Introducción
Los días 5 – 6 de octubre, en el Hotel Pyramisa de El Cairo, se celebró un seminario sobre » Islam y reforma » con la participación de más de una veintena de intelectuales e investigadores del mundo árabe y musulmán, Europa y América. A la clausura del seminario, los participantes publicaron una conclusión en la que pedían la implementación de reformas tanto políticas como religiosas. El seminario y su declaración final provocaron la ira de altos clérigos del estamento religioso egipcio.
Los debates del seminario
El seminario se centró en tres temas principales: parámetros de reforma del Islam, la posibilidad de participación de grupos islamistas en regímenes democráticos, y las relaciones entre la política exterior norteamericana y los grupos nacientes pro democracia del mundo musulmán. 1
En el discurso de apertura, elDr. Sa’ad Al-Dinar Ibrahim, presidente del Centro Ibn Khaldun de Estudios del Desarrollo en El Cairo, afirmó que los planes de reformaaspiran a enfatizar que las puertas de la ijtihad 2 están abiertas y que se debe emprender una Jihad [intelectual] para mantenerlas abiertas hasta el Día del Juicio, dado que el significado de esto [mantener las puertasde la ijtihad abiertas] es la protección de la libertad de pensamiento y de expresión, no sólo en materias religiosas sino en todos los temas… «
El Dr. Ibrahim afirmó: «Todos [libramos la] Jihad [intelectual] para prevenir la marginalización del mujtahidun musulmán, ya seapor sus propios gobiernos, por las instituciones religiosas oficiales, que se han convertido en instituciones al estilo de iglesias, o por fundamentalistas, radicales y zelotes que han secuestrado elIslam y lo han convertido en un medio de intimidación y terror por todo el mundo». 3
Las recomendaciones del seminario
Los participantes publicaron una declaración final, firmada con un gran número de conocidos progresistas del mundo árabe y musulmán: El Dr. Sa’ad Al-Dinar Ibrahim, presidente del Centro Ibn Khaldun de El Cairo; el intelectual egipcio Gamal Al-Bana ; el intelectual egipcio Dr. Sayed Al-Qimny ; el intelectual sirio Dr. Mohammed Sharour; El Dr. Radhwan Masmoudi, director ejecutivo del Centro para el Islam y la Democracia de Estados Unidos; El Dr. Najah Kadhim, director del Foro Internacional de Diálogo Islámico, en Londres; Sherifa Macarandas, presidenta de la Liga Femeninade Mindanao, Las Filipinas; el intelectual tunecino Salah Al-Din Al-Jurshi ; El Dr. Abd Al-Hamid Al-Ansari, ex rector de la Facultad de Shari’a de la Universidad de Qatar; El Dr. Fabyola Badawy, jefe de la Unión Árabe Europea para la Democracia y el Diálogode Francia; y Abdaláh Ali Sabri, redactor jefe del diario yemení Saut Al-Shura.
La declaración final contenía diez recomendaciones clave, publicadas (en inglés) en la páginaweb http://www.mengos.net/events/04newsevents/egypt/october/ibnkhaldun-English.htm:
«1. Construir un nuevo contexto intelectual islámico, caracterizado por la claridad y la unidad de percepción, que busque tener en cuenta todos los cambios y transformaciones que tuvieron lugar en la vida social de los diversos países del mundo musulmán durante los últimos once siglos.
2. Implementar una revisión radical de la herencia islámica que involucre a toda la academia islámica relativa a la Jurisprudencia Islámica y la Sunna, las Tradiciones del Profeta– todo lo cual se fundó durante los primeros tres siglos del Islam. Los participantes solicitan la dependencia del texto coránico como única fuente auténtica a utilizar para revisar la herencia islámica entera.
3. Cotejar todas las instituciones – ya estén integradas por clérigos o laicos – que afirman tener el monopolio de la religión en, y la interpretación apropiada de, su texto sagrado. En su lugar, un nuevo espíritu debería intentar establecer el derecho a la ijtihad de todo el mundo, bajo la bandera de una reforma islámicarelevante en el siglo actual.
4. Contrastar y refutar las visiones y declaraciones de movimientos religiosos fundamentalistas para retrasar su penetración en la sociedad árabe, específicamente entre los jóvenes, muchos de los cuales viven en un estado de depresión bajo el estrés de las dificultades económicas.
5. Intensificar el diálogo con elementos moderados e ilustrados del mundo musulmán, particularmente en Estados Unidos. Es este lenguaje de diálogo y cooperaciónel instrumento para tratar con otros » no musulmanes » sobre la base de los principios de cooperación, respeto a la independencia nacional y coexistencia pacífica entre civilizaciones y naciones. En ese contexto, las comunidades musulmanas en el extranjero podrían funcionar como canales de contacto.
6. A pesar de alguna controversia inicial con respecto a las prioridades de reforma, el consenso acentúa la necesidad de implementar reformas tanto políticas como religiosas simultáneamente para lograr una reforma factible.
7. El acento se puso en la importancia de la incorporación de movimientos islámicos moderados en el proceso democrático, permitiendo así a esos movimientos, que aceptan la democracia como una opción estratégica y reconocen y respetan los principales principios y valores de una sociedad civil liberal democrática en un estado moderno, practicar su papel político libremente.
8. A tal efecto, y [para] alcanzar una agenda común de reformas en el mundo árabe, los participantes recomiendan encarecidamente iniciar un diálogo en profundidad y amplio con los líderes de todos los movimientos islámicos pacíficos.
9. Para maximizar los beneficios del trabajo, todos los trabajos presentados y los debates que tuvieron lugar serán compilados y publicados tanto en árabe como en inglés.
10. Tanto el trabajo como los participantes considerarán un núcleo principal establecer una nueva red de reformistas tanto enel mundo árabe como en el islámico, que serán invitados regularmente dos veces al año a seguir de cerca la implementación de las recomendaciones de trabajo como se representan aquí, en su Declaración Final. [Además], se conviene en que los participantes podrían también recomendar a personas interesadas en el tema de la reforma islámica para que se unieran a la red.
Addendum: Los representantes de siete organizaciones civiles distintas que operan en Egipto piden el establecimiento de un nuevo movimiento llamado «Demócratas Islámicos» e invitan a aquellos que aceptan su visión y discurso a participar en el movimiento que ocupará [el] Centro Ibn Khaldun durante los prolegómenos».
Clérigos de alto nivel del estamento religioso egipcioatacane l seminario y a sus participantes
El seminario y sus recomendaciones provocaron la ira de miembros altos de la jerarquía religiosa de Egipto. El jeque de Al-Azhar, Mohammed Sayyed Tantawi, atacó duramente el seminario y a sus participantes, y afirmó que pedircontrastar todas las instituciones que tienen el monopoliode la religión» está dirigido contra A l-Azhar.
En una entrevista con el diario kuwaití A l-Rai Al-Aam, Tantawi afirma que las voces del seminario»pidieron explícitamente la anulaciónde la Sunna del Profeta; A l-Azhar y la sociedad [egipcia] rechazan esto». Según Tantawi, estos centros de investigación cuyos representantes participaron en el seminario «tienen una influencia destructiva sobre la sociedad egipcia y deben ser detenidos y llevados a juicio… Esto es un llamamiento explícito a descartar una de las fuentes principales de la ley islámica religiosa – la Sunna del Profeta. E sto es un peligroque algunos [de nuestros] enemigos externos están interesados [en promover]».
Más tarde dijo: «La participación de centros [de investigación] occidentales en un debate del Islam y sus fuentes legales es una huella de vergüenza y un desastre que la sociedad y sus líderes necesitan evitar… Es una obligación interceder a la fuerza para prevenir [estas] afrentas. Este es un grupo de extravagantes [religiosos], uno de los cuales ya ha sido procesado bajo cargos de traición; así que está prohibido tratar con ellos y es obligatorio considerarlos insignificantes en la sociedad». 4
El jeque Ibrahim Al-Fayoumi, secretario general de «La Academia de Investigación Islámica», el organismo supremo deA l-Azhar, dijo: Solicito la celebración de una sesión de emergencia para responder a esta imprudencia… ¿Qué hace que centros extranjeros [de investigación] expresen su opinión sobre el Islam?. ¿Estarían de acuerdo en que nosotros interviniéramos en temas de su religión o fe… ?. [Esto es] una guerra religiosa liderada por organizaciones sionistas para dañar el Islam y su ley… Exigiremos que pongan fin a la celebración de estas conferencias que atacan la fe». 5
El Dr. Abd Al-Azim Al-Mut’ani, conferenciante de la universidad A l-Azhar, dijo: «Conferencias como esta aspiran solamente al dominio norteamericano y no tienen intenciónalguna de[buscar] reformas en los mundos árabe y musulmán. Son agencias operadas por Estados Unidos para justificar su intervención en, y presionar a, gobiernos islámicos». 6
La respuesta del Centro Ibn Khaldun
El 10 de octubre,el Centro Ibn Khaldun publicó una declaración en respuesta a las acusaciones del jeque de Al-Azhar. La declaración reza: «El jeque de Al-Azhar dice que ‘la participación de centros occidentales [de investigación] en la conferencia es una huella de vergüenza y un desastre que la sociedad y sus líderes necesitan prevenir’. Preguntamos: ¿Cree el jeque de Al-Azhar que un grupo de personas en particular ostenta el monopolio de la ijtihad y que este grupo no incluye a individuos occidentales?. [Si es así]¿Qué es lo que hacen[los musulmanes] en los departamentos de Estudios Islámicos de universidades occidentales?. ¿Debemos exigir el desmantelamiento [de estos departamentos], puesto que carecen de autoridad?. ¿Nos oponemos al diálogo con estos occidentales porque no tienen autoridad para hablar acerca del Islam?. Nos place recordar al jeque d e Al-Azhar que el Islam es un mensaje universal a todoel mundo, que la ijtihad es un deber islámico y que las puertas de la ijtihad están abiertasa todo el mundo y nadie tiene derecho a cerrar[las] oa monopolizar[las]…
El jeque de Al-Azhar dice: «La recomendación de la conferencia de confiar en el texto coránico como única fuente de autoridad judicial es un llamamiento explícito a descartar una fuente relevante de la ley religiosa islámica – la Sunna del Profeta». En respuesta exigimos que el jeque de Al-Azhar lea detenidamente la declaración final de la conferencia, y descubrirá que no buscamos desautorizar la Sunna del profeta, sino solamente basarnos en el Corán sin adulterar… como fuente única [de autoridad] judicial, es decir, legislar deacuerdo con el Coránen caso de desavenencias. Esto es una prescripción coránica explícita… ‘ ¿ Debería buscar un juezque no sea Alá cuando es Él quien ha revelado el Libro para vosotros, con todos sus preceptos?’. [C orán 6:114]
«¿Discrepa de nosotros el jeque deA l-Azhar en esta materia?. ¿Posee una fuente alternativa de autoridad judicial a la que uno pueda referirse en caso de desacuerdo?. ¿No está el jeque de A l-Azhar al tanto del hecho de que la autenticidad demuchas tradiciones y comentarios es dudosa, y que muchos de ellos son responsables de la culpabilización del Islam [como la causa de] la violencia, el terrorismo y la inflexibilidad?. Si losabe – y ciertamente lo sabe – entonces es obligación suprema, basada en el Derecho deA l-Azhar, conducir la ijtihad para revelar las verdades del Islam y limpiarlas de las mentiras y de las distorsiones que las comprometen.
El jeque de Al-Azhar dice: «Éste es un grupo de extravagantes [religiosos], uno de los cuales ya ha sido procesado bajo cargos de traición». Lamentamos que el jeque de Al-Azhar aluda a una condena contra el Dr. Sa’ad Al-Din Ibrahim y los empleados del Centro Ibn Khaldun, y nos complace aclarar los siguientes hechos:
1. El Dr. Sa’ad Al-Din Ibrahim no estuvo acusado de traición, sino de otros cargos, fabricados por el [Departamento] egipcio de Investigación de la Seguridad del Estado.
2. El veredicto del más alto tribunal de Egipto reza que el Dr. Sa’ad Al-Din Ibrahim y los empleados del centro son inocentes de todos los cargos de los que habían sido acusados. Además, [el tribunal] crítica implícitamente la animosidad de la acusación contra ellos. ¿Sostiene el jeque deA l-Azhar una opinión opuesta a la del Tribunal Supremo?. ¿Cree que una acusación es una condena?.
3. ¿Tiene derecho el jeque deA l-Azhar a acusar a una parte de los intelectuales musulmanes de quebrar el Islam?. ¿No es esto equivalente a acusarnos de apóstatas y poner [así] nuestras vidas en peligro?. ¿No fueron acusaciones similares las responsables del asesinato de Farag Fouda y del intento de asesinato del internacionalmente conocido autor Naguib Mahfouz ?. 7 Invitamosa Al-Azhar a no descender por el camino del takfir [acusación de apostasía ], que es el medio empleado por grupos [caracterizados por] la violencia y el fundamentalismo…». 8
* Y. Yehoshua es Director de Investigacióndel MEMRI.
1 http://www.mengos.net/events/04newsevents/egypt/october/ibnkhaldun-English.htm.
2 » Ijtihad » es el ejercicio del veredicto judicial independiente basadoen las fuentes principales del derecho islámico; se opone a » taklid,» o dependencia oimitación del precedente judicial.
3 Al-Rai Al-Aam (Kuwait), 6 de octubre del 2004.
4 Al-Rai Al-Aam (Kuwait), 8 de octubre del 2004.
5 Al-Rai Al-Aam (Kuwait), 8 de octubre del 2004.
6 Al-Watan (Arabia Saudí), 9 de octubre del 2004.
7 El intelectual egipcio Farag Fouda fue asesinado en 1992 después de que algunos i slamistas lo declararan apóstata. En 1994,fundamentalistas musulmanes intentaron asesinar al autor Naguib Mahfouz después de la publicación de su libro Niños del callejón.