En un artículo publicado el 27 de enero, 2021 titulado «Irán continúa poniendo a prueba los límites de Biden», el prominente periodista saudita ‘Abd Al-Rahman Al-Rahsed señala que Irán le dio la bienvenida a la administración Biden con una serie de provocaciones, es decir, el ataque perpetrado con cohetes el 20 de diciembre, 2020 contra la embajada estadounidense en Bagdad y el ataque perpetrado por los houties en Riad el 23 de enero, 2021, con el propósito de poner a prueba la paciencia de Estados Unidos y sus aliados y su disposición a tomar represalias. La respuesta de Biden a tales provocaciones es extremadamente crucial, dice Al-Rahsed, al igual que su política general sobre Irán y especialmente sobre su expediente nuclear. Esto se debe a que la política estadounidense respecto a Irán determinará en última instancia el resultado de las crisis que se suceden en Irak, Siria, el Líbano, Yemen y Palestina – todos los cuales se han convertido en fichas de canje que Irán puede utilizar amenazando con escalar tensiones a través de su agentes-estados. Al-Rashed advierte que la falta de respuesta de Biden, o el levantamiento de las sanciones a Irán, solo envalentonará al régimen iraní y dejará a Biden sin ninguna forma de impulsar una enmienda al acuerdo nuclear, tal como este prometió.

El artículo fue publicado en el diario saudita en Londres Al-Sharq Al-Awsat.[1] Lo siguiente es una traducción al inglés y luego al español proporcionada por el portal en inglés de Al-Arabiya.[2]

«Con demasiados temas que afrontar, los primeros meses en el cargo del presidente Joe Biden estarán dedicados a manejar varios temas bastante críticos. Además de los temas relacionados con Cuba, Venezuela, la OTAN, Europa, Turquía, Rusia, Taiwán y, comercialmente con China y el mar chino, Biden tiene la intención de abordar la reincorporación al Acuerdo Climático de París, revivir el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), retornar a la Organización Mundial de la Salud y enfrentar la amenaza de la pandemia de coronavirus en los Estados Unidos, que hasta ahora ha resultado ya en más de 400.000 muertes.

«También se espera que sane a una nación dividida por el desempleo y arregle las diferentes brechas sociopolíticas resultantes de las prolongadas disputas electorales.

«Además, la administración Biden está tomando acciones muy rápidas para apaciguar la bomba de tiempo representada por la amenaza iraní y renegociar el Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA/siglas en inglés), también conocido como el «acuerdo nuclear de Irán».

«El resultado de estas negociaciones jugará un papel clave en determinar el cómo se desarrollará la situación en Irak, Siria, el Líbano, Yemen y Palestina, ya que todos estos países se han convertido en ficha de canje para que Irán los utilice amenazando con escalar tensiones a través de sus agentes-estados, todos ellos integrados por milicias y grupos armados locales.

«Esta foto proporcionada el 16 de enero, 2021 muestra un lanzamiento de misiles durante un simulacro militar en algún lugar desconocido en el centro de Irán. (SEPAH NEWS/AFP)

«La pregunta que deberíamos hacernos es, ¿Adoptará el presidente Biden la misma firme postura que su predecesor, el ex presidente Donald Trump, ante el régimen iraní? Está claro que Teherán comenzó a desafiar al presidente Biden apenas dos semanas después de comenzar su presidencia con sus ataques a la embajada estadounidense en Bagdad y en Arabia Saudita como una manera de tantear la situación antes de realizar cualquier acción violenta.

«Es muy probable que las provocaciones de Irán hacia los Estados Unidos y los países de la región no tiendan a disminuir, e Irán seguirá probando los límites y la paciencia de estos países para ver cómo y cuándo estos tomarán represalias. Al contrario de lo que esperaban los partidarios de Irán en Washington, que denunciaban constantemente la política de Trump para ese momento, el régimen iraní no recibió a Biden con los brazos abiertos ni celebró el retorno de los demócratas al poder.

En cambio, las provocaciones se intensificaron con el objetivo de avergonzar a la nueva administración y declarar a Biden como incapaz o el no estar dispuesto a entrar en un enfrentamiento con Irán, lo que significa que se están estableciendo nuevas reglas para esta nueva etapa. El Departamento de Estado emitió un comunicado denunciando el ataque con misiles o drones que tuvo como objetivo la capital de Arabia Saudita, Riad.

«Esta fue una importante reacción fugaz tomada por Estados Unidos contra Irán, que fue seguida por la movilización de tropas estadounidenses y la adición de refuerzos militares para aumentar así la presencia militar estadounidense en la región. Sin embargo, se tomó una decisión desfavorable de posponer la aplicación de sanciones a los houties por un mes. Uno pudiera argumentar que, aunque esta decisión fue totalmente desacertada, es comprensible, ya que la nueva administración pretende darle a los houties una última oportunidad para lograr alcanzar una solución política.

«No se puede culpar al presidente Biden por su falta de acción en este aspecto durante su primer mes en el cargo, ya que el propio ex-presidente Trump se abstuvo de imponer castigo a los houties hasta el final de todo su mandato.

«En este punto, el tema mayormente crítico a considerar es determinar el cómo la administración Biden intentará responder a la agresión impuesta por el régimen iraní y si está dispuesta a hacer compromisos, tales como levantar las sanciones económicas. Este tema es de particular importancia para el Líder Supremo de Irán Jamenei, cuyos funcionarios en el país han declarado explícitamente que no están dispuestos a revisar el acuerdo o enmendarlo en lo absoluto.

«Si estas sanciones son levantadas, entonces Biden no tendrá más fichas de canje para negociar ni impulsar ninguna enmienda sobre el acuerdo, tal como este prometió.

«Todas las declaraciones emitidas por la administración Biden se comprometen a enmendar el acuerdo nuclear de Irán en satisfacción de los aliados; sin embargo, Teherán ha anunciado firmemente que no aceptará ningún tipo de enmienda. La pregunta aquí es, ¿cómo impondrá Biden su nueva visión sin recurrir a la fuerza o sin aplicar ningún tipo de sanciones económicas?

«A mi manera de ver, la situación seguirá escalando y las tensiones se incrementarán incluso si Biden no toma ningún tipo de medidas. Esta falta de acción debilitará la postura de Biden y afirmará lo que ya se supone en la región sobre la debilidad de Biden como presidente, lo que, a su vez, desencadenará una serie de eventos desfavorables que pueden volverse inmanejables en un futuro cercano».


[1] Al-Sharq Al-Awsat (Londres), 27 de enero, 2021.

[2] English.alarabiya.net, 27 de enero, 2021.