En una serie de artículos en el diario de Qatar Al-Watan, el editor Ahmad Ali criticó severamente la administración de Al-Jazeera Tv, qué transmite desde Qatar. Esta fue la primera vez que algún cuerpo de Qatar se atrevió directa y abiertamente a criticar el canal, y al igual que las series de Ali encendieron una ola de reacciones en otros periódicos de Qatar.

Lo siguiente son extractos de la serie y de las reacciones a esta en la prensa de Qatar:

Ciudadanos de Qatar son excluidos de Al-Jazeera

En un artículo el 30 de enero, Ahmad Ali expresó su enojo por la mínima participación de ciudadanos de Qatar en Al-Jazeera: «Ya sea que Al-Jazeera esté en Qatar o transmita sus programas [por satélite] sobre el territorio de Qatar, una pregunta embarazosa permanece surcando los aires de Qatar, que es repetida por [sus ciudadanos]… Después de una década y desde que [Al-Jazeera] fue fundada, qué lugar ocupan los ciudadanos de Qatar en Al-Jazeera? Por qué no estamos viendo una influencia, o una presencia de ninguna clase, de ciudadanos de Qatar en Al-Jazeera… Este canal, que ha hecho extraordinarios logros mediáticos en su excelente e inteligente camino comunicacional, le falta la presencia de miembros del personal de la patria…

«Con mi gran apreciación por este canal… me pregunto por qué los editores de Qatar no están involucrados en el preparar programas políticos en el centro de control, y por qué no hay comunicadores de Qatar en los programas de noticias… Quién sabe, quizá en el año 2020, cuando sea el aniversario de las bodas de plata del canal, a un programador de Qatar se le dará [finalmente] una oportunidad de presentar las noticias. Luego celebraremos las festividades en masa en la costa de [Qatar] para marcar la ocasión histórica…

«Algunos ciudadanos de [Qatar] han trabajado en [Al-Jazeera] y renunciaron, y no existe ninguna duda de que la junta directiva sabe por qué ellos ya no [trabajan más allí]. Debemos saber si la razón por la ausencia de ciudadanos de Qatar, o más precisamente, de su eliminación del canal, yace en las denuncias, esparcidas por algunos, de que los ciudadanos de ‘Qatar son inestables por naturaleza’. O quizá los que trabajaron allí encontraron una difícil realidad ‘Hanfari’ [aludiendo al director general de Al-Jazeera, Waddah Hanfar] que hizo que los retiraran… Ellos [los directores] gobiernan el canal tal como lo desean, nombran a [empleados] cuando deseen, y le otorgan los sueldos más altos a aquéllos que están cerca de ellos – y los de Qatar no tienen ningún derecho, como si estuviesen condenados a seguir siendo meros espectadores… No sabemos si este es ‘nuestro canal’ o ‘su reino’…» [1]

Discriminación económica contra los diarios del gobierno de Qatar

En otro artículo en su serie, Ahmad Ali criticó el extenso apoyo financiero del gobierno de Qatar a Al-Jazeera y lo comparó a su apoyo financiero relativamente vil para los diarios de Qatar: «… Mientras este canal es considerado ‘libre’ de tratar con los problemas árabes globales y las ‘libres’ limitaciones u obstáculos en el camino de su administración mediática, nosotros en la prensa de Qatar somos también libres de discutir los problemas internos de [Al-Jazeera], ya que es, después de todo, una institución situada en nuestra patria… En años recientes, hemos estado escuchando constantemente el lema de [Al-Jazeera], [el cual es ‘Opinión y Contra Opinión’]… Estamos hasta a coronilla de escuchar la ‘opinión’ del ‘honorable’ Sr. Waddah Hanfar, director general de la red Al-Jazeeera, y es hora de escuchar la ‘contra opinión’ de nosotros…

«Cuando [los empleados reciben] incentivos monetarios, promesas de trabajo, lo alto de la libertad, y privilegios extraordinarios, incluyendo lujosas moradas amuebladas equipadas con lo que el ciudadano quiera, [incluyendo] una piscina… además de un BMW, financiamiento de la escuela de sus hijos en las mejores escuelas privadas extranjeras del país, el pago de las facturas telefónicas locales e internacionales, y plena seguridad médica… [sólo es natural que] el talento inteligente surgirá – no sólo en los medios de comunicación, televisión, o en la prensa, sino también en el campo de la energía nuclear!

«Cuál es el sueldo mensual del editor del diario internacional Al-Jazeera, que se espera salga pronto? Compare esto con los sueldos de todos los editores de los demás diarios de Qatar, y con los sueldos de sus lectores… Sin financiamiento del gobierno de los periódicos, cómo puede usted esperar que produzcan maravillosos periodistas? [La gente] quiere que la prensa se desarrolle, pero se olvidan que el desarrollo necesario no puede ocurrir sin una ‘infusión’ de fondos del gobierno para las instituciones de la prensa nacional…» [2]

Supresión a la crítica interna en Al-Jazeera

En el mismo artículo, Ali comentó sobre la suspensión de cinco empleados del canal de deportes de Al-Jazeera después de que criticaron al director del canal en una revista de Qatar: «… Puede este movimiento arbitrario [e.d. la suspensión de los empleados] ocurrir en un canal que se enorgullece de si mismo, día y noche, de su [‘periodismo] de libertad?’ Más de 60 días han pasado, y cinco empleados de Qatar permanecen suspendidos de sus trabajos en Al-Jazeera [meramente] por expresar abiertamente la opinión de su director en las páginas de la revista deportiva [Astad Al-Doha].

«O tiene esta estación un doble discurso, viendo el principio de la libertad de opinión y su expresión de una manera selectiva [?]…

«La breve historia de los cinco ciudadanos de Qatar suspendidos de sus trabajos en nuestro canal satélite por atreverse a expresar su opinión podría dañar la imagen de Al-Jazeera, no [sólo] en la opinión pública local sino también internacionalmente. [También pudo] lanzar dudas en la credibilidad del [lema del canal de] ‘opinión/contra opinión’, e inclusive podría dañar su crédito público entre el público de Qatar… Si Al-Jazeera permite que los invitados del programa critiquen a los jefes de estado en nombre de la libertad [de expresión], entonces por qué son alérgicos a la critica de sus [propios] empleados a su jefe? O es ‘la libertad de expresión’ permitida para ellos pero prohibida para otros?… » [3]

Los ciudadanos de Qatar son mantenidos fuera de Al-Jazeera

Seguido a la serie de Ahmad Ali, el publicista Dr. Ahmad Abd Al-Malik publicó un artículo en el diario de Qatar Al-Raya apoyando la crítica de Ali contra el canal y su administración. Un mes después, siguiendo a este artículo y a uno adicional que critica la corrupción y la falta de transparencia en las instituciones del estado de Qatar, el Dr. Abd Al-Malik fue expulsado de su puesto como consejero mediático al Concejo Nacional para la Cultura, Artes y Herencia de Qatar, y Al-Raya detuvo la publicación de sus artículos. [4] A continuación están los puntos principales de su artículo sobre Al-Jazeera:

«Necesitamos un comité de investigación en el asunto del tratamiento a los ciudadanos de Qatar [en Al-Jazeera]. De hecho, necesitamos abrir [la discusión] del asunto de Al-Jazeera, y hablar con absoluta franqueza sobre la naturaleza de la administración del canal – del cual sale un hedor y afecta a todo el país…

«Queremos preguntarles a los administradores que controlan a nuestro glorioso Al-Jazeera sobre todo lo que está sucediendo allí. La primera pregunta podría ser sobre los sueldos de estos administradores. ¿No tienen estos individuos meritorios, que se llevan para si mismos sumas increíbles todos los meses como sueldo, ningún colega con ciudadanía de Qatar? Queremos saber qué operaciones extraordinarias [estos administradores] realizan [que merecen tales sueldos]…

«Talentosos ciudadanos de Qatar han tocado a las puertas de la junta directiva de Al-Jazeera más de una vez – ciudadanos correctos, con [buenas] referencias de carácter y un historial de seguridad limpio – [deseando] servir a Al-Jazeera y participar en hacerla prospera, como si fuese una parte preciosa de suelo de Qatar. No existe daño en disfrutar el mejor [de los recursos de Qatar], ya que son los mejores y más talentoso ciudadanos de [Qatar]. Pero las puertas permanecen cerradas a ellos. La respuesta [que encuentran] fue: ‘Ciudadanos de Qatar Manténgase Fuera de Al-Jazeera’…» [5]

En un articulo del 29 de marzo, 2007, el director del portal reformista Aafaq Omran Salman criticó la expulsión del Dr. Abd Al-Malik, declarando que esta reflejó la incapacidad del gobierno de Qatar y del canal Al-Jazeera para aceptar la critica de Abd Al-Malik. Él escribió: «Los problemas surgidos por nuestro colega el Dr. Ahmad Abd Al-Malik, aunque serios y sensibles, son insignificantes comparado a la crítica y a los golpes bajos apuntados por Qatar y Al-Jazeera a los gobiernos árabes y extranjeros. A pesar de esto, el gobierno de Qatar no podía tomar su crítica y acelerar silenciarlo – aunque ejerció su derecho natural, [sostenido por] la constitución de Qatar y por las leyes internacionales…

«La pregunta que nos hacemos repetidamente es por qué el gobierno de Qatar no puede tomar la crítica de Abd Al-Malik, y si esto significa que el lema de Al-Jazeera de ‘Opinión y Contra Opinión’ es falso. Quizás [este lema] sólo va dirigido hacia el exterior, y no es implementado en la arena doméstica de Qatar…» [6]

El tabú está roto: Se permite criticar a Al-Jazeera

En otro artículo de Al-Raya, el Dr. Abd Al-Hamid Al-Ansari, ex decano del Shari’a y de la facultad de leyes en la Universidad de Qatar, hizo un comentario sobre la importancia y singularidad de los artículos de Ali y Abd Al-Malik: «… Existe una necesidad de reexaminar la política de los medios de comunicación de [Al-Jazeera] – en sus transmisiones, en su [futura] programación, y en el cómo es administrado. Esto es porque sin la crítica y sin un examen de conciencia, la excelencia no puede ser asegurada…

«Tal como yo lo veo, el artículo de [Ali] es un evento importante mediático en la arena de Qatar, y por consiguiente encontró un amplio eco en el público – particularmente el público de Qatar, que respondió a este de una manera extraordinaria, apoyándolo… con un número grande de correos electrónicos…

«A mi manera de ver, el artículo de Ali es importante y único por dos razones. Para comenzar, ésta es la primera vez que un artículo ha aparecido criticando a Al-Jazeera, a su director y a su junta directiva abierta y claramente, llamando las cosas por su nombre.

«Nos hemos acostumbrado a la crítica de Al-Jazeera desde fuera de [Qatar], pero [la crítica de Al-Jazeera] desde dentro de Qatar, en sus [propios] medios de comunicación, es un tema sensible, tan horrible, al punto dónde ningún antiguo miembro de los medios se ha atrevido a comprometerse en este – a pesar del aumento en la atmósfera de libertad de los medios de comunicación en Qatar…

«De hecho, criticar a Al-Jazeera era estrictamente tabú, o lo pensamos así, hasta que el artículo de Ahmad Ali llegó, y aparentemente rompió el tabú… También, junto con esto vino el artículo del muy conocido publicista Dr. Ahmad Abd Al-Malik, que fue escrito en el mismo contexto, para subrayar la ruptura de este aparente tabú…

«La segunda razón es la demanda hecha por los dos escritores – qué [reflejó] una preocupación del público de Qatar desde que tocó un nervio y expresó los sentimientos de los ciudadanos de Qatar – [a saber la demanda] para cambiar el cómo es manejado Al-Jazeera, para que le sirva a los intereses de Qatar y actualicen las aspiraciones de los [ciudadanos] de Qatar…

«Aunque han pasado 12 años y la red Al-Jazeera se ha expandido, [todavía] no vemos ninguna [presencia] de ningún elemento de Qatar – no en la participación en los programas, ni en el empleo, y ni en el entrenamiento del futuro personal mediático de Qatar. Esta extraña situación plantea serias preguntas acerca del grado de participación de la junta directiva en colocar las políticas, en dirigir las decisiones y exigir una contabilidad del director general…

«Es Al-Jazeera capaz de enfrentar el desafío? Comenzará algún movimiento para el cambio?…» [7]


[1] Al-Watan (Qatar), 30 de enero, 2007.

[2] Al-Watan (Qatar), 4 de febrero, 2007.

[3] Al-Watan (Qatar), 4 de febrero, 2007.

[4] http://www.elaph.com/ElaphWeb/AkhbarKhasa/2007/3/215740.htm.

[5] Al-Raya (Qatar), 5 de febrero, 2007.

[6] http://www.aafaq.org/reformist/aa/3084.htm.

[7] Al-Raya (Qatar), 12 de febrero, 2007.