Dmitry Plotnikov, experto en el tema del «poder blando» y del espacio postsoviético, escribió un análisis titulado «Turquía está construyendo un nuevo imperio otomano», donde analizó los crecientes lazos entre Ankara y Bakú y concluyó que Rusia ha perdido su antigua posición dominante en Azerbaiyán. Tal acción es mucho más evidente en las relaciones militares donde oficiales entrenados en Turquía desplazan a los graduados de las academias militares rusas. Azerbaiyán puede servir como trampolín para una mayor penetración turca en el Medio Oriente.

Sin embargo, no todo está perdido. Rusia aun puede utilizar su poder blando para recuperar parcialmente sus posiciones. Azerbaiyán puede ser un receptor muy oportunista de ayuda turca, pero este desea mantener una postura independiente y la ayuda turca puede, paradójicamente, reforzar esta independencia y frustrar los diseños de Turquía.

El artículo de Plotnikov puede leerse a continuación:[1]

Los presidentes de Turquía y Azerbaiyán Recep Tayip Erdogan e Ilham Aliyev posan con sus cónyuges durante la visita de Erdogan (Fuente: Radiosputnik.ria.ru)
Los presidentes de Turquía y Azerbaiyán Recep Tayip Erdogan e Ilham Aliyev posan con sus cónyuges durante la visita de Erdogan (Fuente: Radiosputnik.ria.ru)

«Susurros en Shusha

«La ciudad de Shusha es símbolo icónico de Nagorno-Karabaj. La toma de Shusha predeterminó la victoria de Azerbaiyán en el conflicto. Por lo tanto, no sorprende que el presidente de Azerbaiyán Ilham Aliyev junto a su colega turco Recep Tayyip Erdogan, firmaran una declaración bilateral precisamente en esa ciudad. La declaración, tal como dijo el líder azerbaiyano, tenía un «significado histórico».

Aliyev enfatizó que las relaciones entre los dos países siempre han sido ejemplo de ‘alianza y de cooperación únicas y singulares’. Sin embargo, la firma de la Declaración Shusha sobre la Alianza (de ahora en adelante conocida como la Declaración Shusha) los elevó a un nivel cualitativamente nuevo. Por supuesto, la Declaración Shusha no es un documento legalmente vinculante y no prevé la creación de un ejército con plenos derechos y bloque político de los dos estados.

«‘Al firmar la Declaración Shusha, deseamos demostrar que en el futuro salvaguardaremos conjuntamente la seguridad de los demás, tal como ocurrió anteriormente, cuando Azerbaiyán y Turquía se unieron alrededor de todos los temas importantes’, dijo Ilham Aliyev.

«El acuerdo asume todos los esfuerzos conjuntos de los dos países para mantener la seguridad global y regional, la creación de mecanismos para la libre circulación de bienes y la expansión de la cooperación en el sector perteneciente a la industria de defensa. Sin embargo, la disposición más importante de la declaración establece que la acción militar contra una parte significa automáticamente una declaración de guerra ante la otra. Luego de regresar a Turquía, Erdogan anunció planes para establecer una base militar turca en Azerbaiyán.

«Desde los días 28 al 30 de junio, los dos países llevaron a cabo ejercicios militares conjuntos denominados Mustafa Kemal Ataturk-2021. Estos ejercicios fueron planeados para llevarse a cabo incluso antes de la firma de la Declaración Shusha, pero la visita de Erdogan a Azerbaiyán precedió a una reunión militar importante, dedicada a la cooperación en materia de seguridad. Este es el vigésimo segundo ejercicio conjunto en los últimos tres años. Todos estos pasos se ajustan al plan expresado por Aliyev de crear «una copia más pequeña del ejército turco» en Azerbaiyán.

«Los actuales acuerdos son continuación de los procesos que se han desarrollado sistemáticamente desde el año 2017. En ese entonces, los dos países firmaron un acuerdo de cooperación en el área de la industria de defensa, cuyo artículo 21 le permitía a Ankara llevar a cabo el entrenamiento del cuerpo de oficiales azerbaiyanos en la formación y educación de las instalaciones de las Fuerzas Armadas turcas. Esto permitirá integrar al ejército azerbaiyano en las operaciones militares de Turquía en un futuro próximo y reemplazará las principales instituciones de educación militar superior rusas por las instituciones turcas. Esto reducirá los contactos informales entre el cuerpo de oficiales de la Federación de Rusia y las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán a un mínimo posible.

«Además, la edad del grupo de graduados de las academias militares turcas son predominantemente oficiales jóvenes, que se distinguieron durante el reciente conflicto. Este hecho les permite trabajar para las labores de la generación anterior de oficiales que recibieron su educación en las academias militares rusas. Por ejemplo, el despido del Jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán Najmeddin Sadykov, está relacionado a su orientación hacia Rusia y las críticas hechas a la creciente influencia turca y Ankara siempre está dispuesta a brindarles asistencia y protección a los oficiales orientados hacia este.

Turquía fomenta activamente la modernización de las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán. Según el ministro de Defensa de Turquía Hulusi Akar, ya se ha elaborado una hoja de ruta correspondiente al tema. El 6 de abril, los dos países firmaron un acuerdo que permite que las empresas militares turcas entren en funcionamiento en Azerbaiyán. Mientras tanto, las empresas turcas han estado cooperando con el sector de la industria de defensa de Azerbaiyán desde al menos el año 2018.

«Sin embargo, la política de seguridad turca en la región no se centra únicamente en la cooperación militar. El 27 de octubre, 2020 el diario turco Turkiye publicó un artículo ‘La decisión sobre el ejército de Turan’. Los autores del artículo instaron la formación de un ejército pan-turco unido compuesto por los países de Turquía, Azerbaiyán, Kazajstán, Uzbekistán, Turkmenistán y Kirguistán. Esto demuestra claramente que el desarrollo de los lazos militares forma parte de la estrategia coherente de Turquía y que los factores políticos están detrás de ello.

«Dos naciones, una sola vía

“’Hace algún tiempo nos separamos, ahora estamos unidos, una nación, dos estados’, se puede leer en el texto de una canción del cantante azerbaiyano Talib Taley.

«Esta frase refleja perfectamente los sentimientos de la sociedad azerbaiyana. Según encuestas sociológicas, el 91% de la población considera que Turquía es el principal aliado del país. Sin lugar a dudas, luego del apoyo de Ankara a Bakú durante el conflicto Nagorno-Karabaj el año pasado, esta postura solo ha salido fortalecida.

«Por ejemplo, el multimillonario azerbaiyano Ilham Rakhimov, quien tiene vínculos muy cercanos con Aliyev, declaró en una entrevista con el diario oficialista Yeni Musavat que ya es hora de que los dos países pasen del modelo de ‘una nación, dos estados’ al de ‘una nación, un único estado’.

«Existen partidarios de la misma opinión no solo entre los círculos pro-gobierno, sino también dentro de la oposición. Por ejemplo, uno de los principales miembros del Consejo Nacional de Fuerzas Democráticas Gultekin Hacibeyli, afirmó que ‘el ideal de la Confederación Turca es el modelo más realista para salir de los conflictos y confrontaciones del mundo contemporáneo, especialmente en nuestra región geopolítica donde nuestro país no es inmune a ello”.

«El ideal de la unidad azerbaiyana-turca se cierne sobre el país desde principios de la década de los años 1990. Según Sanubar Heydarova, doctor en ciencias sociológicas en la Universidad Estatal de Bakú (BSU), la razón detrás del entusiasmo masivo de los azerbaiyanos por la cultura turca fue el deseo de retornar a sus raíces turcas y expulsar todo lo asociado con la época soviética, incluyendo el idioma ruso.

«En aquel entonces, esta tendencia estuvo apoyada activamente por las autoridades del país. El primer presidente de Azerbaiyán Abulfaz Elchibey, se autodenominó con orgullo ‘soldado de Ataturk’ y defendió la idea de una confederación entre Azerbaiyán y Turquía. Suleyman Demirel, quien se desempeñó entonces como primer ministro de Turquía, declaró que su país tenía la oportunidad única de «definir el futuro político de las repúblicas musulmanas de la CEI (Comunidad de Estados Independientes)». Para alcanzar este objetivo, la cancillería de Turquía creó incluso la Agencia de Cooperación y Coordinación de Turquía (TIKA), cuyo objetivo era desarrollar las relaciones con los países de habla turca de la ex-Unión Soviética».

Logotipo de TIKA (Fuente: AA.tr)
Logotipo de TIKA (Fuente: AA.tr)

Para ver el despacho en su totalidad junto a las imágenes copie por favor el siguiente enlace en su ordenador: https://www.memri.org/reports/russian-expert-plotnikov-russia-no-longer-only-player-trans-caucasus-turkeys-influence


[1] Lenta.ru, 1 de julio, 2021.