El 12 de octubre del 2006, el diario iraní Kayhan, el cual está identificado con el Líder Supremo de Irán Ali Khamenei publicó un editorial titulado «Lecciones de Corea del Norte».
Lo siguiente son extractos del editorial: [1]
Corea del Norte ha construido una bomba nuclear ante los ojos de los americanos… A pesar de estar bajo una gran presión, y [a pesar de] años de fuertes sanciones internacionales – y nadie ha podido hacer nada al [respecto]»
«Cómo puede un país especifico volcarse hacia lo nuclear? Ésta es una cuestión importante. Pero lo que es más importante es la cuestión de lo que le sucede [a este], y la actitud hacia este por parte de la comunidad internacional, y hasta qué punto cambia la actitud hacia este y hacia su lugar en la arena internacional cuando se vuelca hacia lo nuclear.
Existe, por supuesto, otra pregunta: ¿Quieren los países que hasta ahora han tenido un monopolio sobre las armas nucleares preservar este monopolio, o permitirán que aparezcan nuevos actores? ¿En otros términos, si algún país expresa interés en producir armas nucleares, existe alguna manera segura de prevenirlo? La prueba nuclear de Corea del Norte el domingo [8 de octubre del 2006] nos ayuda a dar respuestas directas.
[La adquisición de] [capacidad] nuclear por Corea del Norte es el producto de la persistencia. Corea no buscaba demostrar su poder regional, ni renovar las ventajas [encontradas] en renovar el antiguo imperio que este había perdido, y así restaurar su orgullo nacional. Lo que llevó a Corea a este punto no fue nada más que persistencia ante los Estados Unidos, el cual no acordaría en hablar [con este] cara a cara y asegurar que no actuaría para derrocar al gobierno norcoreano.
«Los coreanos dijeron muchas veces antes que si América detuviera sus operaciones para derrocar a su gobierno, y al mismo tiempo regresara a implementar los acuerdos que había firmado [con ellos] en el pasado bajo el esquema de trabajo de cooperación nuclear, y qué habían sido violados luego unilateralmente, [entonces] Corea del Norte no tendría ningún problema en lo absoluto con las inspecciones en sus esfuerzos por producir armas nucleares. Pero los americanos, con su defectuosa actitud mental que siempre han tenido… persistieron, y ahora todo ha terminado.
«Tal como los rusos dijeron el lunes [9 de octubre del 2006], en una primera respuesta a la prueba nuclear de Corea del Norte: ‘Es la terquedad americana que ha llevado a esta situación. Si Washington hubiera acordado ser un poco más flexible y se sienta en la mesa de conversaciones con Pyongyang, el asunto se hubiese resuelto hace mucho tiempo, simplemente, y a un costo más bajo.
«Corea del [Norte] ha construido una bomba [nuclear] ante los ojos de los americanos, a pesar de la gran presión en que esta estaba, y [a pesar de] años de muy duras sanciones internacionales – y nadie ha podido hacer nada al [respecto].
«Si algún país, como Corea Norte, concluye, por razones políticas o de seguridad, que debe poseer armas nucleares, esta finalmente lo logrará… aun cuando todo el mundo se le oponga»
«Lo que esto precisamente significa es que si algún país, como Corea del Norte, concluye, por razones políticas o de seguridad, que debe poseer armas nucleares, este finalmente logrará llevar a cabo su deseo – aun cuando el mundo entero no lo quiera. Las superpotencias pueden reducir [su] camino [en volcarse] hacia lo nuclear, o pueden aplicar presiones económicas y psicológicas sobre esta y en sus ciudadanos – pero al final el deseo que surge de entre el pueblo es lo que prevalece y determina la política.
«Si los americanos estuvieran verdaderamente interesados en la expansión de las armas nucleares en la arena internacional, deberían primero preocuparse por su [propia] conducta y política; [es ahí donde] encontrarán la raíz del mal. La única vía para que los países dejen de producir armas nucleares es dando una respuesta lógica a sus problemas de seguridad. Por lo contrario, cuando los americanos todavía busquen ventilar su rabia en la arena internacional, y amenacen la inseguridad de este o a aquel [gobierno], no podría sino esperarse que estos países aspiren mejorar sus capacidades defensivas de varias maneras.
«Mientras las superpotencias – como América – estén conectadas a la aspiración del monopolio y la agresión, puede concluirse que el hecho de Corea del Norte de lograr obtener armas nucleares significa la derrota absoluta a la política de ‘aplicar presión y amenazas para cambiar al modelo de conducta de los países’. Los americanos deben comprender – aun cuando sea difícil para ellos – que la presión y las amenazas no son una manera conveniente de negociar con el mundo…»
[1] Kayhan, 12 de octubre, 2006.
