La caída de los casi 30 años de régimen del Presidente de Sudán Omar Al-Bashir, se debió casi en su totalidad al heroísmo y la firmeza del pueblo sudanés (gente común, jóvenes, mujeres y los pobres de la urbe) que se unieron sin temor desde diciembre, 2018 hasta el 11 de abril, 2019 y más allá. Dirigidos inicialmente por la Asociación de Profesionales Sudaneses (APS) y por la sociedad civil, fue posteriormente adoptado por los partidos tradicionales de oposición y los grupos rebeldes armados. Decenas de manifestantes fueron asesinados y cientos arrestados y maltratados por un régimen experto en represión y violencia que había suprimido con éxito durante años varias oleadas de disturbios civiles mediante una combinación de fuerzas y ​​el ilusorio ofrecimiento de diálogo y reforma.

Esta vez el resultado fue diferente.[1] Las tácticas habituales no funcionaron. Bashir puede haber perdido su carisma y ha estado en el poder demasiado tiempo. Pero la institución de seguridad nacional del que dependió durante tanto tiempo, una institución que este perfeccionó y manipuló durante años, al final se negó a seguir su demanda a una mayor violencia contra los manifestantes. La declaración inicial del primer y breve líder del consejo militar interino, el Ministro de Defensa Awad Mohamed Ahmed Ibn Awf, hizo parecer que fue un llamado a una represión mucho más violenta que hizo que los militares actuaran en contra de Bashir.

La impresión inicial causada fue algo menos que un golpe de estado que derrocó a un régimen que un régimen que realizó una corrección interna de la dirección a tomar. El Ministro de Defensa dijo que el Consejo permanecería en el poder durante 2 años, mantendría un estado de emergencia durante 3 meses y impondrá un toque de queda nocturno. No resultó de esa manera. Ibn Awf dejó en claro en esa primera declaración que la acción contra Bashir fue realizada por las Fuerzas Armadas Sudanesas (FAS), la policía, el Servicio Nacional de Inteligencia y Seguridad (SNIS) y las tropas de choque de las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR). Pero casi de inmediato, aparecieron las fisuras en la cúpula gobernante.

Poco se notó al principio el hecho de que las FAR se negaron a tomar sus asientos en el consejo militar interino y pidió públicamente una acogida mucho más fuerte a las demandas de los manifestantes civiles de Sudán, incluyendo un retorno más rápido hacia el gobierno civil.[2]

Para aquellos que conocen Sudán, este fue un giro interesante en los acontecimientos. Las FAR, forjadas por Jartum a partir de la violencia del conflicto de Darfur, es la última versión de las notorias Janjaweed, las fuerzas paramilitares creadas de las tribus árabes de Darfur y utilizadas por el régimen en el sangriento trabajo de contrainsurgencia, primero en Darfur y luego en otras fronteras de Sudán y finalmente, en el 2013-2014, incluso en suprimir las manifestaciones en Jartum.

Como encargado de negocios estadounidenses en Sudán desde el año 2007 al 2009, pasé mucho tiempo reuniéndome con las tribus árabes Darfuri, en particular con los pastores de camellos (Abbala Rizeigat) de donde proceden principalmente los Janjaweed. Incluso pude conocer a dos de sus líderes más emblemáticos (o notorios), Musa Hilal y Muhammad Hamdan Dagalo, comúnmente conocidos en Sudán como «Hemeti».

Aunque rivales amargos, ambos contaron una historia similar de su relación con Jartum. Fieles verdugos de una brutal política de seguridad en Darfur, estos estaban muy conscientes de que eran utilizados por Jartum, manipulados como marginados. Dependiendo de las SNIS para el financiamiento y las armas, también les molestaba la forma en que el SNIS les trataba, alentando a las tribus a pelearse entre sí. Ambos expresaron una profunda ambivalencia sobre su relación simbiótica con el centro y enfatizaron que no eran partidarios del gobernante Partido del Congreso Nacional Islámico. De hecho, ambos en algún momento se rebelarían brevemente contra Jartum y hacían como si se fuesen a unir a la oposición armada.

Las tribus árabes de Darfur fueron, sin duda, víctimas que se convirtieron en victimarios. En su mayoría pobres y con una mala educación, en realidad eran poco diferentes de las tribus marginadas en toda la periferia de Sudán, desde sus rivales y víctimas en Darfur hasta la Misseriyya de Kordofan y la Beja de Sudán Oriental. Al igual que las autoridades coloniales, los poderes que están en Sudán hicieron que una tribu enfrentara a la otra, castigando a una mientras recompensaba a otra. Tal comportamiento fue perfeccionado durante décadas de guerra contra los sudaneses del sur, pero continuó después de la independencia del sur en el 2011. Bashir y el NCP simplemente continuaron y aceleraron las prácticas que los gobiernos anteriores habían implementado para mantener el control.

Musa Hilal inicialmente parecía ser el principal comandante Janjaweed de Jartum además de su interlocutor favorito. En el 2008 fue nombrado asesor del Ministerio de Asuntos Federales. Fue elegido para el parlamento de Sudán como parte del PCN de Bashir.[3] Pero Hilal intentó mantener su base de poder en Darfur y se resistió violentamente a fusionar sus fuerzas con las Fuerzas de Apoyo Rápido encabezadas por sus rivales. En noviembre del 2017 fue arrestado por Jartum y desde comienzos del 2019 permaneció en prisión.[4]

Hemeti al final demostrara ser un actor mucho más astuto. El sobrino del tradicional jefe de la sección Awlad Mansour del clan Mahariyya Rizeigat, Hemeti aparentemente trabajó para el SNIS luego de la creación de las FAR en el 2013 e informó a un general del SNIS en Jartum.[5] Con el tiempo, Hemeti se volvería más independiente del SNIS y parece haber sido capaz de hacer que el SNIS y las FAR interactuaran entre sí, mientras le otorga al presidente de Sudán una «tercera opción» autónoma para utilizarla contra un ejército mucho mayor y los servicios de inteligencia. Si bien se le acusa de haber cometido abusos contra los derechos humanos y crímenes de guerra en Darfur[6], las FAR también se beneficiaron de ser utilizadas como tropas brutales de choque a la total disposición de Khartoum más allá de Darfur; en el 2016, un decreto los colocó directamente bajo control presidencial.[7]

Esta reputación de ser una fuerza que es tanto esencial como prescindible, una especie de Guardia Pretoriana que depende solo del jefe de estado sudanés, vería a las FAR enviadas a combatir en Yemen como parte de la contribución por Sudán al esfuerzo de la coalición liderada por Arabia Saudita en contra de los rebeldes Houthi respaldados por Irán.[8] Es en Yemen que las FRA solidificó una conexión con el entonces Brigadier Abdel Fattah Burhan. Burhan también tenía una conexión con la guardia fronteriza de Sudán donde algunos de estos paramilitares árabes de Darfur sirvieron. El papel de Burhan como coordinador del esfuerzo de la guerra de Sudán en Yemen también le puso en contacto con aliados en los Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita.[9]

En contraste con el distante y arrogante Ibn Awf, Burhan fue fotografiado reunido con los manifestantes, al mismo tiempo que las FAR se unieron abiertamente con los manifestantes y exigieron tomar una postura más fuerte por parte del consejo militar interino en línea con la voluntad popular. Menos de 48 horas después de la destitución de Bashir, Burhan sería juramentado como jefe del consejo.[10] Ibn Awf no solo caería en desgracia, sino también el jefe del SNIS Salah Gosh, el antiguo maestro y creador de las FAR, también caería.[11] Su reemplazo, Shams Al-Din Al-Kabashi se graduó en el mismo grupo en el Instituto universitario de Sudán que Burhan. E impactantemente juramentado como delegado de Burhan el 13 de abril, el aparentemente «vicepresidente» interino del consejo militar fue el comandante de las FAR de 46 años de edad Muhamad Hamdan Dagalo «Hemeti».[12] Este fue un ascenso meteórico asombroso al poder en menos de 10 años, de comandante del campo paramilitar árabe en Darfuri hasta la ostensiblemente segunda posición más poderosa en Sudán.

Dada la inestable situación política en Sudán, no existen garantías de que la correlación de fuerzas in situ para este momento perdure. Sudán se encuentra en graves dificultades financieras o económicas y enfrentará tiempos difíciles incluso gobernado por un gobierno civil competente, en caso de que llegue a surgir uno. Las masas han visto los comienzos del cambio y claramente desean mucho más. No está claro cuánto tiempo durará la sorprendente luna de miel entre el nuevo liderazgo militar, incluyendo a las FAR y los manifestantes. Y no existe ninguna garantía de que todo no terminará en llanto, aunque los diplomáticos en Occidente comenzaron a reunirse con Hemeti y los Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita prometieron nuevas ayudas a Sudán. Pero al final, los brutales secuaces que Jartum desató a fin de imponer sangrientamente su voluntad en Darfur se voltearan en su contra y ayudaran a darle una oportunidad a Sudán – (cuántas oportunidades aún no están claras) para un futuro mejor.

*Alberto M. Fernández es Presidente de la Broadcasting Networks en el Medio Oriente (BNMO). Las opiniones expresadas en este escrito son únicamente las del autor y no necesariamente reflejan las opiniones oficiales del Gobierno estadounidense.


[1] Washingtoninstitute.org/policy-analysis/view/after-bashirs-fall-whats-next-for-sudan, 11 de abril, 2019.

[2] Xinhuanet.com/english/2019-04/12/c_137972485.htm, 12 de abril, 2019.

[3] Aljazeera.com/indepth/opinion/2017/09/sudan-renegade-sheikh-170909175651542.html, 10 de septiembre, 2017.

[4] Africanews.com/2017/11/27/musa-hilal-the-powerful-militia-chief-from-darfur-arrested//, 27 de noviembre, 2017.

[5] Dabangasudan.org/en/all-news/article/background-who-are-the-rapid-support-forces-in-sudan, 9 de septiembre, 2015.

[6] Hrw.org/report/2015/09/09/09/men-no-mercy/rapid-support-forces-attacks-against-civilians-darfur-sudan, 9 de septiembre, 2019.

[7] Smallarmssurveysudan.org/fileadmin/docs/issue-briefs/HSBA-IB-27-Sudanese-paramilitary-forces.pdf, 27 de noviembre, 2017.

[8] Jamestown.org/program/sudans-controversial-rapid-support-forces-bolsters-saudi-efforts-yemen/, 27 de octubre, 2017.

[9] Aa.com.tr/en/middle-east/who-is-new-head-of-sudans-transitional-council/1451074, 13 de abril, 2019.

[10] France24.com/en/20190413-veteran-soldier-burhan-becomes-sudans-new-ruler, 13 de abril, 2019.

[11] Aawsat.com/english/home/article/1679931/profile-sudans-ex-intelligence-chief-salah-gosh, 15 de abril, 2019.

[12] Dabangasudan.org/en/all-news/article/rsf-militia-commander-sworn-in-as-sudan-s-interim-v-p, 13 de abril, 2019.