Oriente Medio no es ajeno a las declaraciones ridículas, pero la reacción oficial de Irán y Hamás ante el supuesto ataque de Israel que mató al líder de Hamás, Saleh Al-Arouri, fue particularmente extraña. Tanto Hamás como su patrón en Irán condenaron el ataque, por supuesto, pero también lo deploraron como «una violación de la soberanía libanesa»[1] y de la «integridad territorial» del Líbano».[2] Estas son declaraciones extrañas. Quizás la soberanía o integridad del Líbano sea como ese experimento mental de mecánica cuántica con el gato. Como el gato de Schrödinger, esta soberanía está viva y muerta. Viva cuando es útil para Hamás, Hezbollah e Irán y muerta cuando no lo es.
La realidad es que la soberanía del Líbano ha sido violada repetidamente por terroristas palestinos, por Irán y Siria durante décadas (también por Israel, en respuesta a estos adversarios).[3] Para los palestinos, su violación armada de la soberanía del Líbano fue un elemento importante en la Guerra Civil Libanesa. Beirut era, según la descripción de Arafat, el Stalingrado árabe y el sur del Líbano era «Fatahlandia». La OLP dio la bienvenida a terroristas de Nicaragua a Alemania en su refugio libanés.
El ejército sirio entró bajo la cobertura de la Liga Árabe en 1976, para impedir una toma de poder por parte de la izquierda palestina/libanesa y la casi hegemonía siria duró 29 años, volviéndose particularmente onerosa a partir de 1990 después de la sangrienta derrota del campo cristiano antisirio. Durante décadas, el Líbano fue más bien una propiedad que el régimen de Assad en Siria podía aprovechar para obtener ganancias e influencia política.
Los revolucionarios islamistas iraníes, como Mustafa Chamran, entraron por primera vez en el Líbano a principios de los años 1970 –incluso antes de la caída del Sha– y fueron protegidos por los palestinos. Y fue desde el interior del Líbano, desde el cuartel Sheikh Abdullah en Baalbek, que Irán utilizó sus representantes locales para atacar la embajada de Estados Unidos en Beirut y a las fuerzas de paz francesas y estadounidenses, todo en 1983, todos actos de guerra.
La soberanía del Líbano o la falta de ella quedó de manifiesto en los comentarios del líder de Hezbollah, Hassan Nasrallah, después del asesinato de Al-Arouri. Nasrallah, un hombre sin cargo oficial en el gobierno, advirtió a Israel el 4 de enero de 2024 que «el crimen de ayer no quedará impune». En un discurso anterior del 3 de noviembre de 2023, Nasrallah afirmó haber estado luchando contra Israel desde el comienzo de la guerra de Hamás. «Hay quienes afirman que Hezbollah está a punto de unirse a la contienda. Les digo: hemos estado involucrados en esta batalla desde el 8 de octubre». Desde entonces han muerto unos 150 combatientes de Hezbollah, una cifra nada despreciable. En su nuevo discurso, se encargó de decidir qué es de interés nacional del Líbano y, de hecho, qué constituye una guerra a gran escala en contraposición a una guerra limitada, y agregó que «si se libra una guerra en el Líbano, los intereses nacionales libaneses requieren que participemos en la guerra hasta el final sin regulación.»[4]
Cuando los libaneses que no están en deuda con Hezbollah hablan de neutralidad o de querer la paz o dicen que el Líbano no puede permitirse otra guerra, son vilipendiados por los propagandistas pro-Hezbollah. Un objetivo particular en los últimos años parece ser el liderazgo de la influyente Iglesia católica maronita, su patriarca Bechara Butros Al-Ra’i y los cristianos libaneses recalcitrantes en general.[5] Cuando no matan gente, Hezbollah y sus aliados utilizan la guerra legal o la amenaza de procesamiento legal en tribunales militares gubernamentales para intimidar, como se intentó recientemente contra dos obispos católicos libaneses que cuidaban a su rebaño dentro de Israel. El partido Fuerzas Libanesas defendió a los obispos, especialmente al maronita Musa Al-Hajj, que fue arrestado e interrogado brevemente en 2022 por los militares a instancias de Hezbollah. Un burlón en línea pidió la partición en el Líbano, y agregó que «más tarde nos fijarán horarios de misa o reemplazarán el repique de campanas con un altavoz llamando a Nasrallah Bek». [7]
Si el Líbano fuera verdaderamente soberano, entonces el ejército libanés y la fuerza de paz de la FPNUL asegurarían la frontera sur del país. Pero el sur está controlado por Hezbollah, que no sólo dispara contra su vecino desde allí sino que también permite que grupos palestinos e incluso iraquíes lleguen a la frontera y se unan a la lucha. Si el Líbano fuera soberano, habría elegido un nuevo presidente utilizando las reglas parlamentarias ya establecidas, en lugar de tener el puesto vacante desde el 1 de noviembre de 2022.[8] Hezbollah y sus aliados bloquean el proceso hasta que puedan conseguir un presidente títere maleable.
La preferencia de Hezbollah es que el Líbano esté firmemente en la zona gris, donde nada está del todo claro y todo es posible. En 2006, Hezbollah hundió al Líbano en la guerra por la supuesta ocupación israelí de la pequeña región fronteriza «libanesa» (en realidad, antiguamente siria) de las Granjas de Shebaa. Ese fue el aparente casus belli de esa guerra que llegó y se fue cuando Hezbollah decidió poner fin a ese conflicto. Hoy en día, el Líbano de alguna manera no está en guerra con Israel a pesar de docenas de ataques llevados a cabo desde el 8 de octubre, pero políticamente está en guerra cuando se trata de alguien que se opone a un conflicto más amplio.
La verdadera razón de la ambigüedad de Hezbollah es la ambigüedad de Irán. Irán no parece estar completamente convencido o completamente preparado (quizás esperando a anunciar que es una potencia nuclear) para una guerra generalizada con Israel. Una verdadera guerra de Hezbollah, la que Nasrallah amenazó en su último discurso, sería «muy, muy, muy costosa» para Israel, pero también para Hezbollah y el Líbano.
Por lo tanto, el arma de Hezbollah puede ser devastadora para Israel pero también devastadora para la hegemonía del grupo terrorista sobre el Líbano. Es un poder disuasorio que sólo se puede activar por completo una vez. El poder de Hezbollah parece residir en su potencial más que en su pleno uso, con el Líbano funcionando como una base de cohetes en lugar de un país. Es un arma iraní que siempre debe ser amenazante, siempre pendiente de su plena implementación, pero que en realidad no llega hasta que llegue esa hora cero que Irán desea que finalmente amanezca. Eso podría ser mañana o dentro de diez años. Mantener al Líbano en modo de crisis latente de bajo nivel es parte del juego de espera de Hezbollah, hasta que llegue la luz verde de Teherán. Qué ironía que una guerra que podría debilitar fatalmente a Hezbollah también pueda debilitar fatalmente al propio Líbano. Es probable que las acciones imprudentes del parásito estrangulen a su huésped.
*Alberto M. Fernández es vicepresidente de MEMRI.
[1] Twitter.com/PalestineNW/status/1742278458254717188, 2 de enero, 2024.
[2] en.mehrnews.com/news/210298/Assassination-of-Arouri-sign-of-Zionists-disgraceful-defeat, 3 de enero de 2024.
[3] Twitter.com/FederalLebanon_/status/1742539681978372544, 3 de enero de 2024.
[4] Youtube.com/watch?v=ZFFS0DhYMnM, 3 de enero de 2024.
[5] Independentarabia.com/node/519506/%D8%B3%D9%8A%D8%A7%D8%B3%D8%A9/%D8%AA%D9%82%D8%A7%D8%B1%D9 %8A%D8%B1/%D8%A7%D9%84%D8%A8%D8%B7%D8%B1%D9%8A%D8%B1%D9%83-%D8%A7%D9%84%D9 %85%D8%A7%D8%B1%D9%88%D9%86%D9%8A-%D9%88%D9%85%D8%B9%D8%B1%D9%83%D8%A9-%D9 %84%D9%85-%D8%A7%D9%84%D8%B5%D9%88%D8%A7%D9%86%D9%8A#:~:text=%D8%A8%D8%B9% D8%AF%20%D9%85%D9%86%D8%A7%D8%AF%D8%A7%D8%AA%D9%87%20%D8%A8%D9%85%D8%B9%D9% 88%D9%86%D8%A9%20%D8%B4%D9%85%D9%88%D9%84%D9%8A%D8%A9%20%D8%B9%D8%A8%D8%B1% 20%22%D9%84%D9%85%20%D8%A7%D9%84%D8%B5%D9%88%D8%A7%D9%86%D9%8A%22%20%28%D8% AA%D9%82%D9%84%D9%8A%D8%AF,%D8%B6%D8%AF%20%D8%A7%D9%84%D8%A8%D8%B7%D8%B1%D9 %8A%D8%B1%D9%83%20%D8%A7%D9%84%D9%85%D8%A7%D8%B1%D9%88%D9%86%D9%8A%20%D8%A8 %D8%B4%D8%A7%D8%B1%D8%A9%20%D8%A7%D9%84%D8%B1%D8%A7%D8%B9%D9%8A%20%D8%8C%20 %D9%88%D9%88%D8%B5%D9%81%D8%AA%D9%87%20%D8%A8%D9%80%22%D8%A7%D9%84%D8%B5%D9 %87%D9%8A%D9%88%D9%86%D9%8A%22, 20 de noviembre de 2023.
[6] Almodon.com/media/2023/12/27/%D9%82%D8%B6%D9%8A%D8%A9-%D8%A7%D9%84%D9%85%D8%B7%D8 %B1%D8%A7%D9%86-%D8%A7%D9%84%D8%AD%D8%A7%D8%AC-%D8%AA%D9%86%D8%B2%D9%84%D9 %82-%D8%A7%D9%84%D9%89-%D8%AE%D9%84%D8%A7%D9%81-%D8%B7%D8%A7%D8%A6%D9%81% D9%8A, 27 de diciembre de 2023.
[7] Twitter.com/JoJohaina/status/1739962111193731114, 27 de diciembre de 2023.
[8] Nidaalwatan.com/article/240296-%D9%82%D9%8A%D9%88%D9%85%D8%AC%D9%8A%D8%A7%D9%86-%D8%A5%D9 %86%D9%82%D8%A7%D8%B0-%D9%84%D8%A8%D9%86%D8%A7%D9%86-%D9%8A%D8%AA%D9%85-% D8%A8%D8%AA%D8%B3%D9%84%D9%8A%D9%85-%D8%A7%D9%84%D8%AD%D8%AF%D9%88%D8%AF-% D9%84%D9%84%D8%AC%D9%8A%D8%B4-%D9%88%D8%A7%D9%86%D8%AA%D8%AE%D8%A7%D8%A8-% D8%B1%D8%A6%D9%8A%D8%B3?&utm_source=CMS-6&utm_campaign=Post-154005&utm_medium=twitter, 4 de enero de 2024.
