Por: E. Ezrahi*

Introducción

En los últimos meses las relaciones sauditas-iraquíes se han vuelto extremadamente tensas, como resultado de las actividades por parte del embajador saudita en Irak Thamer Al-Sabhan. Las autoridades iraquíes desaprueban las actividades diplomáticas de Al-Sabhan en el país, las cuales incluyen reuniones con políticos y clérigos iraquíes chiitas, en particular; el suministro de ayuda humanitaria de Arabia Saudita a los iraquíes que han sufrido como consecuencia de las embestidas del Estado Islámico (EIIS) en su área y visitas de los representantes de la embajada saudita a una prisión iraquí donde están detenidos saudíes acusados de actividades terroristas. Estas actividades estuvieron acompañadas por duras declaraciones de Al-Sabhan criticando la participación de Irán en los asuntos iraquíes, así como también la participación de las milicias chiitas iraquíes Al-Hashd Al-Sha’bi respaldadas por Irán en la campaña del ejército iraquí en contra de las organizaciones terroristas y su comportamiento como parte de esta campaña. Al-Sabhan dijo que la participación de Irán en Irak está llevando la situación hacia una discriminación sectaria contra los sunitas y a medidas contra ellos por el Al-Hashd Al-Sha’bi en las ciudades sunitas que han sido liberadas del control del EIIS. Ya que el gobierno iraquí presenta a Al-Hashd Al-Sha’bi como una organización oficial iraquí y a Irán como un país que está ayudando a reprimir el terrorismo del EIIS, este ve las acciones y las críticas de Al-Sabhan como interferencia indebida en los asuntos iraquíes.

Cabe señalar que el nombramiento de Al-Sabhan a principios de junio, 2015 fue opuesto por políticos iraquíes pro-iraníes, e incluso provocó amenazas de daños a la embajada. Los políticos opuestos a su nombramiento argumentaron que Al-Sabhan, quien previamente había sido el agregado militar saudita en el Líbano, no estaba calificado para servir en una posición diplomática y también lo acusaron de apoyar el terrorismo y a Jabhat Al-Nusra y exigió que este fuera reemplazado.[1]

Esta tensión alcanzó su máximo a finales de agosto, cuando el propio Ministerio de Asuntos Exteriores iraquí exigió que Arabia Saudita reemplazara a Al-Sabhan, alegando que este no le había prestado atención a las repetidas advertencias sobre las declaraciones que este estaba haciendo y que había ido demasiado lejos cuando afirmó que se realizo un atentado contra su vida en Bagdad y que los aparatos de seguridad iraquíes fueron incapaces de protegerlo. [2] En respuesta, Al-Sabhan dijo que hubo amenazas bien documentadas contra la Embajada de Arabia Saudita y que fueron reportados periódicamente al Ministerio de Asuntos Exteriores iraquí. Este protestó también en contra la demanda de sustituirlo, diciendo que era debido a las presiones sobre el gobierno iraquí por parte de Irán y sus aliados en Irak.[3]

También se escribieron numerosos artículos que reflejan la tensión en ambas la prensa iraquí y saudita. Artículos iraquíes acusaron a Al-Sabhan de una flagrante interferencia en los asuntos internos de Irak, y alabaron la actuación de Al-Hashd Al-Sha’bi e Irán, diciendo que ayudaban a combatir el terrorismo. Por el contrario, los artículos sauditas elogiaron al embajador y condenaron al gobierno iraquí, que según ellos le permite a Irán interferir en sus asuntos y llevan a cabo una política de discriminación anti-sunita. Estos también criticaron a Al-Hashd Al-Sha’bi, comparando estas milicias al EIIS y diciendo que llevaban a cabo una venganza sectaria contra los sunitas.

Este informe examinará las causas de la tensión saudita-iraquí así como también artículos sobre el tema publicados en la prensa saudita e iraquí.

Las causas de la tensión saudita-iraquí 

Embajador saudita en Irak: La interferencia iraní en Irak se entiende como venganza en contra de los árabes; Irán está tratando de asesinarme

Desde su nombramiento en junio, 2015 como embajador saudita en Irak, Thamer Al-Sabhan se ha enfocado en cultivar las relaciones con los diversos elementos de la sociedad iraquí. Este se ha reunido con corredores gubernamentales iraquíes – no sólo sunitas, sino chiitas y kurdos también – y visitó varias provincias iraquíes; Este también entregó ayuda económica de Arabia Saudita a varios elementos. En todo momento, Al-Sabhan ha hablado con dureza contra Irán y Al-Al-Hashd Sha’bi, acusando al gobierno iraquí de discriminación anti-sunita y subrayando que Arabia Saudita trata a todas las sectas por igual. También hace apariciones frecuentes en los medios y no se retrae de criticar a Irán.

Así, por ejemplo, en declaraciones a los medios de comunicación este ha criticado a Irán por buscar «destruir a la comunidad islámica y el nacionalismo árabe esparciendo su veneno e incitación, interfiriendo flagrantemente en algunos países árabes y [por medio de] sus lacayos y facciones armadas». Este dijo que la interferencia directa e indirecta de Irán en Irak desde el 2003 ha tenido como destino alimentar el conflicto sectario en el país y en «vengarse de Irak y de los árabes». En destacar que la sangre iraquí está siendo derramada en vano, como resultado de esta «política [sectaria] asesina» y que Irak es «un país para todos, donde nadie puede eliminar o marginar al otro», este agregó que Arabia Saudita, a diferencia de Irán, actúa y se reúne con todas las sectas iraquíes y no discrimina entre ellas.[4]

En junio, 2016 mientras el ejército iraquí y Al-Hashd Al-Sha’bi realizaban esfuerzos para liberar Faluya de las manos del EIIS, Al-Sabhan habló en contra de la participación de Irán en la campaña, argumentando que la presencia de funcionarios iraníes en las proximidades de Faluya ampliaría la brecha entre los diversos elementos de la sociedad iraquí.[5] Al-Sabhan también expresó esta acción en tuits, acusando a Irán y a sus partidarios iraquíes de tratar de cambiar la geografía de la región, trayendo a chiitas y expulsando a sunitas: Este escribió: «La presencia de terroristas iraníes cercano a Faluya es prueba clara de su deseo de incinerar a los árabes iraquíes en los fuegos de un sectarismo despreciable, y una afirmación a su intento de provocar un cambio demográfico».

Tuit de Al-Sabhan (Twitter.com/thamersas 3 de junio, 2016)

Para ver el despacho en su totalidad en inglés junto a las imágenes copie por favor el siguiente enlace en su ordenador:

*E. Ezrahi es compañero investigador en MEMRI.

[1] Entre los elementos opuestos se encontraba la Coalición del Estado de Derecho (Dawlat Al-Qanoon) en el parlamento, encabezada por el ex primer ministro iraquí Nouri Al-Maliki. Véase Al-Quds Al-Arabi (Londres), 8 de junio, 2015; Al-Mada (Irak), 6 de junio, 2015.

[2] Rudaw.net, 28 de agosto, 2016.

[3] Al-Sharq Al-Awsat (Londres), 24 de agosto, 2016; Alarabiya.net, 28 de agosto, 2016; Al-Jazirah (Arabia Saudita), 29 de agosto, 2016.

[4] Okaz (Arabia Saudita), 2 de junio, 2016; Al-Sharq Al-Awsat (Londres), 4 de junio, 2016.

[5] Al-Sharq Al-Awsat, (Londres), 4 de junio, 2016.