El siguiente artículo fue escrito por Rudam Azad, un activista baluchista quien lucha por la independencia nacional de Baluchistán.

Introducción

Baluchistán permaneció bajo dominio británico desde el año 1839 hasta 1947. En 1947, el Parlamento del Reino Unido anunció la Ley de Independencia de India que puso fin al dominio británico en India y dividió a la India británica en dos nuevos dominios independientes: India y Pakistán. Sin embargo, la ley señaló el comienzo de la hegemonía de Pakistán sobre Baluchistán, a pesar de sus sueños de independencia.

Poco después de la partición de India, el ejército de Pakistán dominado por Punjabi realizó inmediatamente incursiones a la residencia del gobernante de Baluchistán Khan Mir Ahmed Yar Khan Ahmedzai (comúnmente conocido como «Ahmed Yar Khan» y «Khan de Kalat»). En consecuencia, el ejército obligó a Yar Khan a firmar la anexión de Baluchistán a Pakistán. Sin embargo, dado que las dos cámaras del parlamento de Baluchistán (la Cámara de los Lores y la Cámara de los Comunes) de la época se opusieron a la anexión y no existe evidencia alguna ceremonial oficial de la firma, 40 millones de baluchis consideran que la fusión de Baluchistán con Pakistán es un acto de agresión extranjera por parte del ejército pakistaní.

(Fuente: Twitter)
(Fuente: Twitter)
Fuente: CIA World Factbook)
Fuente: CIA World Factbook)

Un genocidio en cámara lenta del pueblo baluchi

La lucha por la independencia de Baluchistán comenzó poco después de que los tanques del ejército de Pakistán entraran en la región. En 1948, el príncipe Agha Abdul Kareem Baloch (hermano menor de Yar Khan) lanzó un movimiento de resistencia contra la hegemonía de Pakistán. Este luego emigró a Afganistán en busca de ayuda para liberar Baluchistán, pero no encontró apoyo internacional contra la agresión de Pakistán.

Así las cosas, comenzó un genocidio en cámara lenta del pueblo baluchi. La creación de Pakistán lamentablemente no respetó las leyes internacionales, ya que su ejército ha estado reprimiendo y silenciando brutalmente las voces de los pueblos indígenas baluchis durante más de 70 años. A los partidos políticos y sus activistas se les prohíbe protestar pacíficamente, se secuestra a familiares de activistas baluchis, se viola a mujeres baluchis en los campos de tortura del ejército y helicópteros artillados y aviones de combate bombardean aldeas baluchis.

(Fuente: Twitter)
(Fuente: Twitter)

El Movimiento liberación de Baluchistán, encabezado por Hyrbyair Marri, también afirmó que el ejército paquistaní ha utilizado «armas químicas y letales» contra la ya desarmada población baluchi.[1]

En el año 2011, Rehman Malik, quien para ese entonces fue ministro del Interior de Pakistán, amenazó con «aplastar» a los partidos políticos baluchi y a la Organización de estudiantes Baluchi, en una declaración política.[2] Su declaración pretendía glorificar las prácticas ilegales del ejército pakistaní y del Servicio de Inteligencia Interno (SII) contra el pueblo baluchi.

En el año 2006, el ex-jefe del ejército de Pakistán, general Musharraf, también felicitó a su ejército por su «victoria» luego del asesinato del líder baluchi Nawab Akbar Khan Bugti, quien se desempeñó como ministro de Estado del Interior y gobernador de la provincia de Baluchistán en Pakistán y dedicó su vida a la causa baluchi.[3] Justo un año antes, hablando con un periodista, Bugti, quien estaba abierto a las negociaciones, dijo lo siguiente: «¿Cómo pueden continuar las negociaciones sobre los temas políticos con el gobierno en esta situación? Una operación militar además de negociaciones no puede continuar juntas. Si las autoridades lanzan una operación, entonces, ¿con quién van a negociar?”[4]

(Fuente: Dawn.com)
(Fuente: Dawn.com)

Pakistán viola la Convención de Ginebra

El ejército pakistaní está librando claramente una guerra contra el pueblo baluchi, violando los estándares de trato humano y garantías de respeto a las poblaciones víctimas de los conflictos armados, tal como lo establece la Convención de Ginebra.

El desgarrador recuerdo de cuando, en el año 2005, el ejército pakistaní bajo el liderazgo del general Pervez Musharaff utilizó aviones de combate fabricados en los Estados Unidos para atacar a civiles baluchis en Kahan y en las áreas adyacentes a Dera Bugti, lo que resultó en la muerte de cientos de civiles desarmados, sigue siendo algo muy vívido.

Además, desde el año 2009, el ejército paquistaní y su rebelde Servicio de Inteligencia Interno (SII) adoptaron e intensificaron la política de «asesinar y arrojar». Las primeras víctimas de esta política sucia fueron los líderes políticos baluchis Ghulam Mohammad Baloch, Lala Muneer Baloch y Sher Mohammad Baloch. Estos fueron secuestrados en las oficinas de sus abogados y sus cadáveres fueron mutilados, acribillados a balazos y arrojados en el área de Murghab perteneciente al área de Surab del distrito Khuzdar. Sus cadáveres mostraron que antes de recibir disparos a quemarropa, fueron severamente torturados.

Sin embargo, la brutalidad patrocinada por el estado contra los baluchis ha caracterizado al gobierno paquistaní desde su independencia. En particular, en la década de los años 1970, durante el régimen de Zulfiqar Ali Bhutto, los prisioneros de Marri Baloch fueron arrojados desde helicópteros que volaban a baja altura. Además, Pakistán ha estado utilizando «tácticas de desapariciones forzadas» para aterrorizar al pueblo baluchi. Por ejemplo, en la década de los años 1970, el ejército paquistaní secuestró a Asad Baloch, el hijo mayor de Sardar Ataullah Mengal, quien fue el primer jefe electo ministro de la provincia de Baluchistán. Su cuerpo nunca fue encontrado.

A lo largo de los años, el ejército paquistaní secuestró a más de 30.000 civiles baluchis. A estas personas no se les puede llamar personas desaparecidas, porque las familias baluchis saben que sus seres queridos están en las cámaras de tortura del ejército paquistaní.

Según fuentes baluchis independientes, desde el 2005, más de 1.800 baluchis han sido asesinados extra-judicialmente. La mayoría de las víctimas recibieron disparos en la frente después de ser brutalmente torturados. Ninguno de ellos fue presentado nunca ante ningún tribunal local. Además, incluso cuando los baluchis son sentenciados en los tribunales, a menudo no entienden los cargos ni las sentencias finales, porque muchos de ellos no hablan urdu y no se les proveen traducciones para ello.

Una madre baluchi busca a sus dos hijos secuestrados (Fuente: Twitter)
Una madre baluchi busca a sus dos hijos secuestrados (Fuente: Twitter)
Baluchistán Shohda Qabristan, monumento a los caídos y cementerio de los mártires baluchis, está situado en Quetta. El día 13 de noviembre fue declarado día de los mártires baluchis. (Fuente: Twitter)
Baluchistán Shohda Qabristan, monumento a los caídos y cementerio de los mártires baluchis, está situado en Quetta. El día 13 de noviembre fue declarado día de los mártires baluchis. (Fuente: Twitter)
(Fuente: Twitter)
(Fuente: Twitter)

*Rudam Azad es escritor baluchi, representante baluchi y activista de derechos humanos.

Para ver el resto del despacho en inglés junto a las imágenes copie por favor el siguiente enlace en su ordenador: https://www.memri.org/reports/independent-balochistan-natural-ally-west


[1] Indiandefencereview.com/a-free-and-secular-balochistan-will-end-extremism-and-fundamentalism-in-region/, 30 de agosto de 2016; Indiatoday.in/india/story/balochistan-pakistan-chemical-weapons-pm-modi-human-rights-337895-2016-08-29, 28 de septiembre, 2016.

[2] Thenews.com.pk/print/90857-kharotabad-commission-a-whitewash-says-hyrbyair-marri, 16 de junio, 2011.

[3] Idsa.in/strategicanalysis/NawabBugtisAssassinationFuturePortents_abansal_0706, julio, 2006.

[4]Thediplomat.com/2016/08/balochistan-and-the-killing-of-akbar-bugti-10-years-later/, 26 de agosto, 2016.