El anuncio el 6 de diciembre, 2017 por el Presidente estadounidense Donald Trump de que Estados Unidos reconoce a Jerusalén como la capital de Israel y la intención de mudar la embajada estadounidense en Tel Aviv ha desencadenado una serie de reacciones por parte de los palestinos y del mundo árabe, desde una condena relativamente moderada a llamadas a la violencia y a una nueva intifada. 

La Autoridad Palestina (AP) y los países árabes moderados, liderados por Arabia Saudita, Egipto y Jordania, condenaron el anuncio de Trump y expresaron su esperanza a que este se retracte, pero se abstuvieron de hacer un llamado a la violencia. Por el contrario Hamas, el grupo Yihad Islámico palestino y el bando de la resistencia enfatizaron la necesidad de intensificar los ataques, particularmente contra intereses estadounidenses y tropas e incluso pidieron atacar a las embajadas estadounidenses. En este contexto, cabe señalar que Hassan Nasrallah, secretario general de Hezbolá, fue cauteloso e instó al mundo árabe e islámico a actuar y solo se comprometió a proveer apoyo monetario y moral y armas para las acciones palestinas, sin mencionar ninguna participación de Hezbolá. 

Lo siguiente es una revisión de las diversas reacciones en el mundo árabe al anuncio del Presidente Trump sobre el tema Jerusalén.

La AP, Arabia Saudita y Egipto condenan el anuncio de Trump, pero se abstienen de llamar a la violencia

La AP, así como también los países árabes moderados, encabezados por Arabia Saudita, Egipto y Jordania, condenaron el anuncio de Trump en términos sumamente duros. Sus declaraciones oficiales le tildaban de irresponsable diciendo que no tenía en cuenta la legislación internacional, las resoluciones internacionales y la postura del mundo árabe y musulmán. También advirtieron que ponía en peligro el proceso de paz y pudiera provocar a árabes y musulmanes, socavando la estabilidad y la seguridad en la región y del mundo y poniendo en peligro los intereses de los Estados Unidos. Sin embargo, se abstuvieron de incitar a la violencia; incluso los funcionarios de la AP que llamaron a un «día de furia» tuvieron cuidado de convocar solo protestas pacíficas.[1] El diario de la AP Al-Ayyam también reeditó un artículo escrito en el 2012 del columnista Hassan Al-Batal, titulado «Por Qué no Deseo una Tercera Intifada», en el que abogó por negociaciones a largo plazo acompañadas de una «intifada tranquila, es decir, como la primera, a diferencia de la segunda, que se caracterizó por la utilización de armamento y atentados suicidas.[2]

De manera similar, un artículo del destacado periodista palestino Bakr ‘Awida escrito el 6 de diciembre en el diario saudita Al-Sharq Al-Awsat, publicado con anterioridad al anuncio de Trump, criticó la ira y el despotricar sobre el anticipado anuncio, e instó a los estadistas palestinos a actuar sabiamente y a abstenerse de expresar una condena dura e inútil.[3]

En su discurso televisado el 6 de diciembre, 2017 luego del anuncio de Trump, el Presidente palestino Mahmoud ‘Abbas dijo: «Nuestra causa nacional se encuentra hoy en un momento crítico, luego de los pasos que la administración estadounidense anunció tomaría respecto al tema Jerusalén. La administración estadounidense optó por actuar en contra de todas las resoluciones y acuerdos internacionales y bilaterales, prefiriendo ignorarlos y actuar en contra del consenso internacional, expresado en las posturas anunciadas en los últimos días por los países y líderes mundiales, líderes espirituales y organizaciones regionales respecto a Jerusalén».

Denominando ‘perverso y repulsivo’ al anuncio de Trump y su plan de mudar la embajada ‘Abbas agregó que constituían «la destrucción deliberada de todos los medios [utilizados para] lograr la paz y también una declaración del rechazo por los Estados Unidos al papel que desempeñó en las pasadas décadas como patrocinador del proceso de paz». Estos también, dijo, «le sirven a las organizaciones extremistas que intentan convertir la disputa en nuestra región en una guerra religiosa».

‘Abbas señaló que en los últimos días había estado en estrecho contacto con los líderes de los países amigos de los palestinos y que nuevamente había quedado claro que existía una postura unida árabe, islámica e internacional sobre Jerusalén, sobre los derechos del pueblo palestino y sobre el logro de una paz justa y amplia «basada en el establecimiento de un estado palestino soberano e independiente en todo el territorio ocupado en 1967, con Jerusalén Oriental como su capital, junto a Israel y la resolución del problema de los refugiados de conformidad con la Resolución 194 y de la Iniciativa de Paz Árabe».

Este hizo hincapié en lo siguiente: «Jerusalén, la capital del estado de Palestina, está más enraizada que cualquier acción o decisión y posee una identidad árabe… Jerusalén frustrará cualquier complot en su contra, tal como lo ha hecho a lo largo de la historia. La decisión del Presidente Trump esta noche no cambiará la realidad en Jerusalén y no legitimará a Israel sobre este tema en lo absoluto. [Jerusalén] es una ciudad palestina, árabe, cristiana e islámica, la capital del estado palestino eterno».

‘Abbas concluyó congratulando a «nuestros mártires puros y a sus familias, a nuestros héroes heridos que sacrificaron tanto por Palestina y Jerusalén», y agregó: «Viva Palestina, Viva Jerusalén, la capital de un estado libre árabe palestino».[4]

Un editorial publicado por el diario de la AP Al-Hayat Al-Jadida el día antes del anuncio de Trump, titulado «Jerusalén es un punto de no retorno y más que eso», advirtió que la medida de Trump «abriría las puertas del infierno» y causaría acciones terroristas, mientras enfatizaba que esto no debe ser «una amenaza contra nadie bajo ninguna circunstancia» y también enfatizó la necesidad de evaluar la situación «de manera objetiva y responsable».[5]

El 7 de diciembre, el miembro del Comité Central de Fatah Azzam Al-Ahmad anunció que después del anuncio de Trump todo contacto oficial con los Estados Unidos sería cortado por completo.[6]

En contraste con las moderadas respuestas oficiales palestinas, los miembros del Consejo Nacional Palestino en Jordania, encabezados por Salim Al-Za’noun, emitieron una declaración destacando que los palestinos tenían derecho a «oponerse a la ocupación por cualquier medio con el fin de alcanzar todos sus derechos: [el derecho] a retornar y [el derecho] a establecer un estado independiente en las fronteras del 4 de junio, 1967 con Jerusalén como su capital».[7]

Además, las páginas oficiales en Facebook de Fatah publicaron incitaciones explícitas a la violencia. Una publicación mostraba una foto de manifestantes en Nablus quemando una efigie de Trump.[8]

Otro publicado declaró: «Expresen [su] ira, porque si se someten hoy, [vivirán] en sumisión por miles de años».[9] La página oficial Facebook de Fatah Youth instó a todos los palestinos a protestar en las carreteras de los colonos y en los puntos de fricción.[10]

El editor de la agencia de noticias palestina Maan Nasser Al-Lahham, escribió en un artículo que «la calle palestina demostrará que el tema no terminará con tres días de furia». Este llamó a los judíos «una vil minoría incapaz de aceptar al otro» y agregó que el anuncio de Trump «demostró que los judíos han logrado apoderarse de Estados Unidos y pueden controlarlo más de lo que estos controlan Palestina». Sin embargo, esto no les da legitimidad en Palestina, dijo.[11]

Una declaración de la corte real saudita expresó un profundo arrepentimiento y disgusto por el anuncio de Trump, afirmando que «no afectara los derechos permanentes y protegidos del pueblo palestino en Jerusalén y en otros territorios ocupados ni impondrá una nueva realidad en [Jerusalén]» y expresando esperanzas a que la administración estadounidense se retracte de lo anunciado.[12]

La Embajada de los Estados Unidos arrastra el proceso de paz mientras se traslada a Jerusalén (fuente: Al-Sharq Al-Awsat – Londres, 6 de diciembre, 2017)

Una declaración de la cancillería de Egipto expresó su preocupación por las posibles repercusiones del anuncio y agregó que «no cambiará el estatus legal de Jerusalén, considerada esta una ciudad ocupada».[13] El portavoz del gobierno jordano también lo condenó, afirmando que Jerusalén era uno de los temas del acuerdo final, que se decidirá como parte de una solución global para el conflicto palestino-israelí «que garantizará el establecimiento de un estado palestino con Jerusalén como su capital». Este también insistió en que el anuncio no tenía implicaciones legales.[14]

Reacciones similares fueron publicadas luego de la reunión del 7 de diciembre del Presidente palestino Mahmoud ‘Abbas y el Rey de Jordania Abdallah en Amman. La declaración conjunta que emitieron declaró que el anuncio estadounidense era una violación de la ley internacional que pudiera tener resultados peligrosos y provocar tensión y violencia en la región.[15]

Varios funcionarios jordanos tomaron un enfoque más dura que la declaración moderada del Rey jordano. El ministro de estado para los principales asuntos ministeriales Mamdouh Al-‘Abadi, hizo un llamado a todos los musulmanes desde el Atlántico hasta el Golfo para que salgan a las calles por el bien de Jerusalén.[16] El vocero del parlamento ‘Atef Al-Tarawneh, instó a los parlamentarios a participar en las protestas en contra del anuncio de Trump.[17]

Una condena moderada también caracterizó los editoriales publicados en estos países. Un editorial del diario saudita Al-Riyadh publicado el día después del anuncio hizo hincapié en la importancia de Jerusalén en el Islam.[18] Un artículo del 8 de diciembre del sub-editor del diario del gobierno saudita ‘Okaz, Fahim Al-Hamed, enfatizó que ‘la decisión avivará las llamas del extremismo y el terrorismo’ y pondrá en peligro los intereses estadounidenses. El artículo fue acompañado por una imagen de Al-Aqsa con texto en hebreo y árabe que decía: «No hay paz, Jerusalén es la capital eterna de Palestina». Debajo de la imagen se leía una leyenda que decía: «Arabia Saudita ha hablado: el anuncio de los Estados Unidos no cambiará los derechos siempre duraderos de los palestinos».[19]

La imagen en ‘Okaz: «No hay paz, Jerusalén es la capital eterna de Palestina»

 

Para ver el resto del despacho en inglés junto a las imágenes copie por favor el siguiente enlace en su ordenador: https://www.memri.org/reports/arab-reactions-to-trump-jerusalem-announcement


[1] Por ejemplo, el miembro del Comité Ejecutivo de la OLP Ahmad Majdalani declaró que los palestinos se enfrentaran al anuncio de Trump con protestas populares pacíficas. Al-Quds Al-Arabi (Londres), 7 de diciembre, 2017.

[2] Véase Despacho Especial MEMRI No. 7215, diario palestino ‘Al-Ayyam’ vuelve a publicar artículo del 2012: Es mejor responder con negociaciones continuas junto a librar una ‘intifada calmada’, 7 de diciembre, 2017.

[3] Véase MEMRI Despacho Especial No. 7213, Periodista palestino: Mudar la embajada estadounidense a Jerusalén no dañará ni perjudicará los derechos de los palestinos, 6 de diciembre, 2017.

[4] Wafa.ps, 6 de diciembre, 2017.

[5] Al-Hayat Al-Jadida (AP), 5 de diciembre, 2017.

[6] Palinfo.com, 7 de diciembre, 2017.

[7] Wafa.ps, 7 de diciembre, 2017.

[8] Facebook.com/officialfateh1965, 7 de diciembre, 2017.

[9] Facebook.com/officialfateh1965, 7 de diciembre, 2017.

[10] Facebook.com/fatahyouth, 7 de diciembre, 2017.

[11] Maannews.net, 7 de diciembre, 2017.

[12] Al-Watan (Arabia Saudita), 7 de diciembre, 2017.

[13] Facebook.com/MFAEgypt, 6 de diciembre, 2017. Declaraciones similares fueron hechas por la cancillería de los Emiratos Árabes Unidos, que calificó el anuncio de «unilateral», enfatizó que no tendría ningún impacto en el estado legal de Jerusalén y expresó su aprensión de que avivará los sentimientos árabes y musulmanes. Al-Khaleej (EAU), 7 de diciembre, 2017.

[14] Al-Ghad (Jordania), 6 de diciembre, 2017.

[15] Petra.gov.jo, 7 de diciembre, 2017.

[16] Al-Sabil (Jordania), 7 de diciembre, 2017.

[17] Ammonnews.net, 7 de diciembre, 2017.

[18] Ammonnews.net, 7 de diciembre, 2017.

[19] ‘Okaz (Arabia Saudita), 8 de diciembre, 2017.