El 24 de julio del 2013, el diario libanés Al-Safir publicó un artículo por Ghufran Mustafa sobre un vídeo en YouTube, traducido y publicado por MEMRI TV , en el que Nada Al-Ahdal de 11 años de edad, expresa su oposición a la intención de su familia de casarla a su corta edad.
Lo siguiente son extractos del artículo:
«…Nada Al-Ahdal, la joven niña yemení de 11 años de edad, se sienta ante la cámara junto al lente que enmarca su rostro. Nos relata su historia en sólo tres minutos. En tres minutos, ella dice mucho. Dice lo que todo el mundo debe entender: ‘No tengo ningún problema con la muerte, pero no permitiré que me casen’.
«Ella fue filmada durante unos minutos con una cámara de un teléfono celular, y el fue subido a Internet el 8 de julio, 2013. El canal de MEMRI en YouTube dio a conocer el [clip] hace tres días, y tiene más de cinco millones de visitas. En días recientes, la historia de Nada se ha convertido en el tema [del día] en todos los medios de comunicación del mundo, que dedican varios artículos a la historia de la joven valiente.
«Su historia es otra marca de vergüenza en la frente de los que piensan que tienen el derecho a decidir el destino de las niñas, alegando que de que están actuando preocupados por el futuro de [estas] – especialmente en Yemen, donde la práctica de casar a niñas es generalizada.
«Las palabras de Nada transmitieron un mensaje de condena directa a todo este sistema. Esta chica está haciendo caso omiso a las consecuencias de sus palabras, porque su pequeño y hermoso rostro es más hermoso que cualquier reacción profunda que caracteriza su sociedad.
«Ella habló con más sinceridad, sabiduría y madurez de las jóvenes de su generación que han sido víctimas de mentes petrificadas. Eligiendo cuidadosamente cada palabra, dijo cómo se había escapado, y que había decidido renunciar a todo – particular al seno de sus padres – para no perderse los sueños que le esperan, y lo [bueno] que sabe tendrá…
«A ella se le ve contenta sobre lo que está diciendo, y sobre su decisión de huir a la casa de su tío, ella dice: ‘Me escapé de mi familia, no quiero estar más con ellos ¿Qué crimen cometieron los niños para que los casen de esta manera? Me las arreglé para encontrar una solución a mi problema huyendo a la casa de mi tío. Pero la inocencia de algunos de los niños no les permite resolver sus [propios] problemas. Podrían morir, suicidarse, porque [sólo] son niños, no saben nada, algunos de ellos ni siquiera asistieron a [la escuela] para poder educarse».
«El canal Al-Miyadeen presentó un informe investigativo sobre la reunión de la familia con su hija [Nada, luego que escapara de casa] y su padre hizo una promesa de que no la casaría hasta que alcance la edad legal [en Yemen, 15 años]. Pero, ¿qué puede prometérsele a esta chica, y a aquellas como ella, de que no habrá tiempos de pobreza y privación en la familia, cuando [familias] pondrán a las niñas en casa de un ‘novio’ pensando los salvaran de la pobreza?
«El problema nunca es la pobreza, o inseguridad, es la mentalidad que se resiste a comprender lo que significa cuando un hombre está a solas con una chica que no conoce su propio cuerpo, y ni siquiera saber que [ese cuerpo] posee tales deseos…
«Nada es una de las pocas chicas que son la conciencia para sus sociedades – sociedades a las que debe recordársele cada día que [toda] persona nace con un derecho [inalienable] [a la libertad] que nadie puede coartar por ningún motivo. Nada concluyó con palabras que resuenan a través de su país, [hasta sus] aldeas más distantes: «Mejor es estar muerta. Quieren casarme? Me mataré, tal cual. No voy a vivir con ellos. Este [matrimonio forzado] no tiene parangón. Esto es criminal, simplemente criminal'».