La suspensión realizada por parte de las plataformas Facebook y Twitter a las cuentas del ex-presidente Donald Trump luego de los disturbios ocurridos en la capital Washington D.C. el 6 de enero, 2021 provocó críticas por parte de escritores árabes, quienes acusaron a las redes de emplear un doble discurso. Twitter y Facebook dijeron que cerraron las cuentas de Trump con el pretexto de que estas incitaban violencia, pero al mismo tiempo continúan proveyéndole una plataforma a numerosos grupos terroristas tales como Al-Qaeda y el EIIS, que piden el asesinato y violencia de gente inocente.
Caricatura en el diario egipcio Al-Yawm Al-Sabi’ publicada el 9 de enero, 2021: Twitter y Facebook silencian a Trump por motivos de «seguridad pública», pero aun así proveen a las «organizaciones terroristas y del caos» con una plataforma basados en la «libertad de expresión».
Lo siguiente son extractos traducidos de algunos de los artículos:
Editor de diario egipcio: Twitter bloqueó a Trump, pero no ha bloqueado las cuentas de las organizaciones terroristas
Akram Al-Qassas, editor en funciones del diario filial del régimen egipcio Al-Yawm Al-Sabi’, escribió: «La decisión tomada por la plataforma Twitter de cerrar la cuenta del presidente estadounidense Donald Trump constituye un punto de inflexión en las prácticas de las redes sociales en general y de Twitter en particular… El cierre de su cuenta, decisión tomada por Twitter con el pretexto de que incitaba a la violencia, marca un punto de inflexión y uno se pregunta si Twitter limitará estas reglas solo al territorio de los Estados Unidos o se las impondrá a todos – considerando especialmente que Twitter es la red social que en los últimos años ha permitido promover la violencia más que cualquier otra red. De hecho, organizaciones tales como el Estado Islámico [EIIS] y Al-Qaeda tenían cuentas en Twitter donde publicaban declaraciones que incitaban a la violencia e incluso difundían y pregonaban ataques terroristas. Las cuentas Twitter almacenadas en la plataforma todavía incluyen cientos de videos en los que los terroristas incitan al terrorismo, atentados y al asesinato de militares egipcios y de los cuerpos policiales. Además, Twitter sigue brindando una plataforma a aquellos que convocan manifestaciones violentas, que promulgan instigación y asesinatos y videos en el que se destacan sentencias religiosas que acusan a los egipcios de herejía y se incita a asesinarlos.
«Todo esto puede indicar que la adopción repentina de una política que se oponga a la violencia y al terrorismo por parte de Twitter se aplique solo en el territorio estadounidense, o que la red esté empleando un doble discurso: difundir los mensajes de los terroristas y aquellos que incitan a la violencia en Egipto, Arabia Saudita y Europa, mientras previene lo mismo en los Estados Unidos. Esto parece estar motivado por algún tipo de temor por parte de Twitter de que pueda ser demandado si continúa permitiendo que Trump siga utilizando la aplicación.
«En términos generales, detener los tuits de Trump después de ser acusado de incitación a la violencia representa un punto de inflexión muy importante, que obliga a todos los países del mundo a aplicar estas normas en la tenaz lucha contra el terrorismo y bloquear todas las cuentas que llaman a la violencia y promueven el terrorismo. Existen cientos de cuentas Twitter… de organizaciones armadas… que incitan claramente contra Egipto y contra otros países árabes.
«Pero parece ser que la decisión de suspender la cuenta de Trump es específica a él y que a Twitter le resultará difícil aplicar la misma política en todos los casos, ya que la red aparentemente se beneficia, directa o indirectamente, de cuentas falsas o cuentas que incitan a la violencia o al terrorismo, por lo que Twitter será renuente en bloquearlos tal como lo hizo con Trump».[1]
Columnista saudita: Las redes sociales funcionan como un estado dentro de un estado y rechazan ser supervisadas
El columnista saudita ‘Abdallah bin Bjad Al-‘Otaibi escribió en el portal de noticias de los Emiratos Árabes Unidos Al-‘Ain: «Algunas redes sociales, tales como Twitter y Facebook, suspendieron las cuentas del ex-presidente de los Estados Unidos Donald Trump debido a razones políticas. Ellos mismos se auto proclamaron defensores del pueblo y de las instituciones estatales, aunque no son elegidos y no poseen legitimidad política que les permita impedir que el presidente del país más poderoso del mundo se dirija a su pueblo. Esta fue una decisión aplicada a un individuo en un tema mucho más importante y serio.
«Las redes sociales son claramente una herramienta política. Si bien estas operan en la llamada realidad virtual, han creado, en pocas palabras, una realidad muy verdadera con una distribución más amplia que la realidad existente sobre el terreno. Esta realidad es seguida por un billón de personas, que lo cargan en el bolsillo y por lo tanto, mucho más cerca de aquellos medios tradicionales. A pesar de todo esto, estos portales aún no están sujetos a leyes y regulaciones y ahora luchan para asegurar que ningún país pueda supervisarlos o regular sus actividades – y esta es la receta de un caos muy peligroso.
«Lo extraño de esta decisión de suspender las cuentas de Trump es que impide que Trump hable, mientras que todos los dictadores y terroristas del mundo si pueden utilizar todos los medios de publicidad, difusión y propaganda para promover el terrorismo y el asesinato. Las redes sociales se han convertido en una realidad donde todas las organizaciones criminales, que trafican con el terrorismo, las drogas y armas, operan libremente y las redes afirman no poder monitorear estas actividades y evaden el prevenirlos y prohibirlos – excepto en lo que respecta al presidente Trump.
«Dado el conflicto entre las corrientes políticas en los Estados Unidos y dado que estas redes sociales tienden a ser de izquierda y no de derecha, es decir, apoyan a los demócratas y no a los republicanos y ciertamente no al bando Trump, son obviamente fundamentalmente parcializados y no-neutrales como les gusta afirmar. Estos han estado involucrados en una continua confrontación con Trump desde que asumió el cargo hace cuatro años; sin embargo, en nombre de la ‘privacidad’ estos albergan a muchos terroristas y fundamentalistas que incitan al asesinato y al sabotaje y nunca han renunciado a estas posturas, salvo tras intensos enfrentamientos con las instituciones jurídicas y de seguridad de los estados…»[2]
Twitter silencia a Trump (Fuente: Al-Ru’ya, Emiratos Árabes Unidos, 13 de enero, 2021
Columnista sirio: Las redes sociales se han convertido en censores parcializados
‘Amer Na’im Elias, columnista del diario del gobierno sirio Al-Watan, escribió: «Trump fue derrocado al toque de un botón por los directores de Twitter y Facebook. Sus 35 millones de seguidores no hicieron ningún esfuerzo en su nombre y la burbuja de sus seguidores y simpatizantes, tanto en la red como en el terreno, desapareció sin dejar rastro. Aunque el hombre tenía influencia, la decisión fue tomada en su contra y en contra de sus decenas de millones de seguidores sin esperar ningún proceso legal o decisión de las autoridades durante la sin precedente catástrofe política que golpeó a los Estados Unidos el día 6 de enero, 2021 con el asalto al Capitolio…
«Hoy nos enfrentamos a una realidad en la que Silicon Valley y sus plataformas digitales se han convertido en el único juez y censor del gobierno y la pregunta es si los directores de las empresas digitales deberían realmente poseer la autoridad para nombrarse por sí mismos jueces que gestionan el contenido en sus plataformas y lo clasifican como opinión, protegida por la libertad de expresión, o como contenido que amenaza la seguridad social y política y ‘la transferencia pacífica del poder’. Para ello fue el mensaje que publicó Facebook cuando bloqueó a Trump hasta que se completó la transferencia de poder en el gobierno.
«Ya se han presentado casos en el pasado donde las redes sociales actuaron para afectar adversamente el destino de naciones y países… Demandas para delinear un marco a las plataformas digitales e imponer estrictas limitaciones a la libertad de expresión y a las ideas publicadas en estas ya fueron propuestas hace años por expertos y por estados que fueron perjudicados por las actividades en estas redes. Hoy día la creación se ha vuelto en contra de sus amos en Occidente, aunque de una manera más suave, ya que hoy Occidente está siendo perjudicado por las redes sociales y sus países son los que están siendo atacados…
«Lo sucedido en los Estados Unidos revela una vez más la verdadera razón del poder de las redes sociales, que a lo largo de los años han logrado atraer a la mayoría de la población del mundo, con sus diversos enfoques a la vida. Su poder emerge al hecho de que estos le dicen a la gente lo que desean escuchar, lo que desean creer y lo que corresponde a sus sentimientos. Estas redes trabajan para difundir contenidos muy controversiales que no tienen ninguna relación con la libertad de expresión… Y ¿qué dicen sobre su contribución a los esfuerzos de reclutamiento de las organizaciones armadas y terroristas y de las ideas extremistas que difunden ignorando su contenido, lo que ha llevado a una devastación total de países? ¿Hasta qué punto son las plataformas digitales responsables del contenido que estos diseminan? ¿Se les permite seguir difundiendo los contenidos más divisivos para ganar adeptos adicionales, con el pretexto de proteger la pluralidad de opiniones? ¿O acaso los hechos en Washington sientan las bases para limitar el contenido en las plataformas digitales, con el propósito de proteger los derechos de todos los países del mundo y respetar la sensibilidad de su composición demográfica?»[3]
[1] Al-Yawm Al-Sabi’ (Egipto), 10 de enero, 2021.
[2] Al-ain.com, 11 de enero, 2021.
[3] Al-Watan (Siria), 13 de enero, 2021.