A raíz de la reciente ola de sentimientos anti-Islam en Europa, especialmente en Alemania, donde el movimiento PEDIGA[1] ha estado llevando a cabo manifestaciones masivas en los últimos meses contra la «islamización» de Occidente y en contra de la inmigración musulmana al país, los diarios sauditas con sede en Londres Al-Hayat y Al-Sharq Al-Awsat publicaron artículos expresando entendimiento por este sentimiento y responsabilizar a musulmanes radicales de la misma. El columnista de Al-Hayat ‘Aql Al-‘Aql y el columnista de Al-Sharq Al-Awsat ‘Abd Al-Rahman Al-Rashed, el ex director de Al-Arabiya TV, escribieron que el temor al Islam en Europa es debido a las imágenes de asesinato y decapitaciones llevada a cabo por musulmanes radicales en nombre del Islam en todo el mundo, en la mayoría de casos contra otros musulmanes. Ambos llamando a los musulmanes a luchar contra los extremistas y promover el diálogo con las otras religiones monoteístas y con Occidente.

Lo siguiente son extractos de los artículos:


Protesta de PEGIDA en Alemania (imagen: independent.co.uk)

Aql Al-‘Aql: Son los musulmanes radicales que crearon el estereotipo occidental de que el Islam es una religión violenta

En su artículo en Al-Hayat, titulado «Los Judíos Alemanes Defienden el Islam», el columnista ‘Aql Al-‘Aql escribió que el temor de Occidente y la hostilidad hacia el Islam y los musulmanes no es sorprendente ante las imágenes de asesinato y decapitación realizada por los musulmanes radicales. Este añadió que, mientras Occidente está ocupado haciendo descubrimientos científicos que sirven a toda la humanidad, los musulmanes están matándose unos a otros en nombre de la religión. Sin embargo Al-‘Aql se siente alentado por las declaraciones de un líder de la comunidad judía de Alemania, que estuvo junto a los musulmanes ante la hostilidad hacia ellos en el país, y lo ve como una prueba de que la comprensión y el diálogo entre las religiones monoteístas son posibles:

«El Islam y los musulmanes están en un estado de opresión, especialmente en Occidente. En el subconsciente occidental, existe un estereotipo que vincula al Islam con la violencia, el extremismo y el terrorismo. ¿Quién es responsable de este temor en el mundo por el Islam, la denominada ‘islamofobia’?… El mundo atestigua asesinatos y violencia hacia inocentes en nuestro mundo islámico, llevados a cabo en nombre del Islam. ¿Cuál es la imagen del Islam que esperamos vea la gente en el extranjero, cuando ven televisión y navegar por las redes sociales y ven las imágenes de inocentes asesinados y degollados sólo por no pertenecer a la misma escuela [religiosa] como este o aquel grupo, o mujeres de minorías étnicas y religiosas capturados [como esclavos] en el mundo árabe e islámico? Este comportamiento despreciable es suficiente para distorsionar la imagen del Islam en Occidente durante los próximos cien años. En vista de la situación trágica de los musulmanes, no podemos esperar que los que cometen estos crímenes y los atan al Islam hagan otra cosa que exacerbar el conflicto cultural y religioso y arrastrar al Islam en este. No hay duda de que el Islam es el gran perdedor en esta era.


Aql Al-‘Aql

«El mundo lee las estadísticas de musulmanes asesinados por otros musulmanes. Esta data le muestra a Occidente y a los pueblos occidentales que el Islam es una religión de violencia que pone en peligro al mundo entero. Por desgracia, nosotros los musulmanes estamos dando prueba de que esta es [la naturaleza] del Islam. Las sociedades y países no musulmanes están ocupados con sus asuntos y descubrimientos científicos, que sirven a toda la humanidad, incluyendo a los musulmanes, mientras que los musulmanes están ocupados matándose unos a otros. En esta situación, ¿cómo podemos esperar que el mundo nos trate? ¿No [es] correcto temer cualquier cosa relacionada con el Islam y los musulmanes?»

«Además de la situación de pérdida, falta de dirección, y el atraso que nos aflige, y el intento de salir de la crisis cultural que aqueja a los musulmanes, algunos de entre nosotros buscan una justificación [y claman] que los que están tras las hostilidades hacia el Islam son una externa fuerza históricamente hostil al Islam. Esto podría haber sucedido en el pasado, y de hecho ha habido conflictos religiosos en nuestra región. Pero, ¿es lógico que estemos atrapados en estas luchas religiosas? Todos sabemos eso, a lo largo de la historia, incluso en Occidente, han habido guerras entre los pueblos sobre una base religiosa, pero con [el aumento] de la revolución industrial y el estado laico, Occidente surgido del pasado y de la historia del estado religioso.

La complejidad de la crisis cultural en la que los musulmanes están atrapados es que, por una parte, nos [vemos a nosotros] como parte del mundo moderno caracterizado por la globalización, con todos sus aspectos económicos, políticos y sociales, y de la [revolución] informática, que se ha extendido a través de fronteras y continentes. Sin embargo, [todavía] nosotros utilizamos la religión en nuestra lucha política contra el Occidente secular. Esta es nuestra verdadera crisis. Todos leemos y seguimos la flagrante hostilidad del Occidente cristiano [contra el mundo musulmán]. Pero en su lucha con nosotros, pide este Occidente por la hegemonía religiosa? O [persiguen] estos sus intereses políticos y económicos?… Nosotros no debemos engancharnos en [la percepción] de que la lucha entre el Islam y Occidente – que debería llamarse capitalista más que cristiana – o incluso contra el judaísmo como una religión, es inevitable. Nuestro desacuerdo con algunos de los judíos es político, y podemos encontrar un terreno común con miembros de otras religiones.

«Hace un tiempo leí, por ejemplo, que el Consejo Central de Judíos de Alemania declaró su solidaridad con los musulmanes ante los ataques verbales del movimiento anti-islámico PEGIDA… El presidente del Consejo Central de Judíos de Alemania Josef Schuster, le dijo al diario alemán Die Welt: «El miedo al terrorismo islámico ha sido aprovechado para perjudicar a toda la religión… Esto es totalmente inaceptable. ‘Estas posturas y declaraciones son prueba de que hay espacio para las relaciones y el diálogo entre los miembros de las religiones monoteístas, y nosotros musulmanes deberíamos estar abiertos al otro a fin de servir al Islam, que aboga por la paz y el amor. Pero si creemos que algunas voces extremistas en Occidente y en medio de nosotros y dicen de que se trata de un choque de civilizaciones, el mayor perdedor seremos nosotros como nación, y [la imagen de] Islam seguirá siendo perjudicada por las acciones de algunos de nosotros».[2]

‘Abd Al-Rahman Al-Rashed: los musulmanes alemanes deberían distanciarse de los musulmanes radicales y marginarlos

Declaraciones similares fueron hechas por el ex director del canal de televisión Al-Arabiya ‘Abd Al-Rahman Al-Rashed en el diario Al-Sharq Al-Awsat. Escribiendo el día del ataque a Charlie Hebdo en París, Al-Rashed dijo que los radicales dentro de las comunidades musulmanas son un peligro mucho mayor para el Islam y los musulmanes que los alemanes racistas que protestaban contra la comunidad musulmana de Alemania, y son la causa raíz del temor de Occidente de la expansión del Islam en su territorio. Este hizo un llamado a los musulmanes alemanes a combatir a los radicales, marginarlos y permitir que el estado lidie con los extremistas alemanes:

«No es difícil describir la situación en Alemania; existen musulmanes malos y alemanes malos. Los 18.000 alemanes que salieron a las calles en Dresden contra lo que llamaron la ‘Islamización de Alemania’ incluyeron racistas, así como también gente enojada afectada por los actos políticos atroces y horripilantes cometidos por musulmanes de todo el mundo. Entre estos alemanes están aquellos que culpan a otros por la difícil situación económica en que se encuentran, teniendo en cuenta la afluencia de extranjeros que ha llevado a la competencia por los puestos de trabajo y por los beneficios.

«La propia Alemania es el hogar de los extremistas religiosos y políticos musulmanes que lograron distorsionar la imagen de los otros tres millones de musulmanes que viven en paz en Alemania. Los extremistas musulmanes en Alemania son más peligrosos y dañinos para los musulmanes que los enojados, racistas y fascistas alemanes. Alemania es un estado tolerante, laico y civil que cuenta con 2.500 mezquitas. Sus reglamentos, tribunales e instituciones ejecutivas protegen a la comunidad musulmana de los grupos racistas. La canciller alemana Angela Merkel, ha condenado las protestas anti-Islam como un acto detestable. El ministro de Justicia también encabezó una protesta contra los racistas en la misma plaza que la manifestación anti-Islam».


‘Abd Al-Rahman Al-Rashed

«Los árabes constituyen una pequeña minoría de musulmanes en Alemania. Marroquíes, que ocupan el cuarto lugar después de los turcos, bosnios e iraníes, cuenta 80,000 personas. Los de origen libanés están en de sextos con sólo 50.000 inmigrantes. La plática sobre la islamización de Alemania no es nada más de un espantapájaros tonto. Después de todo, los musulmanes son una minoría y se dice que el número de alemanes que se convirtieron al Islam está ubica en 100 000, un número pequeño considerando la población de 80 millones en el país. la mayoría de los convertidos al Islam muy probablemente lo hicieron seguido a matrimonios mixtos y no debido a la prédica. Los musulmanes se han convertido en gente atormentada seguido al daño a su imagen y a la imagen de su religión. Esto ha ocurrido desde que la organización Al-Qaeda salió a la superficie y también debido a la masiva propaganda del Estado Islámico de Irak y Siria (EIIS), que llegó a los titulares con sus prácticas violentas como las decapitaciones de rehenes occidentales».

«Los tres millones de musulmanes residentes en Alemania no pueden hacer mucho para defender su imagen ya que la región islámica está llena de terribles imágenes y noticias utilizas por racistas para incitar en contra del Islam y en contra de los musulmanes pacíficos que viven en Occidente y otros países. ¿Lo qué siempre vale la pena un lance, por los musulmanes de Alemania y otros alemanes, es dirigir su ira hacia los extremistas musulmanes, expulsándolos de sus comunidades y alejándolos de sus escuelas y niños. La lucha contra los extremistas musulmanes en Alemania es más importante para los musulmanes que luchar a los racistas alemanes con quienes el estado va a lidiar y castigar Tal vez el estado se remangara la camisa y también luchara contra los extremistas musulmanes ya que no es posible – y no es aceptable – que la guerra sólo se libre contra los racistas mientras nos hacemos la vista gorda con los extremistas musulmanes. Esos extremistas musulmanes se aprovechan de la tolerancia y las regulaciones civiles a fin de promocionar una cultura de odio, incitar contra los seguidores de otras religiones y buscan controlar las escuelas musulmanas, mezquitas e instituciones humanitarias y de caridad.

«Esta postura no protege a Alemania de la supuesta islamización pero salva a los musulmanes de las manzanas podridas entre ellos y de entre los que sabotearon sus comunidades, las destruyeron o impusieron su ideología extremista sobre sus pueblos. Aquellos que merecen la libertad en las sociedades civiles son aquellos individuos que respetan la libertad y no aquellos que se aprovechan de estos para servir sus propios intereses».[3]


[1] Siglas en alemán de «Patriotas europeos contra la islamización de Occidente».

[2] Al-Hayat (Londres) 30 de diciembre, 2014.

[3] Al-Sharq Al-Awsat (Londres), 7 de enero, 2015.