En su columna publicada el 24 de septiembre, 2019 en el diario jordano Al-Dustour, ‘Abd Al-Hamid Al-Hamshari escribió que los ataques del 11-S fueron planeados por el Consejo de Seguridad Nacional estadounidense con el objetivo de desestabilizar el Medio Oriente y prevenir el incremento de una potencia árabe que competiese con los Estados Unidos por la hegemonía en esa región.
Al-Hamshari, miembro de varias organizaciones jordanas de derechos humanos,[1] agrega que desde que ocurrió el 11-S, Estados Unidos ha seguido sembrando el caos en la región a través de organizaciones terroristas tales como Al-Qaeda y el EIIS, que este estableció, con el propósito de delinear nuevamente sus fronteras a lo largo de líneas étnicas y sectarias y servir los intereses de su aliado, Israel.
Cabe mencionar que, varios días antes del aniversario del 11-S, el diario Al-Dustour publicó otro artículo sobre el tema de las teorías de conspiración en el que afirmaba que los musulmanes eran las verdaderas víctimas de los ataques[2].
‘Abd Al-Hamid Al-Hamshari (Fuente: Facebook.com/abuzaher47)
Lo siguiente son extractos del artículo de Al-Hamshari.[3]
«El 18avo aniversario de los eventos del 11-S pasó silenciosamente, a pesar de la contribución de estos eventos al caos en el Medio Oriente y a pesar de la agitación que estos causaron en la estrategia estadounidense en el Medio Oriente, [una turbulencia] que perjudicó a todos los países árabes, sin excepción alguna y en particular a la causa palestina. [Luego del 11-S, Estados Unidos] comenzó a tomar medidas para fracturar así la unidad árabe y hacer que [la opinión pública] se vuelva contra los países que se oponían a su hegemonía en el Medio Oriente, en primer lugar Irak y Libia. Luego vino un golpe contra la seguridad y la estabilidad de los países influyentes de la región, tales como Siria, Egipto y la Península Arábiga. [Al mismo tiempo, Estados Unidos] cultivó al estado de la entidad sionista [es decir, Israel], con las medidas que este tomó luego de la destrucción de las Torres Gemelas en Nueva York, que [más tarde] se vio reforzado por los pasos dados por Trump – y le dio a [Israel] la oportunidad de mejorar el desequilibrio en los territorios palestinos ocupados a su favor y construir el hogar judío a expensas del hogar palestino, que ya no tiene cabida en el tonto léxico [de Donald Trump].
«Los pasos tomados por Estados Unidos contribuyeron a la interferencia en los asuntos de algunos estados y en la ocupación de otros estados, que fueron dejados al caos, con los Estados Unidos presidiendo [dicho caos] y financiando a quienes llevaron a cabo su agenda. Todo esto con la intensión de dejar [a estos países] abiertos al robo, la usurpación, el asesinato, expulsiones y destrucción, tal como está sucediendo en Irak, Libia, Siria y Yemen. [Estados Unidos también ayudó] a aprovecharse de los recursos de otros países, convirtiéndolos en objetivos de las fuerzas regionales que este estableció a fin de debilitar a estos países y someterlos a las agendas de este estado canalla [los Estados Unidos], con el propósito de preparar el terreno para una intervención y sembrar la destrucción dentro de estos.
«El caos que vino detrás en la región debilitó a los diferentes regímenes, destruyó su poderío económico y militar y los enredó en amargos [conflictos] nacionales y sectarios con el objetivo de remodelar las fronteras a lo largo de las líneas sectarias y étnicas, después de más de un siglo [desde que fue distado el Acuerdo Sykes-Picot]. [Este caos] es parte del Acuerdo del Siglo, que un grupo de halcones estadounidenses se esfuerza por implementar para complacer a los ciudadanos [estadounidenses] y su aliado, el estado hebreo y para atormentar y hostigar a los países de la región.
«Esta política está siendo aplicada por los halcones del Consejo de Seguridad Nacional [de los Estados Unidos] con el propósito de socavar la seguridad y estabilidad de todos estos países. Esto demuestra sin lugar a dudas que elementos en los Estados Unidos planearon y ejecutaron los eventos del [11-S] para culpar a los árabes y musulmanes, quienes fueron blanco de su codicia…
«El ciudadano estadounidense fue reclutado para odiar a los árabes y musulmanes a través de una orientación sistemática de los medios de comunicación, lo que lo llevó a ver los eventos del 11-S como los peores eventos en la historia de su país… Por lo tanto, los estadounidenses se vengaron de los árabes y del Islam, porque los medios de comunicación, controlados por los sionistas, afirmaron que los autores eran árabes musulmanes…
«Con el propósito de derrumbar las dos torres tuvo que haber un elemento de inteligencia sumamente efectivo que pudiera planear una operación terrorista de este tipo. Seguramente fue planeado por el Consejo de Seguridad Nacional de los Estados Unidos que aparentemente decidió extender su control hacia todo el Medio Oriente para despojarlo de cualquier elemento poderoso e influyente que pudiese cambiar el equilibrio de poder en favor de una creciente fuerza árabe que competiría con los Estados Unidos por la hegemonía en la región… Por lo tanto, los Estados Unidos actuaron para desestabilizar a la región a través de organizaciones terroristas tales como Al-Qaeda y el EIIS, que este creó e impuso a quien este deseara en el mundo y especialmente sobre los países árabes, para que destruyeran a estos países en beneficio del estado hebreo, siendo este el puesto de avanzada de los Estados Unidos en el Medio Oriente…
«La serie de eventos y cambios que tuvieron lugar en la región eliminó de un plumazo el tema palestino del centro de atención árabe, regional e internacional y le brindó a la entidad sionista la oportunidad de profundizar su desequilibrio dentro de los territorios ocupados a su favor. Si esta situación persiste, mientras los árabes están preocupados por los peligros que amenazan a sus países y mientras continúa el cisma [interno-] palestino y la inclinación estadounidense a favor del gobierno de ocupación, Palestina y el pueblo palestino desaparecerán sin dejar rastro en el mapa político del mundo…
«Existe consenso en Occidente de que la islamofóbia, o la industria occidental de odio hacia las comunidades musulmanas, está en constante aumento y que la derecha radical en Occidente y en la entidad hebrea es probablemente la que mayormente se beneficia de esto. Están los árabes, [ambos] elementos populares como los actores estatales – conscientes de la actual amenaza existencial [a la que se enfrentan] y del plan sionista-europeo-estadounidense en contra de los países de la región y sus pueblos?»
[1] Al-Hamshari es miembro de la Unión Nacional de Jordania para la Promoción de la Libertad y el Método Democrático. Según su página Facebook (@ abuzaher47), este también está empleado por el Centro Árabe para los Derechos Humanos y la Paz Internacional en Jordania (CADHPIJ).
[2] Véase la serie de MEMRI Despacho Especial No. 8272 – Periodista jordano: Los musulmanes son las verdaderas víctimas del 11-S – desde ese entonces, seis millones de musulmanes han sido asesinados en guerras contra ellos lanzadas por Occidente, 11 de septiembre, 2019.
[3] Al-Dustour (Jordania), 24 de septiembre, 2019.