En un artículo en el diario kuwaití en idioma inglés Arab Times, el redactor Dr. Khaled Al-Janfawi denunció el discurso anti-Occidente prevaleciente en el Medio Oriente. Argumentó que este discurso, el cual promueve una imagen parcializada y distorsionada de Occidente, conduce a la hostilidad y al extremismo y es una de las raíces de la cultura de violencia en el Medio Oriente. Agregó que para promover la tolerancia y la democracia en el mundo árabe, había necesidad de planes de estudios escolares que no demonicen al otro y en cambio enfaticen la importancia de la diversidad y el pluralismo.
Lo siguiente son extractos del artículo: [1]
«El reavivamiento de… los discursos anti-occidentales en el Medio Oriente… [conllevan a] la violencia [y] a la hostilidad»
«… Según muchos críticos post-coloniales, el estudio de Oriente por numerosos viajeros europeos, antropólogos y escritores durante los siglos dieciocho y diecinueve ‘pavimentaron’ el camino para su colonización por los poderes occidentales…
«Sin embargo, se está haciendo actualmente un ‘discurso’ similar sobre Occidente, creado por gente del Medio Oriente! Es un discurso negativo y hostil contra las culturas occidentales y civilizaciones adoptadas antes por los escritores políticos pan-árabes y comentaristas durante los años cincuenta y sesenta. El reavivamiento de tales discursos anti-occidentales en el Medio Oriente ‘pavimenta’ el camino para el esparcir de una cultura de violencia [y] hostilidad que está amenazando deglutirse toda nuestra región del Medio Oriente.
«[Para] enfrentar [este] fenómeno en escalada, existe una necesidad verdadera de lanzar un foro internacional más eficaz para dirigirse a este problema, porque [los] muchos intentos locales del Medio Oriente parecían haber fracasado en el intento!»
«Muchos intelectuales educados árabes pro-occidentales… continúan siendo blanco y discriminados y robados de su derecho básico [a] la libertad de expresión»
«La hostilidad hacia culturas no-árabes y no-musulmanas – o a través del análisis subjetivo y cuasi-periodístico de lo que sucede en el Medio Oriente o [a través de] la continua cobertura parcializada de los medios de comunicación árabes en la región – crea una combinación desastrosa de violencia y extremismo. Muchos intelectuales educados pro-occidentales [quiénes] todavía están intentando esparcir la palabra de paz [y] cooperación cultural entre Oriente y Occidente continúan siendo blancos, discriminados y robados de su derecho básico [a] la libertad de expresión. La cultura de miedo, el extremismo religioso y… las reacciones violentas a los eventos locales son básicamente un resultado directo del anti-occidentalismo.
«No es suficiente celebrar foros ocasionales sobre diálogo inter-cultural entre Oriente y Occidente en la región, asistidos sólo por [un] público de ‘expertos’ en el campo. Los intelectuales orientales y occidentales de mente abierta e ilustrados pueden ciertamente agregar una fuerza poderosa al proceso de democratización de la región. Sin embargo, existe una necesidad de ‘alcanzar’ a las comunidades típicas e individuos del Medio Oriente, y analizar las causas primarias del aparente surgimiento del extremismo en nuestra región. La pobreza, la falta de educación, malos gobernantes, cobertura injusta de los medios de comunicación y débiles economías locales son sólo la punta del iceberg, y otras causas de extremismo necesitan ser examinadas más estrechamente».
«Una típica institución educativa árabe puede ofrecer planes de estudios científicos más avanzados… [pero] al mismo tiempo… demoniza al ‘otro'»
«Por ejemplo, otra razón para el surgimiento en la hostilidad, violencia e intimidación de las minorías culturales y raciales [que son] motivadas por el extremismo religioso en cualquier sociedad humana es la falta de programas educativos suficientes sobre la importancia de la ‘diversidad’. Muchos, si no la mayoría, de los programas educativos en los países árabes… [principalmente] las escuelas medias, continúan adoptando las técnicas pedagógicas [conservadoras]. Una institución educativa árabe típica puede ofrecer planes de estudios científicos más avanzados y recientes, mientras al mismo tiempo [preserva] partes [de los planes de estudios que] demonizan al ‘otro’ – al no-árabe o no-musulmán y a veces [también] al intelectual pro-occidental árabe…»
[1] El Arab Times (Kuwait), 1 de enero, 2008 http://www.arabtimesonline.com/kuwaitnews/faqdetails.asp?faid=775&faqid=9.
El texto ha sido revisado ligeramente para mayor claridad.