En los últimos meses, los asesores al presidente de los Estados Unidos Jarred Kushner y Jason Greenblatt, incrementaron sus contactos con elementos regionales para poner punto final al plan para la paz palestino-israelí conocido como el «Acuerdo del siglo». El Rey jordano Abdulá II ha realizado varias visitas últimamente a los Estados Unidos, durante el cual se le informó sobre los detalles del plan y se le consultó sobre el posible papel que jugaría Jordania en este. Antes del anuncio público del plan, que se espera tenga lugar pronto, ha habido gran preocupación al respecto en Jordania. Esto se debe a información que fue filtrada y publicada en los medios de comunicación árabes, israelíes e internacionales, según los cuales se espera que Jordania participe en la resolución del tema palestino de manera que pueda cambiar su carácter y demografía, como por ejemplo la naturalización de los refugiados palestinos, formando una confederación con la Autoridad Palestina, o convertirse en una patria alterna para el pueblo palestino. Por ejemplo, el diario libanés Al-Akhbar informó el 5 de abril que, como parte del acuerdo, se espera que Jordania naturalice alrededor de un millón de palestinos, a cambio de 45 billones de dólares que le serán entregados.

El diario especuló además que es probable se cree una confederación que incluirá a Jordania, la Autoridad Palestina y la Administración Civil de Israel en Cisjordania, en la que toda Jerusalén será anexada a Israel y que los asentamientos israelíes permanecerán bajo control israelí.[1] Además, los medios de comunicación israelíes informaron que el acuerdo pudiera muy bien incluir cambiar el estatus especial de Jordania en Jerusalén al otorgarle un papel a otros países sobre el control de la ciudad, como por ejemplo Arabia Saudita y Marruecos. Este es otro motivo de preocupación en Jordania, que ha llevado a funcionarios jordanos a realizar declaraciones muy duras sobre el tema Jerusalén en las últimas semanas. Las preocupaciones sobre el acuerdo también se reflejan en artículos de importantes periodistas jordanos, que atacaron el acuerdo y lo presentaron como una «conspiración» y «amenaza existencial» para el reino y como un intento de eliminar el tema palestino a expensas de Jordania. El propio Rey Abdulá hizo declaraciones firmes sobre el tema, aclarando que de ninguna manera sucumbiría a las presiones ejercidas sobre su persona.

Este informe analiza la postura del régimen jordano sobre el Acuerdo del Siglo: sus preocupaciones sobre este y sus expresiones de rechaza a ceder ante las presiones estadounidenses.

Ante el anuncio del acuerdo, el Rey Abdulá realiza varias visitas a Washington

Informes recientes indican que la administración Trump planea anunciar los detalles del Acuerdo del Siglo poco después de las elecciones parlamentarias del 9 de abril, 2019 en Israel. Los asesores presidenciales Jarred Kushner y Jason Greenblatt han mantenido contactos con diversos elementos regionales, incluso con los Emiratos Árabes Unidos, Omán, Bahréin, Qatar, Arabia Saudita y Turquía, en un intento por comercializar el acuerdo.[2] Además, en los últimos meses, el Rey Abdulá de Jordania realizó varias visitas a los Estados Unidos. Durante una visita el 13 de noviembre, 2018 este se reunió con el secretario de Estado Mike Pompeo[3]; varias semanas después, los dos se volvieron a encontrar en Amman, como parte de la gira de Pompeo por el Medio Oriente que también incluyó Egipto y Arabia Saudita.[4] Los medios de comunicación jordanos informaron sobre las reuniones del Rey en términos muy generales, diciendo que se trataron los temas de cooperación estratégica entre Jordania y los Estados Unidos, los desarrollos regionales y los esfuerzos para poner fin al conflicto palestino-israelí – pero es muy probable que los detalles del Acuerdo del Siglo también fueron discutidos.

El Rey Abdulá realizó otra visita a Washington el 10 de marzo, aparentemente para discutir el acuerdo, aunque la prensa jordana informó de nuevo muy nuevamente lacónicamente sobre la visita, sin mencionar el tema palestino. La agencia de noticias oficial de Jordania Petra, reveló que el Rey se había reunido con el Secretario de Estado estadounidense Pompeo, el Asesor de Seguridad Nacional John Bolton, el Secretario de Defensa en funciones Patrick Shanahan y con miembros del Congreso. Sin embargo, Reuters informó, citando fuentes estadounidenses, que a la reunión con Pompeo también asistieron los asesores principales del Presidente Trump Jarred Kushner y Jason Greenblatt, quienes están involucrados en la formulación del Acuerdo del Siglo, un hecho que los medios de comunicación jordanos ignoran de manera evidente.[5] Los comentarios hechos por el Rey Abdulá durante la visita fueron informados por el diario palestino Al-Quds, según el cual el Rey destacó que «la postura de Jordania para alcanzar la paz no ha cambiado: [la paz] debe basarse en las resoluciones internacionales y en dos estados que estén lado a lado en paz y seguridad: Israel y Palestina en las fronteras del 4 de junio, 1967 con Jerusalén Oriental como su capital y en una solución justa al problema de los refugiados palestinos».[6]

La escasa cobertura de las reuniones de Abdulá en la prensa jordana puede se deba a su preocupación de que el hecho mismo de sus reuniones con los asesores de Trump, los autores del Acuerdo del Siglo, pueda desencadenar la ira el reino. Sin embargo, la propia política de desconcierto suscitó críticas. El periodista jordano Maher Abu Tair, columnista del diario Al-Ghad, criticó el secreto que rodea los contactos del Rey con los estadounidenses. En una columna titulada «Los contactos secretos entre Amman y Washington», este escribió: «Este es un tema grave. Se le debe participar al público información directa, precisa y detallada sobre lo que la administración estadounidense espera de Jordania en relación al Acuerdo del Siglo» y sobre los temas pertinentes a Jerusalén y las relaciones jordano-palestinas y sobre la percepción estadounidense de la solución, en lugar de dejar el tema a noticias que se filtran por las [fuentes] jordanas o a través de los medios de comunicación estadounidenses y demás fuentes… Queremos un discurso diplomático abierto, en cualquier forma que elija el estado, porque el tiempo apremia y el tema no puede ser manejado secretamente…»[7]

Artículos en la prensa jordana: Jordania ya ha rechazado grandes sumas de dinero a cambio de aceptar varias propuestas sobre el tema palestino

A pesar de la naturaleza lacónica de los informes en la prensa jordana sobre las visitas del Rey a Washington, es posible inferir detalles sobre el supuesto contenido de sus conversaciones allí a partir de los numerosos artículos escritos en la prensa jordana que advierten sobre los peligros del acuerdo. Periodistas de alto nivel expresaron su preocupación de que el acuerdo pudiese muy bien involucrar propuestas perjudiciales para los intereses de Jordania, tales como convertir a Jordania en una patria palestina alterna, naturalizar a los palestinos que ya viven en Jordania, colocar a Cisjordania bajo control político o administrativo jordano o formar una confederación de Jordania con la Autoridad Palestina. Los artículos rechazaron todas estas ideas y calificaron al acuerdo como una «conspiración»[8], una «amenaza existencial» para Jordania y un intento de eliminar el tema palestino a expensas suyas.[9] El diario Al-Dustour declaró en un editorial: «Las conversaciones… sobre una patria alterna [palestina] no encontrará nada más que un [total] desprecio de nuestra parte, ya que Jordania es Jordania y Palestina es Palestina».[10]

El columnista del diario Al-Ghad, Marwan Al-Mu’asher, escribió el 20 de marzo: «El Acuerdo del Siglo es, sin lugar a dudas, una amenaza existencial para la causa palestina y para los palestinos, porque es un intento de apoderarse de Jerusalén, del valle del Jordán y los territorios [ocupados], donde han sido establecidos los asentamientos [israelíes]… El temor es que los Estados Unidos traten de persuadir a Jordania [de asumir] el gobierno administrativo o político [de los palestinos], negándole así el derecho de los palestinos a establecer un estado en su territorio nacional, incluso en Jerusalén… Para Jordania, el Acuerdo del Siglo no es más que una amenaza existencial verdadera que pretende eliminar a la causa palestina, incluso a expensas de Jordania. Yo creo que Jordania está plenamente consciente de esta gran verdad y de sus implicaciones directas, es decir, que la administración estadounidense e Israel están eliminando prácticamente de manera oficial la solución de dos estados…»[11]

Caricatura en el diario del gobierno de Jordania Al-Rai: «No hay vuelta atrás al derecho al retorno» (Al-Rai, Jordania, 3 de abril, 2019)

Los artículos también reafirman que, como parte de las conversaciones sobre el Acuerdo del Siglo, a Jordania se le ofrecieron incentivos económicos para apoyar el acuerdo. Marwan Al-Mu’asher escribió: «A pesar de las estrechas y cercanas relaciones de Jordania con los Estados Unidos, este nunca aceptará participar en proyectos que amenacen su existencia, independientemente de los incentivos económicos que se le ofrezcan…»[12]

El columnista del diario Al-Rai ‘Isam Qadmani escribió que el Rey Abdulá rechazó un ofrecimiento de $100 billones a cambio de aceptar ciertas propuestas relacionadas al tema palestino, aparentemente como parte del Acuerdo del Siglo.[13] El ex-ministro de información Saleh Al-Qallab, escribió que «algunos afirman que a un individuo árabe relevante se le ofrecieron $250 millones para que acepte el Acuerdo del Siglo y persuada a los palestinos a que lo acepten, pero eso obviamente es completamente falso…»[14]

Rabia en el régimen jordano por posible daño al estatus de Jordania sobre Jerusalén como parte del Acuerdo del Siglo

Otra tema relevante al Acuerdo del Siglo y muy importante para Jordania, el cual ha sido discutido recientemente en los medios de comunicación israelíes y del mundo y está causando rabia en Jordania, concierne a Jerusalén. Según informes, los Estados Unidos buscan involucrar a otros estados árabes, entre ellos Arabia Saudita y Marruecos, en la supervisión de los lugares sagrados cristianos e islámicos de Jerusalén. Jordania, por su parte, rechaza otorgarle a Arabia Saudita un papel en Jerusalén a expensas de la custodia de los lugares sagrados en el Reino Hachemita, la cual está vinculada en el acuerdo de paz entre Israel y Jordania realizado en 1994 y en el acuerdo del 2013 entre la Autoridad Palestina y Jordania.[15] La dinastía Hachemita ha sido, de hecho, el custodio de los lugares sagrados desde 1924 y ha mantenido este papel incluso después de la ocupación israelí de Jerusalén Oriental en 1967 y después de la separación oficial de Jordania de todos los vínculos legales y administrativos con Cisjordania en el año 1988. En el acuerdo de paz entre Israel y Jordania, Israel consolidó este papel al reconocer oficialmente la condición especial de Jordania sobre Jerusalén.

Muy posiblemente, la ira de Jordania a cualquier intento de cambiar este estado está detrás de sus declaraciones y decisiones consideradas de línea dura sobre el tema de Jerusalén en las últimas semanas. Por ejemplo, el Rey Abdulá ordenó expandir el Consejo Waqf en Jerusalén, el cual se encuentra subordinado al Ministerio de Dotaciones Religiosas de Jordania, de 11 miembros a 18, e incorporar en este, por primera vez, a representantes de la Autoridad Palestina, incluyendo el Ministro de Asuntos de Jerusalén ‘Adnan Al-Husseini[16] – una medida percibida como un gesto de desafío en contra de Israel. El ministro de Dotaciones Religiosas de Jordania Abd Al-Nasser Abu Al-Basal, dijo que la expansión del consejo tenía como objetivo «colocar a todos los elementos de Jerusalén involucrados en la protección de los lugares sagrados islámicos bajo un solo techo, incluyendo a renombradas figuras palestinas».[17] Esta medida aparentemente pretende resaltar el estatus de Jordania en Jerusalén, pero también fortalece a la Autoridad Palestina que, tal como se dijo, nunca ha sido parte del Consejo Waqf.

Varios días después de la decisión de expandir al consejo, los palestinos irrumpieron en una edificación en el complejo Al-Aqsa, cercano al Golden Gate, que Israel cerró en el 2003 debido a las actividades ilegales del Movimiento Islámico y por elementos identificados con Hamas. El intento de allanamiento, que interrumpió el estatus quo de 16 años de duración, llevó a la detención de miembros del Consejo Waqf y al cierre de la zona por orden de un tribunal israelí, que a su vez dio lugar a enfrentamientos entre los residentes de Jerusalén Oriental y las fuerzas de seguridad israelíes.

Funcionarios jordanos condenaron duramente las medidas tomadas por Israel, afirmando que es la que ha violado el estatus quo y el acuerdo de paz entre los dos países, que reconoce el estatus especial de Jordania sobre Jerusalén.[18] El Ministro de Dotaciones Religiosas ‘Abd Al-Nasser Abu Al-Basal dijo que el arresto de los miembros del Consejo Waqf fue una «grave escalada» que «perjudicó el papel de Jordania como custodio de los lugares sagrados en Jerusalén y que Israel estaba «jugando con fuego».[19] En otra declaración este dijo que las acciones de Israel dentro del complejo Al-Aqsa pudieran desencadenar una «guerra religiosa».[20] El presidente del Parlamento jordano ‘Atef Al-Tarawneh dijo después de los arrestos que «todo el terrorismo realizado por las acciones del estado de ocupación no disuadirán a Jordania a que continúe cumpliendo con su papel de defender Jerusalén».[21] Tras el cierre de la edificación cercana al Golden Gate, el Canciller de Jordania Ayman Al-Safadi dijo que» Jordania no tomará a la ligera [su función de] defender a Jerusalén y no aceptará ninguna medida israelí que busque interrumpir el estatus quo en el lugar». Durante una sesión parlamentaria, los parlamentarios convocaron expulsar al embajador israelí de Amman y retirar al embajador jordano de Israel.[22]

Caricatura en el diario del gobierno jordano Al-Rai: Jerusalén – la niña de nuestros ojos (Al-Rai, Jordania, 30 de marzo, 2019)

Rey Abdulá: Jerusalén es un punto de no-retorno; Estamos siendo presionados, pero la respuesta será un rotundo ¡No!

El Rey Abdulá sabe muy bien que el consentimiento, como parte del Acuerdo del Siglo, a cualquier propuesta que quiebre el marco común de la solución de dos estados, como la naturalización de los refugiados palestinos en Jordania, amenazará severamente su trono y la estabilidad de Jordania y por lo tanto expresa firme oposición a tales propuestas. El inminente anuncio del acuerdo y lo filtrado sobre sus detalles publicados en los medios de comunicación árabes, israelíes y occidentales, le han llevado a aclarar varias veces en las últimas semanas que no aceptará ninguna de esas propuestas. Luego que el secreto que rodea su última visita a Washington provocara rumores de que pretendía suavizar su postura sobre Jerusalén y el tema palestino, este tomó un tono aún mucho más firme. En una reunión con dignatarios de Al-Zarqa el 20 de marzo, luego de su regreso de Washington, este realizo declaraciones inequívocas, diciendo: «Nunca cambiaré mi postura sobre Jerusalén… Tenemos un deber histórico hacia Jerusalén y los lugares sagrados». Este admitió que estaba siendo presionado y reiteró que «[Jerusalén] es un punto de no-retorno para mí y sé que el pueblo está conmigo [en este punto preciso]… El estado Hachemita tiene el deber de defender los lugares sagrados cristianos e islámicos. Es cierto que estamos siendo presionados, pero nuestra respuesta final será un rotundo ¡No!»[23]

Varios días después, en una reunión con los comandantes del ejército, el Rey, ataviado de uniforme dijo: «Jerusalén y el futuro de Palestina son un punto de no-retorno para Jordania. No creo que pueda ser más claro sobre este punto… Como hachemita, ¿cómo pudiera yo renunciar a Jerusalén? Eso es imposible. Es un punto de no-retorno. [Yo le digo] un rotundo ‘No’ a renunciar a Jerusalén, a que [Jordania se convierta en] una patria [palestina] alterna y a naturalizar a [los palestinos en Jordania]! Al criticar a aquellos que cuestionan la firme postura de Jordania sobre estos temas, este preguntó: «¿Por qué [estos] individuos hablan sobre el Acuerdo del Siglo o sobre una patria alterna [para los palestinos en Jordania]? ¿Cómo? ¿No tenemos nosotros nada que decir al respecto? Somos el ejército árabe [jordano] y poseemos una historia en Jerusalén y Palestina… Tenemos siempre algo que decir y también tenemos nuestra postura».[24]

El Rey Abdulá se dirige a los comandantes militares (imagen: alrai.com, 26 de marzo, 2019)

En respuesta a las declaraciones del Rey, las presiones ejercidas sobre este y las propuestas que se le hicieron a Jordania, los editoriales y editores de la prensa jordana afirmaron que el reino corría grave peligro existencial que justificaba incluso una confrontación militar y el sacrificio de la vida, si es necesario. El editor político del diario Al-Rai escribió: «Hoy Jordania defiende su existencia como estado, ya que los acuerdos regionales tienen la intención de convertirlo en el círculo de ruina que ha dominado la región durante los últimos 7 años malos… Todos estamos de pie junto el Rey Abdulá y su liderazgo alerta. Por el bien de la patria y de Jerusalén, estamos dispuestos a sacrificar [incluso] nuestras vidas».[25]

Un editorial de Al-Dustour respondió a las declaraciones del Rey en su reunión con los comandantes militares, diciendo: «Los comentarios del Rey, pronunciados a sus compañeros de armas, transmitieron un mensaje claro, de que nuestro ejército árabe puede repeler cualquier intento de dañar y perjudicar la estabilidad y seguridad de nuestro país. Este ejército, cultivado sobre un mensaje de verdad, será valiente y fuerte, como siempre, ante cualquier [agresor] ​​codicioso. Este ejército, bajo su comandante en jefe [el Rey Abdulá], ve Jerusalén tal cual cómo ve a Ammán, ya que nuestra situación y nuestro destino son uno y vamos a redimir a Jerusalén con nuestra sangre y con nuestras almas».[26]

Además de sus declaraciones, el Rey también ha tomado algunas medidas prácticas para demostrar su postura firme sobre Jerusalén. El 25 de marzo, el Tribunal Real anunció que había cancelado una visita planificada a Rumania en respuesta a la declaración del primer ministro rumano de que su país planeaba trasladar su embajada en Israel a Jerusalén.[27] Esta medida fue descrita en la prensa jordana como evidencia práctica de la declaración del Rey Abdulá de que Jerusalén era un punto de no-retorno para él.[28]

Además, en vísperas a la cumbre de la Liga Árabe del 31 de marzo en Túnez, el Rey hizo esfuerzos diplomáticos frenéticos para reclutar apoyo por su postura sobre Jerusalén y contra las presiones ejercidas sobre él como parte del Acuerdo del Siglo. Por ejemplo, el 24 de marzo este se reunió en El Cairo con el Presidente egipcio ‘Abd Al-Fattah Al-Sisi y el Primer Ministro iraquí ‘Adel ‘Abd Al-Mahdi.[29] El 28 de marzo, apenas tres días antes de la cumbre, este se reunió con el Rey marroquí Mohammed VI en un intento por obtener su apoyo por la custodia Hachemita de los lugares sagrados en Jerusalén. El Rey marroquí obedeció y dijo que el Waqf jordano era el único custodio legal de Al-Aqsa con derecho a defenderlo y otorgarle acceso a este.[30] En una declaración conjunta, los dos destacaron la importancia suprema de defender a Jerusalén y sus lugares santos de cualquier intento por alterar su estatus histórico, legal y político.[31]

De esta manera, el Rey llegó a la cumbre árabe armado con el apoyo de su homólogo marroquí al custodio jordano sobre los lugares sagrados en Jerusalén. En la propia cumbre este reiteró su posición sobre la necesidad de «encontrar una solución justa y viable al problema palestino que haga realidad las aspiraciones del pueblo palestino de establecer un estado independiente en las fronteras del 4 de junio, 1967 con Jerusalén Oriental como su capital, basados en la solución de dos estados, la Iniciativa de Paz Árabe y las resoluciones de las Naciones Unidas». También repitió su advertencia sobre «perjudicar a Jerusalén y los lugares sagrados» y enfatizó la custodia de ellos por parte de Jordania.[32]

Parece ser que el Rey Abdulá está muy decidido a resistir a las presiones de la administración Trump respecto al Acuerdo del Siglo, presiones que de hecho pueden aumentar en un futuro cercano, a medida que se acerca la fecha del anuncio del acuerdo.

*Z. Harel es un compañero investigador en MEMRI.


[1] Al-Akhbar (Líbano), 5 de abril, 2019.

[2] Raialyoum.com, 26 de febrero, 2019.

[3] Al-Dustour (Jordania), 14 de noviembre, 2018.

[4] Al-Ghad (Jordania), 8 de enero, 2019.

[5] Reuters.com, 11 de marzo, 2019.

[6] Al-Quds (Jerusalén), 13 de marzo, 2019.

[7] Al-Ghad (Jordania), 20 de marzo, 2019.

[8] Al-Rai (Jordania), 14-17 de marzo, 2019; Al-Ghad (Jordania), 20 de marzo, 2019.

[9] Al-Ghad (Jordania), Al-Rai (Jordania), 20 de marzo, 2019.

[10] Al-Dustour (Jordania), 21 de marzo, 2019.

[11] Al-Ghad (Jordania), 20 de marzo, 2019.

[12] Al-Ghad (Jordania), 20 de marzo, 2019.

[13] Al-Rai (Jordania), 14 de marzo, 2019.

[14] Al-Rai (Jordania), 17 de marzo, 2019.

[15] Véase la serie de MEMRI Investigación y Análisis No. 987 – Acuerdo entre Jordania y la Autoridad Palestina reconoce oficialmente la custodia de Jordania sobre los lugares sagrados de Jerusalén, 24 de junio, 2013.

[16] Al-Quds (Jerusalén), Al-Rai (Jordania), 15 de febrero, 2019.

[17] Al-Rai (Jordania), 19 de febrero, 2019.

[18] Al-Ghad (Jordania), 18 de febrero, 24 de 2019; Al-Rai (Jordania), 20 de febrero, 2019.

[19] Al-Rai (Jordania), 24 de febrero, 2019.

[20] Al-Rai (Jordania), 20 de febrero, 2019.

[21] Al-Ghad (Jordania), 24 de febrero, 2019.

[22] Al-Ghad (Jordania), 19 de marzo, 2019.

[23] Canal YouTube de la Corte Real de Jordania, 20 de marzo, 2019; Al-Ghad (Jordania), 21 de marzo, 2019.

[24] Canal YouTube de la Corte Real de Jordania, 26 de marzo, 2019; Al-Ghad (Jordania), 27 de marzo, 2019. Cabe mencionar que las firmes declaraciones del Rey y su admisión de que se le está presionando provocaron declaraciones de apoyo por él en Jordania, desde todos los lados del espectro político. Incluso la Hermandad Musulmana, la oposición tradicional a su régimen, le apoyó. El 22 de marzo, 2019 se organizó una marcha en Ammán en apoyo a Jerusalén, en la que los participantes llevaron pancartas que decían «Estamos con el Rey Abdulá» y pidieron la expulsión del embajador israelí de Jordania y el retiro del embajador jordano de Israel. Al-Ghad (Jordania), 30 de marzo, 2019; albosala.com, 29 de marzo, 2019.

[25] Al-Rai (Jordania), 24 de marzo, 2019.

[26] Al-Dustour (Jordania), 27 de marzo, 2019.

[27] Al-Ghad (Jordania), 26 de marzo, 2019.

[28] Al-Rai (Jordania), Al-Dustour (Jordania), 26 de marzo, 2019.

[29] Al-Rai (Jordania), 25 de marzo, 2019.

[30] Al-Sharq Al-Awsat (Londres), 29 de marzo, 2019.

[31] Elaph.com, 28 de marzo, 2019.

[32] Al-Rai (Jordania), 1 de abril, 2019.