En su columna del 15 de agosto, 2010 titulada «Mi ‘Parcializada’ Actitud – Armas Químicas Contra el PKK» en el diario turco pro-islamista Zaman, Orhan Kemal Cengiz defendió primero su decisión de criticar a su propio país y, luego pasó a convocar una comisión independiente para investigar las denuncias de que militares turcos utilizaron armas químicas para asesinar a miembros del Partido Trabajadores de Kurdistán. (PKK)
También escribió que el Primer Ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, debe «mostrar la misma sensibilidad a las presuntas violaciones de los derechos humanos en su propio país al igual que hacia las llevadas a cabo por Israel».
A continuación se presenta su columna, en su inglés original.
«Creo que mi primer y principal deber es criticar a mi propio país»
«Cada vez que toco un tema delicado en Turquía, algunos lectores me acusan de estar parcializado y ser selectivo en mis críticas.
«Ellos dicen que hablamos de las tragedias de los no-musulmanes, pero no hablan de las tragedias sufridas por los musulmanes en los Balcanes, no critican a los armenios por sus malas acciones en Nagorno-Karabakh, no critican esto y aquello.
«Si yo fuera ciudadano de esos países los estaría criticando muy duramente. Estaría escribiendo artículos acerca de las graves violaciones de los derechos humanos cometidas por los soldados rusos contra los chechenios. Criticaría al gobierno armenio no sólo por Nagorno-Karabakh, sino también por la tortura y todo tipo de violaciones de los derechos humanos que se están llevando a cabo en Armenia en este momento. Estaría criticando muy duramente a Grecia por su trato terrible e inhumano a los refugiados, por su violación a la libertad de las minorías religiosas en el país. Criticaría muy duro a otro país si fuera uno de sus ciudadanos. Por supuesto, hay gente en esos países que critican a sus gobiernos y a cambio se les acusa de estar parcializados en la información, tal y como yo estoy siendo criticado aquí.
«Yo, por supuesto, critico a otros países, pero creo que mi primer y principal deber es criticar a mi propio país. No tengo que mencionar las tragedias que sufrieron los musulmanes en los Balcanes siempre que menciono el sufrimiento de los armenios en mi país. Criticar a mi país es mucho más difícil y riesgoso que criticar a cualquier otro país del mundo. Y es exactamente lo mismo para cualquier persona que lucha contra el estatus quo en su propio país. Los defensores de los derechos humanos viven bajo serias amenazas en Rusia, China e incluso algunos países europeos. Y siempre se les están acusando de lo mismo: Están ‘parcializados’ en contra de su propio gobierno. Se les inculpa por personas que nunca han tenido que enfrentar ningún riesgo en su vida, que no tienen el menor valor cívico para luchar en contra de la autoridad, que nunca han ido más allá de las fronteras tradicionales. Es casi igual en todo el mundo».
¿Por qué tiene un intelectual que «vivir en el exilio en su propio país?… Un intelectual es una irritante constante para el estatus quo»
«En mi opinión, no es el conocimiento lo que hace de una persona intelectual. El tener una mente abierta y una actitud crítica son elementos centrales que constituyen la mente intelectual. Esto es mejor descrito por Edward Said, quien articula una visión del intelectual ‘de exilio y marginal, como de aficionado y como el autor de un idioma que intenta decir la verdad al poder’, ‘dando testimonio’ a las historias olvidadas, ignoradas o suprimidas.
«¿Por qué demonios tiene un intelectual que vivir en el exilio en su propio país? Porque sigue tras su propia conciencia, él nunca cederá a la dinámica de grupo, por lo que siempre corre el riesgo de ser excluido de todos los grupos y ser calificado de persona marginal. Un intelectual es una irritante constante para el estatus quo en su propio país».
¿Está el ejército turco usando armas químicas?
«La revista International Der Spiegel acaba de publicar un artículo en su edición del 12 de agosto, que examina las denuncias a la utilización de armas químicas por los militares turcos. Según el artículo, expertos forenses alemanes examinaron las fotos que fueron tomadas presuntamente de miembros del Partido de Trabajadores Kurdos (PKK) que fueron asesinados en agosto del 2009. Los expertos, sobre la base de las fotos que se les mostró, confirmaron que estas personas fueron asesinadas mediante el uso de armas químicas.
«Después de leer este artículo, llamé el presidente de la Asociación de Derechos Humanos (IHD) para averiguar si tenían alguna evidencia concreta en relación con dichos informes. El Sr. Öztürk Turkdogan me dijo que había escuchado denuncias de militantes del PKK que fueron asesinados por armas químicas, pero en ningún caso se permitió una investigación forense. Por lo tanto, no existen pruebas legales disponibles para imputar cualquier caso en contra de los que pueden ser responsables de estos incidentes».
«Erdogan debería mostrar la misma sensibilidad a las presuntas violaciones de derechos humanos en su propio país al igual como lo demuestra hacia las llevadas a cabo por Israel»
«La cobertura de Der Spigel continua diciendo: ‘En Turquía, los defensores de los derechos humanos llevan tiempo pidiendo una investigación. El ejército, sin embargo, se ha negado a comentar sobre el tema. Del mismo modo, el gobierno del Primer Ministro Recep Tayyip Erdogan, ha sido obstinadamente silente o ha tratado de presentar las acusaciones de crímenes de guerra como «propaganda del PKK».
«Me gustaría instarle al Sr. Erdogan que permita a una comisión independiente realizar una investigación sobre estos alegatos. No sólo estas acusaciones, sino también la presunta mutilación de los cadáveres de militantes del PKK – que es hablado de alguna manera con mucha más frecuencia en círculos diferentes – deberían ser investigadas a fondo y con diligencia.
«Erdogan debería mostrar la misma sensibilidad a las presuntas violaciones de los derechos humanos en su propio país tal como lo muestra hacia las llevadas a cabo por Israel».
