En su columna del 7 de agosto, 2006 en el diario bisemanal del Hamas Al-Risala, bajo el título «Victoria en el Líbano – Hacia una Tercera Intifada», Ibrahim Abu Heija alienta al Hamas a que use como un trampolín lo que ve de la victoria del Hizbullah hacia una tercera Intifada palestina».

Lo siguiente son extractos del artículo: [1]

«El gran beneficiado [de la victoria en el Líbano] será ultimadamente la resistencia palestina»

«Lo que se ha vuelto evidente de las continuas batallas en el orgulloso y resistente sur del Líbano es la confirmación del fracaso de Israel en lograr sus metas y la confirmación del declive en su capacidad de disuasión en comparación con lo que era antes de que se enrollara en el pantano libanés – a pesar de las sangrientas matanzas que Israel cometió contra civiles desarmados…

Lo que es notable aquí no es sólo el colapso de la doctrina de defensa israelí ante una comunidad bien organizada poseída de fe y voluntad, como el Hizbullah, pero lo que es más importante en la pérdida israelí es examinar las consecuencias de la victoria y sus implicaciones en niveles adicionales.

«Hizbullah, que logró la victoria, será la que menos se beneficie de esta victoria, debido a ciertas consideraciones pertinentes a la plaza libanesa, los cuales están basados en la división sectaria. Esto no significa que no ganará mayor fuerza y legitimidad de la que tenía antes, particularmente desde la agresión israelí, tal como es evidente, procede sin dirección y sin ningún calculo en las consecuencias, y por consiguiente se enreda en la guerra de guerrillas, en la que el Hizbullah es excelente en su habilidad, y tiene un apoyo sirio e iraní que no niegan nada en lo que se refiere a armas, dinero, apoyo, y protección.

«No detracta nada desde la posición del Hizbullah que debería beneficiarse del honor de la victoria y que debería ser un escudo protector de Siria y Líbano de quebrarse, y debería ser un escudo para Irán contra un ataque a su reactor nuclear.

«Sin embargo, el beneficiario mayor será finalmente la resistencia palestina, ya que todas las ecuaciones árabes, regionales, e internacionales, sea que estén en discrepancia o de acuerdo, giran alrededor de la causa palestina, o para liquidarla o para defenderla».

«Éste es un momento importante, que la resistencia palestina debe asir»

«Éste es un momento importante, que la resistencia palestina debe asir. Esta se benefició de [un momento similar] al principio de la [Intifada] Al-Aqsa, cuando la Ribera Oriental y Gaza hablaron el idioma libanés, después de que habían estado sumergidos mucho tiempo en las ilusiones israelíes y americanas. Y seguido a la [Intifada Al-Aqsa], el retiro incompleto [israelí] de la Franja de Gaza fue llevado a cabo.

«Y ahora, después de que el cese de hostilidades [hudna] ha sido probado y la experiencia de cambiar a la Autoridad [Palestina] alcanzó su cresta, la puerta será abierta a una tercera Intifada palestina, que transformará a la resistencia de la fase de reacción a las acciones [israelíes] a la [resistencia] que se llevará a cabo bajo nuestra iniciativa».

«Los regímenes árabes… mostraron solidaridad con Israel… y colocaron sus apuestas en un viejo caballo y en una carta perdedora»

«La Intifada será perfeccionada en [varios] puntos: 1) victoria al sur del Líbano; 2) la necesidad de desarrollar elites y movimientos islámico nacionalistas [pan-árabes], según su servicio a las masas. Esto es especialmente cierto después de que los regímenes árabes han perdido la delgada capa patriótica bajo la cual se habían escondido, y abiertamente mostraron solidaridad con Israel y manifestaron su descontento con la resistencia [e.d. el Hizbullah] – y no se les ocurrió que habían colocado sus apuestas en un viejo caballo y en una carta perdedora.

«Esto abrirá la puerta de par en par a las elites fuertes y a los movimientos para [hacer] cambios radicales en las estructuras de la [sociedad] árabe, y la resistencia palestina se beneficiará de esto, de cualquier manera que se le mire.

«En el tercer punto, el espectáculo de fracasos en el Líbano aumentará la torpeza de la administración americana en Irak, y expondrá su método selectivo de reforma. Esto afectará los planes mediterráneos de América, y lo llevará a retroceder y huir, o lo llevará a medidas y soluciones que apuntan a remendar el tema palestino a través de frágiles coaliciones regionales e internacionales. Ninguna alternativa salvará la postura de los Estados Unidos, y no retrocederá el reloj.

«La victoria en el Líbano debilitará esas voces palestinas… llamando a hacer concesiones… y al cese de hostilidades»

«El cuarto punto es este: La victoria en el Líbano debilitará a esas voces palestinas que son escuchadas de vez en cuando, algunas veces llamando a hacer concesiones, otras veces llamando a cese de hostilidades fortuitos. A Hamas se le dará un margen significativo de ganar legitimidad para llevar a cabo una resistencia [armada] en varios frentes dónde [en la actualidad] la Autoridad Palestina objeta y la resistencia desiste.

«La derrota israelí en la Líbano forzará a Israel a adelantar retiros parciales de las Granjas Shab’a, la Ribera Oriental, y quizás las Alturas del Golan»

«El quinto punto: La derrota israelí en el Líbano forzará a Israel a adelantarse hacia los retiros parciales de las Granjas Shab’a, la Ribera Oriental, y quizás las Alturas del Golan, para disminuir los efectos de su derrota – pero esto de ninguna manera engañará a los palestinos, los sirios, o los libaneses. Más bien, todavía los empujará a todos a hacer otro movimiento hacia el lograr sus derechos.

«En general, es importante para la resistencia palestina aprovecharse de los efectos de la victoria en el Líbano por sus propios intereses para lograr sus derechos y avanzar hacia sus objetivos, y alentar a todo el pueblo a unirse detrás de su programa.

«La creciente agresión en la Franja de Gaza contra niños y mujeres es el incentivo más importante para lograr la ecuación de la nueva resistencia y tomarla más allá de los méritos del documento de los prisioneros y la consideración de estar en autoridad… hacia una tercera Intifada».


[1] Al-Risala (Gaza), 7 de agosto, 2006.