El 30 de octubre, 2014 el intelectual iraní Mohammad Maleki, ex presidente de la Universidad de Teherán y crítico del régimen iraní, publicó una carta abierta al pueblo de Irán en el diario en la red Roozonline.com. En la carta, se preguntó el por qué los Estados Unidos y los líderes europeos se consternan por las decapitaciones de EIIS y aun así ignoran los crímenes brutales que el régimen iraní ha estado cometiendo desde su creación en contra de su propio pueblo y los pueblos de la región. Maleki argumentó que el régimen iraní, bajo su fundador el Ayatolá Ruhollah Jomeini y su sucesor Ali Jamenei – siendo estos los equivalentes iraníes al líder del EIIS Abu Bakr Al-Baghdadi – son iguales al EIIS ya que también ejecutan a individuos de forma sistemática y violan brutalmente los derechos humanos de muchos prisioneros. Maleki señaló el asesinato en masa de prisioneros iraníes, especialmente de los militantes de la organización opositora Mojahedeen-e Khalq condenados durante la década de 1980 sin tener en cuenta sus derechos y sometidos a torturas físicas y psicológicas. Este afirmó que Occidente incluso ayudó al régimen iraní dándole una mano en Irak tras el derrocamiento de Saddam y dejándolo actuar en contra de los opositores iraníes allí, en colaboración con el entonces presidente iraquí Nouri Al-Maliki, quien es un lacayo iraní.
Maleki de 81 años, quien vive en Irán, es miembro de la Coalición Nacional Religiosa anti-régimen de Irán y columnista del diario reformista Rooz. Sirvió como primer presidente de la Universidad de Teherán luego de la Revolución Islámica y pasó cinco años en prisión por oponerse a la purga de las universidades realizada por Jomeini como parte de su revolución cultural. En el 2001, fue detenido durante seis meses bajo la acusación de subversión contra el régimen y en el 2009 fue arrestado luego de protestar el fraude electoral en las elecciones presidenciales y fue acusado de insultar a Jomeini y a Jamenei. En enero, 2012 fue nuevamente detenido brevemente por hacer propaganda en contra del régimen.
En noviembre, 2012 Maleki publicó una carta acusando a Jamenei de suprimir a la sociedad y asesinar sistemáticamente a sus críticos y opositores y lo responsabilizó por la masacre de miles de sus ciudadanos por parte del régimen. Este le pidió dimitir antes que un levantamiento popular estallara en su contra y por lo tanto poner a salvo a Irán del tipo de derramamiento de sangre que Siria y Libia han experimentado. [1]
A continuación se presentan los principales puntos de su reciente carta de octubre, 2014: [2]
Mohammad Maleki (imagen: Rdfi.org)
«Todos ahora están hablando del EIIS (el Califato Islámico) y sus crímenes. La plática y los artículos sobre los actos de masacre y otros ataques perpetrados por estos asesinos contra los musulmanes me transportan 30 y tantos años atrás y me recuerdan los eventos ocurridos en la [prisión] de Evin, la [prisión] Ghazal Hasar y otras cárceles de Irán bajo el mandato de Jomeini y de Jamenei.
«Me dirijo a ustedes a fin de mejorar su familiaridad con el carácter de los fundadores del actual [régimen] – [Un régimen] que se asemeja al EIIS. Ningún hombre de honor [que apoya] el humanitarismo y la libertad puede tolerar las acciones de aquellos que se hacen llamar a sí mismos el EIIS o dejen de despreciar lo que hacen. [Pero] déjenme que les presente ejemplos de algunas [acciones] que fueron llevadas a cabo en Irán durante los últimos 30 años por el régimen al Mandato [del Jurisprudente] y por ordenes del iraní «Abu Bakr Al-Baghdadi», a fin de revelar [sólo] una gota en el océano de crímenes que fueron cometidos contra el pueblo de nuestra patria y exponer la esencia de aquellos que actualmente se representaron a sí mismos como opositores del EIIS….
«Durante años, la [prisión] Ghazal Hasar fue el lugar donde los prisioneros fueron enviados a servir su sentencia después de que fueron arrestados, interrogados y torturados de maneras inimaginables y luego llevados a juicio (ante tribunales ilegales y sin la presencia de un abogado y el derecho a la defensa, en procedimientos que generalmente duran sólo unos pocos minutos). Los cargos contra estos individuos no justifican su ejecución, [por lo que] fueron condenados a cadena perpetua o a muchos años de cárcel. [Pero] la mayoría de los prisioneros en la prisión Evin y en las otras prisiones fueron [sin embargo] torturados a muerte o ejecutados. Decenas de miles fueron ejecutados en la prisión de Evin durante la década de 1980 y especialmente en 1988. [3] Los prisioneros en Ghazal Hasar fueron aquellos que escaparon vivos de Evin…
«[Las atrocidades cometidas en las prisiones de Evin y Ghazal Hasar] crearon enormes y terribles problemas. Una de las instalaciones, por ejemplo, ahora alberga a 400 mujeres dementes y chicas jóvenes y no saben qué hacer con ellas. Es imposible liberarlas e imposible mantenerlas allí. La mayoría de estas mujeres son producto de las acciones cometidas por [gente como] Hajj Davoud [un funcionario del régimen a cargo de las prisiones] usando [cámaras de tortura conocidas como] «Día del Juicio Final», «la tumba», «la jaula» y «la unidad de vivienda», que Hajj Davoud creó para hacer que los prisioneros renuncien a su pasado…
«Teniendo en cuenta todos estos crímenes que tienen lugar en Irán, Irak, Siria y otros lugares alrededor del mundo, ¿por qué los Estados Unidos y Europa permanecen en silencio o se conforman con condenas superficiales? ¿Por qué es eso, cuando una banda de fundadores del Boko Haram secuestró salvajemente a 270 mujeres y niñas en Nigeria, ni un solo avión norteamericano o europeo, tripulado o no tripulado, realizó una sola acción seria para rescatarlas y [Estados Unidos y Europa] se conformaron con una condena verbal al secuestro? Pero cuando dos estadounidenses y uno o dos europeos son decapitados por el EIIS (un acto mucho más cruel), el mundo entero debe unirse en contra de los crímenes del EIIS’. ¿Por qué [los Estados Unidos y Europa] no consideran hacer lo mismo cuando los norteamericanos le ofrecieron Irak a Irán en bandeja de plata… e Irán, en colaboración con [Nouri] Al-Maliki y sus asociados, persiguieron al pueblo iraquí y a esos iraníes que habían encontrado refugio en Irak [es decir, los miembros de Mojahedeen-e Khalq]?
«Lamentablemente, los actuales gobernantes de Irán intervienen [en los asuntos] de Irak, Siria, el Líbano y Yemen, sumergiéndolos en el desorden, inseguridad y en la guerra. En un momento en que la nación iraní y las naciones de la región sufren de pobreza y corrupción, Abu Bakr Al-Baghdadi y Ali Jamenei ambos pretenden gobernar el mundo islámico y con ello arrastrar a la región hacia la sangre y el fuego. Sinceramente, ¿cuál es la diferencia entre el EIIS y el régimen de la República Islámica?»
[1] Véase MEMRI Despacho Especial No.5095, Intelectual iraní acusa a Jamenei de asesinato sistemático de sus oponentes y fracaso del liderazgo: ‘Deténganse, [o] mañana será su turno!’, 17 de diciembre, 2012.
[2] Roozonline.com, 30 de octubre, 2014.
[3] Según Mojahedeen-e Khalq, en 1988-1989 decenas de miles de sus miembros fueron ejecutados en las cárceles iraníes bajo las órdenes de Jomeini.