Ante la cercanía de la fecha del décimo aniversario del estallido de la guerra en Siria, Ayman ‘Abd Al-Nour, adversario sirio cristiano residente en los Estados Unidos publicó un artículo en el diario de Londres Al-Sharq Al-Awsat pidiendo por la participación estadounidense en la resolución de la crisis de Siria. Este instó al presidente Joe Biden a liderar un plan multifacético integral que transformará a Siria en un estado próspero y pacífico y que no solo beneficiará a Siria sino que también servirá a los intereses estadounidenses en la región. ‘Abd Al-Nour, quien anteriormente estuvo asociado al presidente sirio Bashar Al-Assad e incluso se desempeñó como su asesor personal, señaló que muchos sirios están a favor de una participación significativa de los Estados Unidos en la reconstrucción de Siria y agregó que el primer paso debe ser que los Estados Unidos y Rusia acuerden mutuamente la necesidad de reemplazar a Assad. También recomendó nombrar a un enviado especial estadounidense para Siria[1] que formará equipos, incorporando a opositores sirios, para que de esta manera se pueda abordar la crisis en las diversas áreas. El plan, agregó, también debe incluir un acuerdo de paz entre Siria e Israel para así determinar el estatus del Golán, así como también un medida para federalizar Siria.
Cabe mencionar que el artículo fue publicado en medio de preocupaciones en la oposición siria de que resolver la crisis de Siria no es prioridad máxima para la administración Biden[2].
Ayman ‘Abd Al-Nour (Fuente: Al-Arab, Londres, 13 de agosto, 2020)
Lo siguiente son extractos del artículo escrito por Ayman ‘Abd Al-Nour:[3]
«Imaginemos a Siria no como un país devastado por la guerra, sino como un tren que se precipita sobre vías en ruinas y que se dirige estrepitosamente hacia un infierno. Según la Organización de Naciones Unidas (ONU), el conductor oficialmente reconocido de ese tren sigue siendo Bashar Al-Assad. Cada uno de los vagones que tambalean detrás de este está cargado con su propia variedad de problemas… Siria no puede verse a través de un solo prisma y su situación no puede reducirse a la frase de ‘un gran enredo’, para cada uno de los vagones del tren sirio se requiere un enfoque muy particular a fin de poder volver a encarrilarlo. Por lo tanto, la solución requerida es una colección de soluciones, todas muy diferentes, ya que la situación en Siria está profundamente estratificada. Esto no solo implica una guerra indirecta entre fuerzas externas con agendas en competencia, sino también una guerra entre actores locales y regionales que compiten por el control y las ganancias, A esto podemos agregarle el empeoramiento de la crisis económica y la pandemia del Covid-19… Por lo tanto, los problemas de Siria no pueden resolverse todos utilizando solo una estrategia.
«Quizás lo que los asesores y responsables políticos no le han dicho a Joe Biden es que muchos en el movimiento de protesta popular sirio están a favor de la participación activa de Estados Unidos en todos los aspectos principales de la crisis en Siria. Estos son grupos civiles desarmados. Son independientes en su pensamiento y se niegan a aceptar cualquiera de las narrativas – del régimen sirio, del grupo militante yihadista Hay’at Tahrir Al-Sham que controla partes del noroeste de Siria, de los kurdos – o de cualquier otro enfoque hegemónico.
«Todos los días me relaciono con cientos de personas en esas regiones de Siria las cuales están listas y dispuestas a cooperar con los Estados Unidos para que tome medidas y resuelva la crisis y esto, es decir, su cooperación hará mucho más fácil llevar a cabo esta tarea. Una de las cosas que estos consideran como más importante es un futuro estable y una buena educación para sus hijos. Ellos desean escuelas e instalaciones educativas que empleen los métodos de enseñanza estadounidenses, como parte de su esfuerzo por garantizar un mejor futuro para las generaciones venideras.
‘¿Cuál debe ser el primer paso? El tren seguirá avanzando hacia el abismo y ninguno de sus vagones llegará a la estación correcta, a menos que reemplacemos al conductor, Bashar Al-Assad. Esto puede suceder fácilmente si Estados Unidos y Rusia se ponen de acuerdo en ello, ya que las dos superpotencias pueden cooperar y ayudar a establecer un gobierno interino, basado en el modelo utilizado en Sudán. Obviamente, esta decisión no arreglará el caos en los vagones del tren, pero reducirá la velocidad del tren y regulará su curso y dirección.
«Segundo, Estados Unidos debería nombrar a un enviado especial para Siria, tal como lo hizo en el caso de Irán y Yemen. Yo tengo plena fe en el secretario de Estado estadounidense Antony Blinken, en su corazón y mente y en su capacidad de hacer lo correcto por Siria. El enviado puede formar equipos para así abordar los problemas en las varias regiones de Siria, cada una con su propio personal, presupuesto y objetivos. Estos equipos deben incluir representantes del movimiento de protesta popular sobre el terreno en Siria, cuya voz debe ser escuchada. Otro equipo actuará a nivel general, con el objetivo de instar al gobierno interino sirio a celebrar unas elecciones libres y justas, además de dirigir la enorme tarea de reconstrucción, que puede y debe generar ganancias a las empresas estadounidenses.
Además, deben levantarse las restricciones y sanciones en contra de Siria respecto a las áreas de energía y de la construcción. Para que esto suceda lo antes posible y cumpla con las demandas de los funcionarios estadounidenses para que Siria se abstenga de realizar cualquier acción hostil hacia sus vecinos, el tema de las áreas del suroeste es decir, los Altos del Golán debe resolverse en cooperación con Israel. Nosotros queremos beneficiarnos del gran plan para reconstruir Siria y resolver rápidamente el conflicto sirio-israelí poniendo fin a la ocupación israelí y firmar un acuerdo de paz, con el propósito de incluir la zona de los Altos del Golán en este plan y convertirlo en un oasis tecnológico al servicio de todos los países de la región.
Además, es imperante transformar el actual modelo sirio de gobernaciones en un modelo basado en estados federados, otorgándole de esta manera a los gobernadores electos de cada estado amplios poderes para promover planes estratégicos de desarrollo dentro de las instituciones del estado en colaboración con cualquier país que desee financiar e implementar muchos proyectos allí – tales como los estados del Golfo, los países de la Unión Europea, los Estados Unidos, Japón o Turquía. Irán tendrá la oportunidad de desempeñar un papel económico, en lugar de militar o político, en Siria una vez que sus milicias se retiren totalmente del país, Rusia también puede jugar un buen papel, si es que apoya esta solución.
«Este enfoque multifacético allanará el camino para que los profesionales sirios más capacitados regresen a salvo a su país y garantizará que se satisfaga su necesidad de estabilidad. Este plan también sirve a los intereses y a la seguridad nacional de los Estados Unidos, ya que el EIIS no encontrará una sociedad que lo proteja en Siria y esto de hecho ayudará a debilitarlo. Hezbolá también perderá sus cartas de triunfo y la influencia de Estados Unidos en las futuras conversaciones con Irán se incrementará, debido a las restricciones ante la presencia iraní en Siria.
«Como sirios, le pedimos al presidente Biden que implemente este plan para que de esta manera ponga fin a esta década de sufrimiento, durante el cual no menos de un millón de personas han perdido la vida… Esta situación no debe continuar. Como miembros de la diáspora siria, especialmente en los Estados Unidos, estamos aquí para apoyarlo a usted Biden y puedo garantizarle que los sirios en Siria esperan ansiosamente este momento también. Esta será una nueva Siria, pacífica y próspera y usted puede liderar el camino para lograrlo».
[1] La administración Biden aún no ha designado un reemplazo permanente a Joel Rayburn, quien ocupó el cargo de enviado especial estadounidense para Siria hasta enero del año 2021 y en su lugar ha nombrado a Aimee Cutrona, subsecretaria adjunta para Asuntos del Levante, como su representante interina para Siria.
[2] Véase la serie de MEMRI Despacho Especial No. 9221 – Elementos en la oposición siria: La administración Biden se apresura a promover el acuerdo con Irán, en lugar de abordar la crisis siria, 10 de marzo, 2021.
[3] Al-Sharq Al-Awsat (Londres), 27 de marzo, 2021.