Manifestaciones de sentimiento separatista nacionalista han crecido de forma común entre kurdos iraquíes que, desde la primera Guerra del Golfo, han disfrutado de la autonomía de las gobernaciones de Sulaymaniyah, Irbil, y Dahuk al norte de Irak. Muchos consideran esto como el reflejar una aspiración kurda para establecer un estado independiente, primero en el Kurdistán iraquí, y después en el Kurdistán Mayor, abarcando las regiones populosas adicionales en Turquía e Irán. Las tendencias separatistas entre kurdos despiertan por consiguiente una aprehensión considerable entre musulmanes sunni y chi’itas, en Irak y en los países vecinos.

Varios escritores kurdos han advertido sobre los peligros de declarar un estado kurdo independiente unilateralmente en Irak. Prominente entre ellos esta el liberal kurdo Dr. Hussein Sinjari, presidente del NGO Tolerancia Internacional. Sinjari es también un ex ministro en el gobierno regional de Kurdistán y dueño del diario liberal en idioma árabe-Baghdadi Al-Ahali.

El 13 de agosto del 2008, el Dr. Sinjari publicó un artículo que trata con los varios aspectos y repercusiones del nacionalismo kurdo, y con la corrupción en el liderazgo kurdo. El artículo – qué encendió un vivo debate en Kurdistán – apareció en su recientemente establecido portal (www.tolerancy.org ) y en varios otros portales kurdos.

Los artículos sobre corrupción en el liderazgo kurdo también fueron escritos por otros dos prominentes escritores kurdos: Mahmoud ‘Othman, un MP iraquí independiente, y Nusherwan Mustafa, quien hasta hace un año fue el No. 2 en el Partido Democrático de Kurdistán.

A continuación extractos de los tres artículos.

Separatismo – Una política destructiva

El Dr. Sinjari argumentó que el nacionalismo del liderazgo kurdo, y sus amenazas implícitas para separarse de Irak, eran provocativas y arrogantes y podrían conducir al desastre. Él escribió:

«[En protestas organizadas por los dos partidos kurdos, la gente ondeaban] cientos de banderas kurdas y letreros exhortando a Bagdad a reconocer los derechos kurdos. La pregunta es por qué los organizadores no pusieron unas cuantas banderas iraquíes para que también fueran ondeadas. Ustedes exigen que Bagdad [reconozca] sus derechos, pero al mismo tiempo provocan a Bagdad y a otros. [Yo digo], ya basta de esta arrogancia. Cierto, tenemos derechos legítimos, pero [cómo espera usted lograrlos] cuándo nos comportamos de una manera inapropiada?

«Estas amenazas implícitas por separarse o [declarar] la independencia es destructiva. En cambio, deberíamos incorporar en primer lugar en la reforma política de la región [kurda] un programa educativo [inculcando un sentido de] nacionalidad iraquí y fe en la patria iraquí basado en la igualdad, el reconocimiento de los derechos y deberes… la tolerancia hacia todas las identidades [étnicas], y la restauración del sentimiento patriótico iraquí entre los kurdos iraquíes…»

Confianza en las fuerzas extranjeras – Un grave error

Sinjari siguió para advertirle a los líderes kurdos a no confiar en las fuerzas extranjeras para ayudarles a lograr sus aspiraciones nacionales, argumentando que el mejor curso de acción para cualquier liderazgo era el asegurar la satisfacción y ganar el apoyo de su propio pueblo:

«… Los líderes [kurdos] confían fuertemente en sus aliados norteamericanos y británicos, y ése es otro gran error. La mejor garantía [para una existencia segura] es la satisfacción del pueblo con su liderazgo… [Es más,] es Bagdad, no Washington o Londres que determinarán el estatus de la región [kurda], la cual es parte de Irak. Los kurdos están padeciendo de la arrogancia y de la jactancia de sus líderes…»

El discurso nacionalista es engañoso y dañino

Sinjari también discutió las prioridades puestas por el liderazgo kurdo, advirtiendo contra el priorizar la agenda nacionalista sobre los temas sociales y administrativos. Él argumentó que el enfoque en las aspiraciones nacionalistas había hecho que los kurdos pospusieran indefinidamente el desarrollo de su región, y les instó a que aprendieran de la experiencia amarga de los países árabes, que habían cometido el mismo error:

«El argumento kurdo de que todavía enfrentamos desafíos nacionales pertinentes a nuestra propia existencia, y que la reforma debería ser pospuesta hasta que ‘la lucha principal’ sea ganada, está agrietada. Los movimientos pan-árabes demuestran [la naturaleza] engañosa e hipócrita de esta [clase de] discurso nacionalista.

«Los líderes árabes han oprimido, y todavía están oprimiendo, a su pueblo bajo el pretexto de que [el precedente siempre se le debe dar a] Palestina y a la lucha contra el sionismo, el colonialismo, y el imperialismo, y que ‘ninguna voz debería estar por encima de la voz de la batalla’. En el nombre de esta [causa,] hipócrita etiquetada ‘seguridad nacional’ o ‘interés nacional supremo’, los derechos han sido usurpados, mientras [los temas de] la democracia, desarrollo y el mandato de la ley han sido diferidos indefinidamente.

«Por qué deseamos repetir esta experiencia infeliz? ¿Por qué queremos que la situación en nuestro país se parezca a la de las sociedades europeas orientales en el pasado? ¿Por qué nos hemos permitido sumergirnos en nuestras propias mentiras que hemos comenzado a creer, y toda nuestra sociedad está viviendo una mentira? Requerimos el nacionalismo, pero hacemos lo contrario; requerimos la responsabilidad, pero nuestra verdadera [preocupación] es para nuestros bolsillos y nuestros privilegios».

Escritores kurdos: Nuestro liderazgo está corrupto

El escritor kurdo Mahmoud ‘Othman criticó igualmente la corrupción en el liderazgo kurdo. En una entrevista el 23 de septiembre, 2008 para el diario independiente kurdo Hawlati, predijo que «muchos kurdos se abstendrán de votar [en las próximas elecciones para el parlamento] porque piensan que es inútil. La gente habría preferido un parlamento con una oposición a un parlamento que está [conjuntamente] controlada por [los dos partidos kurdos, es decir] el Partido Democrático de Kurdistán [encabezado por Mas’oud Barzani] y la Unión Patriótica de Kurdistán [encabezada por el Presidente iraquí Jalal Talabani]… Existen más libertades en Bagdad que en la región kurda, y mucha más libertad de la prensa…» [1]

Nusherwan Mustafa escribió de forma similar en el diario kurdo Roznama: «[Los dos partidos kurdos] se están esforzando por un mayor control de todos los aspectos del gobierno y [todos los aspectos de] la vida diaria de la gente… Queremos justicia y [una distribución justa] de la riqueza nacional… [Mientras] ellos quieren usar esta riqueza, y [aprovecharse de] sus posturas, para promover sus asuntos privados y controlar a la gente… Queremos transparencia y franqueza en las esferas financieras, económicas, empresariales y políticas… mientras ellos quieren manejar todo en una [completa] oscuridad…» [2]

Sinjari también consagró una parte importante de su artículo a este tema, diciendo: «[Nuestros líderes] claman que se están sacrificando a si mismos dando sus propias vidas al pueblo – aun así [en realidad] están engañando al pueblo, usurpando sus derechos, y [violando] su honor.

«El mayor crimen del [liderazgo] no es la destrucción de las instituciones gubernamentales – e.d., los ministerios y los medios públicos – o [incluso] la quiebra del gobierno y la economía. [El mayor crimen es] la deterioración moral… La inculcación de los valores religiosos y nacionales se ha deteriorado [a tal magnitud que la gente] no tiene escrúpulos sobre el robar los fondos públicos, ningún sentido de responsabilidad, y ninguna ética de trabajo. [No tienen] ningún compromiso en el desarrollo de su patria, al progreso de su pueblo, o a la extensión de valores nobles [tales como] el servirle a la humanidad.

«Esta deterioración moral significa mentirle al liderazgo [iraquí] para obtener privilegios; en otros términos, [la gente] se roba los fondos públicos, no trabaja fielmente, mienten y distorsionan los hechos, y les falta responsabilidad religiosa, nacional y humana…

La orden del día – la reforma en la región kurda

Junto a su crítica del liderazgo kurdo, Sinjari también hizo sugerencias para la reforma política interna y la democratización:

«Primero, los liderazgos de los dos partidos [kurdo] deben repensar su acuerdo estratégico el cual es participar en las próximas elecciones como un solo bloque. En otros términos, en lugar de competir y permitir que el gobierno produzca pacíficamente de acuerdo con los resultados de las elecciones, han decidido perpetuar la situación existente por lo menos otros 15 años. Ésta es una seria falla estratégica en [nuestra] democracia…

«Como primer paso en la reforma política, los partidos deben anunciar de que ambos acuerdan competir [en elecciones democráticas], para aceptar los resultados de la elección, facilitar el trabajo de los observadores internacionales celebrando elecciones justas y libres, y permitir un cambio pacífico de gobierno. La política, al igual que la economía, está corrompida por los monopolios y prospera con competencia libre y justa.

«La democracia prosperará en la región [kurda] sólo cuando la mayoría gobierne y la minoría este [representada por] una oposición parlamentaria que supervisará y monitoreará [al gobierno] y se preparará para las próximas elecciones…»

El discurso nacionalista destruirá nuestra región, al igual que el discurso pan-arabista el trajo ruinas a los ejércitos y pueblos árabes

«La única garantía para la seguridad nacional es democracia y más democracia – no el soso discurso sobre amenazas [que cuelgan sobre] nuestra región… Cuando nos educamos a nosotros mismos en creer que nuestra región es parte de Irak, y actuamos y planificamos [en concordancia], nadie se atreverá a amenazar nuestra seguridad, y viceversa.

«Reformando la administración de la región [kurda] es una necesidad crucial, [un asunto] de vida y muerte… La falta de reforma llevará a cuatro desastres… del cual cada político contemporáneo debe tener cuidado: a) la crisis interna en la región, [con] actos de violencia y ruptura del orden público; b) la crisis interna iraquí instigada por esta violencia; c) la crisis regional causada por el desasosiego [en Irak]…; [y] d) crisis internacional causada por las anteriores tres… especialmente desde que Irak está ocupada por fuerzas extranjeras y [por consiguiente] sujeta a las leyes internacionales, resoluciones y compromisos». [3]


[1] Hawlati (Kurdistán), 23 de septiembre, 2008.

[2] Roznama (Kurdistán), 20 de septiembre, 2008.

[3] www.tolerancy.org, 13 de agosto, 2008.

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