Nota: Desde que se publicó este artículo, el número de muertos en la masacre ha aumentado de 900 a al menos 1200.

En una mañana de Shabat y un feriado religioso, el 7 de octubre, agentes de Hamás invadieron Israel y llevaron a cabo un ataque de los Einsatzgruppen de Hamás.[1] Esta guerra no debe compararse con la Guerra de Yom Kippur de 1973, cuando Israel fue sorprendido por ejércitos invasores de estados árabes. Los agentes de Hamás tampoco pueden ser comparados con los terroristas del Estado Islámico.

La misión de Hamás era llevar a cabo un ataque típico de los Einsatzgruppen de Hamás: persiguieron a mujeres, hombres, niños, sobrevivientes del Holocausto y ancianos judíos, y los asesinaron con una crueldad indescriptible.

Se difundieron para consumo público vídeos de los horrendos crímenes cometidos por Hamás. MEMRI está creando un archivo cuasi-Yad Vashem de las atrocidades, para que nadie olvide y a nadie se le permita olvidar.

El director ejecutivo de Meta, Mark Zuckerberg, que es judío, tiene la política de no permitir que estas atrocidades se publiquen en sus plataformas. Con esta política Meta no permite que se recuerde a las víctimas de los Einsatzgruppen de Hamás en Israel.

MEMRI asumirá este papel de conmemoración, en un nuevo centro de documentación cuasi-Yad Vashem. El número de muertos israelíes (según el último recuento, más de 900) equivale a 34.000 muertes estadounidenses. Además, más de 2.600 personas están heridas y Hamás mantiene como rehenes a más de 100 israelíes en Gaza. El 11 de septiembre, Al Qaeda asesinó a casi 3.000 estadounidenses.

¿Cómo fue posible que Hamás desarrollara una fuerza de ejecución que pudiera deambular libremente dentro del territorio israelí?

Personalmente advertí sobre la probabilidad de una guerra en mi ensayo del 31 de agosto de 2023 en MEMRI.org, titulado Señales de posible guerra en septiembre-octubre. Si bien el régimen terrorista islamista de Irán proporciona a Hamás apoyo y entrenamiento militar y estratégico, el verdadero poder que permitió esta operación fue la familia Aal Thani que gobierna Qatar.

La familia Aal Thani es la facilitadora de Hamás. De hecho, su apoyo a Hamás constituye un ataque directo al Estado de Israel. Qatar financió la construcción del imperio militar de Hamás en Gaza: una enorme ciudad subterránea con cuarteles militares y túneles de conexión; un enorme arsenal de misiles; 30.000 asesinos y las municiones necesarias para una guerra extensa; en resumen, todo lo que se necesitaba para el ataque del 7 de octubre.

La trágica respuesta es: fue una política de más de una década bajo el gobierno del primer ministro israelí Binyamin Netanyahu la que dio a Qatar mano libre para enviar 1.500 millones de dólares a Hamás, lo que le permitió construir su imperio militar.

La explicación de esta política antiisraelí fue la presunción de que el gobierno israelí es tan sabio que está comprando a Hamás, y el silencio de Hamás, con dinero de otros. Pero esto nunca sucedió. En cambio, Netanyahu vendió nuestras vidas y nuestra seguridad por una ilusión imprudente. Y el acuerdo con Qatar puede haberle servido a Netanyahu en otras áreas.

Hamás no es la única organización islamista que Qatar ha apoyado a lo largo de los años. La familia Aal Thani apoyó al cerebro de los ataques del 11 de septiembre, Khalid Sheikh Mohammed. Tal como escribiera Richard Clarke, asesor en antiterrorismo de los presidentes Clinton y H.W. Bush: «Si los qataríes nos hubieran entregado [a KSM] como se solicitó en 1996, el mundo podría haber sido un lugar muy diferente». Al momento de escribir este artículo, Qatar financia a los terroristas que viven en Doha, según David Cohen – ex subsecretario del Tesoro de Estados Unidos para Terrorismo e Inteligencia Financiera – y según los registros de la Oficina de Naciones Unidas contra el Terrorismo (UNOCT).

Qatar también apoya a los talibán, a ISIS y al Frente Nusra, vinculado a Al Qaeda. Actualmente, se están llevando a cabo demandas contra la financiación del terrorismo por parte de Qatar en Europa y Estados Unidos.

Qatar es un Estado patrocinador del terrorismo y debería ser proscrito como Estado terrorista en todas las listas de sanciones internacionales. La familia Aal Thani ha logrado ocultar su delito de apoyo a organizaciones terroristas islamistas gracias a su enorme riqueza, que utilizó como herramienta durante muchos años, a pesar de que sus crímenes incluían la responsabilidad por el 11 de septiembre.

El último apoyo de Qatar al ataque de los Einsatzgruppen de Hamás en Israel también se hizo evidente en su canal de televisión Al-Jazeera, que se pone al servicio de los dirigentes de Hamás –el comandante Muhammad Deif y el «portavoz militar» Abu Ubaida- cuyas declaraciones han difundido en numerosas ocasiones, tal como lo hicieron con los discursos de Osama bin Laden antes y después del 11 de septiembre. Para vergüenza del gobierno israelí, Al-Jazeera no ha sido detenido ni por medios administrativos ni legales. Con el ataque de los Einsatzgruppen de Hamás y con la matanza de supervivientes del Holocausto, fueron demasiado lejos. El juego ya ha terminado.

Esto es algo que ni el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, hijastro del Dr. Samuel Pisar, estadounidense fallecido y sobreviviente del Holocausto nacido en Polonia, Embajador Honorario de la UNESCO y Enviado Especial para la Educación sobre el Holocausto, ni el presidente Biden nunca perdonarán, a menos que hayan perdido toda consideración moral

*Yigal Carmon es presidente y fundador de MEMRI.

[1] El Einsatzgruppen era una organización nazi diseñada para localizar a los judíos y exterminarlos, mientras la máquina de guerra de Hitler conquistaba territorio en toda Europa. Yadvashem.org/untoldstories/documents/GenBack/Einsatzgruppen.pd.