La nueva Constitución de Egipto [1] fue aprobada por referéndum el 14 y 15 de enero, 2014, con el apoyo del 98,1%. De los 53,5 millones de votantes elegibles, el 38,6 %, unos 20,6 millones de personas, votaron, de estos, 20 millones votaron a favor.
Resultados del referéndum (Fuente: Al-Ahram, Egipto, 19 de enero, 2014)
La mayoría de las reacciones a los resultados del referéndum en la prensa egipcia cercanos al nuevo régimen fueron muy favorables, en el que la mayoría de los escritores vieron como un reflejo del apoyo de las masas a las medidas del régimen actual en su lucha contra la Hermandad Musulmana (HM) y por la candidatura presidencial del Ministro de Defensa, ‘Abd Al-Fatah Al-Sisi. De hecho, sólo unos días después del anuncio de los resultados del referéndum, se tomaron medidas prácticas en preparar el terreno para una presidencia de Al-Sisi. El 26 de enero del 2014, el Presidente ‘Adly Mansour anunció su decisión de cambiar la hoja de ruta trazada por Al- Sisi tras el derrocamiento del presidente Mohamed Mursi en julio, 2013, y celebrar elecciones presidenciales antes de las elecciones parlamentarias. Al día siguiente, Mansour promovió a Al-Sisi al rango de Mariscal de Campo, el más alto escalón en el ejército egipcio y el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas (CSFA) anunció la aprobación de la candidatura de Al-Sisi.[1] Al mismo tiempo, el diario de Londres Al-Hayat informó que Al-Sisi había dimitido como comandante de las fuerzas militares y ministro de defensa, en preparación a declarar oficialmente su candidatura.[2]
Las críticas de cómo se llevó a cabo el referéndum, y de sus resultados, se supo de sólo un puñado de escritores en los diarios asociados al régimen actual. Algunos afirmaron que los resultados eran artificiales y que prueban una regresión sobre los valores democráticos y una vuelta a la mentalidad de los regímenes tiránicos que habían gobernado Egipto hasta la revolución del 25 de enero, 2011. Otros afirmaron que los dos tercios de los votantes egipcios elegibles que no votaron realmente se oponen a una campaña presidencial de Al-Sisi.
Los medios de comunicación asociados a la HM felicitaron a todos los que habían boicoteado el referéndum y afirmaron que el conteo de votos fue fraudulento y que la participación fue mucho menor de lo reportado.[3]
El Secretario de Estado estadounidense John Kerry, dijo en respuesta a la publicación de los resultados que el aprobar una constitución no era suficiente para establecer democracia, y que esta aprobación debe ir acompañada de medidas que garanticen los derechos y libertades del ser humano, así como por esfuerzos de reconciliación nacional. Su crítica enfureció a los medios de comunicación oficiales egipcios, y fue percibido como una interferencia inaceptable en los asuntos de Egipto. Sin embargo, unos pocos realmente vieron la declaración de Kerry como una muestra de apoyo a la nueva constitución.
Este informe analizará las reacciones de los medios de comunicación egipcios a los resultados del referéndum constitucional.
1. La opinión mayoritaria en los medios de comunicación de Egipto: los resultados son luz verde para presentar la candidatura presidencial de Al-Sisi
Tal como se ha señalado, la opinión mayoritaria en la prensa egipcia cercana al régimen, especialmente el diario Al-Ahram, fue que la aprobación de la constitución fue un voto popular de confianza para Al-Sisi y apoyo al lanzamiento de su sombrero al cuadrilátero.
Periodista egipcio: Apoyo a la constitución – Un llamado a Al-Sisi para postularse como candidato a la presidencia
En un artículo titulado «El pueblo y Al-Sisi son uno», ‘Omar ‘Abd Al- Sami’, quien escribe para el diario Al-Ahram, afirmó que los resultados del referéndum fueron una llamada a Al-Sisi para que postule su candidatura ala a la presidencia: «Sin lugar a dudas, a partir de ayer temprano por la mañana [cuando comenzó la votación], las masas egipcias dieron un doble golpe a las fuerzas de la conspiración, traición, estancamiento, terrorismo y reaccionismo encarnado por la HM y sus seguidores… El doble golpe es, primeo, la victoria en el referéndum constitucional y el inicio de un gran avance hacia el establecimiento de un estado democrático moderno, a pesar de todos los intentos de frustrar esta medida incluyendo asesinatos de la calle. La segunda parte del doble golpe es la convocatoria al General Abd Al-Fatah Al-Sisi, el héroe a quien el destino ha llevado a Egipto, a postularse como candidato a la presidencia de la república y cumplir con la voluntad de los millones que envolvieron sus corazones a su alrededor. [Apoyo a la nueva constitución] es la condición que Al-Sisi impuso para su campaña electoral, junto a la aprobación de los militares…
«El pueblo no está a favor de Al-Sisi sólo emocionalmente y porque es el héroe que les salvó del imperialismo de la HM. También es porque la gente confía en la institución militar de la cual este hombre salió. Las masas también confían en las palabras espontáneas con las cuales este se dirigió a ellos, con gran emoción popular y con un corazón compasivo que les trata con delicadeza… Este persuade al pueblo con sus discursos políticos, que parafrasea con una increíble atención y ellos repiten sus palabras y [declaman] su sencillo lema, que encarna las ambiciones de los egipcios y su anhelo de un futuro mejor: ‘Egipto es la madre del mundo, y así quedará’ Hoy completamos el paso del referéndum, y [después] daremos un paso más con este hombre [Al-Sisi] a un lugar donde él y nosotros trabajaremos y permaneceremos unidos contra la presión y los complots – porque el pueblo y Al-Sisi son uno».[4]
Académico egipcio: Los egipcios se dieron cuenta de que estaban votando no sólo por la constitución, sino por Al-Sisi también
Del mismo modo, Samir Tanagho, profesor de derecho en las universidades de Alejandría y ‘Ain Shams, escribió: «En la historia política de los países democráticos, un referéndum sobre un documento legal o de la constitución es también un referéndum sobre el líder o el propio [presidente]. El ejemplo más destacado de esto es después de la revolución de la juventud y de los estudiantes de 1968 en Francia contra el régimen de Charles de Gaulle, quien quería consolidar su popularidad y la satisfacción de los ciudadanos con él, y así, en 1969 se celebró un referéndum sobre una ley marginal en relación a la autoridad municipal, [que en realidad era un referéndum] sobre él». Este hizo un llamado a los franceses, diciéndoles que si ellos no aprobaban esta ley por un margen que le parecía lo suficientemente grande, iba a renunciar – y eso es lo que sucedió. De Gaulle dimitió después de obtener la aprobación del pueblo para la ley pero no por un margen suficiente para que continuara gobernando.[5]
«Esto es lo que sucedió en Egipto con el referéndum constitucional. El Gen. ‘Abd Al-Fatah Al-Sisi se dirigió a los ciudadanos y les pidió que salieran a votar, y todos los egipcios entendieron… que no solo estaban votando por la constitución, sino que también lo estaban haciendo por el General Al-Sisi. La constitución y el General Al-Sisi recibieron un apoyo masivo totalizando 98,1% – no como en Francia en 1969…
«Todos saben que el General Al-Sisi no se presenta a la presidencia, la presidencia se le presenta a él. Este es su destino nacional y no su futuro político. El número más importante en los resultados del referéndum del 2014 es el número de los que votaron por el sí, lo que asciende a unos 20 millones de ciudadanos – aproximadamente el doble que en la constitución del 2012, que totalizó ligeramente más de 10 millones. La segunda cifra más importante es el porcentaje de partidarios – 98,1%, que todo el mundo conoce es un porcentaje legendario… el Sr. [Rashid] Al-Ghannouchi, el jefe del partido tunecino Al-Nahda, ridiculizó el hecho que el apoyo fue superior al 95%, alegando que esto no se alineo con la democracia. En respuesta, diremos que en momentos de peligro, el pueblo cierra filas y permanecer unido.[6]
2. La opinión de la minoría en los medios de comunicación a favor del régimen: Un alto porcentaje de apoyo significa un retorno a la era Mubarak
En contraste, varios artículos en los medios de comunicación a favor del régimen cuestionaron los resultados del referéndum y afirmaron que el alto porcentaje de apoyo fue una reminiscencia de la era Mubarak. Algunos llegaron a afirmar que el gran número de ciudadanos que boicotearon el referéndum indica el alcance de la oposición a Al-Sisi.
Columnista de ‘Al-Ahram’: Resultados del referéndum de más del 90% a favor son contrarios a la democracia
Un artículo inusual en el diario Al-Ahram, que es conocido por su apoyo al régimen actual y por la campaña presidencial de Al-Sisi, del periodista Karem Yahia, fue titulado «¿Qué significa el silencio de las urnas de votación?» En este, escribió: «Es posible que el título de este artículo sorprenderá a aquellos que ven los resultados del referéndum constitucional nada más que un consenso nacional – es decir, aquellos que no comprenden el peligro de un retorno a la situación que existía antes del 25 de enero, 2011 y lo absurdo de ir en contra de la historia… regresando al referendo, cuyos resultados exceden el 90% [a favor y un retorno] a conceptos tales como «un voto de lealtad a y de potenciación de un inspirado comandante líder y un liderazgo histórico. Esta nomenclatura, que tipifica a un régimen tirano, es contradictoria con los fundamentos más básicos de la cultura democrática…
«No es suficiente que el 98 % dijo sí, debemos prestar atención al hecho que la mayoría de los votantes – el 62 %, casi las dos terceras partes, boicotearon el voto…
«¿Por qué la mayoría de los egipcios se niegan a participar, a pesar de, o incluso por la campaña de propaganda llamando a votar por el sí? Le temían más a la atmósfera imperante de terror, intimidación, el informar, y el silencio en los lugares públicos? Temen estos boicots [el inicio de] una era que incorporará lo peor de las eras de Nasser, Sadat y Mubarak? ¿Sospechan estos que el régimen de Mubarak regresará, y con este, el estado policial y el favoritismo por los ricos?…
«Si, por el bien del argumento, aceptamos la afirmación de que este referéndum es luz verde para un determinado candidato a la presidencia bajo el paraguas del «sí» del consenso nacional, el otorgar poder y la declaración de lealtad, no deberíamos también mencionar que casi dos tercios de los votantes se oponen a este candidato, o por lo menos no están emocionados con su candidatura y temen por el futuro del país con este [a la cabeza del poder]?…
«Particularmente entre los jóvenes, que están bien versados en experimentos sobre democracia, hay quienes saben que referendos como estos son cosa del pasado; un referéndum adecuado es llevado a cabo sobre uno o dos artículos [de un texto] y viene sólo después de un diálogo social… [Podría la baja participación ser] porque la mayoría de los egipcios ya no creen en [la eficacia] de los aparatos del referéndum, después de la serie de referendos en los últimos seis décadas, cuyos resultados fueron siempre «sí» y sólo «sí» [?]… Puede haber otras razones por el silencio [es decir, la baja participación], pero sin duda no se puede afirmar que una de las razones es que todos aquellos boicotearon el referéndum son miembros o partidarios de la HM…»[7]
Para ver el despacho en su totalidad en ingles copie por favor el siguiente enlace en su ordenador: http://www.memri.org/report/en/0/0/0/0/0/0/7805.htm
[1] En referencia a la constitución, véase MEMRI Investigación y Análisis No. 1049, «Proyecto de Constitución de Egipto 2014: Enfoque en la des-islamización y la expansión del poder militar», 10 de enero, 2014.
[1] Al-Ahram (Egipto), 27 y 28 de enero, 2014.
[2] Al-Hayat (Londres), 28 de enero, 2014.
[3] Ikhwanonline.com, 19 y 20 de enero, 2014.
[4] Al-Ahram (Egipto), 15 de enero, 2014.
[5] Actualmente una mayoría de 52,4% rechazó la propuesta de De Gaulle.
[6] Al-Ahram (Egipto), 22 de enero, 2014.
[7] Al-Ahram (Egipto), 20 de enero, 2014.