En una entrevista el 26 de marzo, 2008 con el diario de Qatar Al -‘Arab, el portavoz de la organización sunni jihad iraquí Hamas-Irak, Ahmad Salah Al-Din, acusó a Al-Qaeda en Irak de considerar a la mayoría de las facciones de la resistencia iraquí como su enemigo principal, de ser un subordinado de Irán, y de recibir de este armas, fondos, entrenamiento y cuidado médico para sus heridos. Salah Al-Din agregó que en el último año Al-Qaeda en Irak se había considerablemente debilitado y reducido.
Lo siguiente son extractos del artículo de Al-‘Arab de la entrevista:
Al-Qaeda en Irak tiene su propia agenda que transciende las fronteras de Irak
«Respecto a las razones para la confrontación con Al-Qaeda, Salah Al-Din declaró: ‘Nosotros no consideramos a Al-Qaeda [en Irak] como una organización de resistencia, ya que esta tiene su propia agenda que transciende las fronteras de Irak. Esto ha estado claro desde que Abu-Mus’ab Al-Zarqawi juró obediencia a Osama bin Laden – porque después de la ocupación de Irak, Al-Tawhid Wal-Jihad, [1] qué estaba bajo el comando de Al-Zarqawi, estuvo cerca de todas las facciones de la resistencia iraquí e incluso planeaba unir fuerzas con Al-Jaish Al-Islami. Sin embargo, después que fue anunciado públicamente que Al-Zarqawi juró obediencia a bin Laden, las cosas cambiaron considerablemente: Al-Qaeda comenzó a extender abiertamente sus ideas, metas y odio y acusando de herejía a cualquiera que tomara parte en el proceso político, incluyendo a los partidos árabes sunni.
«‘Siguiendo al asesinato de Al-Zarqawi, Al-Qaeda intensificó su agresión contra las facciones de resistencia de Irak, hasta que se convirtieran en sus primeros [blancos]. Una confrontación entablada entre [Al-Qaeda] y la mayoría de las facciones de la resistencia iraquí, incluyendo a las brigadas Thawrat Al-‘Ishrin – después de que Al-Qaeda tuviera la audacia de asesinar a Hareth Al-Dhari, el sobrino del Jeque Hareth Al-Dhari, secretario-general del Concejo de Clérigos musulmanes en Irak'».
El verdadero comandante de Al-Qaeda [en Irak] es Abu Ayub Al-Masri
«Salah Al-Din acusó a Al-Qaeda de estar subordinado a Irán, [denunciando] que tenían [fuertes] evidencias a ese efecto. Él dijo: ‘Encontramos [moneda] iraní, el toman, en un cuartel general de Al-Qaeda que descubrimos. También hemos capturado armas iraníes, para no mencionar grabaciones de audio y videos que contienen anuncios de Al-Qaeda por los combatientes de que habían recibido entrenamiento en los campamentos del ejército iraní y que Al-Qaeda estaban transportando los heridos a Irán para ser tratados médicamente’.
«Salah Al-Din denunció que el verdadero comandante de Al-Qaeda [en Irak] era Abu Ayub Al-Masri, y que [Abu ‘Omar] Al-Baghdadi [2] era una figura iraquí a quienes muchas [palabras y hechos] son atribuidos solamente para crear la impresión de que [Al-Qaeda es una organización auténtica] iraquí. Él dijo que [Abu Ayub] Al-Masri había sido rescatado de ser arrestado por un aparato de inteligencia árabe usando un vehículo diplomático que le pertenece a la Embajada iraní… ‘»
Irán quiere erradicar nuestras creencias y cambiar la demografía de las regiones sunni, particularmente Bagdad
«[En conclusión], Salah Al-Din declaró, en nombre de Hamas-Irak: ‘Los Estados Unidos es nuestro enemigo principal, pero Irán es un enemigo mucho más peligroso. Los Estados Unidos quieren [nuestro] petróleo, y posiblemente quieren establecer bases militares [en nuestro suelo], o permanecer [en Irak] durante muchos años por venir – mientras Irán quiere gobernar, [y] erradicar y cambiar [nuestras] creencias e ideas, [y] aspira alterar la demografía de las regiones sunni, particularmente Bagdad'». [3]