A finales de junio del 2007, el gobierno iraní lanzó una política de racionamiento comprensivo de la gasolina, necesaria, en parte, por la creciente demanda de gasolina en el mercado doméstico de Irán que no podrá ser subsanada por su infraestructura en la producción de petróleo.
Aunque Irán está entre los mayores exportadores de petróleo del mundo, tiene unas instalaciones de procesamiento y refinamiento limitadas, y de esta forma debe importar la mayoría de su crudo refinado para uso doméstico. No ha habido ninguna inversión significativa en desarrollar sus instalaciones de refinamiento de petróleo desde la época del Shah, e Irán depende totalmente de la gasolina importada.
También parece ser que el racionamiento de la gasolina fue lanzada en anticipación a las sanciones adicionales contra Irán, incluyendo una prohibición en las importaciones y exportaciones de petróleo, que pueden ser impuestas en respuesta a la negativa de Irán de congelar su enriquecimiento de uranio. [1] Adicionalmente, han habido recientes informes, de que compañías extranjeras están recortando su inversión significativamente en desarrollar los campos petroleros de Irán, con el resultado de que muchos proyectos han sido suspendidos. [2] La actividad reducida de las compañías extranjeras es probablemente el resultado de la fuerte presión de los Estados Unidos, como parte de las sanciones contra Irán.
Irán estaba sujeto a sanciones contra el comercio de petróleo a comienzos de 1951, siguiendo a la nacionalización de los recursos del crudo por el entonces presidente de Irán Mohammad Mossadegh. Aunque la economía iraní pudo resistir estas sanciones, y la crisis energética resultante, tuvo un impacto psicológico duradero en la sociedad iraní. [3]
Irán ha extendido recientemente la duración del racionamiento. En principio, una ración mensual de 100 litros por vehículo privado fue impuesta, por un período de cuatro meses. Sin embargo, en julio del 2007, el consejero del Presidente iraní Mahmoud Ahmadinejad Ali Akbar Mehrabian, el recientemente nombrado ministro de industrias y minas quien está a cargo de llevar a cabo el racionamiento, anunció que la nueva política permanecería en efecto hasta marzo del 2008. [4]
A pesar del racionamiento, parece ser que el consumo de gasolina per cápita no ha caído. El 19 de agosto del 2007, la agencia de noticias iraní Baztab informó que «la mayoría de los ciudadanos, especialmente en las ciudades grandes y en las áreas de tráfico pesado, exceden su ración mensual en aproximadamente 100 litros«. [5] Cifras anunciadas por el diario reformista en línea Rooz indican que, durante el 28 de julio al 3 de agosto del 2007, el consumo de gasolina en Irán alcanzó los 416.6 millones de litros, y a la semana siguiente, subió incluso más allá, a 431.9 millones de litros. [6]
No obstante, el sistema de racionamiento está impactando todas las áreas de vida en Irán, [7] y ha llevado a la salida del mercado negro de gasolina así como también a la usura, qué las autoridades están intentando ponerle coto.
A continuación una revisión de las reacciones al racionamiento de la gasolina en Irán.
Protesta pública y reacciones oficiales
La decisión de racionar la gasolina encendió protestas en Teherán, resultando en el arresto de 80 individuos. Según informes, más de 40 bombas de gasolina fueron incendiadas, instalaciones públicas fueron dañadas severamente, y tiendas fueron saqueadas. La nueva agencia conservadora de noticias Fars publicó un video de una turba saqueando un supermercado seguido al anuncio de las autoridades del programa del racionamiento
(http://switch3.castup.net/cunet/gm.asp?ClipMediaID=1140593&ak=null ). [8] Hubo también informes no confirmados de que un número de personas habían sido muertas durante las protestas. [9]
Por orden de las autoridades, a los medios de comunicación iraníes no se les permite cubrir los efectos negativos del racionamiento de la gasolina, o publicar análisis o crítica sobre este tema. En un articulo del 5 de julio, 2007 en el diario reformista Rooz, el periodista disidente Ahmad Zeidabadi condenó la censura gubernamental, diciendo que «las restricciones han aumentado a tal magnitud que ya no es posible escribir o publicar [artículos] sobre ningún tema que afecte [la vida] en Irán. Estos días… además de la prohibición contra el [publicar] informes o editoriales sobre la crisis nuclear [o] sobre la posibilidad de un ataque [militar] americano… existe una prohibición contra el escribir [algo] serio sobre el racionamiento de la gasolina, sobre las visitas de Ahmadinejad [a las provincias], sobre la inflación – o, para abreviar, sobre cualquier tema importante que afecte el destino de nuestra sociedad…» [10]
Mientras se le colocaban trabas a los medios de comunicación, las autoridades han estado emprendiendo una campaña de propaganda que clama los beneficios del racionamiento, declarando que este permite canalizar recursos en desarrollar el país. [11] Ahmadinejad dijo que el programa «es una oportunidad de hacer grandes cambios en la economía e industria de Irán». [12] También le pidió a los MPs que apoyen al gobierno en este problema y se abstengan de discutir la opción de permitir que la gasolina sea vendida en el mercado libre. [13]
El programa del racionamiento también fue apoyado por el Líder Supremo de Irán Ali Khamenei. El 30 de junio del 2007, declaró que «las condiciones presentes en Irán son excelentes… La decisión de racionar la gasolina fue uno de los pasos valerosos del gobierno. Debemos continuar implementándolo, mientras examinamos todos sus aspectos…» [14] Al mismo tiempo, el Secretario del Concejo de Conveniencia Mohsen Rezai criticó la manera «poco satisfactoria» en que el programa estaba siendo implementado, y propuso que a los ciudadanos se les permita comprar gasolina cara en el mercado libre para complementar las raciones. [15]
Protesta en el Majlis
A pesar de la demanda de Ahmadinejad, los miembros del Majlis han estado protestando contra el programa de racionamiento y contra el cómo está siendo gerenciada. El MP Sanati Mehrabani que, siguiendo a las revueltas propuso una ley para cancelar el racionamiento, dijo durante una sesión del Majlis al Ministro del Interior iraní Mostafa Pour Mohammadi: «Si el propósito de su [política] de racionamiento es destruir al país – usted ha tenido éxito, y yo lo felicito por su éxito. Pero si el propósito es ayudar a los empobrecido granjeros, el gobierno no ha triunfado en [lograr esta meta]». [16]
El MP Hassan Shojaee preguntó, «Sabe usted qué problemas tiene la gente que enfrentar en sus vidas diarias debido al racionamiento de la gasolina?… Piensa usted que [las compañías] de autobuses no ha dejado de transportar a turistas alrededor del país debido al racionamiento, causando pérdidas sustanciales a los dueños de hoteles, casas de arriendo, y tiendas que proveen alimento a los turistas? Sabe usted que después de meses de trabajo en los campos, los granjeros necesitan usar sus vehículos para traer sus productos para comercializarlos, pero [ya que se les impide hacerlo] las cosechas permanecen bajo su posesión, y no podrán encontrar a nadie que se las compre, incluso a un precio reducido?… Las ambulancias no tienen combustible para llevar a los enfermos… Fue un valeroso [paso] el infligir todo este daño y catástrofe sobre el pueblo?…» [17]
Un artículo en el portal iraní Alef, el cual está asociado con el MP Ahmad Tavakkoli, jefe del Centro de Investigación Estratégico del Majlis, criticó el hecho que la aplicación del programa de racionamiento fue confiado a los socios de Ahmadinejad a quienes les faltó la experiencia necesaria: «Cincuenta días después de la introducción de la política de racionamiento… los informes de su aplicación… son preocupantes e inquietantes… Parece ser que el honorable presidente [Ahmadinejad] o no le asigna suficiente importancia a este asunto o no está consciente de cómo el programa está siendo gerenciado. En luz de la seguridad y las ramificaciones éticas [del programa de racionamiento], y sus [graves] ramificaciones en las vidas de la gente, los representantes del pueblo en el Majlis deberían darle al gobierno una rotunda bofeteada [en el rostro]… Hoy día, el honorable presidente debe explicarle a los representantes de la nación por qué ha confiado la implementación del programa de racionamiento de la gasolina… a individuos que no tienen experiencia». [18]
Portal iraní advierte sobre inminente crisis
Un análisis publicado el 22 de julio del 2007 en el portal Alef criticó la propaganda gubernamental, que enfatiza los logros del programa de racionamiento mientras desatiende las penalidades que el pueblo está experimentando bajo este. Lo siguiente son extractos:
«Los informes concernientes a la implementación del programa de racionamiento de la gasolina y la política que desatiende [las dificultades enfrentadas por la población]… se están volviendo cada vez más perturbadores. Si asemejamos el sistema de transporte público y el [problema del] consumo de la gasolina a un paciente en un [hospital], y el [programa] de racionamiento de la gasolina a una cirugía, [podemos decir que] 24 días después de esta complicada cirugía, la condición del paciente se está deteriorando. En lugar de persistir en observar al paciente en su lecho alrededor del reloj y supervisar sus signos vitales, el equipo médico (los antiguos funcionarios a cargo del programa de racionamiento)… lo han dejado solo, y están ocupados discutiendo los beneficios iniciales de la cirugía (e.d. la disminución significativa en el consumo de gasolina, la eliminación del contrabando, las mejoras en el tráfico, y el reducir la polución del aire). Ellos no comprenden que si el proceso de curación no continúa rápidamente y bajo una cercana vigilancia, su paciente expirará, y todos esos beneficios iniciales de la cirugía se perderán.
«Durante las últimas dos o tres semanas, informes confidenciales han dado un cuadro alarmante del estado del transporte público urbano e interurbano: Los servicios [públicos] están siendo cerrados; algunos taxistas están comercializando con gasolina [racionando las tarjetas], mientras otros [ni siquiera] reciben las [tarjetas]; los servicios de taxi están gradualmente llegando a un alto; los precios del transporte público interurbano han subido significativamente… El público está sintiendo los efectos de esta [crisis] directamente.
«Ahora mismo, en medio del verano, cuando las demandas en el transporte público urbano son mínimas, [éstos] informes pueden parecer despreciables. Sin embargo, cada uno de ellos es una pieza del rompecabezas que, si se llega a completar, presentaría un cuadro alarmante de crisis inminente: autobuses incendiados, bancos saqueados y tiendas, gasolineras incendiadas por personas que están hasta la coronilla con la inflación, escasez de apartamentos, y colas interminables en las [paradas] de autobuses, trenes y taxis – [y todo esto] para mediados de septiembre del 2007 (cuando las demandas en el transporte público estén en su pico)». [19]
* Y. Mansharof es Compañero de Investigación en MEMRI; A. Savyon es Director del Proyecto de Medios de Comunicación Iraníes en MEMRI.
[1] Rooz (Irán), 19 de julio, 2007. Aprincipios de agosto, Ahmadinejad declaró que «Irán no abandonaría ni siquiera una jota de sus derechos en materia nuclear». Jomhouri-vos Eslami (Irán), 8 de agosto del 2007; véase también el segmento de video de MEMRI TV #1526 del 25 de julio, 2007, http://www.memritv.org/clip/en/1526.htm. Discusiones del Concejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre el expediente en materia nuclear de Irán están previstas a ser resumidas a comienzos de septiembre del 2007. Para más sobre la negativa de Irán en congelar sus actividades nucleares, véase Investigación y Análisis de MEMRI No. 377, «Irán Determinado a Continuar Programa Nuclear A Pesar de las Presiones Internacionales», 23 de julio del 2007, http://www2.memri.org/bin/español/articulos.cgi?Page=archives&Area=ia&ID=IA37707.
[2] Por ejemplo, la compañía de petróleo japonesa Inpex ha reducido su participación en el proyecto de desarrollo del campo petrolero en Azadegan al sur de Irán a sólo el 10%. Según el representante de Inpex en Irán, esta participación limitada le permitirá a este cooperar con Irán en el futuro. Rooz (Irán), 14 de agosto, 2007.
[3] La nacionalización de Mossadegh del petróleo de Irán llevó al golpe de estado de 1953 y al retorno del Shah – planeado y asistido por el Reino Unido y los Estados Unidos.
[4] Aftab-e Yazd (Irán), 27 de junio, 2007; Fars (Irán), 16 de junio.
[5] Baztab (Irán), 19 de agosto, 2007. También fue informado que, por aproximadamente $22, muchos ciudadanos recargaron sus tarjetas ilegalmente en el mercado negro. Ham-Mihan (Irán), 3 de julio del 2007; Aftab (Irán), 30 de junio, 2007.
[6] Rooz (Irán), 13 de agosto, 2007.
[7] Véase, por ejemplo, los informes de Rooz del 19 de julio, 2007 y los informes de Sharq del 21 de julio, 2007.
[8] Fars (Irán), 14 de agosto, 2007.
[9] Rooz (Irán), 28 de junio, 2007.
[10] Rooz (Irán), 5 de julio, 2007.
[11] Por ejemplo, Ahmadinejad declaró recientemente que «construir las refinerías de petróleo [en Irán] y [fabricar] vehículos híbridos, Irán se convertirá pronto en un exportador de combustible [refinado]… Dentro de cinco años, podremos exportar 150 millones de litros de combustible [refinado] por día». (Kayhan, Irán, 10 de julio, 2007). El 2 de julio del 2007, Kayhan informó que, en los primeros cinco días de racionamiento, Irán se ahorró 50 millones de litros de gasolina.
[12] IRNA (Irán), julio, 1, 2007.
[13] Rooz (Irán), 23 de julio, 2007. Kayhan escribió el 19 de agosto del 2007 que el programa de racionamiento de la gasolina era «un deber moral nacional y obligatorio en los medios de comunicación, y en [todos] los círculos, figuras e instituciones» en Irán.
[14] Aftab, 30 de junio, 2007.
[15] Jomhouri-vos Eslami (Irán), 19 de julio, 2007.
[16] Sharq (Irán), 23 de julio, 2007. El miembro del Comité Económico del Majlis Arslan Fathi Pour dijo, «Si el programa de [racionamiento] continúa en su formato presente, habrá daños considerables a todos los logros del gobierno y del régimen.» Aftab-e Yazd (Irán), 22 de agosto, 2007.
[17] Aftab-e Yazd (Irán), 6 de agosto, 2007.
[18] Alef (Irán), 18 de julio, 2007.
[19] Alef (Irán), 22 de julio, 2007. El editorial del 25 de julio, 2007 del diario iraní Jomhouri-vos Eslami, que apoya al Presidente del Concejo de Conveniencia Hashemi Rafsanjani, criticó en cómo el gobierno de Ahmadinejad manejó el programa, así como también su actitud hacia las dificultades y el descontento público que ha causado: «… Los esfuerzos por parte de algunos de los aparatos de propaganda para mostrar que la vida continúa tal como de costumbre definitivamente no beneficiará al gobierno o a nadie más involucrado en el programa de racionamiento de la gasolina… La principal debilidad del gobierno de Ahmadinejad es que no reconoce la necesidad [de aprender de] experiencias pasadas…»