Las celebraciones de Halloween que realizan los ciudadanos en Arabia Saudita provocaron recientemente un acalorado debate en el país, en las redes sociales y en los principales medios de comunicación. Entre los que abordaron el tema se encontraba el escritor y columnista ‘Abdallah bin Bakhit. En un artículo publicado el 4 de noviembre, 2022 en el diario ‘Okaz, este escribió que las fiestas de Halloween reflejan el rechazo de los jóvenes a las tantas prohibiciones islámicas que les fueron impuestos durante décadas y a la cultura de represión y muerte que dominó su crianza.

‘Abdallah bin Bakhit (imagen: Al-Riyadh, Arabia Saudita)

Lo siguiente son extractos traducidos de su artículo:[1]

«Hace años nos dijeron que no debemos seguir el calendario gregoriano. Ninguno de nosotros necesitó de ninguna explicación en lo absoluto para ello, porque el nombre de este calendario indica claramente que es cristiano. Sin embargo, nosotros continuamos utilizando este calendario durante años y no he conocido a un solo musulmán que se haya convertido al cristianismo, o cuya fe decaiga, o que se haya desviado del camino correcto debido a ello.

«Hace años (en el 2010) surgió un debate bastante agrio en Arabia Saudita luego que el gobierno decidiera fusionar los departamentos de educación de los más chicos y chicas en el Ministerio de Educación… Para ese entonces nosotros estábamos obligados a demostrar que el sol brilla en el cielo (es decir, probar lo más obvio): teníamos que probar que fusionar los departamentos no tenía nada que ver con mezclar varones y hembras dentro de la misma aula.

«Cualquiera que estuviera vivo hace seis años y estuviese al tanto de los acontecimientos muy seguramente recuerda la guerra en contra de las rosas del Día de San Valentín.[2] Por primera vez en la historia humana, las rosas se convirtieron en una amenaza, en particular para la fe y religión de la población. La guerra contra las rosas fue el clímax, después de las guerras anteriores contra la belleza, la música, teatro, novela, pintura, fotografía y la felicidad… se prohibió exhibir rosas en público, especialmente rosas rojas, consideradas por los jóvenes como el símbolo del amor. La derrota de las rosas fue una victoria rotunda para la fealdad.

«A lo largo de los años, la belleza se desvaneció y la fealdad se extendió. Las guerras en contra de la belleza fueron reemplazadas por intentos de socavar las emociones humanas de la población. Ellos solían llevar a los chicos a los cementerios. Cada niño tenía que permanecer en una tumba abierta y cualquier chiquillo que no llorara se le ordenaba examinar su malvado corazón. Dado que a las mujeres no se les permite entrar en los cementerios, las mujeres predicadoras se comprometieron en difundir esta fealdad entre las niñas de otras maneras. Estas comenzaron con asaltar las celebraciones de las mujeres, irrumpiéndolas y, en lugar de la propia fiesta, daban demostraciones de cómo lavar a los muertos, envolverlos en sudarios y llorar por ellos.[3]

“Estos adolescentes tenían pesadillas sobre el ser atormentados por la valiente serpiente calva que los espera en la tumba[4] y sobre el hechicero que separará a sus padres y otro hechicero que les hará fracasar en sus estudios. Después de romper la televisión de la familia y hacer trizas sus fotografías y las fotografías de sus amigos, estos muchachos del cementerio tomaron las cartas en sus propias manos. Habiendo sido privados de su alegría en la vida, comenzaron a perseguir a la gente en los mercados e invadir su privacidad. Luego procedieron a realizar las tareas verdaderamente importantes: volar mezquitas, ministerios gubernamentales y hogares de ciudadanos pacíficos, destrozar sus documentos de identidad y pasaportes y unirse a organizaciones terroristas que buscan asesinar gente en todo el mundo.

«Hoy, utilizando la misma táctica de aterrorizar a la gente y llenarla de miedo utilizando rituales y costumbres paganas, los miembros de Sahwa[5] han dirigido su atención a la festividad de Halloween, que consideran de culto al diablo arraigado en el paganismo… Ellos piensan que pueden luchar contra la alegría, tal como lucharon contra las rosas. Pero los jóvenes que celebran Halloween no solo experimentan alegría y se divierten, sino que también están vengando las rosas».


[1] ‘Okaz (Arabia Saudita), 4 de noviembre, 2022.

[2] Hasta el año 2017, las celebraciones públicas del Día de San Valentín eran ilegales en Arabia Saudita y los miembros de la policía religiosa solían interrumpir las fiestas del Día de San Valentín e incluso evitar que la gente venda y compre artículos relacionados con esta festividad, tales como rosas rojas. La prohibición provocó considerables críticas en el reino; véase, por ejemplo, la serie de MEMRI Despacho Especial No. 2811 – Debate en la prensa saudita sobre la prohibición de celebrar el Día de San Valentín – 16 de febrero, 2010.

[3] En referencia a la preocupación por el tema de la muerte en las escuelas saudíes, véanse los informes de la serie de MEMRI: Despacho Especial No. 730 – Educadores y padres protestan contra la ‘cultura de la muerte’ enseñada en las escuelas sauditas – 11 de junio, 2004; Despacho Especial No. 3084 – Simulacro de funeral en una escuela secundaria saudí provoca condena generalizada en el país – 7 de julio, 2010.

[4] Según las tradiciones musulmanas, una «valiente serpiente calva» atormenta a los muertos que descuidaron sus plegarias en vida.

[5] El movimiento islámico Sahwa (Despertar), establecido en la década de los años 1980 por clérigos saudíes, combinó el islam wahabí y salafista con la ideología de la Hermandad Musulmana.