La votación fue sorprendente. 356 miembros del Parlamento europeo votaron a favor de una resolución contra el reino de Marruecos, condenando varios temas sobre derechos humanos y «expresando una profunda preocupación por las acusaciones de que las autoridades marroquíes han corrompido a los diputados del Parlamento europeo». Se alega que Marruecos es un actor en el escándalo conocido como «Catargate» que, tal como su nombre indica, trata principalmente, pero no se limita al rico en petróleo estado de Catar, que compra influencias en el Parlamento europeo.[1]
Votando en contra de la resolución el día 19 de enero del 2023 se produjo una dispersión de partidos de extrema derecha y el gobernante Partido Socialista de España (PSOE), que obtuvo más de la mitad de los 32 votos negativos.[2] Los observadores políticos especularon que el PSOE votó de esta manera para no molestar la próxima reunión bilateral España-Marruecos que tendrá lugar los días 1 y 2 de febrero en Rabat, la primera reunión celebrada de este tipo desde el año 2015.
El contraste entre la política exterior de los dos estados es convincente. Marruecos parece estar centrado y ser totalmente consistente en sus objetivos políticos y ha obtenido importantes logros diplomáticos con el reconocimiento estadounidense ante la postura de Marruecos sobre el Sáhara Occidental (por parte de la Administración Trump y no revocada por la administración Biden).[3] España bajo los socialistas ha sido todo menos consistente, pasando por albergar al jefe del grupo rebelde del Sáhara Occidental apoyado por Argelia POLISARIO, en abril del año 2021, a menos de un año después de reconocer el plan de autonomía de Marruecos para el Sáhara Occidental.[4] El primer ministro español Pedro Sánchez, en el mes de marzo, 2022 realizo un cambio histórico para ponerse del lado de Marruecos en el conflicto por la antigua colonia española sin informarle a sus aliados comunistas en el partido Podemos o a Argelia, un importante proveedor de energía para España.[5]
Aunque Marruecos es un poco más pequeño y más pobre que su vecino ibérico, es España, miembro de la Unión Europea y de la OTAN, la que anda con cuidado para no ofender o provocar la ira de su homólogo norteafricano. Y aunque la política exterior y de defensa marroquí es más coherente y está mejor dirigida que la de la España socialista, la diferencia e incongruencia en la relación de poder es que Marruecos puede esgrimir un arma que ni España ni la Unión Europea ni la OTAN pueden aspirar igualar: el alma de la inmigración.
Los observadores españoles señalaron que el voto del PSOE a favor de Marruecos en el Parlamento de la Unión Europea no solo se refería a la próxima cumbre bilateral, sino también «con el propósito de preservar la apertura de aduanas en las ciudades españolas del norte de África de Ceuta y Melilla, que veremos en qué condiciones son hechas, pero en general para evitar que Marruecos cree problemas, empezando por el problema migratorio, herramienta que ha utilizado frecuentemente para ejercer presión sobre España”.[6]
Si bien la izquierda española, tal como la mayoría de la izquierda política en el mundo desarrollado está ideológicamente a favor de más inmigración y pareciera preferir a los inmigrantes ilegales que a sus propios ciudadanos, el 2023 es un año electoral en España y demasiados inmigrantes que llegan demasiado pronto lo que pueden es provocar un boomerang ante un electorado muy nervioso. Los principales medios de comunicación en España, que se inclinan fuertemente hacia la izquierda, generalmente cubren a los socialistas y se resisten a cubrir temas candentes tales como la delincuencia que cometen los inmigrantes, pero los medios de comunicación no pueden hacer que los problemas desaparezcan por completo. El proverbio de la rana que debe hervir relativamente lento y con muy poca atención.
España desea evitar a toda costa que antes del día de las elecciones se repita la debacle vivida en junio del año 2022 cuando 2.000 hombres, en su mayoría sudaneses y sudaneses del sur, intentaron asaltar la alambrada de 6 a 10 metros en Melilla y al menos 23 de los migrantes murieron en el intento.[7] Mientras que las organizaciones occidentales de derechos humanos criticaron tanto a la policía fronteriza española como a la marroquí por sus acciones, tales condenas resuenan principalmente en un Occidente condicionado, a la manera pavoloviana, en tomarse en serio la estridente retórica del «Complejo Industrial-ONG».[8]
Más allá de las especificidades en la relación bilateral entre España y Marruecos, el hábil juego de la carta migratoria por parte de Marruecos, su cuidadosa modulación ante los flujos migratorios en función de una agenda política, apunta a un interesante futuro político: el papel de los países importantes adyacentes hacia esos ricos destinos que atraen a la mayoría de los inmigrantes. Estos principales países «guardianes», uno piensa en Marruecos, México y Turquía, probablemente pudieran ver mejorada su influencia diplomática y política a medida que el intenso drama humano de la migración ilegal solo se incremente en los próximos años. Existen otros actores de menor importancia (Cuba, los otros países del norte de África, incluso el Líbano y Siria), pero están más lejos de la metrópoli o están siendo acosados por sus propios problemas internos masivos. Los tres grandes en Marruecos, México y Turquía son, a pesar de sus propios problemas internos, países sustanciales con sus propios problemas y agendas y el poder de convertirse en importantes puntos de tránsito o cuellos de botella para millones de personas que intentan llegar a la tierra prometida. Los inmigrantes de Marruecos que intentan entrar en España incluyen tanto a ciudadanos marroquíes como personas de toda África y del Medio Oriente.
Muchos (especialmente en la derecha política) se burlaron de la reciente aparición del ex-vicepresidente estadounidense Al Gore en el Foro Económico Mundial en Davos («visiones de fatalidad apocalíptica en una diatriba enloquecida en el FEM»).[9] Gore habló sobre «olas de refugiados climáticos que se prevé alcancen los mil millones este siglo» y advirtió sobre lo que llamó «xenofobia y tendencias políticas autoritarias que provienen de unos pocos millones de refugiados» que arribaron a Occidente.[10] Realmente no importa si las predicciones de Gore son ciertas, sino que las élites políticas generalmente las creen y así es. Y si países democráticos como España están dispuestos a suavizar sus políticas ante el espectro de unos pocos miles de inmigrantes en Melilla, ¿qué harán cuando esas cifras sean mucho mayores? La Unión Europea ya tenía acuerdos con Libia, Sudán y Turquía utilizando esos países como zonas amortiguadoras para frenar o controlar los actuales flujos migratorios. Todos estos acuerdos fueron controversiales, especialmente el de Sudán por temor a que la financiación por parte de la Unión Europea estuviese fortaleciendo a las fuerzas paramilitares sudanesas sobre el terreno. Ese acuerdo en particular fue suspendido en el año 2019.[11]
Pero la tendencia más amplia se intensificará a medida que veamos a los estados ricos tratando de sobresalir siempre en los temas esenciales pero ahora políticamente volátiles, tales como el control de las fronteras sobre sus vecinos menos aprensivos. Estos vecinos buscarán oprimir a estos estados occidentales tanto como sea posible. La trata de personas no solo es un negocio muy rentable, una industria en crecimiento,[12] sino que el negocio de detenerlos o ralentizarlos también será rentable. Ambos económico como político.
*Alberto M. Fernández es vicepresidente de MEMRI.
[1] Elconfidencial.com/mundo/2022-12-18/espia-marroqui-corrupcion-eurocamara-cataluna_3542030, 18 de diciembre, 2022.
[2] Theobjective.com/internacional/2023-01-19/psoe-resolucion-eurocamara-marruecos-soborno, 19 de enero, 2023.
[3] Véase la serie de MEMRI Informe diario No. 280 – Cuenta regresiva en Ceuta: La lucha híbrida de Marruecos con España, 1 de junio, 2021.
[4] Véase la serie de MEMRI Informe diario No. 371 – España cambia de rumbo sobre el tema de Marruecos y el Sáhara occidental, 30 de marzo, 2022.
[5] Elconfidencial.com/espana/2022-03-19/sanchez-cede-sahara-reconciliarse-marruecos_3394443, 19 de marzo, 2022.
[6] Elmundo.es/espana/2023/01/21/63caf26cfc6c83f4438b4590.html, 21 de enero, 2023.
[7] Hrw.org/news/2022/06/29/morocco/spain-horrific-migrant-deaths-melilla-border, 29 de junio, 2022.
[8] Foreignpolicy.com/2009/11/17/the-ngo-industrial-complex, 17 de noviembre, 2009.
[9] Bizpacreview.com/2023/01/19/al-gore-warns-climate-refugees-could-reach-a-billion-doom-self-governance-forever-in-deranged-davos-diatribe-1325926, 19 de enero, 2023.
[10] Foxnews.com/politics/al-gore-history-climate-predictions-statements-proven-false, 22 de enero, 2023.
[11] Forbes.com/sites/freylindsay/2019/08/06/the-eu-says-it-has-stopped-giving-money-to-sudan-for-migration-control/?sh=288243c47faf, consultado el 24 de enero, 2023.
[12] Rand.org/pubs/research_reports/RR2852.html, 2019.
