Introducción
El Medio Oriente y África del Norte (MENA) es una de las regiones del mundo con mayor escasez de agua. Con aproximadamente el 6% de la población mundial, la región posee alrededor del 1.4% del agua dulce renovable del mundo. Al igual que los países productores de petróleo Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos, así como también Israel, han recurrido a la desalinización del agua para mitigar la escasez de este vital liquido, la mayoría de los demás países han recurrido a sus recursos subterráneos de agua, que en estos momentos se agotan sistemáticamente. Existe el riesgo de intrusión de agua salada en los acuíferos cercanos al mar. La mayoría de los países de la región dependen del agua que proviene desde fuera de la región en forma de alimentos importados, en particular cereales y arroz, para alimentar a sus poblaciones.
Varios factores han exacerbado la crisis del agua en MENA: El rápido crecimiento de la población, el cambio climático con frecuentes y prolongados períodos de sequía, la contaminación de los ríos por el vertido incontrolado de desechos humanos e industriales, los ineficientes métodos de riego que causan un desperdicio de agua innecesario y la construcción de represas en los ríos, afectando drásticamente la cantidad de agua rio abajo. El resultado de todos estos factores ha sido la salinización y la desertificación, desplazando a los agricultores de sus tierras agrícolas hacia centros urbanos de pobreza masiva. Estos son la primera generación de refugiados del agua, cuyo número probablemente se incrementará.[1]
La escasez de agua también pudiera generar violencia política interna o incluso peligro de que estallen guerras regionales. Recientes manifestantes violentas en la región de Ahwaz en Irán habitada por árabes debido a la escasez de agua es solo un ejemplo de ello. La construcción de la represa Renacimiento en el Nilo Azul por parte de Etiopía ha desencadenado amenazas militares de Egipto, ya que la represa pudiera reducir la cantidad de agua que llega a Egipto hasta en un 20%, o incluso más en caso de que se produzca una sequía prolongada. Una fuerte reducción del agua en el Nilo pudiera afectar no solo a los medios cotidianos de vida sino también la supervivencia misma de millones de egipcios.[2]
En Irak, una grave crisis del agua causada por múltiples factores se ve agravada en gran medida a través de la política liderada por los vecinos de Irak, que ha disminuido considerablemente el flujo de agua en muchos de los ríos de los países, especialmente en sus dos ríos mayores: el Tigris y el Éufrates. Irak acusa a Turquía y en menor medida a Siria, de reducir drásticamente el flujo de agua del Éufrates mediante la construcción de represas hidroeléctricas en este, perjudicando así el sector agrícola de Irak que ya se encuentra en apuros. Este acusa a Irán de desviar los principales afluentes del Tigris que también recortaron el flujo de agua en este río. De hecho, un informe publicado recientemente por la Asociación Europea del Agua advirtió que Irak pudiera perder totalmente las aguas de sus dos ríos principales para el año 2040. Irak, advierte el informe, se enfrenta a «un verdadero desastre», lo que significara que el país se convertirá en una extensión del desierto de la Península Arábiga.[3]
Mujer iraquí sentada en tierra reseca al sur de Irak. Fuente: diario Al-Sharq Al-Awsat, 16 de julio, 2009
Esta política de Turquía e Irán y su impacto catastrófico sobre Irak, es el tema central de un artículo del periodista Sami Zubaidi y que fue publicado el 19 de julio, 2021 en el diario iraquí Al-Zaman. Al señalar que esta política – de contener y desviar las aguas río arriba del territorio iraquí, es una flagrante violación a los acuerdos de estos países con Irak, este lamenta el hecho de que Irak no está haciendo nada en su haber para oponerse a ello. Este pide al gobierno iraquí que siga el ejemplo de Egipto – que llegó a amenazar con utilizar la fuerza militar contra Etiopía por construir una sola represa en el Nilo Azul – y tome medidas contra Turquía e Irán para obligarlos a desistir de realizar esta política agresiva. Específicamente, este recomienda detener la importación de bienes, productos agrícolas, gas natural y electricidad de Irán y en cambio, importarlos de los países árabes, a precios mucho más bajos y de mejor calidad. A fin de presionar a Turquía, este pide que deje de exportar petróleo a través del oleoducto que va desde Kirkuk a Ceyhan en Turquía y que en su lugar, utilice los oleoductos sirios y saudíes. Si estas medidas resultan ineficaces, este escribe, Irak debe presentar graves quejas contra Turquía e Irán ante las organizaciones internacionales pertinentes. Sin embargo, reconoce que es poco probable que Irak tome medidas tan firmes, especialmente contra Irán, dado el dominio de las fuerzas pro-Irán en su gobierno.
Lo siguiente son extractos traducidos del artículo de Al-Zubaidi en el diario Al-Zaman:[4]
«La peor violación perpetrada por Irán ha sido contra los derechos de agua de Irak, los cuales están reconocidos en los acuerdos internacionales»; «Turquía también ha construido muchas represas entre los ríos Tigris y Éufrates, lo que ha reducido drásticamente el volumen de agua que estos llevan a Irak»
«Tras la invasión estadounidense de Irak en el año 2003, se produjo un caos político y de seguridad y gobiernos consecutivos estuvieron inmersos en corrupción y ocupados robándose los activos de Irak en lugar de proveer servicios básicos al pueblo iraquí. Al no proteger la soberanía de Irak, estos dejaron que sus derechos históricos sobre su tierra y agua fuesen usurpados por países vecinos tales como Irán a cambio de varios millones de dólares pagados a políticos iraquíes traidores y corruptos…
«La peor violación perpetrada por Irán ha sido contra los derechos acuíferos de Irak, que están reconocidos en todos los acuerdos internacionales entre los estados ribereños y que Irán ha ignorado o violado de dos formas peligrosas: Primero, cambiando el curso de algunos ríos que tienen su origen en Irán y continúan en dirección a Irak y desvían sus aguas de regreso a Irán y en segundo lugar, conteniendo ríos y evitando que sus aguas lleguen a las ciudades iraquíes, especialmente en la época de verano. Esto ha causado mucho sufrimiento a la población de esas ciudades, además del gran impacto que ha tenido en la agricultura de Irak. En los últimos años, el país ha perdido el 80% del agua que solía llegar desde Irán. Este año esta cifra aumentó aún más, después de que Irán contuvo 35 ríos y afluentes más y desvió otros. Irán ha decidido construir 152 represas adicionales para controlar el curso de los ríos que entran en Irak y para disfrutar de sus aguas. Los ríos y arroyos más importantes que Irán ha contenido o desviado hacia su territorio son el Al-Wand, Al-Zab Al-Saghir, Karun, Dawarij, Larkheh, Al-Tayib, Kalal y Kalikar…»
Turquía también ha construido muchas represas en los ríos Tigris y Éufrates, lo que reduce drásticamente el volumen de agua que llevan a Irak y causan problemas en las regiones por las que pasan. La escasez de agua en el Tigris y el Éufrates ha afectado gravemente a la agricultura iraquí… en violación de los acuerdos bilaterales entre los países, que garantizan cuotas de agua adecuadas para Irak. La represa más importante construida por Turquía en los últimos años es la represa Ilisu en el Tigris.
Es una de las cuatro mayores de las 22 represas que Turquía ha construido en el sureste del país, en los ríos Éufrates y Tigris… haciendo que Irak pierda el 50% del agua que fluye hacia este desde Turquía, lo que es una grave amenaza para el pueblo y para la agricultura de Irak. La reducción de la cantidad de agua procedente de Turquía tendrá un impacto inmenso en la economía… y también provocará problemas medioambientales, ya que el agua que entra por la represa de Ilisu es de peor calidad, está gravemente contaminada por productos químicos y fertilizantes utilizados por los agricultores turcos…»
¿Por qué Irak no hace «lo que Egipto y Sudán están haciendo ante Etiopía en construir una sola represa en el Nilo Azul?»; «Irak debe tomar varias medidas que obligarán a Irán a cumplir con sus demandas y respetar sus derechos»
«Las violaciones perpetradas por Irán y Turquía a los acuerdos sobre las cuotas de agua de Irak… pueden dejar a Irak sin ríos en su totalidad para el año 2040 y los problemas causados ??por la intensa sequía aumentarán y llegarán a un punto crítico ya para el año 2025. Yo no entiendo por qué Irak no hace lo que Egipto y Sudán están haciendo respecto a Etiopía para construir una sola represa en el Nilo Azul… Egipto ha amenazado con utilizar todos los medios posibles para defender los derechos acuíferos del país y su población si Etiopía continúa llenando la represa, insinuando que utilizará la fuerza militar para evitar que Etiopía continúe con sus políticas hostiles.
Qué diferente es la conducta de Irak respecto a Irán, que ha usurpado todos sus derechos acuíferos. Irak no ha presentado ni una sola queja contra Irán, a pesar de que, según el ministro iraquí de recursos hídricos, este año Irán no ha liberado agua de las represas en los ríos compartidos. Irán también se niega a aceptar alguna delegación iraquí para discutir los problemas del agua. El ministro ha indicado que si Irán continúa con su política agresiva sobre el tema del agua, Irak se verá obligado a apelar a las organizaciones internacionales, pero esto parece poco probable en este momento, dado que su gobierno está dominado por partidos pro-Irán…
«Turquía promete liberar gran cantidad de agua acordada, adecuada para las necesidades agrícolas y de otro tipo en Irak y eso es de hecho lo que ha sucedido. Las negociaciones con este continúan a fin de incrementar la cantidad de agua permitida que fluya hacia Irak…
«Para garantizar los derechos de agua de Irak y detener las violaciones por parte de Irán a los acuerdos bilaterales, que han estado ocurriendo durante años… Irak debe tomar varias medidas que obligarán a Irán a cumplir con sus demandas y respetar sus derechos, incluyendo: detener la importación de bienes industriales y productos agrícolas de Irán, a favor de las importaciones de otros países tales como Siria, Jordania, el Líbano, Egipto y el Golfo Árabe, que son mejores y más baratos que los productos iraníes y también detener la importación de gas, productos derivados del petróleo y la electricidad de Irán y en su lugar, los importa del Golfo, a precios mucho más bajos y de mejor calidad.
Si Irán no atiende las demandas de Irak luego de que se tomen estas medidas, Irak presentará graves quejas en su contra ante la organización internacional pertinente. Lo mismo ocurre con Turquía, si este continúa violando los acuerdos sobre las cuotas de agua de Irak. Además, Irak dejará de exportar petróleo a través de la terminal de Ceyhan de Turquía, utilizando en su lugar oleoductos petroleros sirios y sauditas, luego que estén adaptados para este propósito, así como también el oleoducto de Jordania, una vez que haya sido terminado…»
*El Dr. Nimrod Raphaeli es analista sénior (emérito) en MEMRI.
[1] Serie de MEMRI Investigación y Análisis No. 1524 – Crisis del agua en Irak: El creciente peligro de la desertificación, 13 de julio, 2020.
[2] Serie de MEMRI Investigación y Análisis No. 1525 – Incremento de tensiones sobre la cuenca del río Nilo (Actualizado), 16 de julio, 2020.
[3] Respecto a la crisis del agua en Irak, véase la serie de MEMRI Investigación y Análisis No. 1524 – Crisis de agua en Irak: El creciente peligro de la desertificación por el Dr. Nimrod Raphaeli, 13 de julio, 2020.
[4] Al-Zaman (Irak), 19 de julio, 2021.