El 17 de enero, 2022 los rebeldes houties en Yemen dispararon drones y misiles contra el aeropuerto de Abu Dabi asesinando a tres personas y causando grandes daños. En respuesta a este ataque y a los continuos ataques perpetrados por los houties contra Arabia Saudita, los medios de comunicación saudíes y emiratíes publicaron varios artículos criticando duramente a la administración Biden, acusándola de adoptar una política débil frente a Irán y ante los houties. Los autores de los artículos, incluyendo a altos periodistas y editores de diarios, acusaron a la administración Biden de adoptar posturas muy débiles hacia Irán y de «cortejarlo» y «perseguirlo» para que firme un nuevo acuerdo nuclear que, según dijeron, le permitirá eventualmente a este país obtener armamento nuclear. Esta debilidad, agregaron junto a la insistencia de Biden en emplear diplomacia frente a Irán y su negativa de amenazar con acciones militares en su contra, alientan a Irán y a sus delegadas milicias-estado en la región a exacerbar su agresión.
El silencio de los Estados Unidos ante la situación en Yemen, afirman los artículos, equivale a abandonar y traicionar a sus aliados, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos. Condenando la decisión de Biden al comienzo de su mandato de eliminar a los houties de la lista de organizaciones terroristas y afirmando que esta es una de las razones por el empeoramiento de sus ataques contra Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos, los escritores imploraron a la administración Biden que rectifique tal error volviendo a colocar a los houties en la lista de organizaciones terroristas.
Lo siguiente son extractos de algunos de estos artículos:
Editor de diario emiratí: La negativa estadounidense de amenazar con una acción militar alienta a Irán a continuar con sus políticas deshonestas
Karam Na’ama, editor del diario emiratí en Londres Al-Arab, escribió el día 18 de enero, 2022 bajo el titular «Existe la presencia de 40.000 soldados estadounidenses aquí, pero no hay ninguna guerra en la región»: «Según la data registrada y publicada, existen 40.000 efectivos estadounidenses en los países árabes del Mediterráneo oriental, en Bahréin, en los Emiratos Árabes Unidos, Qatar, Kuwait, Irak, Siria y Jordania. También existe una continua actividad en la base aérea estadounidense situada en Jordania, a la que las fuerzas previamente estacionadas en Arabia Saudita han sido transferidas. En Irak, aún permanecen estacionados 2.500 soldados estadounidenses y 900 soldados están siendo desplegados en la zona noreste de Siria y en la base Al-Tanf cercana a la frontera entre Irak y Jordania…
“Sin embargo, nadie en el Pentágono discute la opción de guerra en el contexto iraní, a pesar de toda la presión israelí para amenazar con tal guerra. Este enfoque estadounidense es parte de una política de 40 años que refleja la ignorancia de los estadounidenses respecto a la esencia de la teocracia iraní. Este enfoque no puede atribuírsele únicamente al fracaso de Donald Trump o a la debilidad de Joe Biden…
“La negativa estadounidense de hacer sonar los tambores de guerra alienta a Irán a continuar con su deshonesto comportamiento… lo que profundiza la preocupación de los aliados estratégicos de Washington, principalmente Arabia Saudita, respecto a la actual hegemonía iraní sobre los países de la región…
“Teherán mantiene su influencia política y militar sobre toda la región, ya que ha fortalecido sus lazos con aliados clave en gobiernos y milicias en países como Irak, el Líbano, Siria y Yemen. El peligro también es que Irán ahora se atreva a intensificar su política de riesgos. Aquellos responsables de tomar las decisiones iraníes puede que entiendan que aún pueden ejercer su influencia a través de su método habitual de operaciones y pueden continuar organizando más y más provocaciones, mientras que Estados Unidos no podrá hacer mucho en términos de sanciones…
“Hace varias semanas, la marina estadounidense capturó un cargamento de armas en el Golfo, a bordo de un barco pesquero que procedía de Irán y aparentemente se dirigía a entregarle dichas armas a los rebeldes houties en Yemen. Pero, ¿qué pasó luego? los altos comandantes militares se convirtieron en diplomáticos y transmitieron mensajes apaciguadores, que no preocuparon mucho a Irán, a pesar de que las armas destinadas a los houties constituyen prueba condenatoria y decisiva a los esfuerzos de Irán para socavar la seguridad vital de la región.
“Teherán recibe mensajes indiferentes de los estadounidenses respecto a la amenaza que representan Irán y sus milicias afiliadas a los países de la región. Estos mensajes son transmitidos por los medios de comunicación en la periferia de lo noticioso, más de lo que constituye ser una estrategia de la administración Biden…”[1]
Periodista emiratí: la administración Biden permite que Irán juegue con la región como a este mejor le plazca
En un artículo publicado el 19 de enero, 2022 titulado «¡Los houties han cruzado el punto de no retorno!», el periodista y analista político Maher Al-Kayyali escribió lo siguiente: «Lo que está sucediendo en la arena yemení y en los países vecinos significa que los terroristas han cruzado la línea. Las bandas Houtie, siendo estas un brazo de la política expansionista de Irán en la región, están allí para realizar los objetivos iraníes y chantajear a todos los países que rechazan firmemente los intentos por parte de Irán de realizar su objetivo de obtener armas nucleares, lo que seguramente le permitirá expandirse aún más… La decisión anterior de los Estados Unidos de designar a los houties como organización terrorista fue muy sabia. Este tenía como destino contener a estas bandas de mercenarios y debería aplicarse a cualquier elemento del mundo que apoye a los terroristas.
«Es hora de que los árabes tomen medidas, porque el cobarde ataque terrorista que ocurrió hace unos días en nuestro amado país, los Emiratos Árabes Unidos y que tuvo como objetivo las instalaciones civiles en el área de Musaffah en Abu Dabi y lo que está sucediendo en el país hermano Arabia Saudita (es decir, los ataques perpetrados por los houties), están destinados a arrastrar a los países de la región hacia una confrontación mucho mayor. Nuestro sabio liderazgo comprende los posibles resultados de esta confrontación y este está haciendo esfuerzos para ahorrarle a la región todas estas repercusiones Por lo tanto, la Liga Árabe debe invertir todo su poder y esfuerzos en reclutar un apoyo global de todas las organizaciones y organismos internacionales, para frenar así este terrorismo y a aquellos que apoyan estas acciones y traigan estabilidad y seguridad a la región, siendo estas parte integral de la estabilidad y seguridad global…
“La crisis está empeorando debido al ritmo glacial de la respuesta internacional a lo que Irán y sus delegadas milicias agentes hacen en más de un país árabe. La excusa de los Estados Unidos y Occidente es la necesidad de volver al acuerdo nuclear y al engañoso flujo y reflujo de las relaciones entre Irán por una parte y Estados Unidos y algunos estados europeos por la otra, en este contexto le han permitido a Irán hacer lo que le plazca y jugar a su antojo cada vez más en la región.
“La actual administración estadounidense no moverá un solo dedo ante ningún tema en la agenda. Además, al comprometerse verbalmente con Irán, esta le ha brindado a este país la oportunidad única de enriquecer uranio a un nivel que le permitirá alcanzar capacidades para la obtención de armamento nuclear.
“Parece ser de que lo que está sucediendo tras bastidores entre Estados Unidos e Irán es peor que el acuerdo en sí mismo, ya que esto le permitirá a la administración Biden realizar el plan del mentor de Biden, el ex-presidente estadounidense Obama y del Partido Demócrata, que tiene la costumbre de utilizar países, pandillas y milicias tales como Irán y sus milicias, para implementar su política y lograr sus objetivos, especialmente en nuestra región y para ajustar cuentas globales utilizando el terrorismo y socavando la seguridad, la paz y la estabilidad…”[2]
Columnista en diario saudita: Biden, al cortejar a Irán, puede repetir el error de Obama; Estados Unidos y Europa traicionan a sus aliados
Emile Amin, columnista egipcio del diario saudí Al-Sharq Al-Awsat, escribió: «Al comienzo de su mandato, el presidente de los Estados Unidos Joe Biden, eliminó a los houties de la lista de grupos terroristas en un intento por poner fin a la guerra en Yemen a través de medios diplomáticos y ello a pesar de las actuaciones descaradamente atroces de esta milicia terrorista. Los houties no tardaron en reaccionar ante esta medida exacerbando sus ataques contra sus vecinos, aliados estos de los Estados Unidos…. Parece ser, sin embargo, que las noticias de esta reacción (houtie) nunca llegaron a oídos de la administración estadounidense, que se enfrenta a una crisis interna y a una derrota diplomática en el ámbito foráneo. ¿Tomó el presidente estadounidense esta medida de retirar a los houties de la lista terrorista para apaciguar al jurisprudente iraní (es decir, a Jamenei? ¿Quién es el que toma las decisiones cuando el tema trata de los houties?
“La actual situación hace que esta pregunta sea superflua, especialmente cuando Estados Unidos se encuentra persiguiendo a los ayatolás, tratando de que firmen un nuevo acuerdo nuclear que sin duda le permitirá a Irán convertirse tarde o temprano en una potencia nuclear…
«Me gustaría preguntarle a la administración de Biden: si los houties no son una milicia terrorista, ¿cómo podemos denominar sus acciones, que incluyen bombardear deliberadamente hospitales, reclutar niños por la fuerza y ??enviarlos al frente de batalla, intentar asesinar a todos los miembros del gobierno yemení reconocido internacionalmente y bombardear aeropuertos civiles y refinerías petroleras? ¿No entiende el presidente estadounidense que, sin una confrontación para aplastar a los houties, Irán completará su plan en Yemen al momento en que los houties tomen el control de este y que este plan se basa en crear una entidad similar al grupo Hezbolá libanés, pero esta vez en la zona del frente sur de Arabia Saudita?…
“El silencio estadounidense y europeo ante la situación en Yemen ha llegado al punto de traicionar y abandonar verdaderamente a los aliados que, en el pasado, han demostrado ser los mejores aliados de Washington en tiempos de grandes crisis…
“La administración Biden no solo debe declarar nuevamente a los houties de organización terrorista, sino también formular una visión política para abordar de manera integral la situación en Yemen, a través de una serie de medidas, desde hacer cumplir el embargo de armas sobre los houties hasta apoyar al gobierno legítimo y todo esto sin manipulaciones que equivalgan a cortejar a Irán…”[3]
Figura de los medios de comunicación saudíes Mamdouh Al-Muhaini: Biden trata de renovar el acuerdo con Irán para asegurarse otro mandato en el cargo
Destacado periodista saudita Mamdouh Al-Muhaini, director de los canales de televisión Al-Arabiya y Al-Hadath en Arabia Saudita, también abordó el tema de la política de Irán que realiza la administración Biden. Lo siguiente son extractos de la versión en inglés de su artículo, publicado en el portal Al-Arabia:
«La secretaria de prensa de la Casa Blanca Jen Psaki, recientemente se paró detrás de su podio y dirigió su ira hacia la administración estadounidense anterior, cuyo retiro del acuerdo nuclear alentó a Teherán a adoptar una política mucho más hostil, según Psaki. Incluso aquellos que simpatizan con el régimen de Irán no pueden respaldar esta afirmación, ya que la política expansionista de Irán comenzó mucho antes que Trump y se mantuvo mucho después de su periodo en el gobierno.
“Este es uno de los errores clave cometidos por la actual administración. Incluso un año después de salir de la Casa Blanca, la administración Trump todavía está siendo utilizada por su sucesor como chivo expiatorio de todas las crisis extranjeras a las que este último ha contribuido, si no es que la causa. Es más, la administración Biden halla estos justificativos y excusas a su política exterior para poder así seguir realizando su visión en todo el mundo. Este es el motivo principal detrás del enfoque acusatorio hacia el trumpismo, a mi manera de ver.
“En Afganistán, la administración Biden utilizó la misma estrategia poco convincente luego de la caótica retirada ocurrida en el aeropuerto de Kabul y las desgarradoras escenas de civiles que luchaban por sostenerse a los aviones que despegaban. Para ese momento, Biden dijo que esta retirada era inevitable debido a las promesas hechas por su antecesor, aunque pudo haber revocado esos compromisos o desestimarlos tal como lo hizo con otros dosieres, como el de inmigraciones, el de economía o el del Covid-19.
«Ahora mismo se está desarrollando el mismo escenario con las milicias houties, ya que la culpa es dirigida hacia otros. Pero ahora está del todo claro que la eliminación de los houties de la lista negra terrorista un mes después de su inclusión alentó a las milicias y las empujó a enviar cientos de drones y misiles en dirección a Arabia Saudita y, últimamente, en dirección a los Emiratos Árabes Unidos…
“Biden no es el mismo de hace 20 años. Esto no significa necesariamente que haya cambiado sus pensamientos o convicciones, sino que está dispuesto a renunciar a estos por objetivos personales muchos más grandes. La segunda razón y la más importante, es que muchas de las figuras de la administración Obama que creen firmemente en el acuerdo nuclear con Irán se han unido a la administración Biden.
«El acuerdo político en este contexto es bastante claro: un retorno al acuerdo nuclear significa un renacimiento del mayor éxito de la administración Obama en el área de política exterior. Esto, a su vez, es sinónimo de promover políticas diferentes en el Medio Oriente, una que se base en la retirada, el incumplimiento de los compromisos adquiridos con los aliados o el reparto de la región con Irán, tal como ha afirmado personalmente Obama.
“A cambio, la nominación de Biden para un segundo mandato está de hecho totalmente garantizada. Tal nominación es muy difícil de imaginar sin un fuerte cinturón demócrata que lo apoye, uno que solo Obama, el amado líder de muchos demócratas, puede movilizar.
Este conflicto de intereses entre demócratas y republicanos es comprensible y legítimo y las emociones no tienen cabida en este. Todas las excusas que repiten Jen Psaki y otros no son más que ilusiones para desviar la mirada de las ambiciones y objetivos personales. Poco importan las repercusiones sísmicas, ya que el colapso se producirá lejos del ala oeste de la Casa Blanca, donde el presidente se sienta detrás de su oficina con sus estrategas que diseñan su próxima campaña electoral».[4]
[1] Al-Arab (Londres), 18 de enero, 2021.
[2] Al-Bayan (Emiratos Árabes Unidos), 19 de enero, 2022.
[3] Al-Sharq Al-Awsat (Londres), 22 de enero, 2022.
[4] English.alarabiya.net, 20 de enero, 2022.