En el contexto de las crecientes protestas pro-palestinas en los campus universitarios de todo Estados Unidos, el periodista libanés Hussam Itani, miembro destacado del consejo editorial del sitio web saudita Al-Majalla, expresó sus dudas sobre la longevidad de las protestas y cuestionó las comparaciones entre estas protestas y las realizadas contra la guerra de Vietnam en las universidades estadounidenses en los años sesenta y principios de los setenta. Al tiempo que explica que los manifestantes pacifistas de hace 50 años exigían que Estados Unidos dejara de matar civiles y se retirara de Vietnam, destaca que las protestas pro-palestinas de hoy reflejan el apoyo a Hamás y que los manifestantes corean consignas sin indicar ninguna visión clara para el futuro de los palestinos. Un manifestante de la Universidad de Columbia sostiene su teléfono con el logo de Hamás.
Fuente: Twitter.com/SafaaAlNuaimi, 22 de abril de 2024.
Atini argumenta que las protestas no influirán en la Administración Biden para cambiar su política, y que los elogios prodigados a los manifestantes pueden compararse con los elogios expresados por el intelectual francés Michel Foucault a los manifestantes anti-Sha en Irán a fines de la década de 1970. También señala que esto último terminó con la persecución y ejecución de los propios manifestantes.
A continuación, se muestra una traducción de extractos del artículo de Atini:
«Antes de entusiasmarnos demasiado con las manifestaciones estudiantiles en las universidades estadounidenses y sus llamados a un alto el fuego en Gaza y a que las universidades corten todos los vínculos con Israel, primero debemos considerar brevemente la impresión que puede dejar una mirada demasiado apresurada de acontecimientos, personas y períodos de la historia.”
«La comparación generalizada que se hace hoy entre las actividades de los estudiantes en las universidades estadounidenses –incluidos algunos de los centros académicos más importantes– y las protestas contra la guerra de Vietnam a mediados de los años 1960 es innegablemente tentadora. Sin embargo, carece de precisión y contexto, y por lo tanto, no puede predecir de manera significativa el resultado de esta actividad estudiantil actual.”
«A diferencia de los manifestantes de los años 60, que procedían del corazón de la sociedad estadounidense con sus afiliaciones étnicas y sociales a cuestas, la mayoría de los manifestantes de hoy son nuevos inmigrantes. Además, sólo una minoría de los jóvenes de los años 60 apoyba al Viet Cong, mientras que la mayoría centraba su presión en la necesidad de detener la matanza de civiles y retirarse de Vietnam. Mientras tanto, [los manifestantes de hoy] adoptaron una postura que se acerca al apoyo abierto a Hamás, y eso [refleja] un enfoque poco claro con respecto al futuro de Palestina y de los palestinos, excepto lemas como ‘libertad’, ‘independencia’ y ‘detengan el genocidio’.”
«La gran diferencia [entre los dos tipos de manifestaciones] radica en lo que representó la guerra de Vietnam con respecto al frente interno estadounidense: la muerte de decenas de miles de jóvenes… y las ramificaciones de esto para los ámbitos político, económico, e incluso la estructura cultural en Estados Unidos. Comparemos esto con la batalla que libran dos fuerzas extranjeras [es decir, Israel y Hamás] que puede no ser de mucho interés para los ciudadanos estadounidenses en un año electoral, a la luz de la aguda polarización entre las dos grandes fuerzas políticas: el Partido Demócrata y su rival, el Partido Republicano…”
«Si queremos examinar casos similares de movimientos [de protesta] estudiantiles, podemos retroceder a [más] ejemplos del siglo pasado, como la revolución de mayo de 1968 en las universidades de Francia y que condujo a la dimisión de [presidente francés] Charles de Gaulle, pero no transformó el régimen político francés. También hubo protestas estudiantiles en el Líbano durante la primera mitad de la década de 1970, que en última instancia contribuyeron a sentar las bases de la destructiva guerra civil [allí].”
“En el mismo contexto, los elogios a las manifestaciones estudiantiles en las universidades estadounidenses recuerdan sobre todo los elogios a la Revolución [islámica] de Irán por el filósofo francés Michel Foucault… quien creía [en ese momento] que la protesta contra el régimen del sha incluía una ‘espiritualidad política’ [1] que permitió a millones de iraníes desafiar la opresión y la tiranía. Foucault matizó sus posiciones con numerosas aclaraciones y explicaciones hasta que [finalmente] se vio obligado a ver cómo la ‘espiritualidad política’ [iraní] perseguía a su propio pueblo y a sus partidarios, los ejecutaba, los encarcelaba o los desterraba del país.”
«La creencia sostenida por Foucault, que visitó Irán dos veces, era que los clérigos iraníes estaban motivados por una espiritualidad que podía convertirse en una influencia política significativa y que expresaban los deseos feroces de la mayoría del público iraní que se oponía a lo que representaba el sha. Esta creencia es similar a la ilusión de que unos pocos miles de estudiantes en las universidades estadounidenses provocarán un cambio en la posición de la Administración Biden frente a Israel…”
«En otras palabras, en el discurso sobre ‘el coraje’ de los estudiantes, los que están en huelga y los manifestantes en Columbia, Yale y otras universidades, y su desafío a los ‘sistemas’ académicos y políticos y su poderoso alcance, no se tiene en cuenta la influencia que esta actividad tendrá en la guerra en Gaza y en todo el conflicto en Palestina…”
«Foucault fue uno de los intelectuales y filósofos más importantes de la Europa del siglo XX. No era en modo alguno ingenuo y, sin embargo, según muchos de sus lectores y discípulos, parece que su posición sobre la revolución de Irán reflejaba su deseo de ver algo que hiciera añicos las ideas predominantes de su tiempo, como lo hizo en sus escritos. Del mismo modo, [hoy], se depositan grandes esperanzas en algo sobre lo cual debería reflexionarse más seriamente antes de gritarlo a los cuatro vientos.»[2]
[1] En 1978-79, Foucault publicó una serie de artículos sobre el ascenso del ayatolá Ruhollah Khomeini y la Revolución Islámica de Irán. En él, expresó su asombro por la prominencia de la espiritualidad en el liderazgo de Khomeini y en el régimen islámico, comentó la sensación que esto debió haber causado a los manifestantes en las calles y subrayó que no existe una experiencia comparable en Europa.
[2] Majalla.com, 24 de abril de 2024.