En un articulo de opinión en el diario marroquí Aujourd’hui Le Maroc, el redactor Omar Dahbi critica a los islamistas que condenan los ataques terroristas contra los musulmanes, pero no al terrorismo como tal.
Lo siguiente son extractos: [1]
¿Condenan ellos el acto en si mismo o el apuntar a los musulmanes?
«… Cuando un líder islamista o Imam condena ‘el acto terrorista que tiene como objetivo las vidas de los musulmanes’, esto propone un verdadero problema. ¿A qué están ellos condenando, al acto en si o al hecho que los musulmanes sean el objetivo? Cuándo ellos invocan los hadiths que atestiguan la santidad de la ‘sangre musulmana’ en sus argumentos, no legitima esto, al mismo tiempo, la matanza de ‘infieles’?
«Cuándo uno saluda, en ciertos sitios mediáticos, el valor y el heroísmo de los atacantes suicidas del Hamas mientras acusan a aquéllos que han escogido el camino de la paz y el diálogo de ‘traicionar al ummah y al Islam’, no hace que uno lance una apelación ligeramente disfrazada a los jóvenes marroquíes a que desciendan por el mismo camino?
«El hecho de que el atacante suicida en Sidi Moumen, Abdelfettah Raydi, vagó por las calles de Casablanca durante cuatro días atado a un cinturón del explosivos buscando un lugar para volarse – no le dice esto algo a aquéllos que presentan a los atacantes suicidas de Hamas como héroes?»
«Cuál es la diferencia entre matar civiles en Casablanca y [matar civiles] en Tel Aviv?»
«¿Cuál es la diferencia entre el acto de matar a civiles en Casablanca y [el acto de matar a civiles] en Tel Aviv? Aplaudir a aquéllos que se vuelan en un autobús en Haifa es una manera de legitimar el terrorismo.
«Estar en contra del terrorismo significa denunciar cualquier daño a la vida humana como tal, y condenar la ambigüedad del discurso de odio e intolerancia. Glorificando actos de carnicería en otras partes y denunciarlos en su propia casa es un acto de hipocresía que no debería ser tolerado ya más».
Nota al final:
[1] Aujourd’hui Le Maroc (Marruecos), 23 de marzo, 2007.
[1] Aujourd’hui Le Maroc (Marruecos), 23 de marzo, 2007.
