Ante las recientes operaciones militares por parte de Israel contra la expansión militar de Irán en Siria, que comprende ataques contra objetivos estratégicos iraníes y sirios, tales como aeródromos controlados por Irán, bases de misiles y bases de aviones no tripulados (drones), Irán se enfrenta ahora una pregunta estratégica: si responder a estos ataques y si al hacerlo, pudiese provocar un conflicto total con Israel.

El objetivo a largo plazo de Irán en Siria es expandirse en la zona militar y económicamente, dándole a este el control en todo el país, lo que a su vez le permitirá, cuando llegue el momento, actuar de manera efectiva y decisiva contra Israel. Es del interés de Irán que enfrentará una guerra total con Israel solo después de que haya terminado de hacerlo y después de que las fuerzas estadounidenses hayan abandonado Siria. Otras razones para que Irán posponga la respuesta a las operaciones contra Israel incluyen la inestable situación económica de Irán y la devaluación de su moneda el rial en el mercado libre de divisas en las últimas semanas; La decisión del 12 de mayo, 2018 del presidente estadounidense Donald Trump, sobre el futuro del acuerdo en materia nuclear PIDAC; la fragilidad del régimen del Presidente sirio Bashar Al-Assad; y la incapacidad de Teherán de asegurar que Rusia se le una militarmente en contra de Israel.

Pero la actividad estratégica de Israel, tal como fue declarada y ejecutada – es decir, de que no permitirá que Irán se expanda militarmente en Siria – le presenta a Teherán con un desafío difícil: si responder inmediatamente a ello, lo que puede conducir a una guerra total, tal como lo expresan varios funcionarios iraníes medios, las milicias chiitas patrocinadas por Irán tales como Hezbolá y los medios de comunicación afiliados al eje de la resistencia, o si Teherán estaría mejor si continuara por ahora pasando por alto los ataques israelíes para no arriesgar lo que ha logrado hasta hoy en Siria y en la región. El apoyo a esta última postura es evidente en los voceros iraníes que suavizaron sus declaraciones, posponiendo la respuesta iraní a «un lugar y momento apropiados en el futuro».

Cabe señalar que Teherán no respondió al segundo de los dos ataques de Israel en el interior de Siria el 10 de febrero, 2018 que hizo impacto sobre numerosos objetivos sirios e iraníes; tampoco respondió al ataque de Israel el 9 de abril contra la base aérea T-4 cerca de Homs, en el centro de Siria, en el que murieron siete oficiales iraníes del arsenal iraní de aviones no tripulados. Tampoco respondió a dos ataques adicionales el 17 de abril, atribuidos a Israel por voceros sirios y libaneses (es decir, Hezbolá) y por portavoces rusos, en la base aérea de Sharyat cercana a Homs y la base aérea de Dumair, cercana a Damasco, respecto de los cuales Siria dijo primero que había interceptado todos los misiles menos uno que impactó sobre la base de Dumair, pero luego cambió su historia y afirmó que una falsa alarma causada por «un ataque electrónico conjunto» por Israel y los Estados Unidos activó el sistema de defensa aérea sirio.

Tal como fue señalado, la respuesta de Teherán hasta ahora a los ataques de Israel ha sido restringida, tanto militarmente como en lo referente a las declaraciones sobre estos. Sin embargo, en contraste a su comportamiento tras el ataque israelí del 10 de febrero contra la base de aviones no tripulados y el vehículo de comando y control y tras el segundo ataque de Israel contra numerosos objetivos iraníes y sirios en Siria, es decir, el abstenerse de revelar sus pérdidas en los medios de comunicación, luego del ataque el 9 de abril contra la base aérea T-4 sí informó sobre sus pérdidas. Esto podría reflejar la voluntad del régimen iraní de exponerse a la presión del público iraní para responder efectuando contra-operaciones.

De izquierda a derecha: el Líder Supremo iraní Ali Jamenei, el comandante del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) Ali Jafari y el comandante de la Fuerzas Quds del CGRI Qassem Soleimani, en la ceremonia conmemorando el luto de Ashoura en el hogar de Jamenei. (Fuente: Kayhan, 1 de octubre, 2017)

El atronador silencio de Teherán ante los reiterados ataques de Israel contra objetivos estratégicos iraníes y sirios fortalece la evaluación de que Teherán prefiere, desde ya, pasar por alto los ataques israelíes. Pero es posible que Irán piense que las operaciones israelíes en serie le impiden alcanzar sus objetivos estratégicos, es decir, expandirse en Siria y que, por lo tanto, no hay escapatoria de un conflicto total con Israel ahora y no después de que Irán se haya establecido a si mismo allí. También es posible que esta restricción sea una cubierta para los preparativos secretos de realizar un ataque en contra de Israel.

Israel, con sus operaciones, dejó muy en claro a Irán y a Rusia de que se encuentra listo para la guerra ya. Una respuesta iraní a Israel pudiera conducir a una guerra total Irán-Israel. El hecho de que estemos esperando a ver cómo responderán los iraníes a las operaciones de Israel es una prueba de que la próxima guerra ya ha comenzado y que solo puede detenerse si a Irán se le persuade a no llevar a cabo sus amenazas.

La experiencia pasada muestra que Irán siempre se ha abstenido de enfrentarse directamente con los estados del Golfo, enfrentarse a Israel y con Estados Unidos a pesar de sus amenazas mayores de borrar de la faz de la tierra a Israel, al ejército estadounidense y a Arabia Saudita.

Apéndice: Reacciones en Irán a las operaciones de Israel en Siria

Un ejemplo del dilema que enfrentan los líderes del régimen iraní es un análisis del diario conservador iraní Javan, afiliado al Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) de Irán. Este afirmaba en su editorial del 9 de abril, 2018 escrito inmediatamente después del ataque israelí: «Según el General [israelí] Amiram Levin, está muy claro que los sionistas quieren crear un cambio estratégico y fundamental en Siria. Además, estos no están de acuerdo con la decisión del Presidente Trump de retirar sus fuerzas de Siria… El ataque a la base T-4 muestra que los sionistas han comenzado un camino muy peligroso que debe ser combatido seriamente, antes de que la situación en Siria empeore más de lo que se encuentra hoy».[1]

En su editorial del 16 de abril, 2018 el diario Kayhan, portavoz del régimen conocido por su postura vociferantemente belicista contraria a Israel, anti-Estados Unidos y anti-saudita, fue vago sobre la expectativa de una respuesta iraní, explicando que Irán no respondía a la acción israelí, que este denominó un complot destinado a provocar una reacción iraní para mantener a los Estados Unidos en Siria. Este afirmó: «En el tema del ataque del régimen sionista sobre la base T-4 en Homs, que causó la muerte de siete iraníes que defendían los lugares sagrados… existe una interpretación según la cual los sionistas a corto plazo apuntan a atacar a elementos iraníes… es obligar a Irán a responder y así involucrar a los Estados Unidos en la batalla. Este complot fue neutralizado gracias a la sabiduría de Irán. En cualquier caso y en cualquier situación, no hay duda de que este crimen no quedara sin respuesta…»[2]

La confirmación a esta interpretación por los portavoces del régimen es el hecho de que el Líder Supremo iraní Ali Jamenei, el comandante del CGRI Ali Jafari y el comandante adjunto Hossein Salami no han dicho nada sobre una respuesta al ataque israelí, aunque generalmente hacen declaraciones militantes sobre Israel. Las declaraciones de los funcionarios del régimen iraní fueron dirigidas principalmente contra los Estados Unidos, el Reino Unido y Francia, dentro del contexto de su ataque a las instalaciones de armas químicas del régimen de Assad. Cabe señalar que el Líder Supremo Jamenei, que mencionó el ataque por las tres potencias el 14 de abril, varias horas después de que ocurriera, llamó «criminales» a los líderes de los tres países, pero no mencionó directamente el ataque israelí contra objetivos iraníes en Siria.

Jamenei luego respondió a las afirmaciones de Israel de que Irán se estaba expandiendo militarmente en Siria, diciendo: «Cuando se dice que ‘Irán está conquistando y quiere ocupar este lugar en particular [Siria]’, estas palabras carecen de sentido, son contrarias a la realidad y son falacias. No, no deseamos ocupar [Siria] y tampoco tenemos una visión de ocupación respecto a ningún punto del mundo. Tampoco tenemos necesidad [de ocupar tierra], gracias a Alá, la nación iraní tiene un país grande y floreciente con mucho potencial. Irán está presente en Siria y en el Medio Oriente para luchar contra las malvadas [fuerzas de la represión] que existieron y todavía existen allí».[3]

Otros voceros iraníes también se expresaron de forma muy vaga respecto al momento de la operación y quién lo llevaría a cabo. Ali Akbar Velayati, asesor principal de Jamenei quien visitaba Siria en ese momento, se mostró relativamente reservado en comentar sobre el ataque a la base aérea T-4 por los israelíes y dijo el 10 de abril: «Ciertamente, este crimen de los sionistas no quedará sin respuesta».[4]

En una conferencia de prensa el 16 de abril, el vocero de la cancillería iraní Bahram Qassemi, se retractó un tanto del tema del itinerario a una respuesta iraní, e incluso asignó la tarea de responderle a las fuerzas de la resistencia. Este dijo: «Tarde o temprano, el régimen sionista será el receptor de una respuesta adecuada al tema de estos ataques, hasta el punto en que lamentará lo que hizo. No puede hacer tal acción y luego sentarse en una esquina impune… Para Israel, la era de [atacar] y huir ha terminado y las fuerzas de la resistencia son capaces de dar una respuesta apropiada a estos crímenes en el momento oportuno y adecuado».[5]

Para ver el despacho en su totalidad en inglés junto a las imágenes copie por favor el siguiente enlace en su ordenador: https://www.memri.org/reports/iran-faces-strategic-decision-%E2%80%93-whether-respond-israels-operations-against-its-military

*Y. Carmon es Presidente de MEMRI; A. Savyon es Director del Proyecto de Medios de Comunicación de Irán en MEMRI.


[1] Javan (Irán), 10 de abril, 2018.

[2] Kayhan (Irán), 16 de abril, 2018.

[3] Khamenei.ir, 14 de abril, 2018.

[4] IRNA (Irán), 10 de febrero, 2018.

[5] ISNA (Irán), 16 de abril, 2018.