Sucesos recientes han puesto de relieve una inquietante tendencia entre algunos de los grupos neonazis y supremacistas blancos más extremistas: observando y midiendo a las organizaciones terroristas islamistas de modelo e inspiración. Esto fue de hecho evidente con la toma de Afganistán realizada por los talibanes en el mes de agosto, 2021 y con el asesinato de soldados estadounidenses cometido por el grupo Estado Islámico Jorasán (EIIS-K) en el lugar. Esto continuó con el 20avo aniversario del 11-S, cuando varios grupos, incluyendo a algunos afiliados al grupo Proud Boys, celebraron los ataques.

Durante el juicio por la manifestación Unite the Right ocurrido en noviembre del año 2021, en el que el jurado otorgó más de $26 millones en daños y perjuicios, el acusado Matthew Heimbach, quien para el momento de la manifestación era líder del Partido de los Trabajadores Tradicionalistas neonazi y supremacista blanco y uno de los primeros promotores de la camaradería neonazi-yihadista, fue llamado al estrado, donde fue noticia bromeando sobre la personalidad de Hitler. Conocido durante años como ferviente partidario de las designadas organizaciones terroristas anti-Estados Unidos Hezbolá y Hamás, este dijo en el año 2017 que moldeó el enfoque de reclutamiento de su organización en honor a estas dos organizaciones.

Esto sigue al apoyo generalizado que otros grupos neonazis y supremacistas blancos expresaron por Hamás y Hezbolá durante el conflicto de Gaza de mayo del año 2021; siguen siendo algunos de sus fanáticos más vocales en la red y continúan publicando contenido en su elogio. Otro ejemplo reciente que destaca el aspecto global de esta camaradería, el nacionalista extremista francés y candidato presidencial Yvan Benedetti, líder del movimiento «Les Nationalistes», respaldó con entusiasmo a Hezbolá en numerosas ocasiones en su canal de la aplicación Telegram.

Si bien innumerables informes en los medios de comunicación y trabajos de investigación han discutido muchos de los aspectos del último conflicto en Gaza, un nuevo fenómeno inquietante ha sido documentado y ha expuesto el apoyo dado por los extremistas a las entidades terroristas palestinas y a su causa. Los eventos en Gaza le dieron a estos grupos aparentemente opuestos la oportunidad de conectarse, comunicarse e influirse mutuamente. Estos extremistas – desesperados por obtener publicidad – no serán nombrados en este escrito.

Los neonazis y supremacistas blancos compartieron en la red una gran cantidad de contenido que expresa tal solidaridad, junto al odio hacia los judíos e Israel y, lo que es más inquietante, el apoyo a estos puntos de vista tomados del nazismo – incluyendo admiración a la personalidad de Hitler. Su objetivo era sentar las bases para una futura colaboración – una nueva estrategia con el objetivo de atacar a los judíos en todas partes del mundo – y aprovecharon la oportunidad que les brindaba el conflicto para seguirle la corriente al antisemitismo virulento y el odio contra Israel.

Líderes influyentes en estos movimientos instaron a sus seguidores a no solo hallar causa común con los grupos terroristas palestinos, sino también trabajar de manera encubierta con la izquierda anti-israelí y antisemita, cuyas opiniones también fueron reflejadas en los ataques contra judíos por parte de árabes y musulmanes en los Estados Unidos y en otros países de Occidente.

Según algunos de estos líderes, el conflicto también pudiera ser utilizado para fomentar discordia en esos mismos sectores anti-israelíes y antisemitas; un prominente neonazi comentó lo siguiente, «es nuestro trabajo… remover tanta mierda como sea posible». En particular, el grupo supremacista blanco Rise Above Movement, en California, enfatizó que aprovechar el conflicto Gaza-Israel «es una excelente manera de causar división» y que utilizar cualquier tema para «causar pequeñas grietas» es algo realmente bueno.

Hashtags tales como «#hitlerwasright» – también ampliamente difundidos por los antisemitas izquierdistas – y «#together», para publicaciones que alientan la colaboración con los yihadistas, fueron distribuidos en la red, algunos con fotografías de funcionarios nazis junto a líderes musulmanes. Una de dichas publicaciones en un canal neonazi en la aplicación Telegram presentaba una fotografía del año 1943 del jefe de las SS Heinrich Himmler con el gran muftí de Jerusalén Haj Amin Al-Husseini, lo que indica claramente el deseo de revivir la alianza nacional-socialista-musulmana de la Segunda Guerra Mundial.

Expresiones de solidaridad de neonazis y supremacistas blancos con el mundo árabe en contra de los judíos e Israel, incluyendo transmisiones en vivo, videos y fotografías ampliamente compartidos a su participación en mítines en los Estados Unidos y en el extranjero, fueron parte de todos estos esfuerzos.

Un canal asociado a un destacado acusado por los disturbios del 6 de enero en el Capitolio en la aplicación Telegram escribió que transmitiría en vivo desde el propio lugar de las manifestaciones en favor de Palestina. Capturando el espíritu de la época, un supremacista blanco con una camiseta de Hezbolá fue filmado en un mitin anti-Israel en Washington, D.C. señalizando con la mano el signo del «poder blanco». Un importante portal de supremacistas blancos incluso publicó una «carta abierta» de un alto neonazi en los Estados Unidos pidiendo apoyo por Hamás.

Muchos publicados en la red hicieron referencia a Hitler y a otros nazis sobre el tema de los palestinos y recomendaron «superar» el disgusto por colaborar con los árabes, incluso reconociendo que no les importan un bledo los palestinos. También se vieron llamados explícitos en apoyo a Hamás, Hezbolá y otros «lo suficientemente fuertes» como para «lastimar severamente a nuestro enemigo».

Un conocido neonazi y supremacista blanco estadounidense instó a los lectores en la aplicación Telegram a apoyar «literalmente a los únicos hoy» quienes luchan activa y físicamente contra los judíos – los palestinos. Este añadió: «Si uno se considera enemigo de la judería mundial y desea verla destruida, ¿cómo no apoyar entonces su lucha?»

Otra figura, uno de los miembros fundadores de una organización de supremacistas blancos con conexiones a la manifestación Unite the Right del año 2017, fue impulsada por el odio hacia los judíos con el fin de dirigirse al mundo árabe, en perfecto árabe, en un video, argumentando que los árabes, los neonazis y los supremacistas blancos en Occidente deben unir sus manos. Otros destacados extremistas nacionales subrayaron que la crisis en Gaza y las actividades antisemitas resultantes eran una oportunidad demasiado buena como para dejarla pasar.

Hamás es «genial», escribió un neonazi y ex-Marine con muchos seguidores en Telegram. La publicación mostraba misiles dirigidos contra Israel y celebraban que los judíos «fueron bombardeados por los palestinos». Este se alegró de que el conflicto en Gaza haya colocado el antisemitismo dentro de los temas de «corriente principal».

Una reciente discusión en un canal privado neonazi en la aplicación Telegram con miembros estadounidenses y europeos – (este tipo de chateos y de mezcolanzas internacionales se está volviendo muy común) – incluyó comentarios tales como «Juntos compartimos el mismo yihad» y «pueda Hamás destruirlos y convertirlos en cenizas». Esta camaradería terrorista tóxica de hecho está en constante crecimiento, tanto en los Estados Unidos como en todo el mundo y los funcionarios anti-terroristas deben actuar ahora sobre esta amenaza antes de que se nos salga de control.

*Steven Stalinsky es Director Ejecutivo del Instituto de Investigación de Medios de Comunicación del Medio Oriente (MEMRI.org). Este es coautor del publicado Neonazis y supremacistas blancos intentan revivir alianza nazi-palestina en la época de la Segunda Guerra Mundial: El conflicto en Gaza les brinda la oportunidad de promover y actualizar la ‘solución final’, con esfuerzos en la red y sobre el terreno, un apoyo emergente a los grupos terroristas de Hamás y Hezbolá y a su misión compartida de atacar a los judíos en todo el mundo.