En los últimos años, el rey marroquí y altos funcionarios marroquíes han adoptado una postura muy clara contra el antisemitismo y han subrayado la necesidad de enseñar los valores de tolerancia y convivencia como lecciones propiamente derivadas del Holocausto. Las organizaciones pro-palestinas en el país han condenado tal discusión sobre el Holocausto como una expresión de normalización de relaciones con Israel.

Introducción

Si bien la mayoría de los países árabes se abstienen de tocar el tema del antisemitismo y de incluir el Holocausto en sus planes de estudio escolares, Marruecos parece estar adoptando un enfoque diferente. Al hablar en conferencias y foros internacionales sobre el Holocausto y el diálogo intercultural, los funcionarios del régimen marroquí, encabezados por el Rey Mohammed VI, han hablado con frecuencia sobre la necesidad de condenar el antisemitismo, inculcar los valores de tolerancia y convivencia religiosa dentro de la sociedad marroquí y aprender las lecciones del Holocausto, mientras se destaca el papel fundamental de la educación en este contexto.

La postura del rey marroquí, muy inusual en el mundo árabe, ya era evidente para el año 2009, cuando se refirió al Holocausto como «uno de los desastres más dolorosos en la historia de la humanidad». Esto fue en un momento en que el anterior presidente iraní Mahmoud Ahmadinejad, llamaba al Holocausto «una invención de Occidente»[1] y aunque el antisemitismo y la negación del Holocausto también estaban presentes en muchas otras partes del mundo árabe y musulmán. Las declaraciones del rey fueron leídas en su nombre por el ministro marroquí de asuntos religiosos en la ceremonia de lanzamiento del Proyecto Aladdin, una ONG internacional dedicada al acercamiento entre culturas y en especial entre judíos y musulmanes. El rey dijo: «Mi enfoque y el enfoque de mi pueblo ante el desastre del Holocausto está muy alejado de los enfoques que parecen sufrir una especie de amnesia [es decir, la negación del Holocausto]. Nuestro enfoque se basa en un estudio en profundidad de una de las heridas que están grabadas en nuestra memoria colectiva y que hemos trabajado para definir como uno de los desastres más dolorosos en la historia de la humanidad».[2]

En otro discurso, leído por el primer ministro marroquí en septiembre, 2018 el rey dijo que «el antisemitismo es la antítesis de la libertad de expresión [porque] implica la negación del otro» y llamó a enseñar la historia, incluyendo sus «más oscuras horas», insinuando al Holocausto.[3]

Refiriéndose más explícitamente al tema de la enseñanza sobre el Holocausto en la escuela como parte del inculcar valores de tolerancia y convivencia dentro de este, el Ministro de Educación marroquí Sa’id ‘Amzazi dijo, en una conferencia en Marrakech en el 2018, que Marruecos estaba considerando «enseñar las lecciones de las grandes tragedias de la historia, incluyendo el Holocausto, como componente importante a una educación de altísima calidad e importancia».[4]

Parece ser que, hasta ahora, las actividades educativas relacionadas con el antisemitismo y el Holocausto se están llevando a cabo en Marruecos, aunque a una escala muy limitada y principalmente por las ONG, tales como la Organización Mimouna, fundada por el musulmán marroquí Elmehdi Boudra, que se ocupa de la historia de los judíos de Marruecos y del diálogo intercultural. Además, en los últimos años Marruecos ha firmado acuerdos con organizaciones internacionales dedicadas a la conmemoración del Holocausto en Francia y en los Estados Unidos. Estos acuerdos incluyen la cooperación en proyectos educativos.[5]

Cabe mencionar que, en sus declaraciones, el rey marroquí enfatiza que los judíos y cristianos que viven en su reino disfrutan de los mismos derechos y libertad de culto. Durante la visita del Papa Francisco a Marruecos en marzo, 2019 el rey dijo que, en su calidad de monarca y líder de los fieles, este se encuentra personalmente comprometido a garantizar la seguridad y libertad de culto de los judíos y cristianos en Marruecos.[6] Dirigiéndose a los participantes de una conferencia internacional para el diálogo interreligioso e intercultural en septiembre, 2018 en Fez, en un mensaje leído por el Ministro de Justicia y Libertades de Marruecos Mustafa Ramid, el rey habló del «modelo marroquí único» y de «la arraigada convivencia [en el lugar], especialmente entre musulmanes y judíos».[7]

Recientemente, en enero, 2020 el rey visitó la recién inaugurada Casa del Patrimonio Judío marroquí en la ciudad de Essaouira. La Casa del Patrimonio Judío marroquí, dada a conocer por el asesor real Andre Azoulay en asociación con el Ministerio de la Cultura de Marruecos, está dedicada a la coexistencia histórica de las comunidades judías y musulmanas en la ciudad. Ubicada en la antigua casa y sinagoga de ricos comerciantes judíos, contiene información sobre la comunidad judía, junto a fotografías antiguas, material de archivo, grabaciones musicales, vestimenta tradicional y objetos religiosos. Su segundo piso albergará un centro de investigaciones.[8]

El rey de Marruecos visita la recién inaugurada Casa de la Herencia Judía marroquí (Fuentes: 24saa.ma/, 18 de enero, 2020; 9avril.ma, 19 de enero, 2020)

Las organizaciones pro-palestinas en Marruecos condenaron la discusión sobre el tema del antisemitismo y el Holocausto en el país y la participación de funcionarios en conferencias sobre el Holocausto, acusándolos de incitar la «falsificación» de la historia. Estos se opusieron a incluir el Holocausto en los planes de estudio y en su lugar pidieron incluir material sobre «los crímenes de la ocupación sionista». Además, estas organizaciones participaron en la campaña para demoler un monumento erigido en memoria del Holocausto cerca de Marrakech, que también debía incluir un centro educativo sobre el Holocausto.

Este informe revisa las declaraciones hechas en los últimos dos años por el rey marroquí y funcionarios sobre el tema del Holocausto, el antisemitismo y la importancia de enseñar y educar sobre estos temas y la oposición de elementos pro-palestinos en el país a cualquier discusión sobre estos temas. También presenta extractos de un artículo del activista Elmehdi Boudra publicado en el año 2015, fundador de la Organización Mimouna, sobre las actividades de su organización y sus esfuerzos para educar sobre la herencia judía y el Holocausto en Marruecos.

El rey de Marruecos en su discurso ante la ONU: El antisemitismo es la antítesis de la libertad de expresión

Atendiendo a una mesa redonda en septiembre, 2018 sobre «el poder de la educación para la prevención del racismo y la discriminación: el caso de antisemitismo», celebrado en Nueva York al margen de la 73ava sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas, el Primer Ministro marroquí Saadeddine Othmani leyó un mensaje del rey marroquí, en el que condenaba el antisemitismo y abordaba el papel de la educación para combatirlo. En este discurso, el rey también enfatizó la necesidad de enseñar historia, en particular sus «horas más oscuras» y enfatizó la igualdad de derechos de los judíos en Marruecos. Lo siguiente son extractos del discurso del rey:

«La reunión de hoy tiene lugar en un momento en que varias partes del mundo presencian tendencias hacia la exclusión, reclusión y el rechazo al otro… El discurso de odio va en aumento, alimentando el racismo, la xenofobia, islamofobia, el antisemitismo y muchas otras formas de discriminación que proveen caldo de cultivo al extremismo violento y a una creciente inseguridad.

«El racismo en general y el antisemitismo en particular, de ninguna manera son solo una forma de pensar. El antisemitismo es la antítesis de la libertad de expresión. Implica la negación del otro y es admisión al fracaso, insuficiencia e incapacidad para coexistir: implica un retorno anacrónico a un pasado mitificado.

«¿Es ese el pasado que queremos dejarle a las generaciones futuras como legado? Estas calamidades, que afectan a muchas comunidades, no deberían permitir que se apague la antorcha que le transmitiremos a las generaciones futuras. Habiendo dicho esto, no debería existir improvisación en la batalla contra estos flagelos. Esa batalla no es militar ni financiera. Es, por encima de todo, educativa y cultural. Y esa batalla tiene nombre: educación. Por el bien de nuestros hijos, es crucial ganarla porque son ellos los que se beneficiarán y serán los portadores de esta antorcha…»

A nuestros hijos se les debe enseñar la historia, incluyendo sus horas más oscuras

«La educación es el único logro que produce beneficios tanto individuales como colectivos. Esta tiene el distintivo y crucial poder de ayudar a trascender el miedo al otro, rechazar la confusión deliberada y romper con los prejuicios. Como antídoto poderoso y arma saludable, esta consolida la cohesión social, propicia la igualdad y es prerrequisito esencial para el desarrollo…

«A través de esta calidad educativa, a nuestros hijos se les debe enseñar historia, utilizando, a tal efecto, una amplia gama de fuentes históricas y narrativas y arrojando luz no solo sobre los momentos gloriosos de la humanidad, sino también sobre sus horas más oscuras. La educación debe ayudar a los chicos a aceptar la apertura y diversidad humana y cultural. Debería fomentar el surgimiento de mentes curiosas, tolerantes e iluminadas que puedan florecer y prosperar en países como Marruecos, donde la interacción cultural y el enriquecimiento mutuo son parte de la vida cotidiana…

«Mi país, donde las civilizaciones árabe-islámica, africana y judeocristiana se han mezclado durante mucho tiempo, honra una tradición inmutable de moderación, convivencia y comprensión mutua.

«No hace falta decir que la historia de los judíos marroquíes es ilustración elocuente a este respecto. Formada por los sultanes y los reyes de Marruecos, cuenta la historia de un destino entrelazado junto a una continuidad histórica, una en la que los judíos marroquíes siempre han sido considerados ciudadanos con plenos derechos que disfrutan de los mismos derechos que sus compañeros musulmanes. Judíos y musulmanes se codean a diario, enriqueciéndose mutuamente y aprendiendo de sus respectivas crianzas y sistemas de educación.

«La coexistencia religiosa es verdadera. Las mezquitas, las sinagogas y las iglesias existen juntas en las ciudades marroquíes. Esta es la imagen que queremos ver grabada en la mente de nuestros hijos. Este es el legado que queremos legarles y este es el mensaje de paz que hemos llegado a brindarles al darle a la educación el lugar especial y legítimo que merece y le corresponde».[9]

Para ver el despacho en su totalidad en inglés junto a las imágenes copie por favor el siguiente enlace en su ordenador: https://www.memri.org/reports/moroccan-king-senior-officials-condemn-antisemitism-call-teach-tolerance-coexistence-lessons

*B. Chernitsky es compañero investigador en MEMRI.


[1] Véase la serie de MEMRI Despacho Especial No. 2326 – Presidente iraní Mahmoud Ahmadinejad: El ídolo del sionismo creado por Occidente debe ser destrozado, 27 de abril, 2009.

[2] Pncl.gov.ma, 27 de marzo, 2009.

[3] Maroc.ma, 26 de septiembre, 2018.

[4] Projetaladin.org.

[5] Hespress.com, 14 de noviembre, 2017; Ushmm.org, 16 de mayo, 2018.

[6] El rey también enfatizó el papel de la educación en la lucha contra el extremismo (elaph.com, 30 de marzo, 2019).

[7] El rey también aludió a la comunidad judía de Marruecos, citando un artículo de la Constitución de Marruecos del 2011 que establece que la unidad nacional marroquí se forjó mediante la combinación de múltiples componentes, y «fue nutrida y enriquecida por sus influencias africanas, andaluzas, hebraicas y mediterráneas» ( maroc.ma, 10 de septiembre, 2018; constitproject.org).

[8] Afp.com/ar, 19 de enero, 2020.

[9] Mapnews.ma, 27 de septiembre, 2018.