6]
Entre los que escribieron en contra del fatwa están la columnista de Al-Sharq Al-Awsat Diana Mukkaled. En un artículo titulado «Fatwas de Miedo», escribió que los fatwas de este tipo sólo reflejan la ignorancia de los clérigos del mundo moderno, y su deseo de controlar y reprimir las innovaciones que los atemorizan.
A continuación se presentan extractos de su artículo:
«La mayoría de estos fatwas no hacen sino reflejar… un conocimiento limitado de [sus autores] sobre la… globalización y la tecnología moderna»
«Estos evocan sentimientos de tristeza, tanto como sentimientos de desprecio y burla. Estoy hablando de varios fatwas y opiniones religiosas e interpretaciones que ocasionalmente aparecen aquí y allá. Aquellos que los emiten expresan su opinión [religiosa]… desde el púlpito o a través de sus portales, [por lo general] en respuesta a las preguntas del público sobre lo que se debe comer y el como vestir, cómo vivir y cómo se deben utilizar los diversos servicios de comunicación y tecnologías de la información del mundo moderno.
«El ex jefe del Comité del Fatwa de Al-Azhar llamó a prohibir el portal de redes sociales Facebook, diciendo que quien utiliza este portal está cometiendo pecado. Naturalmente, Al-Azhar se apresuro a renunciar a este fatwa, diciendo que debido a que fue emitido por el ex jefe de la Comisión del fatwa y no por su actual jefe, no representa la postura oficial de Al-Azhar…
«No es cierto que la mayoría de esos fatwas no hacen sino reflejar la opinión personal del jeque que lo emitió y su limitado conocimiento sobre los mecanismos de la globalización y la tecnología moderna, resultando en humillación para la institución a la que pertenece?
«El fatwa contra Facebook recuerda una larga serie de incidentes embarazosos que involucraron a los medios de comunicación modernos y en particular Internet, lo que generó una serie de fatwas que parecían ser como híbridos que no tienen nada que ver con los valores de la modernidad… eso [guía] a nuestra generación, para bien o para mal. Sin duda, el desarrollo de conocimientos y técnicas de comunicación [en nuestra época] supera con creces nuestra capacidad para comprender y regularlos – en especial porque este desarrollo abre nuevos horizontes revolucionarios de conocimiento. Sin embargo, estos [nuevos] horizontes también contienen las semillas de riesgos y daños. Esto es cierto para todos los progresos en todos los ámbitos de la vida y el pensamiento. Internet es una herramienta para el diálogo y el intercambio de conocimientos, tanto como es un instrumento de explotación. No hay que olvidar que el mundo está todavía en las etapas iniciales de esta revolución [digital]».
«Los portales sociales y blogs han contribuido a romper las barreras y producir innovaciones»
«Internet ofrece modos únicos de comunicación, y continua planteando un serio desafío para los investigadores y pensadores. Estos mismos retos también son enfrentados por las instituciones religiosas tradicionales.
«Los portales electrónicos y blogs han ayudado a derribar barreras y descubrir [nuevos] [artistas] creativos. Además, estos han ayudado a documentar la historia política y social en una medida nunca antes vista. ¿No es esto lo que ocurrió recientemente con los manifestantes iraníes que utilizan Twitter, y antes de eso con los bloggers egipcios e iraquíes? Esto está sucediendo cada día con cientos de bloggers que escriben sus pensamientos en los portales sociales.
«El miedo a este [fenómeno] impulsa a amplios sectores de la sociedad, que son tradicionales [en su pensamiento], a tratar de contener y ponerle freno a estos avances y – mucho más peligroso que todo – reprimirlos. La mayoría de las fatwas y opiniones religiosas [que prohíben estas innovaciones] son una reacción defensiva por algunos individuos temerosos, alarmados por lo que consideran un ataque a sus tradiciones musulmanas.
«Es difícil conciliar fatwas que prohíban Facebook con los valores del mundo moderno. [Hoy], el trabajo del predicador ha cambiado, y antes de emitir fatwas, este debe hacer un esfuerzo por entender la tecnología moderna y dejar de considerarla como un fuente de gran maldad».
[1] Al-Raya (Qatar), 1 de febrero, 2010.
[2] www.alarabiya.net, 3 de febrero, 2010.
[3] www.islamonline,net, 5 de enero, 2010.
[4] www.moheet.com, 3 de febrero, 2010.
[5] Al-Hayat (Londres), 21 de febrero, 2010.
[6] www.saudiwave.com, 5 de febrero, 2010.