La elección de Joe Biden a la Casa Blanca despertó muchas preocupaciones en los sectores de la oposición siria, que teme el retorno de las políticas indulgentes del anterior presidente demócrata Barack Obama, tanto hacia el régimen de Assad como a Irán. Según la oposición, estas políticas se manifestaron en el hecho de que a Assad no se le presionó para que alcanzara una solución política en Siria y en el concederle a Irán manos libres en Siria como parte de los esfuerzos para concluir el acuerdo nuclear con este. Estos temores se intensificaron cuando Biden, siendo este el vicepresidente de Obama durante su periodo en el cargo, anunció su voluntad de renovar el acuerdo nuclear con Irán[1] y eliminó a los houties yemeníes de la lista estadounidense de organizaciones terroristas,[2] medidas que fueron vistas por la oposición siria como concesiones inmerecidas a Irán. Otro motivo de preocupación fue la mínima atención que se le dedicó al tema de Siria en la campaña presidencial de Biden y el hecho de que ni siquiera este lo mencionó en su primer discurso en política exterior como presidente, el día 4 de febrero, 2021. Estos hechos fortalecieron el sentimiento en la oposición siria de que el presidente de los Estados Unidos los había «olvidado» y que resolver la crisis de Siria no es prioridad alguna para la Casa Blanca.
Ante este contexto, el presidente adjunto del Comité Constitucional de Siria Hadi Al-Bahra, tuiteó el 22 de febrero que Biden continúa con la política de concesiones de Obama hacia Irán, «que para los sirios en ese momento, les costó muy caro».[3]
El tuit de Al-Bahra
También se expresaron críticas similares ante Biden en artículos escritos por opositores sirios. Por ejemplo, el intelectual Michel Kilo advirtió que, dada la indiferencia de Estados Unidos por el desastre en Siria, su nuevo acuerdo con Irán probablemente será a expensas de los sirios, muy similar al acuerdo de Obama. El periodista ‘Abd Al-Jalil Al-Sa’id también evaluó que el silencio de Biden sobre Siria indica que este tiene la intención de utilizar la carta siria para negociar un acuerdo con Irán. El periodista Ghazi Dahman evaluó que Estados Unidos no se apresura a resolver la crisis en Siria, ya que esta crisis le sirve a sus intereses – y le permite a Estados Unidos mantener su presencia en la zona este de Siria sin ningún costo considerable utilizándolo como ficha de canje ante Irán y Rusia.
(Fuente: Syriahr.com)
Lo siguiente son extractos traducidos de estos tres artículos.
Michel Kilo: No debemos repetir las tontísimas acciones de Obama, que llegó a un acuerdo con Irán a expensas de nuestro pueblo
En un artículo publicado por el diario en Londres Al-Arabi Al-Jadid, el opositor sirio Michel Kilo atacó a la administración Biden por ignorar la situación en Siria y por hacer concesiones con Irán, aunque las experiencias pasadas nos enseñan que el régimen iraní se aprovecha de todo esto. Kilo escribió: «Al anunciar una intención de recompensar a Irán por su papel en Yemen, Estados Unidos revocó la designación de los houties como organización terrorista, con el argumento de que el pueblo yemení se muere de hambre y la administración del presidente estadounidense Biden específicamente se siente responsable de su destino. A los estadounidenses no les importa si esta medida eventualmente lleva a Estados Unidos a proveerle a los houties todo lo que estos necesitan para seguir matando de hambre a los yemeníes y para equipar a su pueblo, siendo estos responsables de agravar el sufrimiento de los yemeníes, derramando su sangre, ocupando su patria, destruyendo sus hogares y asesinando a sus hijos. Los houties hacen todo esto con el apoyo activo de Irán, el país que ha establecido organizaciones terroristas en Irak, Siria y el Líbano, organizaciones repletas de asesinos y mercenarios que combaten en las guerras de Irán y que, como organizaciones establecidas por el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán, están a cargo de expandir su influencia y presencia en una de las regiones del mundo más importantes para Occidente y los Estados Unidos
«¿Cómo esperan ustedes que entendamos todo esto, honorables señores de la Casa Blanca? ¿Es este un preludio necesario para las negociaciones con Irán sobre su falta de compromiso con el acuerdo nuclear? ¿Tienen estos mensajes el destino de mejorar la atmósfera antes de revocar su boicot a Irán y optar por contenerlo, a la manera de Barack Obama, quien perdonó sus acciones en Siria y advirtió a sus ayudantes, uno de los cuales fue el actual presidente Biden diciendo: ‘De ahora en adelante, ¡No quiero que ninguno de ustedes mencione a Siria?![4]
«Parece ser que el nuevo amo de la Casa Blanca no necesita que nadie le recuerde esto. Aquellos que han sido puestos a cargo del destino de Siria, algunos de ellos son partidarios de Irán, como el Representante Especial para Irán Robert Malley, mientras que otros son partidarios del grupo PKK, tales como el Coordinador del Consejo de Seguridad Nacional para el Medio Oriente y África del Norte Brett McGurk que no le recordarán a este lo de Siria. Al contrario, lo ayudarán a realizar una rápida transición a la etapa Siria… De lo contrario, ¿cómo se las arreglaron, de la noche a la mañana, para llevar a Libia de la guerra a una solución con solo presionar un botón nombrando un nuevo gobierno con el patrocinio de las Naciones Unidas y el apoyo estadounidense? ¿Por qué fortalecieron la fuerza de ocupación iraní en Yemen y decidieron satisfacer las necesidades alimentarias y medicinales de sus agentes houties? ¿Por qué detuvieron la ‘agresión’ saudita contra los houties y por qué todas las declaraciones de la Casa Blanca sobre la defensa de la libertad y los derechos humanos en todo el mundo se abstienen de mencionar a Siria?
«¿No son los sirios seres humanos con derechos que deberían ser defendidos? El compromiso con los derechos humanos expresado por Biden y su administración, ¿no deberían estos aplicarse a ellos también? ¿No necesita Siria de la paz y el fin de la hambruna y de la expulsión sufrida por su pueblo, que ha sido exiliado a un área distante dentro de su país, donde están siendo asesinados mediante torturas, hambruna y humillación? Aquellos que asesinaron a más de dos millones de ciudadanos sirios, ¿no merecen ellos ser castigados? ¿Acaso el pueblo sirio no merece ver la implementación de las resoluciones internacionales sobre Siria, que fueron bien recibidas y acogidas por Washington, todas las cuales exigen la transición de un estado de guerra a una solución democrática? Tengan presente que no existen resoluciones sobre Libia comparables en número y contenido y no existen resoluciones internacionales que exoneren a los houties de derramar la sangre de los yemeníes, haciéndolos morir de hambre, librar guerras con estos, destrozar su patria y dejar que los iraníes se hagan cargo de esta?
«¿Qué sucede con Siria? En otras palabras, ¿qué crimen ha cometido su pueblo contra Alá y contra el hombre que merecen escuchar al tonto e ignorante Trump llamar a su país ‘la tierra de arena y sangre’ y ver al presidente Biden y a su administración olvidarse por completo de Siria e ignorar su causa… La generosidad estadounidense no se extiende a los sirios. Su seguridad y protección no están en el tope de la agenda estadounidense y no reconocen su derecho a elegir a sus líderes.
«Escribo todo esto para llamar la atención a todos aquellos que toman las decisiones en la Casa Blanca. Al igual que la mayoría de mis compañeros sirios, yo tenía esperanzas de una victoria de Biden en las elecciones presidenciales de los Estados Unidos y les pedí a mis amigos árabes estadounidenses que lo apoyaran tanto como puedan. Yo espero que este no repita las tontas acciones de Obama, quien hizo un trato inútil con Irán a expensas de todo un pueblo y contribuyó a la masacre de ese mismo pueblo al firmar dicho acuerdo. En la actualidad, toda la región está pagando muy caro por los misiles iraníes, cuyo alcance, gracias a ese acuerdo, cubre a lo largo y ancho de esta región y muchos de los cuales han sido apuntados a la embajada de la Casa Blanca en Bagdad. Sería un grave error que el amo de la Casa Blanca crea que las concesiones y la indulgencia hacia Irán será entendida correctamente por el liderazgo de Irán y no como una señal de debilidad que alentará a Irán a expandirse más entre sus vecinos.
«El mundo no gozará de paz ni seguridad mientras alguien considere al pueblo sirio como un cobarde que sucumbirá a su voluntad incluso si ignora sus derechos y expone sus cuellos ante las dagas de los asesinos. Si eso llega a suceder, nadie debería culpar a nadie excepto a sí mismos…»[5]
Periodista sirio: Existe preocupación de que Biden, al igual que Obama y Trump, no pueda formular una política clara sobre el tema Siria
En un artículo publicado el 9 de febrero en la plataforma de noticias sede en los Emiratos Árabes Unidos Al-Ain, el periodista sirio ‘Abd Al-Jalil Al-Sa’id expresó su preocupación de que el silencio mostrado por Biden ante la crisis siria fuese una continuación de la vaga postura estadounidense sobre el tema sirio, lo cual dijo, contribuyó al deterioro de este país. Este escribió: «El presidente de los Estados Unidos Joe Biden, eligió presentar los lineamientos generales de la política exterior global de su administración desde el edificio del Departamento de Estado. Muchos de los que siguen los temas estadounidenses notaron la naturaleza de este precedente, señalando que esta ubicación simbólica es clara indicación de que la diplomacia es la primera preferencia del nuevo presidente.
«En su primer discurso en política exterior, el presidente estadounidense Biden hizo caso omiso a la crisis siria, un desastre sin precedentes en un país árabe inmerso en conflictos y luchas internas que lo han destruido todo y han convertido a la mitad de su población en refugiados fuera de su país o en desplazados dentro de este.
«Los sirios le temen a esta vaga postura estadounidense, sobre todo porque la administración del ex-presidente Donald Trump, durante todo su mandato, no tuvo un plan claro para Siria y se centró en gestionar la crisis en lugar de solucionarla o incluso forzar a la partes involucradas a negociar seriamente para alcanzar una solución política justa y total.
«La preocupación respecto a esta peligrosa postura estadounidense surge de la comparación entre la política de Biden y la de su patrón y amigo cercano, el ex-presidente Obama, quien brindó nada más que apoyo moral a los movimientos de los opositores en Siria, con declaraciones vagas que finalmente llevaron la crisis a su estado actual.
«Quizás aquellos responsables de tomar las decisiones en la Casa Blanca están esperando por un enfoque integral sobre el tema Siria a que se decidan y es por eso que aconsejó a Biden que no incluyera a Siria en su discurso antes de que se formule este esperado enfoque. El que debería estar más involucrado en esto es el Coordinador del Consejo de Seguridad Nacional para el Medio Oriente y África del Norte Brett McGurk, un veterano diplomático estadounidense que entiende perfectamente todos los detalles del panorama sirio, a pesar de su complicada naturaleza…
«Hacer esperanzar los corazones de los sirios y llenarlos de optimismo respecto a su país y al estado al que hemos llegado es casi imposible… Más que eso, la magnitud de las dificultades económicas de los sirios, en todas partes del país, les hace dudar de que los componentes de esta entidad árabe podrán unirse y seguir coexistiendo en el futuro, ya que las fuerzas que ocupan Siria – tanto estados como milicias, controlan su toma de decisiones y frustran todo gesto de buena voluntad que se presente a debate por parte de cualquier elemento local.
«Por lo tanto, la pregunta más importante dentro del contexto de Siria sigue siendo la siguiente: ¿Se abstuvo el presidente del país más poderoso del mundo de mencionar a Siria porque considera su difícil crisis como uno de los temas que deben ser manejados como parte del futuro acuerdo que pretende hacer con el régimen iraní, que anhela el diálogo con los Estados Unidos, en su nueva forma? ¿Es posible que este acuerdo implique luego otorgarle valiosos obsequios a Irán a expensas de los sirios y su desastre?»[6]
Periodista sirio: La actual situación en Siria es conveniente para los Estados Unidos en sus negociaciones con Rusia e Irán
Ghazi Dahman, columnista del diario Al-Arabi Al-Jadid, evaluó en un artículo publicado el 18 de febrero que Siria no es una prioridad para la administración Biden y que Estados Unidos no está interesado en actuar en contra del régimen de Assad. Este escribió: «El discurso de Biden sobre la futura política exterior de los Estados Unidos… no mencionó a Siria, a pesar de que el tema sirio está en el corazón de la política tradicional del Partido Demócrata, basados en darle peso al tema de los derechos humanos en la configuración de la política exterior de la administración estadounidense. Parece ser que la administración Biden no pretende basarse en este tema de los derechos humanos para demostrar así su intrínseca identidad como administración demócrata siempre que esto implique aceptar costos y compromisos que no pretende emprender…
«La falta de interés que muestra la administración Biden en el tema de Siria en el futuro previsible puede verse agravada por el hecho de que la situación de los Estados Unidos en Siria es considerada ideal, en la que no se requieren cambios ni acciones. Estados Unidos está logrando sus objetivos a bajo costo y mantiene su presencia en la zona este de Siria sin gastar recursos considerables o dedicarle activos militares sustanciales a ello, porque el futuro previsible no parece presentar ningún peligro serio que le obligue a cambiar su enfoque…
«Resumiendo, dejar la situación sin cambios puede llegar a ser la política más realista que la administración Biden puede asumir sobre el tema Siria, ya que no conlleva ningún costo ni riesgo y también le sirve al objetivo estadounidense de mantener una presencia en el Medio Oriente sin dejar de lado el problema sirio como tema de negociaciones con Irán y Rusia. Si el permanecer en Siria es del interés estadounidense, cualquier movimiento en una dirección diferente, tales como alguna acción militar para derrocar a Assad, no es del interés de la administración Biden, cuya política tiene como base evitar los riesgos. Para mantener el actual equilibrio de poder en Siria sin cambios, la administración Biden pudiera de hecho tomar medidas diligentes para aliviar las sanciones ante Assad, con la excusa de minimizar el daño al pueblo sirio y así evitar que Assad caiga debido al empeoramiento de la situación económica».[7]
[1] Cbnc.com, 19 de febrero, 2021.
[2] Washingtonpost.com, 6 de febrero, 2021.
[3] Twitter.com/hadialbahra, 22 de febrero, 2021.
[4] No logramos encontrar evidencias a tal cita.
[5] Al-Arabi Al-Jadid (Londres), 8 de febrero, 2021.
[6] Al-Ain.com, 9 de febrero, 2021.
[7] Al-Arabi Al-Jadid (Londres), 18 de febrero, 2021.