El 28 de abril, 2020 el Teniente General Scott Miller, comandante de las fuerzas estadounidenses y de la OTAN en Afganistán le advirtió a los talibanes que no continúen sus ataques contra las fuerzas de seguridad afganas. «Si los talibanes continúan atacando, entonces lo que deberían esperar es una respuesta» dijo Miller y agregó: «Los necesitamos para reducir la violencia y… esa reducción le da a nuestro liderazgo político en todos lugares la oportunidad de determinar el camino pacífico a seguir»[1]

Teniente General Scott Miller, comandante de las fuerzas estadounidenses

La declaración del General Miller se produjo en medio de los crecientes ataques por parte de los talibanes contra las fuerzas de seguridad afganas durante todo el mes de abril. Esto refleja la manera en que el Emirato Islámico de Afganistán, es decir, la organización de los talibanes, quienes firmaron un acuerdo de paz con los Estados Unidos en Doha el 29 de febrero, no ha cesado o reducido sus ataques contra las fuerzas de seguridad afganas, tal vez como política de socavar al gobierno afgano y esperar desalojarlo del poder.[2]

Luego de haberse firmado el acuerdo entre los Estados Unidos y los talibanes en Doha, existían expectativas de que marcara el comienzo de una era de paz en Afganistán. Sin embargo, los talibanes no solo continuaron sus ataques contra las fuerzas de seguridad afganas, sino que también los incrementaron. A los pocos días de la ceremonia de la firma en Doha, el acuerdo Doha comenzó a desmoronarse.[3]

Los comentarios del General Miller muestran que los talibanes han continuado con sus tácticas anteriores. En respuesta a su persona, los talibanes emitieron una declaración señalando que la declaración del General Miller lo que hará es agregarle «leña al fuego». A continuación se muestra el texto de la declaración de los talibanes:[4]

«Tales declaraciones para cualquier propósito no tienen la intención de llevar el conflicto afgano hacia una solución, sino que pueden tener el efecto adverso de agregarle leña al fuego»

«El comandante de las fuerzas estadounidenses y de la OTAN en Afganistán, General Scott Miller, le dijo a los periodistas junto a uno de sus comandantes títeres Asadullah Khalid lo siguiente: Los talibanes han intensificado sus ataques y si continúan, nosotros responderemos. No existe ninguna duda de que pudiera ser obligación de los generales estadounidenses el dar falsa confianza a sus aliados internos [afganos] que carecen de moral. Pero también es cierto que tales declaraciones para cualquier propósito no tienen la intención de llevar el conflicto afgano hacia una solución, sino que pueden tener un efecto adverso de agregarle leña al fuego.

«El General Miller debería haberle transmitido su advertencia a aquellos que continúan tratando de sabotear el histórico acuerdo firmado por los líderes de Scott Miller. El objetivo de sus advertencias debería ser aquellos por quienes ustedes sacrificaron miles de tropas y vertieron billones de dólares, pero que lo han desperdiciado todo.

«Se suponía que Scott Miller amenazara a sus colegas títeres, quienes aunque sirvieron como los principales candidatos para la ocupación estadounidense – por no haber implementado la estrategia de guerra estadounidense debido a su incompetencia, corrupción, barbarie y crueldad y ahora están retrasando e interrumpiendo su estrategia de paz y el acuerdo globalmente aceptado [es decir, el acuerdo Talibán-Estados Unidos] para finalmente desprestigiarlo y derrotarlo».

«El General estadounidense no debería obstaculizar la implementación del exitoso acuerdo [entre los talibanes y los Estados Unidos]… por sus fallidos títeres [es decir, las fuerzas de seguridad afganas]»

«El General estadounidense no debería obstruir la implementación del exitoso acuerdo con el Emirato Islámico por sus fallidos títeres [es decir, las fuerzas de seguridad afganas]. Sabemos muy bien que sus repetidas violaciones al Acuerdo de Doha, sus constantes bombardeos, operaciones y ataques con cohetes y la no liberación de prisioneros no les han dado nada más sino presentarlos como violadores del acuerdo de paz al igual que la administración Kabul.

«En lugar de emitir advertencias, si hubiesen hecho un esfuerzo serio hoy para implementar el Acuerdo Doha liberando a los 5.000 prisioneros de las cárceles de Kabul, se hubiesen evitado cualquier daño a su estatus y credibilidad y se hubiese allanado también el camino para la realización de conversaciones internas-afganas y en consecuencia podían haberse marchado de una manera que les hubiese valido de reputación relativamente buena en lugar de recibir solo calumnias.

«Utilizar el lenguaje amenazante de la guerra en una atmósfera pacífica no les beneficiará. Los muyahidines han tratado de evitar ser culpados por la comunidad internacional, pero no le temen a las advertencias en lo absoluto; de lo contrario, no se hubieran sacrificado durante 19 años y hubiesen evitado sus luchas en Guantánamo, Bagram y Pul-e-Charkhi.

«El Emirato Islámico nunca aceptará un llamado irracional a un alto al fuego o una disminución de las operaciones. Todo esto está escrito de manera legible en el Acuerdo Doha. Si hubiesen tratado de cumplirlo, es muy probable que la guerra de dos meses hubiese sido detenida antes, pero en lugar de encontrar una solución factible al conflicto, a pedido de la administración Kabul o el darles motivo a falsas éticas y moral, ustedes confían en las advertencias lo cual es un experimento fallido y repetir los experimentos fallidos es en sí mismo un error garrafal».


[1] ToloNews.com (Afganistán), 28 de abril, 2020.

[2] Para una discusión detallada de las tácticas de los talibanes, véase el Informe Diario de MEMRI No. 215 – Entregarles Afganistán a los talibanes: El amenazante riesgo en Kabul mientras el gobierno de Ashraf Ghani es acosado tanto por Estados Unidos como por los talibanes, 21 de abril, 2020.

[3] Véase la serie de MEMRI Investigación y Análisis No. 1503 – A solo días de ser logrado el Acuerdo Estados Unidos-Talibán sobre el tema Afganistán este amenaza con volar en pedazos, 4 de marzo, 2020.

[4] AlemarahEnglish.com (Afganistán), 1 de mayo, 2020.