Según una encuesta realizada a finales del año 2022, la mayoría de los jóvenes estadounidenses no se sientes nada orgullosos de vivir en los Estados Unidos.[1] El 36% de aquellos denominados millennials (nacidos entre 1981 y 1996) estaban orgullosos, mientras que solo el 16% de la generación Z (nacidos entre 1997 y 2012) expresó sentimientos similares. Si se puede confiar en la encuesta, la mayoría de los estadounidenses menores de 40 años son, en el mejor de los casos, extremadamente ambivalentes en su opinión acerca de los Estados Unidos. La generación Z también es la generación estadounidense menos religiosa hasta el momento, con máximos históricos en personas que no poseen ningún tipo de afiliación religiosa (34%) y máximos en quienes se consideran ateos o agnósticos (18%). Un 50% de la generación Z cree que los roles tradicionales de género están desactualizados y el 21% se identifica dentro del grupo LGBTQ+, también un máximo histórico. Estos también son una generación ansiosa y deprimida.[2] No sorprende que cuando votan (la mayoría no lo hace), estos jóvenes votantes estadounidenses se inclinan hacia la izquierda. Aquí vemos evidencia tangible de un alejamiento de esas antiguas normas de identidad: identidad nacional o patriotismo, fe religiosa y la familia tradicional. Estados Unidos está cambiando. El mundo occidental está cambiando y América del Norte parece moverse mucho más rápido.[3]

Y mientras Occidente es solo una minoría de la población mundial, el peso cultural, económico y mediático de Occidente es mucho mayor que su población, sus obsesiones y neurosis inevitablemente se ciernen sobre el escenario mundial, lo quiera el resto del mundo o no. A medida que se disuelven las viejas identidades en Occidente, no está del todo claro qué puede permanecer o qué surgirá. Las mayores pasiones del momento parecen ser sexuales, raciales y terapéuticas más que religiosas, políticas o económicas. Parece ser que estamos, tal como señaló el gran filósofo anglo-polaco Zygmunt Bauman, en un interregno entre el final de las viejas formas y el comienzo de lo nuevo, siendo este intervalo una era de incertidumbre permanente. La modernidad avanza inexorablemente, dejando atrás las viejas certezas, pero con un destino bastante incierto.[4]

Para la escritora Katherine Dee, nuestro intervalo liberal tardío tiene «un problema de nihilismo», donde, para muchos, ni la civilización, ni la sociedad, ni siquiera la vida parecen tener mucho significado:

En el torbellino de la confusión, nada tiene sentido. El significado es esquivo. El nihilismo – el rechazo a la posibilidad de algún significado – es el agua en la que nadamos y la oscuridad que ha envuelto nuestra forma de vida en formas que ni siquiera hemos comenzado a comprender.[5]

No es de extrañar que ser moderno y liberal en Occidente se asemeje a no tener hijos en su mayoría, ya que las tasas de natalidad se desploman en todo el mundo, pero especialmente en las economías más avanzadas de Occidente (más el este de Asia). La confusión no parece propicia para la reproducción, para las familias numerosas o para ver hacia el futuro. Y la gran ironía de un mundo moderno que disuelve viejas identidades es la búsqueda incesante de otras nuevas, a medida que se trascienden nuevas fronteras que ni siquiera sabíamos existían. Justo más allá de las actuales frenéticas aventuras en materia de género, se encuentran campos nuevos y tentadores, tales como la investigación de los alucinógenos y la interfaz cerebro-máquina humano.[6] Y mientras la tecnología y la riqueza del imperio estadounidense permanezcan intactas, parece no haber fin a la vista para el apetito por la experimentación.[7]

A veces, la búsqueda de identidad puede ir de mal en peor, ya sean chicos que lamentan haberse mutilado en episodios de experimentación sexual, el sombrío nihilismo de aquellos adolescentes estadounidenses que utilizan armas de fuego o los occidentales que buscan desesperadamente nuevas identidades raciales o religiosas. La adolescente de California que detuvo su proceso de cambio de género Chloe Cole, a quien le extirparon los senos a la edad de 15 años, compara la cirugía de transición de menores con los experimentos médicos nazis.[8] Aparentemente, existen al menos 72 géneros para elegir, así como también más de unos pocos casos de personas de piel blanca en los Estados Unidos que buscan reinventarse a sí mismas como personas de piel negras o indígenas de mayor estatus.[9]

Los desafíos no se limitan a Occidente. La urbanidad y modernidad han sido desafíos sociales importantes en el mundo en desarrollo durante décadas y particularmente destructivos para las sociedades tradicionales desarraigadas por los cambios rápidos producidos. En Israel, la población beduina del país ha experimentado una gran agitación al instalarse en nuevas ciudades construidas en el Negev. Ante la interrupción de su estilo de vida tradicional, la pobreza y el crimen, muchos han adoptado el islam político como refugio seguro en tiempos de incertidumbre y agitación. Prueba de ello es la gran cantidad de mezquitas que se han construido durante este acelerado proceso de urbanización. Los beduinos, que históricamente no se han caracterizado por un islamismo devoto, están mentalmente aplastados por este proceso, durante el cual van perdiendo su forma de vida y su identidad. Como resultado, se adhieren al islam para que los mantenga unidos desde dentro.

Donde pueda mantener algún tipo de vitalidad y solidez verdadera frente a nuestro líquido futuro, la religión tradicional (o las nuevas creencias) seguirán siendo algo así como un refugio de tal oscuridad nihilista. El nuestro es un dilema metafísico y requiere de respuestas metafísicas. Parece difícil ser centrista cuando el centro no resiste, cuando el término medio de la supuesta razón liberal es excavado por debajo de uno. Pero uno de los riesgos de oponerse al zeitgeist encontrando supuestos refugios que parecen ser los más alejados o intransigentes del espíritu de la época es el del extremismo.

El controvertido y decididamente anti-moderno ex-kickboxer convertido en influyente misógino Andrew Tate, ahora arrestado por tráfico de personas en Rumania, describió recientemente al islam, al que se convirtió recientemente, como «la última religión, la última, porque ninguna otra religión tiene fronteras que estos harán cumplir. Si toleras todo, entonces no representas nada».[10] El reformista islámico residente en Europa Hamed Abdel-Samad, en contraste con Tate, ve al islam conservador contemporáneo como algo cada vez más «disminuido».[11] Tate parece haber emprendido un viaje de fe, si se le puede llamar así en una personalidad tan singular, que pasó del cristiano nominal al ortodoxo rumano y luego al islam.[12] Aún así, ser amish, benedictino o jasídico también es estar en clara contradicción con un mundo sin amarras. Pero también lo es el ser supremacista blanco o yihadista.[13]

En el Reino Unido, la generación X (ella nació en 1968), Sally-Anne Jones pasó de ser cristiana nominal al punk rock, a la brujería y a estilos de vida alternos, no solo para convertirse al islam, sino convertirse en una reclutadora de gran éxito para el Estado Islámico.[14] Hace menos de una década, decenas de miles de otros occidentales, tanto conversos como musulmanes de cuna, se vieron motivados a abandonar Occidente y buscar emigrar al territorio del EIIS, donde sus vidas estaban en constante peligro.

Mucho más reciente, en el año 2018 Corey Johnson de 17 años, de Júpiter, Florida, decidió convertirse en musulmán viendo videos del EIIS y leyendo el Corán, aunque parece que nunca interactuó con ningún musulmán vivo. Johnson pareciera más bien el chico del afiche de la generación Z de nuestra época: sin padre, «inteligencia por encima del promedio pero madurez retrasada, autismo y enfermedad mental bastante grave», depresión, medicamentos recetados, acoso en las redes sociales.[15] Por el supuesto bien al islam, asesinó a puñaladas a un chico de 13 años e intentó asesinar a otras dos personas una noche durante una fiesta de pijamas. Antes del islam, este se enamoró de Hitler y Stalin, de los supremacistas blancos. Apoyó el atentado a la ciudad de Oklahoma (que tuvo lugar cinco años antes de que él naciera). Tenía una esvástica en su perfil en Facebook. Durante su juicio en el mes de noviembre, 2021 en Florida, sus abogados defensores lo describieron como un «recipiente vacío buscando pertenencia».[16] A pesar de expresar remordimiento, este fue sentenciado a cadena perpetua a la edad de 21 años.

En esta nueva era de ferviente búsqueda de identidad, el estado en Occidente y muchas instituciones heredadas, sus propios cimientos resquebrajados, están en su mayoría ausentes o, en muchos sentidos, buscan ser relevantes promoviendo lo último. Muchos serán arrastrados por el último entusiasmo, el último espejismo, que constantemente necesitará ser reinventado y re-empaquetado para dar la impresión de que si progresa. El culto a lo nuevo será apaciguado regularmente. Otros a menudo sentirán que están solos, redundantes o alienados, solos ante los vientos del cambio que se acelera rápidamente, solos ante la oscuridad. En ellos quedará la chispa de la auténtica rebeldía. En lugar de buscar la utopía, el imperativo será la búsqueda de comunidades que parezcan ofrecer puerto seguro – o la ilusión de un puerto seguro.

*Alberto M. Fernández es vicepresidente de MEMRI; Yigal Carmon es presidente de MEMRI.


[1] Morningconsult.com/2023/01/9/gen-z-corporate-activism-is-local-first, 9 de enero, 2023.

[2] Aecf.org/blog/generation-z-and-mental-health, 16 de octubre, 2021.

[3] Compactmag.com/article/the-myth-of-conservative-america, 9 de enero, 2023.

[4] Youtube.com/watch?v=lPRV8fTn3WQ, subido el 29 de enero, 2012.

[5] Contra.substack.com/p/mass-shootings-and-the-world-liberalism, 10 de junio, 2022.

[6] Newrepublic.com/article/169525/psychonauts-training-psychedelics-dmt-extended-state, 3 de enero, 2023.

[7] Unherd.com/thepost/why-are-incels-turning-themselves-into-girls, 5 de enero, 2023.

[8] https://www.dailymail.co.uk/news/article-11619823/Detransitioner-Chloe-Cole-slams-breast-removal-op-endured-aged-15-child-protection-appeal.html

[9] CNN.com/2021/02/16/politics/race-academia-trnd/index.html, 16 de febrero, 2021.

[10] Sportskeeda.com/pro-boxing/news-andrew-tate-provides-take-organized-religion, 10 de agosto, 2022.

[11] Video del portal MEMRI TV No. 10049 – Estudioso germano-egipcio Hamed Abdel-Samad: El islam nació con la semilla de la guerra civil y no ha logrado idear un plan para coexistir; el sharia disminuye y lo que resta de ello es hiyab y sexo, 17 de noviembre, 2022.

[12] Islamism.news/2023/01/09/irreligious-islamism-andrew-tates-arrest-highlights-a-growing-divide, 9 de enero, 2023.

[13] MEMRI DiarioInforme núm. 446, ‘Allahu Akbar’ – ‘Alá es el más grande’ – Un grito de guerra yihadista, 11 de enero, 2023.

[14] Independent.co.uk/news/world/middle-east/sally-jones-white-widow-dead-uk-isis-jihadi-kent-junaid-hussein-drone-strike-syria-a7997251.html, 12 de octubre, 2017.

[15] Cbsnews.com/miami/news/florida-man-corey-johnson-gets-life-in-prison-for-sleepover-stabbing-death-of-13-year-old, 14 de enero, 2022.

[16] Truecrimedaily.com/2022/01/14/corey-johnson-west-palm-beach-florida-sentenced-life-in-prison-killing-jovanni-sierra-sleepover-isis, 14 de enero, 2022.