En su editorial del 16 de marzo, 2017 Kayhan, portavoz de la corriente ideológica de Irán, atacó la política del bando pragmático, es decir, la del gobierno de Rohani y especialmente a la cancillería iraní, que pidió dialogar con Estados Unidos y la administración Trump bajo la premisa de que tal diálogo es necesario para evitar una guerra estadounidense contra Irán. Kayhan argumentó que una guerra estadounidense se ha estado librando desde hace varios años en las fronteras occidental, oriental y meridional de Irán y este ha estado involucrado en manejar esta guerra en los frentes iraquí, sirio, libanés y yemení. Estos frentes constituyen «una continuación natural de la Revolución Islámica». El documento enfatizó que «nuestras fuerzas están involucradas en intensos combates en Siria e Irak habiendo estas sido impuestas por Estados Unidos y sus agentes».
Kayhan afirmó además que aquellos que llaman al diálogo con Occidente y Estados Unidos, especialmente en la cancillería, son unos «mentirosos» que presentan una imagen engañosa de las verdaderas intenciones de Estados Unidos, ya que el revolucionario Irán nunca ha dejado de ser blanco de las hostilidades estadounidenses, tal como se evidencia en el hecho de que Estados Unidos ha aumentado últimamente sus sanciones contra Irán. El bando de Rohani, que este acusó, se opone a la expansión hegemónica de Irán en la región y al «poderío iraní» e insta a Irán a no llamar la atención sobre su poderío en la región y sus capacidades militares-tecnológicas e incluso pidió se retire del frente nuclear confiando en que Occidente le suministrara con tecnología nuclear, a fin de resolver su conflicto con Occidente. Según el diario, el bando pragmático es por lo tanto incluso peor que los enemigos occidentales de Irán, porque estos últimos respetan el estatus superior de Irán en la región, mientras que los pragmáticos consideran «los grandes logros de Irán en la región» como fuente de peligro. Kayhan le preguntó desafiante al bando pragmático: «Una verdadera guerra estalla hoy día contra el poderío y honor de Irán en la región y en las tierras de la resistencia y los hijos puros de Irán se han propuesto [cumplirla]. Que han hecho ustedes para asegurarse de que este conflicto termine con una victoria para nuestro frente?»
Lo siguiente son extractos del artículo:[1]
«Cuando elementos del bando de Rohani dicen: ‘Debemos adoptar una política que impida la guerra, de lo contrario pagaremos un precio muy alto por ello’, estos van demasiado lejos en su incitación y descartan la realidad. En algunos casos esto es acompañado por la difusión de mentiras, porque la guerra de la cual ellos desean prevenir [ya] se está dando en la región y en las fronteras occidental, oriental y meridional de Irán, e Irán es su objetivo principal. El propio Irán está involucrado en combatir estos frentes de batalla de varias maneras…
«Durante mucho tiempo y especialmente dentro de un clima post-PIDAC y luego que el bando de Rohani se ha visto obligado a admitir que Occidente no cae en cuenta de sus compromisos, estos nos han estado diciendo de que nos encontramos en una encrucijada [y debemos elegir entre dos opciones]: la guerra con el mundo o cooperar con este. La lógica dicta que debemos elegir cooperar con el mundo y como parte de esta cooperación debemos pensar en los acuerdos que impedirán una guerra contra Irán y la expansión de la guerra regional hacia Irán.
«Tras la elección de Trump esta gente reiteró [sus] pretensiones anteriores, diciendo que Trump es un impredecible que toma decisiones imprudentes y por lo tanto es mejor evitar decir cualquier cosa que lo ofenda. Hoy estos dan un paso al frente, diciendo que existen indicios de que es posible negociar con Trump y llegar a un acuerdo con él, por lo que debemos mantener un clima diplomático y mediático moderado sobre el tema de las relaciones con Estados Unidos a fin de llegar a un acuerdo sobre temas regionales…
«Pero los estadounidenses hablan y actúan de manera opuesta. Es decir, los estadounidenses, ya sean demócratas o republicanos, estén en el Senado y el Congreso o en el gobierno, tanto en el periodo de Obama como en el de Trump, nunca pensaron realmente en un acuerdo con Irán y nunca lo promovieron y, a juzgar por nuestra experiencia con el PIDAC, lo que desean es una capitulación iraní, por lo que incluso si Irán detiene su política de independencia, la cual se verá debilitada considerablemente, nunca Lograra un acuerdo con Estados Unidos [sino sólo una capitulación], lo que hará que el enemigo se envalentone.
«Algunas figuras políticas [en el bando de Rohani] tratan de justificar tal capitulación diciendo que ‘la guerra [nos espera]’… [Al mismo tiempo], también dicen que Irán ya no está en la mira de Estados Unidos y Europa y que otros temas han tomado su lugar, por lo tanto, la razón y la lógica dicta que debemos evitar tomar medidas que nos sitúen de nuevo en la mira de Estados Unidos y Europa y nos conviertan de nuevo en ser el tema No. 1 del mundo. Desde la perspectiva de esta gente, Irán ha dejado de ser [un objetivo de] hostilidad por parte de Estados Unidos, Europa y sus seguidores… [Pero] si les preguntamos a estas personas qué evidencia [tienen] de ello… no tendrán nada que presentar… excepto interpretaciones. [El hecho es que] toda la evidencia y pruebas indican que la Revolución Islámica y el régimen religioso de Irán siguen siendo y siempre lo serán, el principal problema para los Estados Unidos y Europa. Las sanciones de Estados Unidos contra Irán persisten y en las dos últimas semanas Irán, una vez más ha sido etiquetada de ‘eje del mal’ como parte a la prohibición de entrada a ciudadanos iraníes hacia los Estados Unidos. En la región también, Estados Unidos se centra en las fuerzas que coordinan con Irán [y] todos estos son sólo ejemplos…
«Algunas de estas personas, que participan en las así llamadas reuniones de expertos, afirman que la política de Irán que se esfuerza por la hegemonía regional no beneficiará a Irán porque lo colocará en el foco de las amenazas y en el sufrir daños. Estos agregan que debemos tomar una postura realista de las capacidades de Irán, de que en lugar de pensar en una «región iraní» deberíamos pensar en ‘Irán en la región’ y de que Irán debe darse cuenta de que ningún país puede establecerse como una potencia hegemónica. [Pero] en realidad, es una mentira que nosotros vamos tras dicho objetivo, porque si la ‘hegemonía’ significa un gobierno de tiranía e imperialismo sobre otras naciones, entonces esto está prohibido por los principios de la Revolución [Islámica] y por las políticas del régimen [iraní] y hasta ahora Irán no ha dado ningún paso en esta dirección. La verdad es que Occidente, Oriente y los regímenes que les siguen no tienen ningún problema con nuestra hegemonía, porque saben que Irán no va tras de tal objetivo, su problema es con el poderío de Irán. El hecho es que estas personas dentro de Irán se oponen a la importante demanda de Irán por la hegemonía y quieren negar el poderío de Irán y, por lo tanto dentro de Irán estos atacan cualquier cosa que justifique el poderío de Irán y todo lo que cree una posición de poder para Irán, tratando así de debilitarlo. Estos toman la obsoleta visión de que Irán no puede fabricar ni siquiera un tarro de barro para el baño y que debe retirarse de su camino científico y dejarle los desarrollos científicos a los países occidentales, donde Irán será un cliente más de sus productos industriales.
«Los temas regionales son una fuente de orgullo para Irán, pero en este tema [estos] le exige a Irán [exactamente] lo que [sus enemigos] Estados Unidos, Europa, Israel, Arabia Saudita, Turquía y otros le exigen, pero con una gran diferencia, es decir, que Estados Unidos y los demás respeten en gran medida el estatus de Irán y lo reconozcan en sus declaraciones. Pero ellos (el bando de Rohani) llama a los grandes logros regionales de Irán ‘tierra incinerada’ y ‘hegemonía perjudicial’… Estos desean entregarle estos logros a [Turquía, Arabia Saudita, Israel y Estados Unidos sin recibir nada a cambio.
«Esta gente afirma que debemos implementar cualquier medida para evitar que Irán se involucre en una guerra y aquí también existen dos grandes mentiras. La primera es su afirmación de que Estados Unidos y el resto no desean combatirnos y no deberíamos traernos a nosotros una guerra que no existe [todavía]. [Pero] la verdad es que esta guerra contra Irán comenzó hace mucho tiempo, en el 2012 y todavía está continua muy activamente. Para realizar este simple hecho basta con observar la guerra en nuestra región… en Siria, Yemen y el Líbano, Estos son países considerados aliados de Irán, no de Estados Unidos ¿Qué países, sectas y grupos son blanco de la intensa guerra que se desarrolla ahora mismo? Estos son [frentes] que constituyen una continuación natural de la Revolución Islámica y no [áreas controladas por] el frente de la arrogancia [es decir, los Estados Unidos]… en un momento en que toda ciudad iraní posee tumbas de ‘mártires [asesinados defendiendo] los santos Lugares’ y mientras nuestras fuerzas aún están involucradas en intensos combates en Siria e Irak que sus agentes nos impusieron sobre nosotros y sobre nuestro querido pueblo iraní, ¿cómo puede [el bando de Rohani] afirmar de que no estamos en la mira del enemigo y que no existe una guerra y no debemos hacer nada para provocarnos una?
«La segunda mentira es que estos se describen a sí mismos como una fuerza que se opone a la guerra y la impide, pero cuando uno observa las evidencias sobre el terreno, uno descubre que [son partidarios] del compromiso y de un pensamiento superficial sobre la guerra. Lo mismo ha sucedido en Siria e Irak y los gobiernos de estos países pensaron inicialmente que [los acontecimientos] no fueron resultado de una conspiración, pero finalmente se vieron envueltos en una intensa guerra…
«Debemos preguntarle a esta gente: Una verdadera guerra se está librando en la actualidad en contra del poderío y honor de Irán en la región y en las tierras de la resistencia y los hijos puros de Irán se han comprometido [cumplir]. Que han hecho ustedes para asegurarse que este conflicto finaliza con una victoria para nosotros?…»
[1] Kayhan (Irán), 16 de marzo, 2017.